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Sociedad
RADIOGRAFÍA DE unA RED DE COnTEnCIÓn InFAnTIL La fragilidad del sistema bonaerense, que incluye a ONG, organizaciones comunitarias, municipios y entidades religiosas de distintos credos, pone en riesgo a chicos vulnerables
| Lunes 3 de marzo de 2014
Qué son las UDIs
Más ayudas
Son emprendimientos desarrollados por municipios, ONG, iglesia Católica y otros credos. El programa incluye 1597 jardines maternales y centros sociales
De ellos, unos 93.000 menores reciben becas La beca varía según el tipo de prestación y llega hasta $ 450 mensuales. El valor está congelado desde diciembre de 2010
Asistencia Contiene a alrededor de 120.000 niños de hasta 12 años
El programa depende de la Subsecretaría de Políticas Sociales del Ministerio de Desarrollo Social bonaerense
Otros 100.000 adolescentes de hasta 18 años que habitan éste distrito, reciben becas con distintas denominaciones como CJ (Centros juveniles), Plan Eva Perón y otras; sus valores mensuales también están desactualizados y sus pagos se retrasan periódicamente
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soCIEDAD Edición de hoy a cargo de Nora Bär | www.lanacion.com/sociedad
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EDUCACIÓN ALTERNATIVA | PARA PREVENIR LA DELINCUENCIA Y EL CONSUMO DE DROGAS
Denuncian atrasos en los programas bonaerenses de ayuda social Becas para niños y adolescentes que no se actualizan desde 2010 y cuyo pago se suspende periódicamente ponen en riesgo la continuidad de los centros de contención Silvina Premat LA NACION
Monseñor Oscar Ojea, obispo de San Isidro, reclamó al gobierno de la provincia de Buenos Aires la actualización de las becas con las que se mantienen centros de contención de unos 225.000 niños y adolescentes de las zonas más pobres de la provincia. “Hablar de contención en un barrio marginal es hablar de prevenir el consumo de drogas, por eso la estabilidad de estos centros es fundamental”, dijo Ojea, que en el Episcopado preside Cáritas Argentina. En su diócesis, integrada por San Fernando, Vicente López, Tigre y San Isidro, funcionan ochenta centros que subsisten gracias a donaciones y ayudas de empresas y particulares. Se trata de jardines maternales, “casas del niño”, centros de atención a la infancia y centros juveniles en los que unos 500 docentes, asistentes sociales y otros profesionales asisten a unos 15.000 chicos. En teoría, esos centros son sostenidos con becas del Ministerio de Desarrollo Social de la provincia, como las UDI (unidad de desarrollo infantil), para niños de hasta 12 años, y otras ayudas con distintas denominaciones, como Centros Juveniles, Plan Eva Perón y otras, para adolescentes de hasta 18. Pero la falta de actualización de sus montos y el retraso en su pago están poniendo en dificultades a los gestores de los centros. El monto de esas becas no se actualiza desde diciembre de 2010 y van de $ 300 a $ 450 por mes por cada chico. En la mayoría de los casos se adeudan desde septiembre de 2013. A Cáritas-San Isidro el Ministerio de Desarrollo Social de la provincia le depositó los dos bimestres adeudados de las becas UDI luego de correrse el rumor de que monseñor Ojea había dado una entrevista a la nacion. Siguen sin cobrarse el resto de las becas. “Aun cuando ahora se pongan al día con lo adeudado, la cuestión de los atrasos se repite, y si algo se atrasa o no se aumenta quiere decir que no es una prioridad”, dijo Ojea, quien hace unos días se entrevistó con el flamante ministro de Desarrollo Social, Eduardo Aparicio. A pocos días de asumir, después de varios meses de haber permanecido esa cartera sin titular, Aparicio recibió el pedido de audiencia de representantes de Cáritas y ofreció concurrir él al obispado de San Isidro. Así lo hizo. Fue recibido por Ojea y por monseñor Carlos Tissera, obispo de Quilmes, donde también funcionan centros de contención gracias a las becas oficiales. Los obispos plantearon al ministro Aparicio la dificultad que producen los atra-
Las denuncias del obispo Advierte sobre el riesgo de abandonar a niños y jóvenes Mons. oscar ojea presidente de CáritAs ArgentinA
“Si hay atrasos y no se actualizan los montos, significa que los chicos no son una prioridad” “Hablar de contención en un barrio marginal es hablar de prevención del consumo de drogas” “Se trata de dinero de los pobres. Esto no es una ayuda a la Iglesia sino a un trabajo directo con los niños” “Scioli nos convocó preocupado por el narcotráfico. Nuestra propuesta es potenciar lo que ya existe, porque si no están estos lugares, estos chicos ¿adónde van?”
