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CULTURA

I

Domingo 22 de marzo de 2009

LA POLITICA EN EL MUNDO EDITORIAL Y MAJUL, LANATA, AGUINIS Y NELSON CASTRO PREPARAN SUS TEXTOS

Los libros K se escriben contra reloj Varios títulos sobre el kirchnerismo y sus protagonistas llegarán a las librerías este año, apurados por el nuevo cronograma electoral SUSANA REINOSO

Críticas en papel

LA NACION Bastó con anticipar las elecciones legislativas para el 28 de junio para que se crisparan los nervios en los grupos editoriales que habían planificado cuidadosamente, para este año, el lanzamiento de varias novedades vinculadas con el matrimonio presidencial, el kirchnerismo y sus diversos frentes de batalla. Random House-Mondadori (ex Sudamericana), Planeta y Ediciones B, entre otros, ajustaron plazos y fechas de salida, porque lo que haya que contar o denunciar, a través de los libros, habrá de hacerse antes de lo previsto. Random House es el que contrató más libros periodísticos y ensayos sobre los Kirchner, su entorno y su modelo político. Contrató para este año alrededor de diez títulos, al margen de los que ya están en el mercado. Los anticipos de Random House a algunos autores también ocupan la pole position: oscilan entre US$ 100.000 y US$ 150.000, según la calidad del autor y del libro. El dato obtenido por LA NACION no fue suministrado por la compañía editorial. Planeta, por su parte, tiene dos ases en la manga, cuyos autores no quiso adelantar. El gerente editorial de ese grupo, Ignacio Iraola, sólo dijo que se trata de dos periodistas conocidos y que ambos proyectos son investigaciones. En tanto, Ediciones B tiene previsto publicar en mayo La sorprendente historia de los vicepresidentes argentinos, de Nelson Castro, que tiene un capítulo dedicado al actual gobernador bonaerense, Daniel Scioli, y al vicepresidente Julio Cobos. En este momento, en algún lugar secreto de Punta del Este y alejado de los aplausos del teatro Maipo, el periodista Jorge Lanata da las puntadas finales a una de las promesas editoriales del año: una investigación sobre Néstor Kirchner. Mientras tanto, en Buenos Aires, Luis Majul invierte los fines de semana para concluir su libro sobre el modelo de “eternización” política del matrimonio Kirchner, en el que trabaja hace dos años. No son los únicos que sacrifican el ocio a manos del trabajo. Otros dos periodistas, José Antonio Díaz y Edi Zunino, también trabajan contra reloj. El primero escribe La

Ensayos con denuncia

Conocer el kirchnerismo En sus libros respectivos, Marcos Aguinis, Mariano Grondona y Juan Gasparini profundizarán el análisis crítico sobre las políticas ausentes del Gobierno, el pacto Menem-Kirchner y el poskirchnerismo. Luis Majul, Jorge Lanata, Edi Zunino y José Antonio Díaz también preparan sus textos. Argumentos

Enfoques críticos Mientras algunos de los libros criticarán el modelo de eternización política de los Kirchner en el poder, otros autores irán a fondo con las estrategias que utilizan para financiar su modelo político. En los 90 fue Planeta

Random House, adelante

Kaja, un libro que denuncia el modelo de financiamiento de la política kirchnerista, y el segundo, Callar al mensajero, un trabajo sobre la hostil relación del gobierno con los medios, cuya última expresión es la propuesta de ley de radiodifusión.

