Arquidiócesis de Santo Domingo Arquidiócesis de Santiago Diócesis de Barahona Diócesis de Baní Diócesis de Puerto Plata Diócesis de San Pedro de Macorís Diócesis de San Francisco de Macorís Diócesis de Mao-Montecristi Diócesis de San Juan de la Maguana

Valor del Mes:

MISION

Lema del Mes:

“Vayan y hagan discípulos de todos los pueblos” (Mt 28,19)

Plan de Pastoral Octubre 2017

Acción Significativa del Sector: Realizar la Semana Misionera de Evangelización y Campaña Ecológica en el Sector. Rosario por las casas Acción Significativa Familiar: Participar como familia en la misión del Sector y de la Parroquia. Rezar el Rosario en familia. Índice Primera Parte: Presentación Octubre Misionero. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 3 Lectura orante Lema del Mes: Encuentros de Evangelización. . . . . . . . . . . 4 Adoración Misionera al Santísimo. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 13 Rosario Misionero por las casas de nuestros sectores. . . . . . . . . . . . . . . . 15 Semana Misionera: Decídete por Jesús. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 17 Misión con los Niños. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 24 Misión con los Jóvenes. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 27 Misión con los Enfermos. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 30 Semana Mariana. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 32 Segunda Parte: Celebraciones Dominicales, Lecturas de la Palabra de cada día y Meditación diaria del Evangelio. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 41 Octubre termina pero la Misión se sigue. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 111 Colaboradores: José Abel Rodríguez (Arquidiócesis de Santiago), P. José Álamo (Diócesis de SJM), P. Ricardo Pimentel (Diócesis San Pedro de Macorís), P. César Guerrero (Diócesis de Higüey) , Comunidad Cuerpo de Cristo: Luis José Camilo, Johnny Guzmán, Ignacio Miranda Cubilette, José Burgos Cedeño, Enmanuel Hernández, Miguel Ángel Justo, Héctor Olivier, Raquel Moratín, Tobías González, Edwin Sabala, Vilma Capellán de Badía, Jazmín De la Cruz de Ruíz, Willy Cruz, Rafaela Reyes de Batista, Comisión Arquidiocesana de Animación Bíblica, Martharís Rivas, P. Rodrigo Hernández, P. Valerio Baines Sanz, oar, P. Gregorio Santana y Pbro. Daniel Lorenzo Vargas Salazar (Santo Domingo). Coordinadora: Eugenia López Diagramación y Arte final: Jesús Pérez Portadas: Giantfranco Santos Impresión: Editora Amigo del Hogar / Manuel María Valencia No. 4, Santo Domingo, D. N. / Tel.: 809.548.7594 / Para contacto Vicaría de Pastoral, Correo Electrónico: guiamensual.vipastoral@arzsd., [email protected] Teléfonos: 809-682-0815, 809-685-3141, Ext. 261-262, 809-221-3126 Redes Sociales: www.facebook.com/vicariadepastoralsantodomingo

Plan de Pastoral - Octubre 2017

OCTUBRE MISIONERO

La misión en el corazón de la fe cristiana Presentación El domingo 22 de octubre celebramos en toda la Iglesia la jornada mundial de reflexión, oración y colaboración, en favor de la misión universal de la Iglesia, o sea el DOMUND. La Iglesia es misionera por su misma naturaleza. Jesús la envió a evangelizar todo el mundo, hasta los confines de la tierra. Comenzamos evangelizando en la familia, en el sector, en la parroquia, en la diócesis, en el país, pero no podemos quedarnos ahí, la Iglesia tiene que “salir” hasta los confines de la tierra. Para que cada uno pueda ser discípulo, Iglesia, tiene que ser misionero. Cada miembro de la Iglesia es corresponsable de que Jesús sea conocido, creído, seguido, celebrado, comunicado en todo el mundo. El DOMUND nos recuerda este compromiso de cada cristiano católico. Todo octubre, mes del rosario, es octubre misionero. El Papa sueña con una Iglesia misionera. En cada diócesis hay un director de las Obras Misionales Pontificias, responsable de animar el espíritu misionero universal. Terminé en julio mi responsabilidad como obispo presidente de la Comisión de las misiones y enlace con las Obras Misionales Pontificias. Fue elegido para un periodo de tres años S.E.R. Mons. Jesús Castro Marte, obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Santo Domingo. Mi gratitud al Director Nacional y Directores Diocesanos de O.M.P Para animar este mes de OCTUBRE MISIONERO les proponemos diferentes actividades que muevan a todas las Parroquias e Instituciones Católicas a orar por las Misiones, a colaborar económicamente con la obra misionera universal y a volvernos cada vez más auténticos discípulos misioneros donde quiera que vayamos. Encontrarán en esta GUIA MENSUAL diferentes esquemas: • Lectura orante sobre la Misión • Encuentros de Evangelización sobre la Misión • Adoración Eucarística Misionera • Rosario Misionero • Misión con los enfermos • Misión con los Niños • Misión Joven • Semana Misionera como preparación a la Jornada Mundial Misionera del 22 de Octubre • Semana Mariana Misionera Fraternalmente,

+Rafael Felipe Núñez Obispo emérito de Barahona, Administrador Apostólico de San Pedro de Macorís

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Vayan y hagan discípulos de todos los pueblos

Lectura Orante / Mateo 28,19-20

“Vayan y hagan discípulos de todos los pueblos” Orientaciones: La formación es parte esencial de todo discípulo de Cristo, con la Lectura Orante comunitaria y personal nos mantenemos constantes en las enseñanzas transmitida por la Palabra del Señor. Para este encuentro debe haber un responsable, pero su función es dirigir la lectura y organizar el encuentro, en el que debemos tener la participación de todos. Duración: No más de 30 minutos. 1. Invocación al Espíritu Santo Se pide la presencia del Espíritu de verdad, para que ilumine nuestro entendimiento de las enseñanzas recibidas a través de esta Palabra de Vida, que arda nuestro corazón y mueva nuestra voluntad a la misión. 2. Leo el texto de Mateo 28,19-20 Leemos detenidamente el texto en dos ocasiones en voz alta y de ser posible en traducciones distintas (Biblia de Jerusalén o la del Pueblo Peregrino, entre otras), luego cada persona lee en silencio para que el Espíritu hable a su corazón y conciencia. 3. Medita (¿Qué me/nos dice la Palabra?) ¿Quién habla en la lectura y a quiénes va dirigida? ¿Por qué Jesús envía a los discípulos a todos los pueblos? ¿Cuándo me bautizo estoy consciente de que me he reclutado como discípulo del Señor? ¿Qué lugar ocupa la formación en mi vida como cristiano/discípulo de Cristo? Reflexión El mensaje es claro la misión de todo cristiano es llevar el Evangelio a los que no lo conocen y hacer que todos los pueblos sean discípulos del Señor, ésta es la misión de la Iglesia a la que pertenecemos, la fundada sobre la piedra angular rechazada por los constructores. Cada uno de nosotros tiene ese deber, pero no es solo el de anunciar el Evangelio, también el de enseñar lo que hemos recibido, esas enseñanzas trasmitidas generación tras generación por el Magisterio de la Iglesia. 4. Ora (¿Qué le respondo al Señor?) Exprésale al Señor lo que de tu corazón brota luego de reflexionar la Sagrada Escritura, ahora es momento de hablarle a Dios, responderle al llamado que me hace. 5. Contempla y actúa (¿Qué inspira en mi vida la Palabra?) • ¿Soy un admirador(a) de Jesús o su discípulo? • ¿Estoy cumpliendo con el mandato que el Señor me dejó? • ¿Participo y coopero con mis recursos para la misión en mi parroquia, mi diócesis y a nivel mundial?

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Plan de Pastoral - Octubre 2017

• Propósito: Me comprometo hoy a contribuir con la misión de la Iglesia, de la cual soy miembro, para llevar el Evangelio a todos los pueblos. 6. Concluyamos con el Padre Nuestro, Ave María Gloria. Nos damos un abrazo fraterno y vivamos con gozo y como comunidad la Palabra que Dios ha puesto en nuestros corazones solicitando y acudiendo al mandato que Jesús nos hace hoy.

Primer Encuentro de Evangelización Semana 2 al 7 de Octubre

Misión y Participación ¡Ay de mí si no anuncio el Evangelio!” (1 Cor. 9, 16). Ambientación En este primer Encuentro del mes de octubre para la ambientación colocamos los carteles con el lema y el valor del mes y también el del año 2017. Además, se ponen todos los signos que deseemos sobre misión y participación: sandalias, redes, biblias, los libros de la misión Continental, los folletos y cuadernos de catequesis, libros con documentos de la Iglesia, etc. Cantos de animación Además de los cantos de acogida y animación, es conveniente poner cantos sobre la misión y los misioneros. Oración inicial Iniciamos con una oración pidiendo la presencia del Espíritu Santo en todas las personas participantes. Oramos también por todos los misioneros de la parroquia y del mundo entero, principalmente por quienes están pasando persecución y dificultades de cualquier tipo. Canto: Antes que te formaras en el vientre de tu madre… Introducción “Evangelizar constituye, en efecto, la dicha y la vocación propia de la Iglesia, su identidad más profunda. Ella existe para evangelizar” (Exhortación Apostólica “Evangelii Nuntiandi”, El Anuncio del Evangelio, del papa Pablo VI. Número14). Nosotros y toda la Iglesia estamos convencidos de ello, siendo así que la Evangelización y la Misión son la identidad de la Iglesia, es normal que los documentos oficiales de la Iglesia sobre el tema sean muchos, muy profundos y muy importantes. No nos detenemos a presentarlos, citaremos algunos de ellos, principalmente los más recientes, y el documento de Aparecida, que

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Vayan y hagan discípulos de todos los pueblos

tiene como idea o eje central el que los bautizados y bautizadas somos por el bautismo Discípulos Misioneros. Iluminación bíblica: Mateo 28,16-20 ¿A quién manda Jesús a la misión? ¿Sólo a los once discípulos? ¿A qué les envía, cuál es su misión? ¿A qué tipo de personas debe llegar la misión de los discípulos? ¿Hoy día, quién está cumpliendo el mandato de Jesús? ¿Lo estoy cumpliendo yo? ¿Y mi comunidad? ¿Dónde está la misión de mi comunidad? Canto: Háblame (Yo siento, Señor, que tú me amas…) Reflexión Como las enseñanzas de la Iglesia son tan abundantes en el tema de la misión, vamos a citar algunos de esos textos eclesiales. Pedimos que las personas participantes en el Encuentro reflexionen los textos y los pongan en común por medio de un diálogo fraterno. ¿Quiénes deben participar en la misión? En virtud del Bautismo recibido, cada miembro del Pueblo de Dios se ha convertido en discípulo misionero (cf. Mt 28,19). Cada uno de los bautizados, cualquiera que sea su función en la Iglesia y el grado de ilustración de su fe, es un agente evangelizador, y sería inadecuado pensar en un esquema de evangelización llevado adelante por actores calificados donde el resto del pueblo fiel sea sólo receptivo de sus acciones. La nueva evangelización debe implicar un nuevo protagonismo de cada uno de los bautizados. Esta convicción se convierte en un llamado dirigido a cada cristiano, para que nadie postergue su compromiso con la evangelización, pues si uno de verdad ha hecho una experiencia del amor de Dios que lo salva, no necesita mucho tiempo de preparación para salir a anunciarlo, no puede esperar que le den muchos cursos o largas instrucciones. Todo cristiano es misionero en la medida en que se ha encontrado con el amor de Dios en Cristo Jesús; ya no decimos que: somos «discípulos» y «misioneros», sino que somos siempre «discípulos misioneros». (Francisco, Evangelii Gaudium: La Alegría del Evangelio, 120)

¿Cuándo y dónde se debe participar en la misión? 1.- En la vida diaria: Hoy que la Iglesia quiere vivir una profunda renovación misionera, hay una forma de predicación que nos compete a todos como tarea cotidiana. Se trata de llevar el Evangelio a las personas que cada uno trata, tanto a los más cercanos como a los desconocidos. Es la predicación informal que se puede realizar en medio de una conversación y también es la que realiza un misionero cuando visita un hogar. Ser discípulo es tener la disposición permanente de llevar a otros el amor de Jesús y eso se produce espontáneamente en cualquier lugar: en la calle, en la plaza, en

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el trabajo, en un camino…” (Francisco, Evangelii Gaudium: La Alegría del Evangelio, 127). 2.- En la parroquia: La renovación de las parroquias, al inicio del tercer milenio, exige reformular sus estructuras, para que sea una red de comunidades y grupos, capaces de articularse logrando que sus miembros se sientan y sean realmente discípulos y misioneros de Jesucristo en comunión. Desde la parroquia, hay que anunciar lo que Jesucristo “hizo y enseñó” (Hch 1, 1) mientras estuvo con nosotros. … Toda parroquia está llamada a ser el espacio donde se recibe y acoge la Palabra, se celebra y se expresa en la adoración del Cuerpo de Cristo, y, así, es la fuente dinámica del discipulado misionero. Su propia renovación exige que se deje iluminar siempre de nuevo por la Palabra viva y eficaz. (Aparecida 172) 3.- En el sector, movimiento, comunidad: Las comunidades eclesiales de base, en el seguimiento misionero de Jesús, tienen la Palabra de Dios como fuente de su espiritualidad y la orientación de sus Pastores como guía que asegura la comunión eclesial. Despliegan su compromiso evangelizador y misionero entre los más sencillos y alejados, y son expresión visible de la opción preferencial por los pobres. Son fuente y semilla de variados servicios y ministerios a favor de la vida en la sociedad y en la Iglesia… (Aparecida 179). Como respuesta a las exigencias de la evangelización, junto con las comunidades eclesiales de base, hay otras válidas formas de pequeñas comunidades, e incluso redes de comunidades, de movimientos, grupos de vida, de oración y de reflexión de la Palabra de Dios. Todas las comunidades y grupos eclesiales darán fruto en la medida en que la Eucaristía sea el centro de su vida y la Palabra de Dios sea faro de su camino y su actuación en la única Iglesia de Cristo. (Aparecida 180). 4.- En la ayuda a los demás y compromiso social: Evangelii Gaudium 24: Como consecuencia, la Iglesia sabe «involucrarse». Jesús lavó los pies a sus discípulos. El Señor se involucra e involucra a los suyos, poniéndose de rodillas ante los demás para lavarlos. Pero luego dice a los discípulos: «Serán felices si hacen esto» (Jn 13,17). La comunidad evangelizadora se mete con obras y gestos en la vida cotidiana de los demás, achica distancias, se abaja hasta la humillación si es necesario, y asume la vida humana, tocando la carne sufriente de Cristo en el pueblo. Los evangelizadores tienen así «olor a oveja» y estas escuchan su voz. Luego, la comunidad evangelizadora se dispone a «acompañar». (Francisco, Evangelii Gaudium: La Alegría del Evangelio, 24). Canto: Quiero decirte que sí (Yo siento tu voz muy dentro de mí…) Reflexión comunitaria Con tantos textos de los documentos de la Iglesia, ¿hemos entendido el tema? ¿Quiénes deben participar en la misión? ¿Dónde se funda ese ser

