Espectáculos

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Domingo 28 de octubre de 2007

Lo que se viene: El fantasma de la ópera y Rent

Broadway regresa a Buenos Aires El fantasma de la Opera

Luego de la crisis, los grandes musicales volverán el año que viene, con producciones de costos altísimos

■ El musical que hace más tiempo que se mantiene en cartel llegará a Buenos Aires. Un equipo creativo y artístico vendrá a montar la obra, que promete tener una puesta en escena con gran despliegue

Otros proyectos para 2008

Por María Fernanda Mugica Para LA NACION Un grupo de ocho jovenes están parados en el escenario, intentando esconder los nervios. El director musical les indica que empiecen a cantar y la versión en español de “Seasons of Love”, del musical Rent, sale con energía de sus gargantas. “Muchas gracias. Esperen afuera que ahora les vamos a avisar quiénes pasan a la segunda audición”, dice una asistente, y los ilusionados jóvenes se retiran. Así fue, en resumen, una de las primeras audiciones abiertas para elegir quienes serán los protagonistas de la versión local de Rent, que se estrenará en abril. Este musical que hizo furor en Broadway en los años 90 no es el único que se estrenará en Buenos Aires el año que viene. El fantasma de la Opera, que llegará en marzo, y algunos otros proyectos musicales (ver recuadro) se presentarán en los escenarios porteños en 2008. Se trata de musicales muy distintos, que se diferencian tanto en estilo como en características de producción. El fantasma de la Opera es uno de los más famosos musicales y el que hace más tiempo que se mantiene en cartel, récord que le ganó a Cats. Esta creación del “señor de los musicales”, Andrew Lloyd Weber, se estrenó el 27 de septiembre de 1986, en el Her Majesty’s Theatre, de Londres (con libro de Richard Stilgoe y letras de Charles Hart). Cie México, que ahora se llama Time for fun, compró hace varios años los derechos de El fantasma... para varios territorios, los cuales incluyen México y España, en donde ya se presentó. El proyecto para hacerla en Buenos Aires viene de antes de 2001, pero fue abandonado debido a la crisis. Diez años antes, Tito Lectoure también tuvo la intención de montarla en el Luna Park, pero se frustró cuando los técnicos británicos dijeron que el estadio no reunía las condiciones necesarias para el sonido de esta obra enteramente cantada. “Es un espectáculo de los que llamamos clon, porque se compra la licen-

Muy cerca de concretarse

JOAO CALDAS

Rent ■

La bohemia neoyorquina de los años 90 es retratada en este musical que llegará en abril

cia, con letra y música, y vienen todos los creativos y un staff técnico que le enseña al equipo argentino y ya dejan montada la obra. Una vez que se estrenó, se van y lo dejan a cargo al equipo local”, explica Mariana Correa, productora general del departamento de teatro de la división entretenimientos de Cie Argentina. Los directores que vienen a montar El fantasma... son Arthur Masella, que es el director de actores; David Carrick, que es el director musical, y Benny Berry, que es la coreógrafa. Harold Prince, director original de la obra, vendría a las audiciones finales y al estreno. El caso de Rent es distinto. Andy Ovsejevich y Ricardo Manetti, de la Ciudad Cultural Konex, adquirieron los derechos de este musical, que tenían como proyecto desde 2003, pe-

ro tuvieron libertad para elegir un equipo creativo argentino. La primera adaptación, según explicaron, la hicieron Fernando Masllorens y González del Pino, y ahora se está trabajando más específicamente en las letras de las canciones. “Fuimos dialogando con varias personas sobre

cómo veían Rent y fuimos evaluando las distintas propuestas”, dijo Ovsejevich, acerca de cómo conformaron el equipo. Finalmente, quedó integrado por Valeria Ambrosio (Ella), que será la directora; Gaby Goldman (Ella), quien tendrá a cargo la dirección musical y James Murray (Jazz, swing, tap), que será director de actores. Rent, que está ligeramente basada en algunos personajes y situaciones de La Bohème, es el musical insignia de la generación X y la prensa norteamericana la comparó con lo que significó Hair para la juventud de los años 60. La obra, escrita por Jonathan Larson, es un retrato de la vida de un grupo de jóvenes bohemios en los años 90, que intentan sobrevivir en el Greenwich Village, acosados por el sida y la pobreza. Las características de producción de ambas obras son muy distintas. En Rent el acento está puesto en la historia y las canciones. Además, se consideró importante el ámbito en el que iba a ser presentada, ya que por tratarse de una obra sobre una contracultura, un teatro tradicional no resultaba un lugar adecuado.

