SOCIEDAD | 19
| Domingo 21 De septiembre De 2014
QUé pensamos de la escUela medIa Una encuesta telefónica que abarcó 932 casos en todo el país indagó sobre la percepción social de la situación de la escuela secundaria y confirmó que la gente desconoce la gravedad del fenómeno
Percepción del abandono escolar
Beneficios de terminar la escuela
En los últimos 15 años, ¿en qué condición se encuentra la educación secundaria pública? En porcentajes
¿Qué ventajas tiene completar la secundaria? En porcentajes
NIVEL EDUCATIVO
Menos de 200.000
23%
Entre 200.000 y 350.000
30%
Entre 350.000 y 500.000
15%
TOTAL 0
Mejoró
12%
Más de 500.000
20%
El número real fue de 427.111 en 2010, último dato oficial
19
Mejor inserción laboral 46
20
66
18
2
Provee herramientas útiles para la vida 22
ALTO 0
50
15
2
MEDIO 0
30
60
Está igual
Ns/nc
BAJO 0
23
Empeoró
Ns/Nc Fuente: Consultora Isonomía para Fundación Cimientos
Percepción del estado general
¿Qué cantidad de chicos abandonan la escuela secundaria anualmente?
14
66
12
1
Permite acceder a la universidad 19
2 Otros y Ns/Nc 9
En estos sectores existe una mirada optimista de la realidad
Mejor futuro 4
sociedad Edición de hoy a cargo de José Crettaz | www.lanacion.com/sociedad
@LNsociedad
Facebook.com/lanacion
[email protected]
educación | la percepción social de la crisis de la escuela
Unos 500.000 chicos dejan la secundaria cada año, pero la gente apenas lo registra El 73% de los argentinos es incapaz de estimar la cifra y el 20% directamente desconoce el problema, según una encuesta de la Fundación Cimientos; sin embargo, para el 61% de los consultados, la calidad de la enseñanza empeoró Luciana Vázquez PARA LA NACiON
En el Día del Estudiante, no hay buenas noticias para los chicos en edad de estar en la escuela secundaria. Casi medio millón de estudiantes abandonó ese nivel educativo en 2010, el último dato oficial disponible elaborado por la Dirección Nacional de información y Evaluación de la Calidad Educativa (Diniece) sobre una matrícula total en aquella época de 3.655.923 alumnos. Exactamente, fueron 427.111 adolescentes, un promedio de casi 1200 chicos por día o un colegio de gran porte, como el Nicolás Avellaneda, cada veinticuatro horas. Pero lo que puede ser aún más preocupante es la percepción social del fenómeno. Según el estudio Opinión sobre la dimensión de la deserción en la Escuela Secundaria Pública, realizado por la consultora isonomía para la Fundación Cimientos, apenas el 15% de los consultados acierta la cantidad real de chicos afectados por la deserción escolar en la escuela secundaria al ubicarla en una franja de entre 350.000 a 500.000 chicos. En cambio, el 73% de la gente “no sabe o brinda un número muy inferior al real”. Y el 20% directamente desconoce el problema y no es capaz de arriesgar cifras. Ese desconocimiento crece entre los sectores de nivel educativo alto, donde llega al 24%. Un 12% cree que la situación es más grave que la real y cree que la cantidad supera los 500.000. La Fundación Cimientos es una organización civil que desarrolla programas para que los chicos de bajos recursos terminen el secundario y con este estudio buscó contrastar la información oficial sobre abandono con la percepción de la sociedad. El
trabajo se realizó mediante un sondeo telefónico nacional que alcanzó una muestra de 932 casos, hombres y mujeres de 18 a 80 años. De la encuesta se desprende que la percepción de la población en general subestima el impacto del problema. Cuando se divide a la población según su nivel educativo (bajo, medio o alto), la percepción pública acerca de la cifra real de chicos que deja el secundario da resultados similares. Sin embargo, el dato más llamativo es que el sector de nivel educativo más alto es el que mayor desconocimiento muestra del número real, con un 24%. ¿Por qué es importante la percepción social y los niveles de información de la opinión pública cuando se trata de la deserción escolar? La directora ejecutiva de Cimientos, Agustina Cavanagh, tiene una primera respuesta: “El desconocimiento sobre un problema contribuye a su naturalización. Al conocer, desnaturalizamos la situación, se pone enfrente nuestro como problema, podemos entenderlo mejor y tomar medidas”. El estudio de Cimientos también buscó indagar sobre cómo es percibida la calidad de la educación secundaria y si en los últimos quince años mejoró o empeoró. “Desde la fundación no creemos que la escuela secundaria esté mejor. Si bien es cierto que se ha mejorado en el aspecto del acceso, con el ingreso de una población que no tenía la menor posibilidad de ir a la escuela secundaria, persisten problemas en la permanencia y el egreso, y en lo que los alumnos aprenden”. En ese punto, la percepción social está más cercana a la realidad, con un 61% que cree que la escuela empeoró. En cambio, el 23% sostiene que mejoró y un 15% cree que su situación no se