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Vayan y hagan discípulos de todos los pueblos

misioneros y misioneras? ¿En qué momentos, circunstancias y lugares se debe participar en la misión? ¿Ya estoy participando en la misión de Cristo y de la Iglesia? ¿Cómo, dónde, cuándo? ¿El trabajo social, la pastoral social, el compromiso por cambiar la realidad tiene algo que ver con la Misión del cristianismo? Oración final: Se colocan en círculo. Se va pasando la Biblia de mano en mano y cada uno al tener la Biblia da gracias a Dios por haberlo enviado a evangelizar a su familia, su sector, en su trabajo y donde quiera que se mueve. Podemos terminar rezando la oración del final del Documento de Aparecida: “Quédate con nosotros, porque atardece y el día ya ha declinado” (Lc 24, 29). Quédate con nosotros, Señor, acompáñanos aunque no siempre hayamos sabido reconocerte. Quédate con nosotros, porque en torno a nosotros se van haciendo más densas las sombras, y tú eres la Luz; en nuestros corazones se insinúa la desesperanza, y tú los haces arder con la certeza de la Pascua. Estamos cansados del camino, pero tú nos confortas en la fracción del pan para anunciar a nuestros hermanos que en verdad tú has resucitado y que nos has dado la misión de ser testigos de tu resurrección. Quédate con nosotros, Señor, cuando en torno a nuestra fe católica surgen las nieblas de la duda, del cansancio o de la dificultad: tú, que eres la Verdad misma como revelador del Padre, ilumina nuestras mentes con tu Palabra; ayúdanos a sentir la belleza de creer en ti. Quédate en nuestras familias, ilumínalas en sus dudas, sostenlas en sus dificultades, consuélalas en sus sufrimientos y en la fatiga de cada día, cuando en torno a ellas se acumulan sombras que amenazan su unidad y su naturaleza. Tú que eres la Vida, quédate en nuestros hogares, para que sigan siendo nidos donde nazca la vida humana abundante y generosamente, donde se acoja, se ame, se respete la vida desde su concepción hasta su término natural. Quédate, Señor, con aquéllos que en nuestras sociedades son más vulnerables; quédate con los pobres y humildes, con los indígenas y afroamericanos, que no siempre han encontrado espacios y apoyo para expresar la riqueza de su cultura y la sabiduría de su identidad. Quédate, Señor, con nuestros niños y con nuestros jóvenes, que son la esperanza y la riqueza de nuestro Continente, protégelos de tantas insidias que atentan contra su inocencia y contra sus legítimas esperanzas. ¡Oh buen Pastor, quédate con nuestros ancianos y con nuestros enfermos. ¡Fortalece a todos en su fe para que sean tus discípulos y misioneros! Canto de despedida: Hermano entre los hombres (Siento tu llamada, me seduces tú, Señor…) (https://www.youtube.com/watch?v=fG9C--O-YzM) // Alma misionera

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Segundo Encuentro de Evangelización Semana del 9-14 de Octubre

Participación en la misión Ad Gentes (hacia todos los pueblos) “Vayan y hagan discípulos de todos los pueblos” (Mt 28,19) Ambientación El tema de este Encuentro es continuación del anterior, por tanto los signos pueden ser los mimos. Le añadimos unos mapas de la República Dominicana, y de todo el mundo. Se colocan banderas de distintos países. O los 5 colores de los Continentes (Verde: Africa. Azul: Oceanía. Amarillo: Asia. Blanco: Europa. Rojo: América). Cantos de animación Como en el anterior Encuentro se ponen cantos de acogida, de misión y de envío. Oración inicial Quien preside el Encuentro anima a todas las personas participantes a hacer unas invocaciones al Espíritu Santo, para que ilumine las mentes y se pueda aprovechar bien para convertirnos en misioneros y misioneras. Se reza el salmo 117, Canto: Qué detalle, Señor, has tenido conmigo. Introducción Cristo vino a salvamos, esto lo realizó por medio de toda su vida, principalmente por su muerte y resurrección; sin embargo, antes de subir al cielo, encomendó a los Apóstoles que anunciaran y llevaran esta salvación hasta los últimos rincones de la tierra, (Mt 28, 16-20 y Marcos 16,15-18). Partiendo de ese mandato, la misión de la Iglesia es la misma Misión de Cristo, es su continuación; la Iglesia es Sacramento universal de salvación, como dice la Constitución Dogmática Lumen Gentium del Concilio Vaticano II. Cumpliendo su deber de predicar la salvación a todas las gentes, sabiendo que el mensaje evangélico no está reservado a un pequeño grupo de privilegiados o elegidos, sino que está destinado a todas las gentes, la Iglesia de hoy, se une a la preocupación de Cristo ante las multitudes abandonadas “como ovejas sin pastor” y repite con frecuencia su palabra: “Tengo compasión de la muchedumbre” (Mt 9,36). Partiendo de esto se entiende la Misión “Ad Gentes”, hacia las gentes, hacia fuera. La Misión “Ad Gentes” es el trabajo de llevar la evangelización, la Buena Nueva del Reino de Cristo a los pueblos y a las personas que aún no conocen a Dios. Es lo que el Papa Francisco llama la Iglesia en salida, cuya acción y fuerza se pone en todos aquellos que no conocen o no viven de acuerdo

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Vayan y hagan discípulos de todos los pueblos

con el evangelio y se les ofrece conocer a Cristo yendo a los lugares donde ellos están, porque la misión no consiste en que esperemos a que la gente venga en busca de dios o de la Iglesia, sino al revés poner de manifiesto que por medio de los misioneros es el mismo Cristo, y su Iglesia, que va en busca de las personas. En pocas palabras “La Iglesia Peregrinante es, por su propia naturaleza, misionera, puesto que tiene su origen en la misión del Hijo y la misión del Espíritu Santo según el plan de Dios Padre”. (Ad Gentes 2, este es el título del Decreto del Concilio Vaticano II sobre La Actividad Misionera de la Iglesia). Iluminación bíblica: Hechos de los Apóstoles 2, 1-24 En este texto de Hechos aparece claramente que la primera predicación de los apóstoles fue para gente de muchas y diversas nacionalidades. Aunque la predicación es en un solo lugar, hay gente tan diversa. ¿Esta diversidad se da en nuestro país? ¿En República Dominicana hay personas de muchos y diversos países? ¿Esas personas están necesitadas de evangelización? ¿Quién la va a realizar? ¿En nuestros sectores hay personas que no tienen interés por Cristo, por la fe, por la Iglesia? ¿En nuestras comunidades hay personas de distintos países, o de culturas, pensamientos, creencias y maneras de ser diferentes? ¿Desde la fe y desde la Iglesia hacemos algo por ellas? ¿Qué podemos hacer? Hay países donde se conoce nada o poco de Cristo y su Iglesia es todavía débil, ¿qué podemos hacer por su evangelización? Canto: Señor, no soy nada, ¿por qué me has llamado? Reflexión El encuentro con Cristo como Persona viva que da sentido a la vida y llena la sed del corazón conduce obligatoriamente al deseo de compartir con otros el gozo de esta presencia y de darlo a conocer para que todos lo puedan experimentar. Intentamos explicar, en palabras sencillas, lo que es la Misión Ad Gentes: es la misión para la humanidad, es decir, aquella misión que se realiza hacia la gente que nunca ha conocido a Jesucristo como Salvador del mundo. Dicho de otra forma, en términos más misioneros es lo que se llama el Primer Anuncio o la primera evangelización. El Primer Anuncio es llevado a cabo en una misión ad extra (hacia afuera de la Iglesia y de los creyentes), quiere decir, en virtud del mandato de Cristo de “vayan y hagan que todos los pueblos sean mis discípulos,” los evangelizadores y evangelizadoras desde las comunidades maduras en fe y desde las Iglesias locales que sientan la necesidad de compartir su fe en el Resucitado, salen hacia otros pueblos (normalmente fuera de sus países de origen y de sus barrios) a fin de proclamar esa Buena Nueva. Eso da a entender que la misión ad gentes es considerada como una misión a d e x t r a , supone ir hacia afuera, al encuentro con otros y otras, principalmente con quienes no conocen el Evangelio de Cristo.

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Estamos hablando claramente de esos misioneros y misioneras que están en tierras lejanas, difíciles, con problemas de todo tipo, para llevar el mensaje de Salvación. Y si nos quedamos en eso podemos decir que misioneros y misioneras ad gentes pueden ser pocas personas… ¿Será esto verdad? San Juan Pablo II, nos enseñó que la misión se hace: dentro de la Iglesia a las personas creyentes, y se realiza fuera de la Iglesia, con la misión Ad gentes, para quienes no conocen a Cristo, y añade un tercer tipo de misión “Se da, por último, una situación intermedia, especialmente en los países de antigua cristiandad, pero a veces también en las Iglesias más jóvenes, donde grupos enteros de bautizados han perdido el sentido vivo de la fe o incluso no se reconocen ya como miembros de la Iglesia, llevando una existencia alejada de Cristo y de su Evangelio. En este caso es necesaria una «nueva evangelización» o «reevangelización»”. (Redemptoris Missio33). Partiendo de estas palabras y de otros documentos de la Iglesia, algunos teólogos han comenzado a hablar de “misión inter-gentes”, es decir, de la misión entre las gentes, entre esas personas que tal vez sí han oído hablar de Jesucristo, pero están sumamente lejos de Él. Esta misión inter gentes ayuda mucho a comprender la misión tan necesaria en la sociedad actual. Podíamos decir que al hablar de la misión inter-gentes y ad gentes, no se puede considerar como únicamente aquella que se realiza de manera explícita ad extra, esto es, exclusivamente hacia afuera del mundo cristiano y de las comunidades ya maduras en la fe. Por tanto, no significaría solamente ir a otros continentes, naciones, y pueblos lejanos para proclamar el Evangelio. Hoy en día, las gentes sedientas del Evangelio de Cristo se hallan también entre nosotros y nosotras; todas esas personas de nuestros barrios y sectores que no les preocupa lo más mínimo los asuntos religiosos, ni de Dios, ni de la Iglesia. Esas gentes están entre nosotros y pueden ser: nuestros familiares, amigos, los vecinos de la casa de al lado, los inmigrantes, los vecinos al templo parroquial o la capilla, los choferes de buses, el compañero de trabajo o estudio, etc. Todas aquellas personas alejadas por completo de Cristo son personas apropiadas para esta misión Ad Gentes. No nos queremos olvidar de las naciones y lugares propios de esa misión ad gente, que necesitan colaboración de toda la Iglesia, pero tampoco queremos lavarnos las manos y decir que en esa misión solo nos corresponde orar por los misioneros y contribuir con algunos recursos materiales…. Terminamos con Aparecida, ya en su parte conclusiva que resumiría esta la misión: Esta V Conferencia, recordando el mandato de ir y de hacer discípulos (cf. Mt 28, 20), desea despertar la Iglesia en América Latina y El Caribe para un gran impulso misionero. No podemos desaprovechar esta hora de gracia. ¡Necesitamos un nuevo Pentecostés! ¡Necesitamos salir al encuentro de las personas, las familias, las comunidades y los pueblos para comunicarles y compartir el don del encuentro con Cristo, que ha llenado nuestras vidas de “sentido”, de verdad y amor, de alegría y de esperanza! No podemos quedarnos tranquilos en espera pasiva en nuestros templos, sino urge acudir en todas las direcciones para proclamar que el mal y la muerte no tienen la última palabra, que el amor es más fuerte, que hemos sido liberados y salvados por la victoria pascual del Señor de la historia, que Él

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nos convoca en Iglesia, y que quiere multiplicar el número de sus discípulos y misioneros en la construcción de su Reino en nuestro Continente. Somos testigos y misioneros: en las grandes ciudades y campos, en las montañas y selvas de nuestra América, en todos los ambientes de la convivencia social, en los más diversos “areópagos” de la vida pública de las naciones, en las situaciones extremas de la existencia, asumiendo ad gentes nuestra solicitud por la misión universal de la Iglesia” (Aparecida 548). Canto: Hubo un día como hoy que me llamaste Reflexión comunitaria ¿Hemos entendido qué es la Misión Ad Gentes? ¿Quiénes participan en esa misión Ad Gentes? ¿Nos corresponde hacer algo en y desde República Dominicana? ¿Qué podemos hacer como comunidad de nuestra parroquia o sector? Oración final Se colocan en círculo y se le entrega a cada uno una bandera de otro país o los 5 colores de los continentes y cada uno orará por alguno de esos países, por su evangelización y por sus misioneros. Luego se concluye con esta oración. Virgen y Madre María, tú que, movida por el Espíritu, / acogiste al Verbo de la vida en la profundidad de tu humilde fe,/ totalmente entregada al Eterno,/ ayúdanos a decir nuestro «sí» ante la urgencia, más imperiosa que nunca, de hacer resonar la Buena Noticia de Jesús. / Tú, llena de la presencia de Cristo, llevaste la alegría a Juan el Bautista,/ haciéndolo exultar en el seno de su madre. Tú, estremecida de gozo, cantaste las maravillas del Señor./ Tú, que estuviste plantada ante la cruz con una fe inquebrantable/ y recibiste el alegre consuelo de la resurrección, /recogiste a los discípulos en la espera del Espíritu para que naciera la Iglesia evangelizadora. Consíguenos ahora un nuevo ardor de resucitados / para llevar a todos el Evangelio de la vida que vence a la muerte. /Danos la santa audacia de buscar nuevos caminos para que llegue a todos el don de la belleza que no se apaga. /Tú, Virgen de la escucha y la contemplación, madre del amor, esposa de las bodas eternas,/ intercede por la Iglesia, de la cual eres el icono purísimo, / para que ella nunca se encierre ni se detenga en su pasión por instaurar el Reino. Estrella de la nueva evangelización, / ayúdanos a resplandecer en el testimonio de la comunión, del servicio, de la fe ardiente y generosa, de la justicia y el amor a los pobres,/ para que la alegría del Evangelio llegue hasta los confines de la tierra/ y ninguna periferia se prive de su luz. Madre del Evangelio viviente, manantial de alegría para los pequeños, / ruega por nosotros. Amén. Aleluya. (Francisco, Evangelii Gaudium: la alegría del evangelio) Canto de despedida: Nos envías por el mundo a anunciar la buena nueva

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Adoración Misionera del Santísimo Sacramento AMBIENTACIÓN Es bueno que ambientemos la capilla antes de la Adoración. Haciendo de este rato que vamos a pasar con el Señor un momento especial para los que vamos a adorarle. Podemos decorar la capilla con flores, velas, e incluso poner debajo del altar (a los pies del Señor) un Mapamundi o una Bola del Mundo, como signo de esa oración que vamos a hacer por los misioneros que están esparcidos por todo el mundo para anunciar el Evangelio. También podemos poner una Biblia, pero hagamos lo que hagamos, tengamos presente que la atención se ha de poner en la Eucaristía y no en la decoración que hagamos. La ambientación nos ha de ayudar a centrarnos en Jesús y no a dispersarnos. MONICIÓN INICIAL Nos reunimos hoy en torno al Señor presente en la Eucaristía para adorarle, para contemplarle y para dejarnos mirar por Él y pedirle que nos muestre su voluntad para con cada uno de nosotros, a la vez que le pedimos por nuestros misioneros. Desde que Jesús vino a la Tierra, ha habido miles de personas que, por un llamado del mismo Señor, han sido enviados por la Iglesia a anunciar el Evangelio a quienes no lo conocen. Son enviados a ser testigos del Amor de Dios y su Misericordia para con todos aquellos con los que se encuentran. Hoy nos presentamos ante el Señor también para rogarle por todos los misioneros, para que el Señor los cuide, los bendiga y les dé la fortaleza necesaria para vencer las dificultades con las que a diario se encuentran. Canto de Adoración mientras se expone el Santísimo Invocación al Espíritu Santo, pidiéndole que sea Él quien obre en nosotros en este tiempo de Adoración Comunitaria. Oración del que preside Lectura de la Palabra de Dios: “Yo soy el pan vivo bajado del cielo; el que coma de este pan vivirá para siempre. El pan que Yo daré es mi carne, y la daré para vida del mundo.” (Juan 6, 51). 5. Breve reflexión que anime a la contemplación de Jesús Eucaristía. 6. Tiempo de silencio contemplativo (15 minutos).