sos en los pagos de las becas UDI. Aparicio, por su parte, expresó su voluntad para lograr una solución concreta a corto plazo. Los centros, que nacieron como de apoyo escolar, abren sus puertas a niños y adolescentes en contraturno y, además de alimentarlos, los ayudan a hacer las tareas y les ofrecen talleres de arte, música y otras disciplinas. Los chicos que concurren a esos centros “son los que suelen estar mucho en la calle, son los chicos de las esquinas, los que no tienen contención familiar”, dijo Ojea, para quien “es feroz” la demanda de droga en los barrios marginales. “Hay villas donde el consumo está tan difundido que el chico siente que queda fuera del grupo si no consume, porque al no tener una familia su adhesión al mundo es a través de la banda”, continuó Ojea. Y admitió: “Estamos en una situación difícil. Si las becas no aumentan vamos a tener serios problemas. No puedo poner plazos, porque siempre recurrimos a la buena voluntad de nuestras comunidades para pedir ayuda y el gobierno expresó su voluntad de solucionar este problema, pero está llegando un momento en el que nosotros también estamos con un ahogo importante”. Para paliar el desfase en cuanto a los montos recibidos desde el gobierno provincial y los gastos erogados, sobre todo en sueldos a los profesionales y empleados, el obispado de San Isidro se hizo cargo de conseguir fondos. El vicario de San Isidro, padre Guillermo Caride, cuenta que el valor de la beca hoy, teniendo en cuenta los aumentos de sueldos y gastos que fueron absorbidos en estos tres años, sería de más de $ 650 por chico. Y a ese valor aún faltaría sumarle los incrementos de sueldos otorgados en estos meses. “Se trata de dinero que es de los pobres. Esto no es una ayuda a la Iglesia, sino un trabajo directo con los pobres”, dijo Ojea. El padre Jorge García Cuerva, vicepresidente de Cáritas San Isidro y párroco de la villa La Cava, recibe a unos mil chicos en sus diferentes espacios. “Mientras estas ayudas no estén reglamentadas por una ley, seguiremos siempre patinando”, dijo García Cuerva. El obispo recordó que cuando la Iglesia sacó, el año pasado, un documento sobre el narcotráfico, el gobernador Daniel Scioli fue la primera persona que convocó a los obispos bonaerenses. “Estaba preocupado por este tema y me parece que para cristalizar esta preocupación de un modo más concreto es necesario cuidar estos centros y potenciar lo que ya existe, porque si esos chicos no van a esos lugares, ¿adónde van?”ß
Actividades en el centro de apoyo escolar Domingo Savio
Además de clases de apoyo, los chicos reciben la merienda
fotos RicaRdo PRistuPluk
Ante la falta de fondos, algunos comedores ya cerraron La organizaciones que gestionan centros de ayuda enfrentan serias dificultades para subsistir Sebastián Lalaurette CORRESPONSALÍA LA PLATA
LA PLATA.– Más de 250 chicos ya se quedaron sin la contención que recibían hasta el año pasado por la falta de pago del gobierno bonaerense del dinero comprometido a organismos no gubernamentales de esta provincia que mantienen comedores y centros de apoyo escolar, algo que ya preocupó incluso a la Iglesia, que administra algunos de estos lugares. Mientras tanto, también varios comedores escolares se encuentran en alerta por el atraso en los pagos. El conflicto se centra en el programa de Unidades de Desarrollo Infantil (UDI), del Ministerio de Desarrollo Social de la provincia de Buenos Aires. Ese programa comprende los servicios de 1597 jardines maternales, comedores infantiles, Casas del Niño, centros juveniles y centros de atención integral que incluyen tareas didácticas y de apoyo escolar, a través de convenios con organizaciones comunitarias, municipios y entidades religiosas de diferentes credos. Unos 120.000 chicos se benefician de ese sistema.
Periódicamente, el ministerio entrega a esas instituciones un monto por chico asistido, que es de hasta 450 pesos mensuales (valor que las entidades reclaman actualizar para tener en cuenta la inflación). Pero los pagos están atrasados. Hay varias organizaciones que le entablaron juicio al Estado y, por la falta de fondos, la reconocida Obra creada en esta ciudad por el ya fallecido sacerdote Carlos Cajade decidió no abrir tres de sus emprendimientos solidarios (dos Casas del Niño y una Casa de los Bebés) que atendían a más de 250 chicos. “El ministerio nos debía seis meses de becas. Sólo hace dos días nos depositaron el pago de un mes”, dijo a la nacion Daniel Cajade, encargado de la Obra y sobrino del fundador. El conflicto viene de lejos. Eduardo Aparicio, ministro de Desarrollo Social bonaerense desde hace menos de un mes, lo heredó de su antecesor, Martín Ferré. “Para el gobierno ya se naturalizó la práctica de no pagar un bimestre de cada año. A nosotros se nos hace difícil sostener la alimentación de los chicos y el apoyo escolar, porque además el valor de las becas está congelado desde hace años y no alcanza. El área de jardín ya la tuvimos que restringir”, dijo a este diario Marcela Val, presidenta de la Fundación Che Pibe, que trabaja en Villa Fiorito, Lomas de Zamora.
Mientras tanto, para las organizaciones no gubernamentales que mantienen los comedores escolares de la provincia, la situación sigue siendo crítica. El presidente de la asociación que los agrupa, Héctor Acevedo, dijo a la nacion que a pocos días de que comience el ciclo lectivo aún no han recibido el pago correspondiente al mes de septiembre de 2013. “En estas condiciones no vamos a poder abrir los comedores el miércoles. No hay manera. Muchas ONG no van a poder comprar la mercadería antes de esa fecha”, dijo Acevedo. Los comedores escolares se financian mediante otro programa de Desarrollo Social, el Servicio Alimentario Escolar (SAE). Acevedo calcula que el Estado mantiene una deuda de unos 500 millones de pesos con las ONG que prestan ese servicio. Según Acevedo, el ministro Aparicio les dijo la semana pasada a él y a otros representantes de comedores que depositarían lo correspondiente al mes de septiembre de 2013. Pero hasta el miércoles eso no había sucedido. Voceros del Ministerio de Desarrollo Social señalaron que el programa de UDI “no está cortado” y que “los pagos se están haciendo efectivos” tanto en ese caso como en el del SAE, sin brindar precisiones sobre cuándo se pondrían al día.ß