La falta de apoyo familiar, una de las razones atribuidas al abandono ha modificado. Pero en este aspecto, hay variaciones entre la perspectiva de los sectores según su nivel educativo. Entre los sectores de bajo nivel educativo, la percepción es mucho más optimista. Aunque el 50% de este sector cree que la secundaria empeoró, el 30% cree que mejoró y el 18% cree que está igual, lo que contrasta con los sectores de nivel educativo medio, donde apenas el 19% cree que mejoró y el 14% la ve igual. “Nuestra
interpretación es que los sectores de nivel educativo bajo valoran más las posibilidades de acceso al secundario, que efectivamente aumentaron, que los aspectos de calidad, de ahí su percepción positiva”, dice Cavanagh. En cuanto a por qué los chicos dejan la secundaria, los principales motivos, según la percepción de la gente, son la “falta de contención en los hogares”, que se lleva el 24% de las respuestas; en segundo lugar, “la falta de
aníbal greco/archivo
políticas educativas”, con el 16%, y luego el hecho de que “los chicos no encuentren motivación en los estudios”, con el 15%. Los otros dos motivos de mayor peso son la calidad del secundario (“es malo”), con el 9%, y la “falta de políticas sociales”, con el 9%. Para Silvina Gvirtz, directora general ejecutiva del programa Conectar igualdad y ex directora de Escuelas de la provincia de Buenos Aires, “la escuela secundaria fue concebida
Impulsan profundos cambios en la ley de adopciones DIPUTADOS. Hay consenso entre oficialistas y opositores para darle media sanción antes de fin de año; el adoptado tendrá derecho a conocer su orígen y a partir de los 10 años será exigido su consentimiento; buscan acelerar el proceso Laura Serra LA NACiON
Antes de fin de año, oficialismo y oposición prevén avanzar en la Cámara de Diputados en una nueva ley de adopción. La iniciativa, con la que se pretende agilizar un trámite hoy por demás lento y burocrático, contiene importantes innovaciones que prometen desatar varias polémicas. La base de la discusión legislativa será el capítulo sobre adopción incluido en el proyecto de reforma del Código Civil, cuya sanción está trunca por diferencias políticas. Entre las novedades que se proponen figura el derecho del adoptado (inclusocuando fuese menor de edad) a conocer su identidad y sus orígenes. Otro punto importante es que, a partir de los diez años, el niño o adolescente debe prestar su consentimiento sobre su adopción. Además, se incorpora la “adopción de integración”, es decir, la posibilidad de adoptar al hijo del cónyuge o conviviente.
El debate arrancará en los próximos días en un plenario de las comisiones de Legislación General y de Familia de la Cámara baja. La propuesta que llevará el oficialismo es casi calcada del proyecto de reforma del Código Civil, aunque no incluyó por ahora a los convivientes como potenciales adoptantes. Sí lo hizo, en cambio, el diputado Felipe Solá, del Frente Renovador y presidente de la Comisión de Familia, que presentó su propio proyecto. Éste será uno de los puntos de debate, aunque el oficialismo ya anticipó que incluirá a los convivientes como adoptantes. “Nuestra intención es avanzar en una ley que logre el mayor consenso posible, por eso vamos a escuchar a todas las voces”, enfatizó la diputada del Frente para la Victoria Mara Brawer, vicepresidenta de la Comisión de Familia y autora, junto a la también kirchnerista Anabel Fernández Sagasti, de la propuesta oficialista. El diputado Solá celebró que el kirchnerismo finalmente dé el debate. “En la actualidad hay unos 14.000 niños y adolescentes sin cui-
dados parentales, y para muchos de ellos la adopción es la única opción legítima para vivir y desarrollarse en una familia que los cuide, que les dé afecto y que cubra sus necesidades”, enfatizó. El nuevo régimen contemplaría un procedimiento judicial más ágil para concretar el trámite de adopción. Éste se inicia con una “declaración judicial de adoptabilidad”, por la cual el juez define si un niño, niña o adolescente cumple efectivamente con las condiciones para ser adoptado. El proyecto le otorga al magistrado un plazo de 90 días para decidir esta situación. Luego, el juez seleccionará a los adoptantes, inscriptos previamente en el registro correspondiente, y les otorgará el menor en guarda por un plazo que no debe superar los seis meses. Vale remarcar que la iniciativa prohíbe la entrega directa de menores mediante escritura pública. Una vez cumplido el período de guarda, el juez inicia el juicio de adopción. La iniciativa comprende tres tipos: adopción simple y plena