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7. Canto misionero 8. Lectura del Evangelio: Marcos 16,9-15 9. Breve reflexión sobre el llamado a la Misión. 10. Silencio meditativo con la pregunta que nos debemos hacer: “Señor, ¿Me llamas?”, y para que demos una respuesta al Señor: “Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad” (Salmo 39) (15 minutos). 11. Canto misionero 12. Peticiones  Por la Iglesia, por el Papa, obispos y ministros de la Iglesia, para que sea muy fieles a su llamado de ser testigos y evangelizadores de la Buena Nueva del Reino. Roguemos al Señor.  Por todos los misioneros, para que el Espíritu Santo les asista en su misión de Evangelizar. Roguemos al Señor.  Por todas las familias que parten en la misión, para que sigan siendo testimonio en medio del mundo del Amor de Cristo a la Iglesia. Roguemos al Señor.  Por todos los que se dedican al desarrollo humano y social de las personas, para que, asistidos por el Señor, sigan siendo fermento del Evangelio en el mundo. Roguemos al Señor.  Por todo el mundo, para que cesen las guerras, el terrorismo y toda forma de violencia en nuestra sociedad y así todos puedan conocer la alegría del Evangelio. Roguemos al Señor.  Por todos los jóvenes, para que muchos escuchen y respondan con generosidad la llamada a la misión. Roguemos al Señor.  Por todos nosotros, para que cada día aumenten en nuestra vida la fe, la esperanza y la caridad. Roguemos al Señor. (Se pueden añadir otras). 13. Canto de adoración al Santísimo 14. Bendición con el Santísimo de la forma habitual, pidiendo al Señor que esa bendición llegue también a todos nuestros misioneros.

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Plan de Pastoral - Octubre 2017

Rosario Misionero por las Casas de Nuestros Sectores Hagamos misión con María, Madre de la evangelización

El Rosario Misionero nos ayuda a ser solidarios con nuestros hermanos y hermanas. En este año del 2017 que la Iglesia nos invita a participar y vivificar la Iglesia. Esta oración nos acerca como comunidad de fe y nos une como cristianos católicos en mundo entero. Rezamos por los misioneros misioneras del mundo entero: por los padres, catequistas, evangelizadores, religiosos, religiosas que están evangelizando en estos países. Rezamos por los laicos cristianos que están viviendo realidades difíciles. Nos anima el Papa Francisco con su mensaje para el Domingo Mundial de las Misiones 2017 cuando nos dice: “Queridos hermanos y hermanas, hagamos misión inspirándonos en María, Madre de la evangelización. Ella, movida por el Espíritu, recibió la Palabra de vida en lo más profundo de su fe humilde. Que la Virgen nos ayude a decir nuestro «sí» en la urgencia de hacer resonar la Buena Nueva de Jesús en nuestro tiempo; que nos obtenga un nuevo celo de resucitados para llevar a todos el Evangelio de la vida que vence a la muerte; que interceda por nosotros para que podamos adquirir la santa audacia de buscar nuevos caminos para que llegue a todos el don de la salvación”. Participemos en octubre misionero en República Dominicana y en el mundo. Llevemos el rosario misionero casa por casa. Eres católico, Eres misionero. Para realizar estas Visitas Misioneras es bueno tener en cuenta: 1. Todos los misioneros y miembros de comunidades y grupos apostólicos se organizan de dos en dos para ir por las casas llevando el Rosario en familia. Se distribuyen las diferentes casas previamente contadas. 2. Rece el Rosario Misionero así: dependiendo del día de la visita se rezan los misterios del Rosario que correspondan a ese día. Misterios Gozosos: lunes y sábado Misterios luminosos: jueves Misterios Dolorosos: martes y viernes Misterios Gloriosos: miércoles y Domingo 3. Cada misterio del Rosario se ofrece por uno de los Continentes pidiendo por sus necesidades siguiendo este orden: Primer misterio: Por ÁFRICA: Miseria y hambre. Éxodos por motivo las guerras y dictaduras políticas. Persecución de la iglesia por defender

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los derechos humanos. Las epidemias y enfermedades. La escasez de evangelizadores. Segundo misterio: Por AMÉRICA: La evangelización enfrenta la situación de la extrema pobreza de nuestros hermanos. La persecución de la Iglesia en los países más pobres. Las situaciones políticas-económicas que afectan a los pobres. Poca sensibilidad en compartir los bienes. Falta de evangelizadores, sacerdotes, religiosos, religiosas y catequistas. Tercer misterio: Por EUROPA: La indiferencia hacia la fe cristiana. Individualismo. Falta de vocaciones religiosas y sacerdotales. La gran necesidad de una reevangelización. Cuarto Misterio: Por OCEANIA: El trabajo que realiza la Iglesia en hacer vivir la fe en Cristo desde sus culturas. Faltan misioneros, catequistas, religiosos y religiosas. Quinto Misterio: Por ASIA: La Iglesia es una minoría en este continente. Diálogo de la Iglesia con otras religiones orientales y trabajo ecuménico. Explotación de niños, niñas sexual y laboralmente. La falta de misioneros. 4. Lectura Bíblica: Se lee uno de estos textos según el día: Lunes: Mateo 28, 16-20 Martes: Marcos 16, 15-20 Miércoles: Lucas 4, 16-22 Jueves: Juan 20, 19-23 Viernes: 1 Corintios 10,9-15 Sábado: Hechos 1, 7-8 Domingo: 1 Corintios 9, 16- 23. 5. Oraciones especiales por cada Continente. Se ora en este momento de manera especial por uno de los Continentes siguiendo este orden. Lunes: África Martes: América Miércoles: Asia Jueves: Europa Viernes: Oceanía Sábado: Por los Misioneros en todos los Continentes Domingo: Por la participación de todos los que somos Iglesia en su misión universal 6. Se concluye con un momento fraterno con la familia visitada.

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Semana Misionera

15 al 22 de Octubre del 2017

Decídete hoy por Jesús Preparación El domingo 22 de octubre celebraremos el Domingo Mundial de las Misiones, al que llamamos DOMUND, que una jornada de oración y colaboración con las misiones en el mundo entero, y en el que tenemos presentes a todos los hombres y las mujeres que en todas partes anuncian el evangelio, dándolo todo por la causa del Reino de Dios. Para ello, nos estamos preparando todo este mes de octubre, dedicado a las misiones y al rezo del Santo Rosario, para que todos estos días sean una auténtica fiesta misionera y en la que pongamos de manifiesto, como dice el Papa Francisco, que la misión está en el corazón de la fe, la mejor manera de demostrar lo que tenemos en el corazón todos los creyentes es la misma misión, no se es un verdadero creyente si no se es un alegre y valiente evangelizador. Esta semana es una preparación intensiva a la fiesta del DOMUND, una movida misionera en clave de Iglesia en salida. Porque proponemos que se hagan estas jornadas misioneras de 5 días (estas jornadas pueden hacerse también durante el mes visitando las casas 4 veces con un tema destino cada vez) y que las mismas concluyan con un gran envío festivo en las misas del próximo domingo 22 de octubre, día de las misiones, donde todos, absolutamente todos, salgan a las calles, a las casas, plazas, parques, a comunicar un breve mensaje cristiano del amor de Dios por las personas y de la importancia de responder la llamada de misericordia y perdón que nos ofrece por medio de su Iglesia; si alguno da su testimonio de fe sería mucho mejor. Formación Crear un equipo de formación para que convoque a todas las comunidades, movimientos y grupos de la parroquia para una jornada de formación misionera. Esta actividad consistirá en explicar los temas de cada día y organizar las estrategias, horarios, lugares y equipos de misioneros para visitar las casas, los equipos de logística, animación musical y promoción de la semana misionera y de la Jornada misionera Decídete hoy por Jesús, si bien se debe invitar a todos a salir de misioneros ese día, se ha asegurar los equipos que van a ser enviados a misionar y ponerse de acuerdo en la modalidad de misión que van a querer realizar, para que ese día no deje nada a la improvisación. Sería conveniente producir algún material para entregar en las vistas por las casas como a las personas que encontremos en el Domingo del DOMUND.

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MOVIDA MISIONERA 2017 CUATRO VISITAS MISIONERAS A CADA CASA UNA VEZ POR SEMANA EN EL MES DE OCTUBRE Primera Visita

Decídete por Jesús: Su evangelio es poderoso y transformador

1. Saludo Misionero La paz y amor de Jesucristo, y su bendición, estén siempre en esta casa. 2. LECTURA BIBLICA: Filipenses 3, 7-14 3. Diálogo ¿Qué pasó en la vida de Pablo desde que conoció a Jesucristo? ¿Crees en la Palabra de Dios? ¿Qué es el evangelio? Las palabras de Jesús tienen poder ¿Puede compartirnos cómo ha sentido ese poder en su vida? Ciertamente Dios transforma nuestras vidas con su palabra. Todos conocemos ejemplos de personas que la escucha de la Palabra de Dios le ha cambiado su vida por completo. Muchos dicen que desde que comenzaron a leer y estudiar las Escrituras su vida les cambió. Esta Palabra puede transformarte a ti hoy. 4. Mensaje del Papa “La misión de la Iglesia, destinada a todas las personas de buena voluntad, está fundada sobre la fuerza transformadora del Evangelio. El Evangelio es la Buena Nueva que trae consigo una alegría contagiosa, porque contiene y ofrece una vida nueva: la de Cristo resucitado, el cual, comunicando su Espíritu dador de vida, se convierte en Camino, Verdad y Vida por nosotros (cf. Jn 14,6). Es Camino que nos invita a seguirlo con confianza y valor. Al seguir a Jesús como nuestro Camino, experimentamos la Verdad y recibimos su Vida, que es la plena comunión con Dios Padre en la fuerza del Espíritu Santo, que nos libera de toda forma de egoísmo y es fuente de creatividad en el amor”. (Papa Francisco, DOMUND 2017). 1. Momento de oración: Se le pide permiso para hacer un momento de oración por los de la casa y por su decisión por Jesús. 5. Despedida No despedimos deseándoles que el poder del Evangelio de Jesús les llene a todos ustedes de larga vida, salud, alegría y paz. Se dan el abrazo de paz.

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Segunda visita Decídete por Jesús: Estás en el tiempo de Dios y de su salvación 1. Saludo Misionero La paz y amor de Jesucristo, y su bendición, estén siempre en esta casa. 2. Lectura Bíblica: 2 Corintios 6,1-2 3. Diálogo ¿Cree usted que se pierde mucho tiempo hoy? ¿Qué cree acerca del tiempo que Dios nos da en la tierra? Mucha gente dice que no le alcanza el tiempo, pero ¿Piensa que Dios tiene tiempo para nosotros? Muchas veces pensamos que ya no hay nada qué hacer, que todo está perdido, que se acabaron las oportunidades. Pero no es así. Hoy estamos para decir en este día y esta hora que estás en el tiempo de Dios, para que experimente su amor y su alegría, y a eso ha salido la Iglesia. 4. Mensaje del Papa “A través de la misión de la Iglesia, Jesucristo sigue evangelizando y actuando; por eso, ella representa el tiempo propicio de la salvación en la historia. A través del anuncio del Evangelio, Jesús se convierte de nuevo en contemporáneo nuestro, de modo que quienes lo acogen con fe y amor experimentan la fuerza transformadora de su Espíritu de Resucitado que fecunda lo humano y la creación, como la lluvia lo hace con la tierra. «Su resurrección no es algo del pasado; entraña una fuerza de vida que ha penetrado el mundo. Donde parece que todo ha muerto, por todas partes vuelven a aparecer los brotes de la resurrección. Es una fuerza imparable»”. (Papa Francisco, DOMUND 2017). 5. Momento de oración: Se le pide permiso para hacer un momento de oración por los de la casa y por su decisión por Jesús. 6. Despedida Nos despedimos invitándole a aprovechar este chance de vida y de salvación que Dios sigue ofreciendo. El tiempo de Dios es perfecto y Él te está llamando respóndele hoy. Se dan el abrazo de paz. Tercera visita Decídete por Jesús: La Iglesia ha salido hasta tu casa 1. Saludo Misionero La paz y amor de Jesucristo, y su bendición, estén siempre en esta casa. 2. Lectura Bíblica: Lucas 10, 1-9

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3. Diálogo ¿Cómo le hace sentir que la Iglesia le visite? ¿En qué lugares crees necesitan más la presencia de la Iglesia? ¿Has visitado a alguien en nombre de Jesús o de la Iglesia? ¿Quiénes son las personas que más visitas? La Iglesia como una madre va a todas partes buscando los hijos de Dios. Ella ha sido enviada por Dios para llegar a todos los rincones del mundo y lo sigue haciendo hoy transmitiendo un mensaje de alegría y esperanza a tantas personas que sufren olvidadas por los demás, pero no olvidadas por Dios, porque Él sale a encontrar a sus hijos donde quiera que se encuentren, para invitarlos a su fiesta, esperando que acepten su invitación diciéndole que sí. 4. Mensaje del Papa “La misión de la Iglesia está animada por una espiritualidad de éxodo [salida] continuo. Se trata de «salir de la propia comodidad y atreverse a llegar a todas las periferias que necesitan la luz del Evangelio». La misión de la Iglesia estimula una actitud de continua peregrinación [viajes] a través de los diversos desiertos de la vida, a través de las diferentes experiencias de hambre y sed, de verdad y de justicia. La misión de la Iglesia propone una experiencia de continuo exilio, para hacer sentir al hombre, sediento de infinito, su condición de exiliado en camino hacia la patria final, entre el «ya» y el «todavía no» del Reino de los Cielos”. (Papa Francisco, DOMUND 2017). 5. Momento de oración: Se le pide permiso para hacer un momento de oración por los de la casa y por su decisión por Jesús. 6. Despedida Que Dios les conceda la gracia también a ustedes de transmitir a otros mensajes de amor, vida, paz y esperanza. Para que quienes sufre o están solos vean que de verdad Dios existe y actúa a través de las personas. Cuarta visita Decídete por Jesús: Como María digamos Sí 1. Saludo Misionero La paz y amor de Jesucristo, y su bendición, estén siempre en esta casa. 2. Lectura Bíblica: Lucas 1, 34-38 3. Diálogo Cuando nos piden una colaboración o nos hacen una invitación ¿qué cosas piensa y dice la gente antes de decir que sí? ¿Te cuesta decirle que sí a Dios? ¿A qué le dice que sí todo el mundo? María es el ejemplo de creyente, pues responde que sí a la misión de ser la Madre de su Hijo Jesús. A muchos nos cuesta responder que sí, comprometernos con Dios y con los demás. Decirle que sí a Dios es decirle que sí a la vida, al amor, sí a la generosidad, sí a la justicia y a la solidaridad, sí a Jesús y su salvación.

