PLENITUD EN CRISTO Por Yoandys Arlex López Pérez Usado con permiso Una de las palabras más desafiantes, a la vez que alentadoras de las Escrituras, son las de Jesús en Juan 10:10 “Pero yo he venido para que tengan vida y para que la tengan en abundancia.” Vida y abundante, al parecer Dios se empeñó en una combinación explosiva. Y es que ¿quién no quiere tener vida? Todos, de alguna forma, sin importar edad, estado de salud o solvencia económica, nos aferramos a ella y ¡cuánto más si el término implica vida eterna! Sin enfermedades, sufrimientos, problemas y... con la deleitante presencia de Dios en los cielos; no en vano el apóstol escribió: “Cosas que ojo no vio, ni oído oyó, ni se ha imaginado el hombre, son las que Dios tiene reservada para los que le aman.” Pero, por si fuera poco, nuestro Señor nos adelanta adicionalmente plenitud en nuestra vida diaria. Es triste ver como en muchas ocasiones vivimos una vida miserable, cuando Dios nos ha llamado a vivir “abundantemente” en Cristo. Estamos en la orilla del mar, sin darnos cuenta de la profundidad de la experiencia cristiana. No es carismatismo desmedido, excesiva prosperidad material, ni ausencia de problemas, es la seguridad y la realidad de la presencia de Dios en nuestro diario vivir. ¿Te hallas triunfante, por encima de toda circunstancia? ¿Disfrutas una vida plena en Cristo? Este escrito es una contribución de la agrupación para eclesiástica cubana: Ministerio CRISTIANOS UNIDOS. ObreroFiel.com – Se permite reproducir este material siempre y cuando no se venda.