(como en el actual Código Civil) y la de integración que, como se dijo, permite la adopción del hijo de un cónyuge o convivente. Una de las novedades más controvertidas que incluiría el nuevo régimen es que quienes adopten deberán firmar una declaración –que se incluirá en el expediente– en la que se comprometen a que el adoptado conozca sus orígenes y tenga acceso al trámite. En este sentido, el adoptado puede acceder, cuando lo requiera, al expediente judicial y administrativo en el que se tramitó su adopción y a otra información que conste en registros judiciales o administrativos. Uno de los requisitos para adoptar es que el adoptante sea por lo menos 16 años mayor que el adoptado (hoy la ley establece una diferencia 18 años como mínimo), excepto cuando el cónyuge o conviviente adopta al hijo del otro cónyuge o conviviente. Otros requisitos son los siguientes: *Residencia: el adoptante deberá tener residencia permanentemente en el país por un período
mínimo de cinco años anterior a la petición de la guarda con fines de adopción y estar anotado en el registro creado a estos fines. Este plazo no se exigirá a las personas de nacionalidad argentina o naturalizadas. *Edad: sólo podrán adoptar aquellos que hayan cumplido 25 años (hoy la ley exige 30 años como mínimo). *Fallecimiento de adoptante: cuando la guarda se otorgue durante el matrimonio o concubinato y el período legal se complete después del fallecimiento de uno de integrantes de la pareja, el juez podrá otorgar la adopción al sobreviviente y generar vínculos jurídicos de filiación con ambos. Por otra parte, el proyecto de ley prohíbe las llamadas “guardas puestas”, es decir, aquellas situaciones en las que una pareja que quiere adoptar un niño o una niña se pone en contacto con una mujer embarazada (a través de abogados o escribanos) que en situación social precaria estaría dispuesta a entregar el bebe.ß
como una nivel seleccionador de los mejores que ingresarían a la universidad o a las burocracias intelectuales del Estado. Cuando la sociedad del conocimiento se masificó, la secundaria se volvió una necesidad y la ley de educación de 2006 estableció su obligatoriedad. Pero a la escuela le cuesta acompañar esos cambios, aunque hay esfuerzos y la percepción social muchas veces le sigue demandando al secundario el rol de seleccionador, que expulsa”. Más allá del sistema educativo, Gvirtz responsabiliza a los valores sociales, o “disvalores” según su análisis, una fuente de desmotivación para terminar el secundario. “Un ejemplo es la Legislatura porteña nombrando a Marcelo Tinelli como personalidad destacada de la cultura. No se valora al que sale del sistema educativo. ¿Por qué terminar el secundario si todo depende de la suerte o del dinero? Un chico primera generación en secundaria, y esa es la realidad que trajo la obligatoriedad, necesita que su esfuerzo sea valorado”, afirma Gvirtz. Respecto de las consecuencias del abandono en el secundario, la opinión pública abarca en 16 respuestas una amplia gama de consideraciones: “nos perjudica como país” (18%), “un chico más en la calle” (15%), “aumenta la inseguridad” (14%), “falta de oportunidades laborales y la desocupación” (8%), entre otras cosas. Según la encuesta de Cimientos, la percepción social sobre el impacto del abandono ve en el fenómeno un problema general. “El 20% considera que es un problema que afecta sólo a nivel individual. El 80% restante lo considera una problemática social, que afecta al país”, sostiene el trabajo en sus conclusiones.ß
Los puntos más importantes Innovaciones que incluiría la nueva ley de adopción Orígenes El adoptado tiene derecho a conocer sus orígenes: puede acceder cuando lo requiera al expediente en el que se tramitó su adopción Hermanos Se prioriza la adopción de grupos de hermanos en la misma familia adoptiva o, en su defecto, el mantenimiento de vínculos jurídicos entre los hermanos Consentimiento El adoptado tiene derecho a ser oído; por tal motivo, será obligatorio requerir su consentimiento a partir de los 10 años Trámite más corto El trámite de adopción sería más corto. El juez tiene 90 días para definir la situación de adoptabilidad de un menor y la guarda no podrá exceder los 6 meses