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4. Mensaje del Papa “Queridos hermanos y hermanas, hagamos misión inspirándonos en María, Madre de la evangelización. Ella, movida por el Espíritu, recibió la Palabra de vida en lo más profundo de su fe humilde. Que la Virgen nos ayude a decir nuestro «sí» en la urgencia de hacer resonar la Buena Nueva de Jesús en nuestro tiempo; que nos obtenga un nuevo celo de resucitados para llevar a todos el Evangelio de la vida que vence a la muerte” (Papa Francisco, DOMUND 2017). 5. Momento de oración: Se le pide permiso para hacer un momento de oración por los de la casa y por su decisión por Jesús. 6. Despedida Que María sea siempre su madre y protectora. Que imiten siempre su ejemplo de mujer creyente, siempre dispuesta a escuchar y obedecer al Señor. Se dan el abrazo de paz.

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Domingo 23 de octubre

DOMINGO MUNDIAL DE LAS MISIONES DOMUND 2017

Decídete por Jesús / Jornada Misionera Modalidades • Envío de 2 en 2 por las casas del territorio parroquial. • Envío de 2 en 2 o en pequeños grupos a transeúntes de las calles. • Espacio festivo en parques, centros comerciales, semáforos, paradas de transporte, etc. Y tener actividad misionera tipo concierto, con canciones, testimonios, momentos de oración y predicación. • Visitas a instituciones educativas (días previos), centros médicos… • Y la combinación de una otras, así como cualquier iniciativa que facilite llegar al mayor número de personas en ese día. • Se puede vivir en este día la experiencia de los enviados por Jesús: ir sin cartera, sin dinero, sin comida casa por casa. Si le dan comen y toman. Si no siguen hasta la hora que terminen la visita casa por casa. 1. Inicio: Al terminar la Eucaristía se hace un envío de toda la feligresía a que salgan a dar un testimonio de su fe por las calles a todas las personas que se encuentren. Se recomienda hacer esto en todas las celebraciones dominicales. Se tiene el envío de los misioneros y sus distintos de trabajo para la Jornada Misionera. 2. Desarrollo Elegida la modalidad de misión y el tiempo de misión (el cual se puede distribuir en 2 o 3 tandas que abarquen todo el día). Se saluda a las personas con el saludo cristiano de la paz, al tiempo que se les desean las bendiciones del Señor sobre ellos y sus familias. Se les da un volante con un mensaje misionero que invite a escuchar la voz de Dios y responderle a su llamado. Puede ser algo parecido a éste. LES PRESENTAMOS ESTE ESQUEMA: 1. Saludo Misionero La paz y amor de Jesucristo, y su bendición, estén siempre en esta casa. 2. Propósito de la visita Le hemos venido a visitar en nombre del Señor para darles su paz y para comunicarle un mensaje de alegría y de esperanza para usted y su familia, invitándoles a cada uno: “DECIDETE HOY POR JESUS”.

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3. Texto Bíblico: Se lee Juan 14, 1-6 4. Mensaje del Papa Francisco “El Evangelio es la Buena Nueva que trae consigo una alegría contagiosa, porque contiene y ofrece una vida nueva: la de Cristo resucitado, el cual, comunicando su Espíritu dador de vida, se convierte en Camino, Verdad y Vida por nosotros (cf. Jn 14,6). Es C a m i n o que nos invita a seguirlo con confianza y valor. Al seguir a Jesús como nuestro C a m i n o , experimentamos la V e r d a d y recibimos su V i d a , que es la plena comunión con Dios Padre en la fuerza del Espíritu Santo, que nos libera de toda forma de egoísmo y es fuente de creatividad en el amor”. Por eso te invitamos: “DECIDETE HOY POR JESUS”. 5. Momento de oración: Se le pide permiso para hacer un momento de oración por los de la casa y por su decisión por Jesús. 6. Saludo final y despedida Le invitamos a dejarse amar y querer por Jesús y a unirse a nosotros en la Iglesia para seguir anunciando esta hermosa noticia: Que Dios nos ama y sigue hoy liberándonos de muchos males. 7. Propuesta de Mensaje a dejar en las casas Decídete hoy por Jesús Este mensaje de Salvación es para ti. Porque este es el tiempo propicio que Dios ha dispuesto para que lo escuche y experimente el poder transformador de su Palabra. Te traemos esta gran noticia: Jesús está vivo y te ama profundamente a ti y a los tuyos. Jesús te dice: “Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida” (Jn 14,6). En verdad El “es C a m i n o que nos invita a seguirlo con confianza y valor. Al seguir a Jesús como nuestro C a m i n o , experimentamos la V e r d a d y recibimos su V i d a , que es la plena comunión con Dios Padre en la fuerza del Espíritu Santo, que nos libera de toda forma de egoísmo y es fuente de creatividad en el amor” Por eso, a ti quieres la alegría completa te invitamos a seguirle y te decimos: DECIDETE HOY POR JESUS. Déjate transformar por El hoy y para siempre. Que su paz y su amor llene toda tu vida y de tu familia Momento de clausura A ser posible se crea un espacio en la parroquia para concluir la Jornada misionera. Se tiene un breve momento para compartir la experiencia vivida durante el día y se termina con un momento de oración de intercesión por las personas con las que nos encontramos y por los misioneros en el mundo entero. 1.

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MISIÓN CON LOS NIÑOS:

Visita de los Niños a los Hogares con el Rezo del Rosario Misionero Octubre es el mes dedicado al Santo Rosario y a las Misiones. Proponemos organizar con los niños de la parroquia, de la Catequesis, o de la Infancia, Adolescencia Misionera u otros grupos de pastoral de la infancia, visitas a los hogares llevando el rezo del Santo Rosario Misionero. El rosario misionero es una oración universal, no sólo por su estructura interior si no porque es una oración eclesial y querida por la virgen, recomendada por los papas, rezada por los cristianos del mundo y a favor de todo el mundo. Por eso es una oración eminentemente misionera. Es universal porque es a favor de todos los hombres del mundo, también para los que no creen en Cristo ni en Dios, “puesto que la maternal intercesión de la virgen es para todo género humano motivo de esperanza”. Orientaciones prácticas:  Estas visitas se pueden realizar durante una semana todas las tardes 6:00 ó 7:00 pm o los sábados del mes de Octubre en horas de la tarde, aprovechando así que los niños van al centro a recibir su catequesis cada semana.  Podemos llevar a la misión cada semana un grupo de niños diferentes así varios grupos pueden vivir la experiencia misionera.  El Catequista, guía del grupo o el adulto responsable debe coordinar con anticipación cuáles hogares se van a visitar, y preguntará a los de la casa si pueden recibir los niños para rezar el Santo Rosario. Puede ser que se elijan 5 casas donde los niños puedan recitar una decena del rosario, se puede realizar cada día en diferentes casas, al mismo tiempo pueden salir por los sectores varios grupos y visitar varios hogares.  Antes de salir a visitar los hogares se reúnen todos en un lugar próximo (Templo o capilla) donde se dan las instrucciones y se le comunica a cada uno lo que debe hacer.  Se debe coordinar con los niños y designar a quien le corresponde iniciar y distribuir los 5 misterios para que al momento de recitarlo se sientan seguros y sin ningún tipo de temor.  Los niños pueden ir identificados con los colores de los 5 continentes de acuerdo con la decena que le corresponda a cada uno respectivamente.  Se debe colocar una imagen de la Virgen maría con unas flores y un velón en un lugar adecuado donde se realizará la visita misionera.  Es importante que cada niño lleve el santo rosario.  Al final en la medida de lo posible, se puede entregar algunos dulces a los niños.

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Modo de rezarlo: Canto: Es maría la blanca paloma… En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Guía: Estamos reunidos en el nombre de Jesús y acompañados por la Santísima Virgen María para rezar con esta oración universal y unirnos a los niños del mundo entero que rezan como nosotros por los misioneros y por las misiones de la iglesia. Invoquemos al Espíritu Santo… Ven Espíritu Santo llena los corazones de tus fieles… Un niño(a)

Primer Misterio: (Se anuncia el misterio correspondiente)

Recemos por la Iglesia de África El color verde simboliza las inmensas selvas africanas. En este primer misterio, vamos a recordar al continente Africano con sus más de 500 millones de habitantes, a fin de que su profundo sentimiento religioso le facilite asumir la plenitud de la revelación de Cristo. Oremos por los pueblos que no tienen misioneros que lleven el mensaje de Jesús. Muchos niños todavía no conocen la fe Cristiana y necesitamos urgentemente misioneros que estén dispuestos a dar la vida por el evangelio. África con sus 330 millones de habitantes es un continente casi deshabitado, dado su enorme extensión. Rezar: Padre Nuestro 10 Avemaría y Gloria. Otro niño(a)

Segundo Misterio: Oremos por la Iglesia de América (Se anuncia el misterio correspondiente)

Recordamos especialmente en este segundo misterio a nuestro continente americano, el “continente de la esperanza”, donde se registra el más alto porcentaje de católicos, pero que sufre por la escasez de sacerdotes y poco compromiso de los laicos. El color rojo nos recuerda que muchos mártires han derramado su sangre por la fe, dando testimonio de su confianza en Jesús. La sangre que ha sido derramada por esos hombres y mujeres niños y niñas, son semillas de nuevas vocaciones de cristianos. Pidamos al Señor por intercesión de su Madre que muchos misioneros salgan desde América, hacia otros continentes, como testigos de la verdad y del amor. Rezar: Padre Nuestro 10 Avemaría y Gloria.

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Una niña

Tercer misterio rezamos por la Iglesia de Europa (Se anuncia el misterio correspondiente)

Con este color representamos la piel de los habitantes de Europa que lucen una piel muy blanca, y la figura del Santo Padre que vive en este continente y siempre viste de blanco. Ofrecemos este tercer misterio por Europa, donde muchas iglesias han tenido que cerrar sus puertas, y muchos se han alejado del camino de Dios. Pidamos al Señor por intercesión de la Virgen Madre, para que este continente de donde vinieron los primeros misioneros a evangelizarnos, retorne a las fuentes de su fe, que se ha enfriado con el correr de los siglos. Pidamos a Dios que asuman su compromiso misionero y sea de nuevo fuerza que despierte del dinamismo misionero. Rezar: Padre Nuestro 10 Avemaría y Gloria. Canto: María tu que velas… Un niño

Cuarto misterio rezamos por la Iglesia de Oceanía (Se anuncia el misterio correspondiente)

El color azul simboliza el agua azulada de los océanos. Ofrecemos este cuarto misterio por el lejano y pequeño universo de islas que se llama Oceanía, a fin de que sus numerosas razas puedan ser iluminadas y guiadas a la luz del evangelio. Oceanía está formada por innumerables islas bañadas por el océano, esto hace muy difícil evangelizar por la diversidad de culturas y lenguas. Pidamos a Jesús por los niños de Oceanía para que tengan también su protección y su amor. Rezar: Padre Nuestro 10 Avemaría y Gloria. Una niña

Quinto misterio rezamos por la Iglesia de Asia (Se anuncia el misterio correspondiente)

Con el color amarillo representamos a los pueblos asiáticos, por el color de su piel. Recemos este quinto misterio por Asia, para que la virgen María vuelva sus ojos al continente más poblado del mundo, donde viven más personas y donde hay menos cristianos, donde los católicos constituyen tan solo el 2% de la población y la Iglesia es perseguida y combatida, para que nuevas vocaciones de todos los continentes puedan llegar más allá de sus fronteras a llevar la buena nueva del Reino de Dios que hemos encontrado en el mismo de Jesús. Rezar: Padre Nuestro 10 Avemaría y Gloria. Otro niño(a)

ORACIÓN FINAL

Padre dueño de la mies mira la abundancia de tu mies y envía trabajadores para que anuncien el evangelio a toda criatura; y todo pueblo, congregado por la palabra de Jesús, que da vida y sostenido con la fuerza de los sacramentos, avance por el camino de la salvación y del amor. Por nuestro Señor Jesucristo tu hijo que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo, por los siglos de los siglos. AMÉN. Canto: Santa María del camino.