Escritura urgente Biografías, libros de investigación periodística, ensayos y hasta un “panfleto”, género del siglo XIX resucitado en estas vísperas del Bicentenario, denuncian y “dan pruebas” sobre el modelo de poder que construyen Néstor y Cristina Kirchner, sobre la conflictiva relación del Gobierno con los medios, los pesares de los empresarios no adictos, los negocios ocultos detrás del poder político, la verdadera historia de las “nacionalizaciones” de empresas privadas y otros asuntos de interés para la opinión pública. Las consultas hechas por LA NACION entre editores, escritores y periodistas abren el juego a una pregunta inicial: ¿en qué se diferencia escribir

sobre el kirchnerismo de hacerlo sobre el menemismo? Un dato curioso: varios de los periodistas consultados no contestaron las llamadas de esta cronista o prefirieron no hablar on the record. ¿Razones? Las fuentes podían desistir de hablar. Un segundo dato curioso: cuando Olga Wornat escribió Menem, la vida privada, no se ahorró datos ni detalles críticos sobre el ex presidente. Reina Cristina, su biografía autorizada sobre Cristina Kirchner, resultó un libro edulcorado, escrito con reparos y sin distancia. Pese a que muchos de los personajes que se movían en el entorno privilegiado de Carlos Menem también lo hacen en el círculo áulico de los Kirchner, Iraola encuentra una primera diferencia: “Con Menem, la ficción y la investigación periodística estuvieron a full, porque había una causa y una denuncia por día. Pero cuando se habla del kirchnerismo, que es más hermético, surgen nuevas preguntas. ¿Quiénes son? ¿Hacia dónde van? El gran libro sobre los

Kirchner todavía no se escribió, porque no hay quienes vayan a fondo en sus investigaciones”.

Una crítica a quiénes somos El gerente editorial de Random House, Pablo Avelluto, dice que desde 2007 hay una suerte de “revival de la investigación periodística, que se ha profundizado”. Y cita, entre otros, Operación Traviata, el libro sobre el sindicalista José Rucci escrito por Ceferino Reato. Agrega: “Las fuentes empezaron a hablar un poco más, y también la gente, en un año electoral, está más inclinada a leer sobre política. La idea es que estos libros sean leídos para entender el funcionamiento del kirchnerismo”. Para Avelluto, la diferencia entre contar el menemismo o el kirchnerismo radica en que “mientras que en los años 90, los hechos eran más descarnados y grotescos, al kirchnerismo adhieren amigos nuestros. Una crítica al kirchnerismo es también una crítica a quiénes somos”. Para algunos de los consultados, el gran

libro del menemismo fue Pizza con champán, de Sylvina Walger, una crónica sobre la “fiesta menemista”. En tren de hallar coincidencias y diferencias entre unos y otros, un autor que prefirió el anonimato subrayó: “Los Kirchner van por todo. Detrás de la argentinización de empresas privadas, está la construcción de un inmenso proyecto político y financiero, sostenido por un discurso ideológico. Los negociados del menemismo tenían que ver con la coima. Pero el kirchnerismo se queda directamente con las empresas. Al lado de éstos, Menem era un pichón”. También Marcos Aguinis puso manos a la obra. Su libro de próxima aparición se titula ¡Pobre patria mía!. “Lo escribí con dolor y bronca. Rescato un género literario del siglo XIX que fue revolucionario, el panfleto, para denunciar que la única política de Estado de los Kirchner es el soborno. Y eso infecta los valores de la sociedad, que, en buena parte, es cómplice. Entre Menem y Kirchner hay muchas analogías.”

El cambio electoral apresuró los planes de las empresas editoriales. Random House Mondadori es la que más ensayos periodísticos sobre el kirchnerismo contrató. En los 90, ese paso lo dio el Grupo Planeta. Hablar o no hablar

De un modelo a otro Si Menem dialogaba con la oposición y la prensa, lo que facilitaba el acceso a las fuentes, para contar el kirchnerismo se exige más paciencia y más tiempo, porque las fuentes no disimulan su miedo al hablar con los periodistas que escriben ensayos. En las librerías

Títulos que pisaron fuerte En los últimos años, hubo algunos títulos vinculados con el kirchnerismo. Entre ellos, Propaganda K, de María O’Donnell, y Los Kirchner. La política de la desmesura, de Joaquín Morales Solá, fueron publicados en 2007 y en 2008, respectivamente, con muy buena repercusión en el mercado.