El fantasma..., en cambio, tendrá un gran despliegue de escenografía y vestuario. El teatro Opera, donde se presentará, ya está siendo invadido por las 230 piezas de vestuario que van a ser utilizadas por los personajes principales y el resto del elenco. Durante la obra hay 22 cambios de escena y entre la escenografía se encuentra la famosa araña de luces que cuelga sobre la platea y simula derrumbarse sobre los espectadores. Pero no todo son diferencias entre estos dos musicales que le devolverán a Buenos Aires los sueños de tener un porción de Broadway. Ninguno de los dos está apuntando a tener una estrella entre sus actores principales. Tanto para Rent como para El fantasma... se hicieron audiciones abiertas, a las que concurrieron cientos de aspirantes. Para los productores de ambos espectáculos, el talento en el canto, el baile y la actuación es fundamental para enfrentar las exigencias que estas obras implican y apuestan a la fama de los títulos para convocar al público. En cuanto a los costos de traer espectáculos de tal magnitud, los productores prefieren no revelarlos, aunque, a modo de aproximación, LA NACION pudo saber que la producción de El fantasma... tiene un costo que supera ampliamente los cinco millones de pesos. Se trata de una gran apuesta a un género que vuelve a vivir un crecimiento en nuestro país.

Los sueños de que Buenos Aires pudiera convertirse en Broadway se desvanecieron cuando la crisis de 2001 y la devaluación hicieron que comprar derechos de musicales extranjeros y solventar los gastos que implica una producción de estas características fuera sólo una quimera. El año próximo, además de Rent y El fantasma de la Opera, hay varios proyectos, algunos ya confirmados, que llegarán a los teatros porteños. Pablo Kompel, productor de Los productores, presentará en Buenos Aires El joven Frankenstein, entre el segundo trimestre de 2008 y comienzos de 2009. La obra, basada en la película homónima de Mel Brooks, está en sus funciones previas en Broadway y se estrenará el 8 de noviembre próximo. Kompel viajará a ver el estreno junto a Guillermo Francella, quien ya está confirmado para protagonizarla. El equipo creativo incluirá al director de Los productores, Ricky Pashkus, quien también tiene entre manos otro proyecto. Desde que comenzó su carrera en el musical, sueña con dirigir A Chorus Line y ahora está en tratativas para hacerlo en 2008. Otros proyectos que se estrenarían son el clásico Cantando bajo la lluvia, producido por Diego Romay; Otelo, de Pepe Cibrián, y Legally Blonde, basado en el film con Reese Whitherspoon. Daniel Grinbank y Florencia Peña fueron a Nueva York por los derechos de esta obra a mediados de año.

Buenos intérpretes en un endeble musical Regular

✩✩ Martirio. Mujer y tango. De Enrique Morales y Enrique Dacal. Dirección y puesta en escena: Laura Manzini. Con Laura Manzini y Néstor Scirocco. Bailarines: Alberto Leis, Marina Otero, Ayelén Sánchez y Pablo Pezet. Coreografía: Ayelén Sánchez, Walter Suquía y Rodrigo Villani. Arreglos y dirección musical: Daniel Berardi. Diseño de escenografía: Melina Frezzotti. Diseño de luces: Laura Manzini. Asistencia de dirección: Paula Brinko. En Gargantúa (Jorge Newbery 3563). Sábados, a las 21.30. Duración: 60 minutos.

El mundo del tango se impone en la construcción de esta experiencia que acaba de estrenarse en Gargantúa. Y no sólo son sus temas musicales los que van dando forma a su estructura narrativa, sino que, además, los dos personajes resultan reconocibles, toda vez que se repare en que sus comportamientos también han sido extraídos de alguna composición conocida. Ella ya no cree en el amor y menos en el que puede brindarle un hombre de lenguaje florido, marcado por una mezcla de lunfardo y poesía barrial rimbombante y decadente. El aspira a obtener el amor de ella, pero de continuo se siente rechazado. Ese rechazo de la mujer y la espera casi angustiante de él se manifiestan cantando. Y, en verdad, esto es lo que más demuestra las cualidades de Laura Manzini y Néstor Scirocco en escena. Ese espacio es el más adecuado para ambos porque los dos descubren en cada tema que interpretan una fuerte motivación.

Néstor Scirocco y Laura Manzini

En verdad, la pequeña trama de Martirio. Mujer y tango es sumamente endeble, quizás una excusa para aportarle cierta teatralidad al espectáculo, pero es lo más cuestionable, porque ni los personajes asoman bien desarrollados, ni sus diálogos terminan de tener una verdadera potencia dramática. Sólo parecerían dar pie para que un tema musical ocupara su lugar.

Personalidad artística Si bien las coreografías resultan atractivas y el grupo de bailarines es efectivo, su labor se ve un tanto deslucida, porque el espacio del Gargantúa es muy pequeño para que ese trabajo adquiera la presencia que merece. Muy buena cantante e intérprete, Laura Manzini se ve en esta propuesta algo opacada. No es éste un material teatral que la ayude a valorizar y enriquecer su personalidad artística.

Carlos Pacheco