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Misión Joven 2017 Jóvenes: la misión en el corazón de la fe cristiana. Déjate encontrar por Jesús, “camino, verdad y vida” 2. Organiza La Misión Joven Permanente En Tu Parroquia, Forma Tu Equipo De Misionero Este año la Jornada Mundial de las Misiones nos vuelve a convocar entorno a la persona de Jesús, «el primero y el más grande evangelizador» (Pablo VI, Evangelii nuntiandi, 7), que nos llama continuamente a anunciar el Evangelio del amor de Dios Padre con la fuerza del Espíritu Santo. Esta Jornada nos invita a reflexionar de nuevo sobre la misión en el corazón de la fe cristiana. De hecho, la Iglesia es misionera por naturaleza; si no lo fuera, no sería la Iglesia de Cristo, sino que sería sólo una asociación entre muchas otras, que terminaría rápidamente agotando su propósito y desapareciendo. Por ello, se nos invita a hacernos algunas preguntas que tocan nuestra identidad cristiana y nuestras responsabilidades como creyentes, en un mundo confundido por tantas ilusiones, herido por grandes frustraciones y desgarrado por numerosas guerras fratricidas, que afectan de forma injusta sobre todo a los inocentes. Todos los misioneros deben socializar estas preguntas para iniciar: ¿Cuál es el fundamento de la misión? ¿Cuál es el corazón de la misión? ¿Cuáles son las actitudes vitales de la misión? Nos animan estas palabras del Papa Francisco para este DOMUND 17 cuando dice de nosotros los jóvenes: “Los jóvenes son la esperanza de la misión. La persona de Jesús y la Buena Nueva proclamada por él siguen fascinando a muchos jóvenes. Ellos buscan caminos en los que poner en práctica el valor y los impulsos del corazón al servicio de la humanidad. «Son muchos los jóvenes que se solidarizan ante los males del mundo y se embarcan en diversas formas de militancia y voluntariado [...]. ¡Qué bueno es que los jóvenes sean “callejeros de la fe”, felices de llevar a Jesucristo a cada esquina, a cada plaza, a cada rincón de la tierra!» (ibíd., 106). La próxima Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos, que tendrá lugar en el año 2018 sobre el tema «los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional», se presenta como una oportunidad providencial para involucrar a los jóvenes en la responsabilidad misionera, que necesita de su rica imaginación y creatividad” (no. 8). Para que una acción evangelizadora logre sus resultados necesita una preparación adecuada y detallada de modo que todo esté a punto para

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que el Señor realice su obra de liberación y salvación en las personas y comunidades que se nos han confiado. Esta organización es nuestra parte en la Misión y el Señor pondrá lo demás. Somos los precursores del Señor como Juan Bautista para preparar el camino del Señor, enderezar sus sendas; rellenar todo barranco, rebajar todo monte y colina, rectificar lo tortuoso y hacer de las asperezas que se presenten caminos llanos para que todos vean la salvación de Dios (cf. Lc. 3,5-6). Equipos de la Misión Joven Permanente en tu parroquia: • Encargado de la formación y atención de los misioneros de la Misión. Se preocupa de la formación de todos los misioneros teniendo en cuenta los diferentes tipos de misioneros: • Misioneros que visitarán casa por casa. • Misioneros que predicarán los temas en las CASAS MISION o lugares de la Misión. • Misioneros que ayudarán en la logística de la Misión (decoración, acogida, sonido, lugar, sillas, etc.) • Misioneros de animación musical. Es el responsable de velar por la transmisión de los objetivos y contenidos de la Misión. Se encarga de la atención de los misioneros, de la distribución de los misioneros y de la evaluación y de su trabajo. • Encargado de liturgia y espiritualidad: es el encargado de apoyar y asesorar en los contenidos litúrgicos y las celebraciones propuestas. Asegura la oración de intercesión en las diferentes etapas de la Misión. • Encargado de servicio y recursos logísticos: Coordina el trabajo de apoyo a las distintas actividades. Se preocupa por obtener los materiales necesarios para cada actividad. También se preocupa del traslado de materiales, de la preparación de lugares, de la limpieza, etc. • Encargado de la comunicación con los MCS: Coordina todo lo relacionado a la sensibilización y promoción de la Misión, a través de los diversos medios de comunicación social tomando en cuenta los medios digitales. • Encargado de animación: es el responsable de la animación musical, de las dinámicas y juegos de cada día de la Misión. La Misión Joven es una ocasión de convocar a todos los jóvenes de nuestros sectores y ambientes a este encuentro con el Señor. Por eso, el primer momento de la Misión Joven es la convocatoria persona por persona, casa por casa, sector por sector, ambiente y campo de acción por ambiente y campo de acción. Hay muchas formas para hacer esta convocatoria de las personas, pero una sola es la finalidad: llegar al corazón de cada persona, de modo que se abra al amor de Dios manifestado en su Hijo Jesucristo, crea en El, se convierta a Él y se integre en la comunidad eclesial. Durante la semana anterior a la Misión se dedicará a la convocatoria de todos y de todas con los diferentes medios posibles.

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Lo que interesa es que nadie se quede sin ser convocado en nombre del Señor. No importa que ellos no respondan, sino que lo que interesa es que nadie deje de responder porque nosotros no hayamos hecho la diligencia. No importa que sean de otros grupos cristianos, que anden en caminos desviados o se declaren que no creen en Dios. 3. Encuentros de Oración y Misa de Envío para salir a misionar con el corazón Oremos todos los misioneros y coordinadores, asesores y párroco, en unidad con la fuerza del Espíritu Santo, haciendo en el Jueves Eucarístico designado, antes del envío en la parroquia. Organización de la Misa y los momentos de oración con la adoración del jueves eucarístico es organizado por el equipo que tiene el Encargado de Oración y liturgia de la Misión Joven. 4. Visita Casa Por Casa – Misión Joven En las visitas misioneras casa por casa se sigue este esquema: • Saludar, dar su nombre y a la parroquia que pertenece y pedir permiso para compartir una lectura y si las personas quieren que oren por alguna necesidad actual. • Llevar la Biblia la Lectura de Jesús del evangelio de San Juan 14, 1-6. • Anunciar el Kerigma con un testimonio ABC (Autentico, Breve y Centrado en Cristo). • Invitar a los jóvenes de la casa, con un volante o invitación parroquial, que invite al joven a vivir la experiencia del Encuentro Juvenil “Déjate Encontrar Por Jesús: Camino, Verdad y Vida”. 5. Encuentro Juvenil “Déjate Encontrar por Jesús: Camino, Verdad y Vida” Objetivo: Programar actividad propuesta de un pasadía juvenil que motive a los jóvenes a vivir un encuentro con Jesús luego los 6 encuentros de la experiencia del Kerigma, el retiro de compromiso y las actividades de formación de nueva comunidad de la Post Misión, ver Guía para la Misión Joven. Programa de encuentro “Déjate Encontrar Por Jesús: Camino, Verdad y Vida” Iniciamos en la Mañana con música de fondo o videos, una decoración con el nombre del encuentro. 08:00 a.m. Llegada, bienvenida, acogida, registro de datos, oración inicial. 08:30 a.m. Animación con música y dinámicas, motivar a subir fotos con el Hashtag #DejateEncontrarPorJesus #JesusCaminoVerdadVida

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09:30 a.m. Oración inicial con sociodrama de la del evangelio de San Juan 14, 1-6. Reglas del espacio del encuentro, socializar las expectativas de los jóvenes. 10:00 a.m. Parte Motivacional sobre “Jesús Camino, Verdad y Vida” 11:00 a.m. Receso 11:20 a.m. Dinámica de grupos, se forman de grupos de 5 a 15 y cada uno va a debatir: Porque Jesús es Camino? ¿Porque Él es la Verdad? y ¿Porque es la Vida? 12:00 m. Plenario de grupos 01:00 p.m. Comida 02:00 p.m. Animación con música y dinámicas, motivar a subir fotos con el Hashtag #DejateEncontrarPorJesus #JesusCaminoVerdadVida 02:40 p.m. Taller Kerigmático, Anuncio del Kerigma (ver Guía para Misión Joven) 03:40 p.m. Animación Musical y dinámica. 04:00 p.m. Conversemos sobre los jóvenes de hoy, la fe y el discernimiento Vocacional (Ver carta a los jóvenes del Sínodo de los Obispos en XV Asamblea General Ordinaria http://w2.vatican. va/content/francesco/es/letters/2017/documents/papafrancesco_20170113_lettera-giovani-doc-sinodo.html ) 05:00 p.m. Invitación a vivir los temas de los 6 pasos del Kerigma, retiro de compromiso y dar testimonio de lo importante que es vivir en comunidad. 05:30 p.m. Avisos Parroquiales y Oración final con Música. 06:00 p.m. Dejar todo limpio y recogido. VISITA MISIONERA A LOS ENFERMOS “Porque estuve enfermo y me fueron a ver” (Mt 25,36b) Antes de iniciar invocar al Espíritu Santo para que, guíe nuestros corazones y de los enfermos. I. Lectura bíblica a leer: Mt 8, 5-10.13 II. Breve meditación III. Letanías por los enfermos: Oremos al Señor por nuestro hermano enfermo y por todos los que le cuidan y están a su servicio: ⇒ Mira con amor este enfermo: R/Te rogamos óyenos ⇒ Da nueva fuerza a su cuerpo: R/Te rogamos óyenos ⇒ Alivia sus angustias: R/Te rogamos óyenos ⇒ Líbralo del pecado y de toda tentación: R/Te rogamos óyenos ⇒ Ayuda con tu gracia a todos los enfermos: R/Te rogamos óyenos ⇒ Asiste con tu poder a los que se dedican a su cuidado: R/Te rogamos óyenos

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Terminemos nuestras letanías con las palabras que Cristo nos enseñó: Padre Nuestro… IV. Consagración a la Madre de Dios consuelo de los enfermos: 1) Madre Santa, Virgen Purísima que al pie de la Cruz diste ánimo y consuelo a quienes te acompañaban, da fortaleza a este hermano nuestro, intercede ante tu Hijo por su salud, te lo pedimos a ti que eres nuestra Madre: Dios te Salve María …. 2) Madre Santa, Reina de la Esperanza, aumenta la fe de este enfermo, de sus familiares, y de todos los que imploramos su recuperación, intercede ante tu Hijo, para que encuentre la Salvación y la paz, a ti Madre te suplicamos: Dios te Salve María …. 3) Madre Santa, Salud de los enfermos, intercede ante tu Hijo, Jesucristo, que es plenitud de vida, para que este enfermo encuentre la salud que busca por medio de la Palabra de vida eterna, hecha carne y que acampa entre nosotros: Dios te Salve María …. Oremos: Oh Madre piadosa, Virgen de la Altagracia, a quien la Iglesia llama confiada Salud de los enfermos, aquí estamos reunidos en tornos a este hermano (a) enfermo implorando tu favor. Tu Madre del eterno consuelo, se Tú nuestra intercesora ante tu Hijo fuente de salud eterna, para que este hermano (a) encuentre la salud y la paz que desea. Amén. V. Finalizar con la imposición de las manos al enfermo de manera reverente, y una invitación a un saludo de paz.

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Semana Mariana 23-30 octubre

María la primera que participó de la misión de su Hijo Introducción Proponemos esta semana de oración con la virgen María, para profundizar en nuestra condición de bautizados invitados a participar en la misión de Cristo, que es la misma misión de la Iglesia. María, como diría el Papa Francisco, primereó la misión, es decir fue la primera misionera. Ella llevó a su Hijo en su seno al visitar a su prima Isabel (Lc 1,40-41). Siguiendo el documento de Aparecida, y la invitación del papa Francisco a profundizar en el mismo (Encuentro CELAM, Bogotá 2017), nos vamos adentrar en cómo María vivió su condición de discípula y misionera, y las distintas experiencias y disposiciones eclesiales y de fe a las que somos invitados para ser fieles al espíritu mariano de escuchar la voz del maestro que nos habla y nos manda. Primer Dia: Lunes 23 María, la Primera Misionera. Oramos y damos gracias por todas las evangelizadoras 1. Oración inicial Invocación al Espíritu Santo / Credo de los Apóstoles. 2. Cantos marianos 3. Rezo del Santo Rosario (misterios gozosos) 4. Lectura Bíblica: Del Evangelio según san Lucas (1,39-45) Unos días después, María se puso en camino y fue aprisa a la montaña, a un pueblo de Judá; entró en casa de Zacarías y saludó a Isabel. En cuanto Isabel oyó el saludo de María, saltó la criatura en su vientre. Se llenó Isabel del Espíritu Santo y dijo a voz en grito: “¡Bendita tú entre las mujeres, y bendito el fruto de tu vientre! ¿Quién soy yo para que me visite la madre de mi Señor? En cuanto tu saludo llegó a mis oídos, la criatura saltó de alegría en mi vientre. Dichosa tú, que has creído, porque lo que te ha dicho el Señor se cumplirá”. Palabra del Señor. 5. Reflexionemos con Aparecida: “María es la gran misionera, continuadora de la misión de su Hijo y formadora de misioneros. Ella, así como dio a luz al Salvador del mundo,

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trajo el Evangelio a nuestra América. En el acontecimiento guadalupano, presidió, junto al humilde Juan Diego, el Pentecostés que nos abrió a los dones del Espíritu. Desde entonces, son incontables las comunidades que han encontrado en ella la inspiración más cercana para aprender cómo ser discípulos y misioneros de Jesús. Con gozo, constatamos que se ha hecho parte del caminar de cada uno de nuestros pueblos, entrando profundamente en el tejido de su historia y acogiendo los rasgos más nobles y significativos de su gente. Las diversas advocaciones y los santuarios esparcidos a lo largo y ancho del Continente testimonian la presencia cercana de María a la gente y, al mismo tiempo, manifiestan la fe y la confianza que los devotos sienten por ella. Ella les pertenece y ellos la sienten como madre y hermana”. (Aparecida 269). 6. Diálogo-comentario ¿Qué cosas podemos destacar de la virgen María como misión? ¿Hay personas que se parezcan a María entre nosotros? ¿Qué relación podemos encontrar entre María y nuestras evangelizadoras, podemos decir que son madres también ellas? Decimos de la Iglesia que es como una madre que se ocupa de alimentar la fe de sus hijos, vela y se entrega por ellos. María es nuestro modelo de Iglesia. Todos los que formamos la Iglesia como María, llevamos a Jesús y su Palabra por dentro, y esa Palabra se vuelve un ardor, como con Jeremías, que hace preciso gritarla, anunciarla. 7. Letanía misionera: Se lee un texto bíblico sobre la misión y se responde diciendo: Como María participemos de la misión de Jesús • “El Señor llamó a Samuel, y él respondió: «Aquí estoy… Habla, porque tu servidor escucha». (1 Sam 3,4). • “Yo oí la voz del Señor que decía: «¿A quién enviaré y quién irá por nosotros?». Yo respondí: «¡Aquí estoy: envíame!»”. (Is 6,8). • “Antes de formarte en el seno de tu madre, ya te conocía; antes de que tú nacieras, yo te consagré, y te destiné a ser profeta de las naciones”. (Jer 1,5). • “Irás adondequiera que te envíe, y proclamarás todo lo que yo te mande. No les tengas miedo, porque estaré contigo para protegerte”. (Jer 1,7). • “Miren sobre las montañas los pasos del que trae la buena noticia, del que proclama la paz”. (Nah 2,1). • “Síganme y los haré pescadores de hombres”. (Mt 4, 19). • “Miren que los envío como ovejas en medio de lobos: sean, pues, astutos como la serpiente, pero sencillos como la paloma”. (Mt 10,16). • “El que quiera seguirme, que renuncie a sí mismo, cargue con su cruz y me siga. Pues el que quiera asegurar su vida la perderá, pero el que sacrifique su vida por causa mía, la hallará”. (Mt 16,24). • “Dijo María: «He aquí la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra” (Lc 1,38). • “Vayan, pues, y hagan que todos los pueblos sean mis discípulos. Bautícenlos en el Nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, y enséñenles a cumplir todo lo que yo les he encomendado a ustedes.

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Yo estoy con ustedes todos los días hasta el fin de la historia”. (Mt 28,19). 8. Aviso: En la Arquidiócesis de Santo Domingo se tendrá la Caminata Mariana 2017 el 29 de Octubre del 2017 en cada Vicaría Episcopal Territorial y en el Distrito Nacional desde las 3:30 pm 9. Canto mariano 10. Brindis comunitario en el Sector Segundo Día: Martes 24 de Octubre María gestora de comunión. Oramos por los equipos de animación pastoral, coordinadores y responsables 1. Oración inicial Invocación al Espíritu Santo / redo de los Apóstoles 2. Cantos marianos 3. Rezo del Santo Rosario (Misterios Dolorosos) 4. Lectura Bíblica: Filipenses (2,1-7a) 5. Reflexionemos con Aparecida: “Como en la familia humana, la Iglesia-familia se genera en torno a una madre, quien confiere “alma” y ternura a la convivencia familiar. María, Madre de la Iglesia, además de modelo y paradigma de humanidad, es artífice de comunión. Uno de los eventos fundamentales de la Iglesia es cuando el “sí” brotó de María. Ella atrae multitudes a la comunión con Jesús y su Iglesia, como experimentamos a menudo en los santuarios marianos. Por eso la Iglesia, como la Virgen María, es madre. Esta visión mariana de la Iglesia es el mejor remedio para una Iglesia meramente funcional o burocrática”. (Aparecida 268). 6. Diálogo-comentario ¿En qué se basa el liderazgo cristiano? ¿Qué nos enseña Pablo acerca del liderazgo y la relación con los demás? ¿Qué nos enseña Aparecida acerca de la comunión Y María? ¿Quiénes realizan esta tarea entre nosotros? María entendió toda su vida como vida en relación con otros, con José su esposo, con su Hijo Jesús, con los demás discípulos. Ella fue siempre un ente de comunión y vinculación en la Iglesia naciente. Su figura nos la recuerda siempre el acontecimiento de Pentecostés que sucede precisamente con ella y los apóstoles en su entorno. Nuestra misión primaria dentro de la misma

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Iglesia es vivir la comunión, forjar el buen trato, la empatía, familiaridad y amistad que se necesitan para vivir la unidad y hacer la vida de la iglesia algo creíble en el mundo (Jn 17) 7. Oración final: Se termina con estas letanías misioneras. Se lee un texto bíblico sobre la misión y se responde diciendo: Como María participemos de la misión de Jesús • “Dijo María: «Yo soy la servidora del Señor, hágase en mí tal como has dicho»”. (Lc 1,38) 8. “Me envió para llevar la Buena Nueva a los pobres, para anunciar la libertad a los cautivos y a los ciegos que pronto van a ver, para despedir libres a los oprimidos y proclamar el año de gracia del Señor”. (Lc 4,18). 9. “La Palabra es la luz verdadera que, al venir a este mundo, ilumina a todo hombre”. (Jn 1,9). 10. “Como el Padre me envío a mí, así los envío yo también a ustedes.” (Jn 20,21). • “Síganme, y yo los haré pescadores de hombres”. (Mc 1,17). • “Jesús los eligió para que estuvieran con Él y para enviarlos a predicar”. (Mc 3, 14). • “Vayan por todo el mundo y anuncien la Buena Nueva a toda la creación”. (Mc 16,15). • “Los discípulos salieron a predicar por todas partes con la ayuda del Señor”. (Mc 16,20). • “Serán mis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaría y hasta los confines de la tierra”. (Hech 1,8). • “Nosotros no podemos callar lo que hemos visto y oído”. (Hech 4,20). 11. Aviso: En la Arquidiócesis de Santo Domingo se tendrá la CAMINATA MARIANA 2017 el 29 de Octubre del 2017 en cada Vicaría Episcopal Territorial y en el Distrito Nacional desde las 3:30 pm 12. Canto mariano 13. Brindis comunitario en el Sector Tercer día: Miércoles 25 Con María participemos sirviendo ante las necesidades de los demás. Oremos por los Agentes de la Pastoral Social 1. Oración inicial: Invocación al Espíritu Santo. Credo de los Apóstoles 2. Cantos marianos

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3. Rezo del Santo Rosario (misterios gloriosos) 4. Lectura Bíblica: Del Evangelio según san Juan (2,1-12) 5. Reflexionemos con Aparecida: “Con los ojos puestos en sus hijos y en sus necesidades, como en Caná de Galilea, María ayuda a mantener vivas las actitudes de atención, de servicio, de entrega y de gratuidad que deben distinguir a los discípulos de su Hijo. Indica, además, cuál es la pedagogía para que los pobres, en cada comunidad cristiana, “se sientan como en su casa”162. Crea comunión y educa a un estilo de vida compartida y solidaria, en fraternidad, en atención y acogida del otro, especialmente si es pobre o necesitado. En nuestras comunidades, su fuerte presencia ha enriquecido y seguirá enriqueciendo la dimensión materna de la Iglesia y su actitud acogedora, que la convierte en “casa y escuela de la comunión”163 y en espacio espiritual que prepara para la misión”. (Aparecida 272) 6. Diálogo-comentario ¿Servir a los demás es una misión? ¿Es lo mismo servidor, sirviente o servil? ¿Qué nos enseña María acerca del servicio? ¿Quiénes se destacan entre nosotros por ser servidores? María nos da a todas muestras de que el servicio es una misión. Ella inicia a su Hijo en la labor de servir públicamente a los demás. Para servir es necesario estar atentos a las necesidades de los demás. Muchos se dicen serviciales, pero para que hagan algo hay que avisarles. El cristiano toma la iniciativa para servir como gesto de amor y de compasión. No es lo mismo que quien lo hace a cambio de una remuneración o por vanas motivaciones, eso sería sirviente o servil. 7. Oración final: Se rezan estas letanías misioneras. Se lee un texto bíblico sobre la misión y se responde diciendo: Como María participemos de la misión de Jesús • “Él nos ordenó predicar al pueblo y dar testimonio de que Dios lo ha constituido Juez de vivos y muertos”. (Hech 10,42). • “No tengas miedo, sigue hablando y no calles… Yo estoy contigo y nadie podrá hacerte daño”. (Hech 18,9). • “No me avergüenzo del Evangelio, porque es la fuerza de Dios para la salvación de todos los que creen”. (Rom 1,16). • “Predicar el Evangelio no es para mí ningún motivo de gloria; es para mí una necesidad imperiosa. ¡Pobre de mí si no anuncio el Evangelio!”. (1Cor 9,16). • “Me hice débil con los débiles para ganar a los débiles. Me hice todo para todos, para salvar por lo menos a algunos. Y todo lo hago por el Evangelio”. (1Cor 9,22)

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• “Se nos concedió la gracia de anunciar a los pueblos paganos la incalculable riqueza de Cristo”. (Ef 3,8) • “Rueguen también por mí, a fin de que encuentre palabras adecuadas para anunciar con valentía el misterio del Evangelio, del cual yo soy embajador entre cadenas, y así podré hablar libremente de él, como debo hacerlo”. (Ef 6,19) • “Confiados en nuestro Dios, nos atrevimos a anunciarles el mensaje de Dios entre frecuentes luchas”. (1Tes 2,2) • “Y era tal nuestra preocupación por ustedes, que estábamos dispuestos a darles, no sólo el Evangelio, sino también nuestra propia vida, tan queridos habían llegado a ser para nosotros”. (1Tes 2,8) • “Lo que hemos visto y oído, se lo anunciamos también a ustedes”. (1Jn 1,3) 8. Aviso: En la Arquidiócesis de Santo Domingo se tendrá la CAMINATA MARIANA 2017 el 29 de Octubre del 2017 en cada Vicaría Episcopal Territorial y en el Distrito Nacional desde las 3:30 pm 9. Canto mariano: El Magnificat Cantado (El Señor hizo en mí, maravillas…) 10. Brindis comunitario en el Sector Cuarto día: Jueves 26 Discípulos a la escucha de la voz del Señor que envía a la Misión. “Hagan lo que Él les diga” (Jn 2, 5) Oremos por todos los catequistas 1. Oración inicial: Invocación al Espíritu Santo / Credo de los Apóstoles. 2. Cantos marianos 3. Rezo del Santo Rosario (misterios luminosos). 4. Lectura Bíblica: Del evangelio según San Mateo (28, 18-20). 5. Reflexionemos con Aparecida: “Detenemos la mirada en María y reconocemos en ella una imagen perfecta de la discípula misionera. Ella nos exhorta a hacer lo que Jesús nos diga (cf. Jn 2, 5) para que Él pueda derramar su vida en América Latina y El Caribe. Junto con ella, queremos estar atentos una vez más a la escucha del Maestro, y, en torno a ella, volvemos a recibir con estremecimiento el mandato misionero de su hijo: Vayan y hagan discípulos a todos los pueblos (Mt 28, 19). Lo escuchamos como comunidad de discípulos misioneros, que hemos experimentado el encuentro vivo con Él y queremos compartir todos los días con los demás esa alegría incomparable”. (Aparecida 364).

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6. Diálogo-comentario ¿Cómo vives tu condición de misionero? ¿Puedes contar alguna experiencia en la que hayas habla de Jesús a otras personas? ¿Qué te pide hoy la Virgen María? María sigue invitándonos a escuchar la voz de su Hijo y a hacer lo que Él nos diga. Lo que Jesús sigue diciendo hoy es que anunciemos el evangelio y que hagamos a todos los hombres sus discípulos, es decir disponerlos para escuchen sus enseñanzas y su Palabra. La única razón de ser para estar en la iglesia es la evangelización. Sigamos atentos a la voz del Maestro que nos habla como a discípulos y nos da mandatos para actuar en su nombre, comunicando la alegría y felicidad de habernos encontrado con Él. 7. Oración final: Se rezan estas letanías misioneras. Se lee un texto bíblico sobre la misión y se responde diciendo: Como María participemos de la misión de Jesús. Se rezan las letanías del primer día de la Semana Mariana, lunes 23 de Octubre. 8. Aviso: En la Arquidiócesis de Santo Domingo se tendrá la CAMINATA MARIANA 2017 el 29 de Octubre del 2017 en cada Vicaría Episcopal Territorial y en el Distrito Nacional desde las 3:30 pm 9. Canto mariano: El Magnificat Cantado (El Señor hizo en mí, maravillas…) 10. Brindis comunitario en el Sector. Quinto día: Viernes 27 de Octubre del 2017 Con María enviados a la Misión que crea la igualdad fraterna. Oremos por el trabajo misionero en el mundo que busca la igualdad y la unidad entre los pueblos. 1. Oración inicial: Invocación al Espíritu Santo. Credo de los Apóstoles. 2. Cantos marianos 3. Rezo del Santo Rosario (misterios dolorosos) 4. Lectura Bíblica: De la Carta de Pablo a los Gálatas (3,26-29) 5. Reflexionemos con Aparecida: “La antropología cristiana resalta la igual dignidad entre varón y mujer, debido a ser creados a imagen y semejanza de Dios. El misterio de la Trinidad nos invita a vivir una comunidad de iguales en la diferencia. En una época de marcado machismo, la práctica de Jesús fue decisiva para significar la dignidad de la mujer y su valor indiscutible: habló con ellas (cf. Jn 4, 27), tuvo singular misericordia con las pecadoras (cf. Lc 7,36-50; Jn 8,11), las curó (cf.

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Mc 5, 25-34), las reivindicó en su dignidad (cf. Jn 8, 1-11), las eligió como primeras testigos de su resurrección (cf. Mt 28, 9-10), e incorporó mujeres al grupo de personas que le eran más cercanas (cf. Lc 8, 1-3). La figura de María, discípula por excelencia entre discípulos, es fundamental en la recuperación de la identidad de la mujer y de su valor en la Iglesia. El canto del Magnificat muestra a María como mujer capaz de comprometerse con su realidad y de tener una voz profética ante ella”. (Aparecida 451) 6. Diálogo-comentario ¿Qué es para ti la igualdad? ¿Son los hombres y las mujeres iguales ante los ojos de Dios? ¿María fue una liberadora de la mujer? ¿Cómo vives tú esta invitación a la igualdad que nos enseña Pablo? ¿Quiénes entre nosotros trabajan por la igualdad y la unidad? María es la nueva Eva. Ella es la imagen nueva de lo que significa ser mujer y ser hombre, es la madre de la nueva humanidad. En esa nueva humanidad todos tenemos la misma dignidad, sin importar el género, el origen o la condición social. María nos invita hoy a tomar en serio nuestra lucha por la igualdad entre las personas. Necesitamos una misión del respeto por las personas y una nueva cultura de respeto por las personas que viven y son de manera de diferentes a nosotros. Anhelamos un clima de tolerancia para con todos y ya María ha comenzado ese camino entre nosotros. Vayamos tras ella y su Hijo Jesús, esa es la misión de la igualdad, la misión del amor y la compasión con todos todas. 7. Oración final: Se rezan estas letanías misioneras. Se lee un texto bíblico sobre la misión y se responde diciendo: Como María participemos de la misión de Jesús. Se rezan las letanías del primer día de la Semana Mariana, lunes 23 de Octubre. Se reza esta oración: Hermana peregrina de los pobres de Yahvé, / Profetisa de los pobres libertados, Madre del Tercer Mundo, / madre de todos los hombres de este mundo único, porque eres / la Madre del Dios hecho hombre. Con todos los que creen en Cristo / y con todos aquéllos que, de algún modo, buscan su Reino, te llamamos a Ti, Madre, / para que le hables de todos nosotros. Pídele a Él, que se hizo pobre/ para comunicarnos las riquezas de su amor, que su Iglesia se despoje, sin subterfugios,/ de toda otra riqueza. A Él, que murió en la cruz para salvar a los hombres/ pídele que nosotros, sus discípulos,/ sepamos vivir y morir / por la total liberación de nuestros hermanos. Pídele que nos devore el hambre y la sed de aquella justicia / que despoja y redime. A Él que derribó el muro de la separación,/ pídele que todos los que llevamos el sello de su nombre, / busquemos de hecho, por encima de todo lo que divide, aquella unidad reclamada por Él mismo en testamento, / y que sólo es posible en la libertad de los Hijos de Dios.

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Pídele a Él, que vive resucitado junto al Padre,/ que nos comunique la fuerza jubilosa de su Espíritu / para que sepamos vencer el egoísmo,/ la rutina y el miedo. Mujer campesina y obrera, nacida en una colonia/ y martirizada por el legalismo y la hipocresía:/ enséñanos a leer sinceramente el Evangelio de Jesús y a traducirlo en la vida( con todas las revolucionarias consecuencias, / en el espíritu radical de las Bienaventuranzas/ y en el riesgo total de aquel amor / que sabe dar la vida por los que ama / como lo Jesucristo / tu hijo, el hijo de Dios, nuestro hermano. Amén, (Brasil). 8. Aviso: En la Arquidiócesis de Santo Domingo se tendrá la CAMINATA MARIANA 2017 el 29 de Octubre del 2017 en cada Vicaría Episcopal Territorial y en el Distrito Nacional desde las 3:30 pm 9. Canto mariano: El Magnificat Cantado (El Señor hizo en mí, maravillas…) 10. Brindis comunitario en el Sector

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Lecturas Octubre 2017 Las citas de las Lecturas Diarias utilizadas son tomadas de: Calendario Litúrgico 2017 de la Conferencia del Episcopado Dominicano 1

XXVI Domingo del Tiempo Ordinario

II Semana de la Liturgia de las Horas

Verde

El testimonio sincero y humilde de nuestra fe es nuestra primera misión Orientaciones para la Celebración: Colocar el lema y el valor del mes en un lugar visible, así como el lema de esta celebración. En la procesión de entrada se lleva un rosario grande acompañado de la Biblia. Se llevan signos de la misión: sandalias, libros de la misión, una comunidad que avanza al altar con las manos unidas entre ellos. Monición de Entrada: Hermanos y hermanas: Nos reúne el Señor para celebrar la Eucaristía en este primer domingo de Octubre, mes de la Misión, Mes del Rosario, con el lema: Vayan y hagan discípulos de todos los pueblos” (Mt 28,19). En este Vigésimo sexto Domingo del Tiempo Ordinario, el Señor nos invita a examinar en verdad nuestra actitud de cara a su Palabra y nos recuerda que no bastan las palabras ni nuestros rezos y celebraciones, sino que a Él le importan más las acciones con las que practicamos esta Palabra. Nuestra primera misión delante de la gente es nuestra coherencia, entre lo que decimos y hacemos y el amor fraterno que vivamos teniendo los mismos sentimientos de Jesús, que fue capaz de darlo todo por nosotros con una gran sencillez. En Octubre, contamos, de manera especial, con la protección de María, a quien nos acogemos, de modo especial en este mes del Rosario, como la primera misionera de su Hijo en los inicios y en la historia de la evangelización de toda América. Con gran alegría iniciemos nuestra Celebración de pie cantando a Jesucristo que llega a presidirla a través de su ministro. Oración Colecta Oh Dios, que manifiestas especialmente tu poder con el perdón y la misericordia, derrama incesantemente sobre nosotros tu gracia, para que deseando lo que nos prometes, consigamos los bienes del cielo. Por nuestro Señor Jesucristo. LITURGIA DE LA PALABRA Primera Lectura: Ezequiel 18,25-28 El profeta Ezequiel, como misionero del Señor, nos recuerda que no basta el título de justo y de santo, sino de serlo siempre. De lo contrario,

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un malvado que escuche la Palabra y la viva se nos puede adelantar. Escuchemos. Lectura de la profecía de Ezequiel 18,25-28 Así dice el Señor: «Comentan: “No es justo el proceder del Señor”. Escucha, casa de Israel: ¿acaso no es injusto mi proceder?, ¿o no es su proceder el que es injusto? Cuando el justo se aparta de su justicia, comete la maldad y muere, muere por la maldad que cometió. Y cuando el malvado se convierte de la maldad que hizo y practica el derecho y la justicia, él mismo salva su vida. Si recapacita y se convierte de los delitos cometidos, ciertamente vivirá y no morirá.» Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 24,4bc-5.6-7.8-9 R/. Recuerda, Señor, que tu misericordia es eterna Señor, enséñame tus caminos, instrúyeme en tus sendas: haz que camine con lealtad; enséñame, porque tú eres mi Dios y Salvador, y todo el día te estoy esperando. R/. Recuerda, Señor, que tu ternura y tu misericordia son eternas; no te acuerdes de los pecados ni de las maldades de mi juventud; acuérdate de mí con misericordia, por tu bondad, Señor. R/. El Señor es bueno y es recto, y enseña el camino a los pecadores; hace caminar a los humildes con rectitud, enseña su camino a los humildes. R/. Segunda lectura: Filipenses 2,1-11

Pablo recuerda que a quienes han escuchado al Hijo, se les reconoce porque viven un mismo amor, un mismo espíritu, un mismo sentir que implica abajarse como lo hizo Jesús. Sólo si actuamos así, la gente reconocerá que somos verdaderos discípulos misioneros de Jesús. Escuchemos.

. Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Filipenses 2,1-11 Hermanos: Si quieren darme el consuelo de Cristo y aliviarme con su amor, si nos une el mismo Espíritu y tienen entrañas compasivas, denme esta gran alegría: manténganse unánimes y concordes con un mismo amor y un mismo sentir. No obren por rivalidad ni por ostentación, déjense guiar por la humildad y considérense siempre superiores a los demás. No se encierren en sus intereses, sino busquen todos el interés de los demás. Tengan entre ustedes los sentimientos propios de Cristo Jesús. Él, a pesar de su condición divina, no hizo alarde de su categoría de Dios; al contrario, se despojó de su rango y tomó la condición de esclavo, pasando por uno de tantos. Y así, actuando como un hombre cualquiera, se rebajó hasta someterse incluso a la muerte, y una muerte de cruz. Por eso Dios lo levantó sobre todo y le concedió el Nombre-sobre-todo-nombre; de modo que al nombre de Jesús toda rodilla se doble en el cielo, en la tierra, en el abismo, y toda lengua proclame: Jesucristo es Señor, para gloria de Dios Padre. Palabra de Dios.

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Aleluya Jn 10, 27 Mis ovejas escuchan mi voz -dice el Señor- y yo las conozco, y ellas me siguen. Evangelio según San Mateo 21, 28-32 Obedecer es realizar la misión a la cual hemos sido llamados. No bastan las palabras huecas sino las acciones verdaderas. Aquí no caben los puestos ni la antigüedad en la fe. Lo que importa es la sinceridad que se ve en la realización de la voluntad del Padre manifestada en su Hijo. Escuchemos. Lectura del santo evangelio según san Mateo 21,28-32 En aquel tiempo, dijo Jesús a los sumos sacerdotes y a los ancianos del pueblo: «¿Qué les parece? Un hombre tenía dos hijos. Se acercó al primero y le dijo: “Hijo, ve hoy a trabajar en la viña.” Él le contestó: “No quiero.” Pero después recapacitó y fue. Se acercó al segundo y le dijo lo mismo. Él le contestó: “Voy, señor.” Pero no fue. ¿Quién de los dos hizo lo que quería el padre?» Contestaron: «El primero.» Jesús les dijo: «Les aseguro que los publicanos y las prostitutas les llevan la delantera en el camino del reino de Dios. Porque vino Juan a ustedes enseñándoles el camino de la justicia, y no le creyeron; en cambio, los publicanos y prostitutas le creyeron. Y, aun después de ver esto, ustedes no recapacitaron ni le creyeron.» Palabra del Señor. Meditación En la segunda lectura, el apóstol Pablo les escribe desde la cárcel a los Filipenses, podríamos decir que fue de las comunidades que siempre le brindo más cariño y apoyo. Se dirige a ella en un momento en que se encuentran divididos, a pesar de su fe y de la formación que habían recibido del mismo Pablo. Este, a modo general y sin tomar partido, les llama a la unidad y la armonía motivada en el amor de Dios por medio del Espíritu Santo, esta armonía que debe darse en un ambiente de paz y humildad, puesto que la soberbia y la vanagloria solo acarrean rivalidades y rencores. Unas de las características que deben distinguir a la iglesia y que la hace fuerte es cuando hay verdaderos signos de unidad y armonía. Esto no quiere decir que no se presenten diferencias entre sus miembros y entre sus propias autoridades, pero lo que nos hace diferentes es el espíritu de como las enfrentamos o solucionamos. Debemos procurar siempre, que lo que nos motive sea el amor a Dios, el buscar hacer su voluntad, procurando dejar de lado nuestros propios intereses por el bien de los demás. A veces creemos que esos intereses aplican a las grandes cosas, pero, sin embargo, primero empiezan en las cosas pequeñas y a medida que le damos cabida van trascendiendo a otras de más relevancias. En muchas ocasiones es el egoísmo el que puede guiar nuestras actuaciones, movidos por querer permanecer en nuestra zona de confort o el querer hacer nuestra

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propia voluntad. Otras veces puede ser la falta de humildad o la vanagloria que nos ciega y no nos permite ver la bondad en las propuestas o ideas de los demás, y peor aún, cerrarnos a poder aprender y crecer en santidad. Una de las cosas que más nos cuesta es poner a los demás por delante de nosotros mismos y es el egoísmo el principal causal de tantas desavenencias, falta de paz, divorcios, conflictos y hasta de guerras. Debemos deshacernos de esos sentimientos que llevaron a los sumos sacerdotes y a los ancianos del pueblo que nos menciona el Evangelio de hoy, a no entender cuál era su rol dentro del pueblo elegido de Dios. Algunos estudiosos señalan que Jesús se refería a estos como el segundo hijo de la parábola que contesto: “Voy Señor”, pero no fue. Estos se supone que procuraban conducir al pueblo hacia el mismo Dios, pero sin embargo movidos por la envidia y sus propios intereses lo que buscaban era deshacerse del mismo Jesús, porque denunciaba la falta de justicia y el nuevo reino que se avecinaba y que no compaginaba con sus planes. Debemos despojarnos de todos aquellos actos que nos llevan al pecado, a la desidia, a la pereza, a la indiferencia hacia los demás, al egoísmo, a la vanidad y por lo tanto a un alejamiento de Dios. Debemos procurar que su voluntad, que es lo mejor para nosotros, sea la nuestra y así la vida adquiera el verdadero valor ante los ojos de Dios y que nos conducirá a la felicidad eterna. Oración de los Fieles: El que preside: A Ti, Padre, que nos llamaste a ser de tu Reino, te presentamos nuestras peticiones diciéndote: Padre, haznos misioneros sinceros y humildes de tu Reino. Por el Papa Francisco, nuestros obispos y todas las personas que dentro de la Iglesia tienen la primera responsabilidad de ser misioneros de la Palabra, para que seamos los primeros que la cumplamos y la proclamemos con nuestras vidas. Oremos. Para que en este mes de las misiones, en nuestra Iglesia se acreciente cada día más el deseo por llevar a Jesús a quienes no lo conocen. Oremos. • Por nuestros gobernantes para que con obras concretas manifiesten que escuchan la voz de Dios y de su pueblo, solucionando los grandes problemas de la Republica Dominicana. Oremos. • Para que pongamos en práctica la solidaridad, la justicia y la caridad con los más pobres y no nos quedemos en buenas palabras. Oremos. • Para que seamos cristianos y cristianas de verdad, que con nuestra vida testimoniemos la presencia de Dios en nuestra realidad y seamos capaces de proclamar a un Cristo Vivo en todos nuestros ambientes. Oremos. El que preside: Escucha Señor nuestras oraciones que te hemos presentado y haznos cada vez más verdaderos discípulos misioneros de tu Hijo con un testimonio de vida coherente con su Evangelio. Por Jesucristo nuestro Señor.

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Oración sobre las ofrendas Dios de misericordia, que nuestra oblación te sea grata y abra para nosotros la fuente de toda bendición. Por Jesucristo, nuestro Señor. Oración después de la comunión Que esta Eucaristía, Señor, renueve nuestro cuerpo y nuestro espíritu, para que participemos de la herencia gloriosa de tu Hijo, cuya muerte hemos anunciado y compartido. Por Jesucristo, nuestro Señor. 2 Lunes

Memoria Obligatoria: Santos Ángeles Custodios Blanco

Lectura del libro del Éxodo 23,20-23ª Así dice el Señor: «Voy a enviarte un ángel por delante, para que te cuide en el camino y te lleve al lugar que he preparado. Respétalo y obedécelo. No te rebeles, porque lleva mi nombre y no perdonará tus rebeliones. Si lo obedeces fielmente y haces lo que yo digo, tus enemigos serán mis enemigos, y tus adversarios serán mis adversarios. Mi ángel irá por delante.» Palabra de Dios. Salmo Responsorial 90, 1-2.3-4.5.6-7 R/. A sus ángeles ha dado órdenes para que te guarden en tus caminos Tú que habitas al amparo del Altísimo, que vives a la sombra del Omnipotente, di al Señor: «Refugio mío, alcázar mío, Dios mío, confío en ti.» R/. Él te librará de la red del cazador, de la peste funesta. Te cubrirá con sus plumas, bajo sus alas te refugiarás. R/. Su brazo es escudo y armadura. No temerás el espanto nocturno, ni la flecha que vuela de día, ni la peste que se desliza en las tinieblas, ni la epidemia que devasta a mediodía. R/. No se te acercará la desgracia, ni la plaga llegará hasta tu tienda, porque a sus ángeles ha dado órdenes para que te guarden en tus caminos. R/ Lectura del santo evangelio según san Mateo 18,1-5.10 En aquel momento, se acercaron los discípulos a Jesús y le preguntaron: «¿Quién es el más importante en el reino de los cielos?». Él llamó a un niño, lo puso en medio y dijo: «Les aseguro que, si no vuelven a ser como niños, no entrarán en el reino de los cielos. Por tanto, el que se haga pequeño como este niño, ése es el más grande en el reino de los cielos. El que acoge a un niño como éste en mi nombre me acoge a mí. Cuidado con despreciar a uno de estos pequeños, porque les digo que sus ángeles están viendo siempre en el cielo el rostro de mi Padre celestial.» Palabra del Señor.

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Vayan y hagan discípulos de todos los pueblos

Meditación “Ángel de mi guarda, mi dulce compañía, no me desampares ni de noche ni de día, hasta que me pongas en los brazos de Jesús, José y María” . Desde el siglo II el gran sabio Orígenes decía: “Los cristianos creemos que a cada uno nos designa Dios un ángel para que nos guíe y nos proteja”. Y se basa esta creencia en la frase del Salmo 90: “A sus ángeles ha dado órdenes Dios, para que te guarden en tus caminos”. También en este pasaje de Jesús contenido en el Evangelio de hoy, “Cuidado de no escandalizar a ninguno de estos pequeñuelos, porque sus ángeles están siempre contemplando el rostro de mi Padre Celestial”. Ya en el año 800 se celebraba en Inglaterra una fiesta a los Ángeles de la Guarda y en el año 1608 el Sumo Pontífice extendió a toda la Iglesia universal la fiesta de los Ángeles Custodios y la colocó el día 2 de octubre. Como vemos, es basada en la Palabra de Dios nuestra creencia y vivencias o experiencias en torno a los ángeles custodios, la Fiesta que hoy celebra nuestra Iglesia. El evangelio en este día nos deja varias enseñanzas, entre ellas, el llamado de Jesús a la conversión. En esta ocasión lo hace, aprovechando las inquietudes de sus discípulos en torno a “quién es el más grande en el reino de los cielos”. Jesús toma de la mano a un niño, pero entendemos un niño en su estado “natural”, cuyas características genuinas están marcadas por la bondad, por la inocencia que lleva a la confianza, por la pureza y lo inofensiva de su alma, por su humildad y apertura a la creencia y a dejarse guiar. Un niño, sin las deformaciones que, lamentablemente y poco a poco, le va creando la sociedad y el mundo, tiende al perdón, a no guardar rencores, en muchos casos también tiende al servicio. Igualmente, y más en el tiempo de Jesús, en que los niños no tenían “derechos civiles”, un niño vivía casi a la “intemperie humana”, vulnerable, a merced del cuidado de sus padres y de la divinidad (Dios en sus ángeles...). Dios, a la mano de un niño, nos llama hoy a dejar a un lado nuestra soberbia, nuestra falta de confianza, nos llama a la plena pureza de alma, corazón y mente, ayudados por su Gracia. Nos llama a ser libres, olvidando y dejando atrás, como los niños, los rencores, nos llama a la libertad que viene después de haber perdonado a quien nos haya ofendido. De la misma manera, nos llama a dejar la esclavitud del pecado, así como a servir y ser solidarios con las necesidades de los más pequeños en la sociedad. En resumen, Jesús, en su palabra, hoy y siempre, nos llama constantemente a una mayor conversión. Así podremos, siempre contando con su gracia más que en nuestras propias fuerzas, vivir la grandeza del cielo. Que si sea! Oremos: “Ángel del Señor, que por orden de su piadosa providencia eres mi guardián, custódiame en este día, ilumina mi entendimiento, dirige mis afectos, gobierna mis sentimientos, para que jamás ofenda a Dios Señor, y pueda yo servirle y amarle en los demás. Amen”.

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Feria o Memoria libre: San Francisco de Borja, Presbítero

Martes

Verde o Blanco

Lectura de la profecía de Zacarías 8,20-23 Así dice el Señor de los Ejércitos: Todavía vendrán pueblos y habitantes de grandes ciudades, y los de una ciudad irán a otra diciendo: «Vayamos a implorar al Señor, a consultar al Señor de los Ejércitos. – Yo también voy contigo.» Y vendrán pueblos incontables y numerosas naciones a consultar al Señor de los Ejércitos en Jerusalén y a implorar su protección. Así dice el Señor de los Ejércitos: Aquel día diez hombres de cada lengua extranjera agarrarán a un judío por la orla del manto, diciendo: «Queremos ir con ustedes, pues hemos oído que Dios está con ustedes.» Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 86,1-3.4-5.6-7 R/. Dios está con nosotros Él la ha cimentado sobre el monte santo; y el Señor prefiere las puertas de Sión a todas las moradas de Jacob. ¡Qué pregón tan glorioso para ti, ciudad de Dios! R/. «Contaré a Egipto y a Babilonia entre mis fieles; filisteos, tirios y etíopes han nacido allí.» Se dirá de Sión: «Uno, por uno todos han nacido en ella; el Altísimo en persona la ha fundado.» R/. El Señor escribirá en el registro de los pueblos: «Éste ha nacido allí.» Y cantarán mientras danzan: «Todas mis fuentes están en ti.» R/. Lectura del santo evangelio según san Lucas 9,51-56 Cuando se iba cumpliendo el tiempo de ser llevado al cielo, Jesús tomó la decisión de ir a Jerusalén. Y envió mensajeros por delante. De camino, entraron en una aldea de Samaria para prepararle alojamiento. Pero no lo recibieron, porque se dirigía a Jerusalén. Al ver esto, Santiago y Juan, discípulos suyos, le preguntaron: «Señor, ¿quieres que mandemos bajar fuego del cielo que acabe con ellos?» Él se volvió y les regañó y dijo: «No saben de que espíritu son. Porque el Hijo del Hombre no ha venido a perder a los hombres, sino a salvarlos.» Y se marcharon a otra aldea. Palabra del Señor. Meditación Dios está con nosotros! El creador de los cielos y la tierra, de lo que vemos y hasta de lo que no vemos, nos afirma que está con nosotros. Esto significa, en primer lugar, que no estamos solos. También quiere decir que no sólo contamos con nuestras fuerzas, sino también con la fuerza de Dios (si caminamos según su divina voluntad). Que Dios esté con nosotros nos debe traer paz, seguridad, gozo y ánimo. Si vivo de esta manera, otros lo notarán y podremos compartir con ellos esta gran verdad. Esta es una de las formas en que podemos

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empezar a traer a otros al corazón de Dios (“vayan y hagan discípulos a todos los pueblos”, Mt 28,19 – valor de este mes de octubre). Cuando hemos reflexionado e interiorizado que Dios está con nosotros, entonces no importa que las pruebas o dificultades que estemos enfrentando sean grandes. Toda prueba es pequeña cuando se coloca delante de Dios. En la primera lectura, vemos una profecía hermosa en la que el Señor levanta el ánimo del pueblo de Israel. Los israelitas habían sido exiliados, desterrados y habían pasado grandes sufrimientos. El templo de Jerusalén había sido destruido y, en la época de este profeta, empezaban a regresar y se empezaba su reconstrucción. Frente a un pueblo que se había visto castigado y bajo maldición, resuenan estas palabras de bendición. El Señor promete que hasta los pueblos vecinos querrán venir con los israelitas diciendo: «Queremos ir con ustedes, pues hemos oído que Dios está con ustedes.» No sé dónde estás desterrado o exiliado. Tal vez estás muy bien en la tierra de tu trabajo, de la mejoría económica o de ganar fama o poder, pero alejándote de Dios. ¿De qué nos sirve ganar todo esto si perdemos el poder vivir en el reino de nuestro Padre?. Quizás estás en la tierra de la soledad, de la desesperación, de la ansiedad o de la depresión (como el pueblo de Israel). El Señor tiene una buena noticia para ti hoy: El está contigo! Su fuerza y su gracia te acompañan. No debes temer. El está en control. Es tiempo de confiar, no sólo de creer en Dios sino de creerle a él. Cuando vivimos en la certeza de que Dios está con nosotros estamos en paz con todo lo que nos rodea y nuestra alma está tranquila. Los demás lo notan y desean lo mismo. Ahí les podemos llevar a los pies de Jesús, pues él quiere salvarnos a todos. Esto último lo vemos claramente en la respuesta de Jesús a sus discípulos en el evangelio de hoy. Los discípulos reflejan actitudes humanas pero incorrectas. Ellos se sentían poderosos, pues poco antes Jesús les había dado poder para expulsar demonios y curar enfermos. Al sentir el desprecio de los samaritanos en no darles hospedaje quieren vengarse (como cualquiera de nosotros cuando alguien nos hace algo malo o nos lleva la contraria). Jesús les regaña haciéndoles ver que su misión es salvar a los hombres. Oración: “Gracias Señor por recordarme que deseas mi salvación y que estás conmigo todo el tiempo” Amén. 4 Miércoles

Memoria Obligatoria: San Francisco de Asís Blanco

Lectura del libro de Nehemías 2,1-8 El mes de Nisán del año veinte del rey Artajerjes. Tenía el vino delante, y yo tomé la copa y se la serví. En su presencia no debía tener cara triste. El rey me preguntó: «¿Qué te pasa, que tienes mala cara? Tú no estás enfermo, sino triste.»

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Me llevé un susto, pero contesté al rey: «Viva su majestad eternamente. ¿Cómo no he de estar triste cuando la ciudad donde se hallan enterrados mis padres está en ruinas, y sus puertas consumidas por el fuego?» El rey me dijo: «¿Qué es lo que pretendes?» Me encomendé al Dios del cielo y respondí: «Si a su majestad le parece bien, y si está satisfecho de su siervo, déjeme ir a Judá a reconstruir la ciudad donde están enterrados mis padres.» El rey y la reina, que estaba sentada a su lado, me preguntaron: «¿Cuánto durará tu viaje, y cuándo volverás?» Al rey le pareció bien la fecha que le indiqué y me dejó ir. Pero añadí: «Si a su majestad le parece bien, que me den cartas para los gobernadores de Transeufratina, a fin de que me faciliten el viaje hasta Judá. Y una carta dirigida a Asaf, superintendente de los bosques reales para que me suministren tablones para las puertas de la ciudadela de templo, para el muro de la ciudad y para la casa donde me instalaré.» Por un favor de Dios, el rey me lo concedió todo. Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 136,1-2.3.4-5.6 R/. Que se me pegue la lengua al paladar si no me acuerdo de ti Junto a los canales de Babilonia nos sentamos a llorar con nostalgia de Sión; en los sauces de sus orillas colgábamos nuestras cítaras. R/. Allí los que nos deportaron nos invitaban a cantar; nuestros opresores, a divertirlos: «Cántennos un cantar de Sión.» R/. ¡Cómo cantar un cántico del Señor en tierra extranjera! Si me olvido de ti, Jerusalén, que se me paralice la mano derecha. R/. Que se me pegue la lengua al paladar si no me acuerdo de ti, si no pongo a Jerusalén en la cumbre de mis alegrías. R/. Lectura del santo evangelio según san Lucas 9,57-62: En aquel tiempo, mientras iban de camino Jesús y sus discípulos le dijo uno: «Te seguiré adonde vayas.» Jesús le respondió: «Las zorras tienen madriguera, y los pájaros nido, pero el Hijo del hombre no tiene donde reclinar la cabeza.» A otro le dijo: «Sígueme.» Él respondió: «Déjame primero ir a enterrar a mi padre.» Le contestó: «Deja que los muertos entierren a sus muertos; tú vete a anunciar el reino de Dios.» Otro le dijo: «Te seguiré, Señor. Pero déjame primero despedirme de mi familia.» Jesús le contestó: «El que echa mano al arado y sigue mirando atrás no vale para el reino de Dios.» Palabra del Señor. Meditación En el Evangelio de San Lucas vemos unas actitudes de Jesús que nos indica que era una persona radical. A aquél que le dice “te seguiré” Jesús no le dice que no lo haga, simplemente le indica que el camino será difícil

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y que no habrá descanso. Esto podría parecer desmotivante, pero Jesús no es mentiroso y no adorna, va directo al grano. Al segundo es Jesús que le llama. Este hombre le pide primero enterrar a su padre. Jesús le responde y pareciera que “le echa un boche”. Pero resulta que no se cree que se le acababa de morir (eso sería una coincidencia demasiado grande. Además Jesús no iría en contra del mandamiento de honrar padre y madre) sino que estaba enfermo y que podría tomar un tiempo en morir y ser enterrado. Esta es una muy buena razón para no seguirle de inmediato, pero tiene sabor a excusa. El mensaje que este discípulo daba era “luego de que me despreocupe de mis deberes, entonces atenderé muy bien tus asuntos” . ¿Acaso no seremos así muchos de nosotros? Jesús contesta firme: “deja que los muertos entierren a los muertos”. Jesús no desprecia ni al discípulo ni a su familia, toma el momento para enseñar una lección. Frente a la prédica del reino de Dios - que es vida -, lo demás es como la muerte. Los que viven en este mundo despreocupados de la vida eterna, están como muertos. No seamos así nosotros. Busquemos primero el reino de Dios y lo demás se nos dará por añadidura. Por otro lado, La misión de Jesús era urgente e importante, no podía haber medias tintas. Si no evangelizamos, no hay conversiones, sin conversiones no hay almas que se salven. Hay que actuar y pronto! Hoy, la misión sigue siendo así y depende de discípulos radicales que quieran seguir al maestro, que actúen con astucia y con valentía, y que estén dispuestos a pagar cualquier precio por el reino de Dios. El tercero le dice a Jesús que le seguirá pero que lo deje despedirse de su familia… es como el caso anterior. Jesús no dice: “no vayas” pero sí le enseña de que seguirle es una nueva vida, en la que él es nuestra prioridad, en la que hemos roto con la vida anterior, con el pecado, los egoísmos, con estar en primer lugar… poner la mano en el arado y mirar atrás es como anhelar nuestro pasado y nuestras antiguas costumbres mundanas. Esto sería como restar valor a la vida que el Señor nos ofrece ahora y en la eternidad. La lección está clara: Para seguir a Jesús hay que estar dispuesto a dejarlo TODO. Nuestro maestro dio su vida entera por nosotros, si somos buenos discípulos, tenemos que imitarlo y dar la vida por él y por nuestro prójimo. Ofrezcamos nuestras vidas enteras a Dios y demos testimonio a los demás de la grandeza del amor de Dios. Evangelicemos junto a Jesús! Oración: Señor, dame la radicalidad que necesito para ser tu discípulo y la valentía de anunciarte a los que me rodean. Amén. 5 Jueves

Témporas de Acción de Gracias y Petición Blanco

Lectura del libro del Deuteronomio 8,7-18 Habló Moisés al pueblo, diciendo: «Cuando el Señor, tu Dios, te introduzca en la tierra buena, tierra de torrentes, de fuentes y veneros que manan en el

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monte y la llanura, tierra de trigo y cebada, de viñas, higueras y granados, tierra de olivares y de miel, tierra en que no comerás tasado el pan, en que no carecerás de nada, tierra que lleva hierro en sus rocas, y de cuyos montes sacarás cobre, entonces comerás hasta hartarte, y bendecirás al Señor, tu Dios, por la tierra buena que te ha dado. Pero cuidado, no te olvides del Señor, tu Dios, siendo infiel a los preceptos, mandatos y decretos que yo te mando hoy. No sea que, cuando comas hasta hartarte, cuando te edifiques casas hermosas y las habites, cuando críen tus reses y ovejas, aumenten tu plata y tu oro, y abundes de todo, te vuelvas engreído y te olvides del Señor, tu Dios, que te sacó de Egipto, de la esclavitud, que te hizo recorrer aquel desierto inmenso y terrible, con dragones y alacranes, un sequedal sin una gota de agua, que sacó agua para ti de una roca de pedernal; que te alimentó en el desierto con un maná que no conocían tus padres, para afligirte y probarte, y para hacerte el bien al final. Y no digas: “Por mi fuerza y el poder de mi brazo me he creado estas riquezas.” Acuérdate del Señor, tu Dios: que es él quien te da la fuerza para crearte estas riquezas, y así mantiene la promesa que hizo a tus padres, como lo hace hoy.» Palabra de Dios. Interleccional: 1Cro 29,10.11abcd.11d-12ª.12bcd,2 R/ “Tu eres Señor de universo” Bendito eres, Señor, Dios de nuestro padre Israel, por los siglos de los siglos. R/. Tuyos son, Señor, la grandeza y el poder, la gloria, el esplendor, la majestad, porque tuyo es cuanto hay en cielo y tierra. R/. Tú eres rey y soberano de todo. De ti viene la riqueza y la gloria. R. Tú eres Señor del universo, en tu mano está el poder y la fuerza, tú engrandeces y confortas a todos. R/. Lectura de la segunda carta a los Corintios 5,17-21 Hermanos: El que es de Cristo es una criatura nueva. Lo antiguo ha pasado, lo nuevo ha comenzado. Todo esto viene de Dios, que por medio de Cristo nos reconcilió consigo y nos encargó el ministerio de la reconciliación. Es decir, Dios mismo estaba en Cristo reconciliando al mundo consigo, sin pedirle cuentas de sus pecados, y a nosotros nos ha confiado la palabra de la reconciliación. Por eso, nosotros actuamos como enviados de Cristo, y es como si Dios mismo los exhortara por nuestro medio. En nombre de Cristo les pedimos que se reconcilien con Dios. Al que no había pecado Dios lo hizo expiación por nuestro pecado, para que nosotros, unidos a él, recibamos la justificación de Dios. Palabra de Dios. Lectura del santo evangelio según san Mateo 7,7-11 En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Pidan y se les dará, busquen y encontrarán, llamen y se les abrirá; porque quien pide recibe,

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quien busca encuentra y al que llama se le abre. Si a alguno de ustedes le pide su hijo pan, ¿le va a dar una piedra?; y si le pide pescado, ¿le dará una serpiente? Pues si ustedes, que son malos, saben dar cosas buenas a sus hijos, ¡cuánto más su Padre del cielo dará cosas buenas a los que le pidan!». Palabra del Señor. Meditación De la primera lectura hoy reflexionaremos sobre el agradecimiento que debemos tener al Señor. El pueblo de Israel ha caminado por el desierto por 40 años y está próximo a entrar en la tierra prometida. Allí le espera el bienestar y la abundancia. Dios, que le ha guiado y les recuerda cómo él sacaba agua de las rocas, les protegía de los peligros del desierto y les alimentó con el maná, ahora les aconseja, como buen padre, que no se olviden de él y que sean agradecidos. A Dios no le interesa que le estén dando gracias a cada rato, lo que le interesa es que nuestro corazón esté siempre vuelto hacia él. Muchas personas cuando estamos en prueba estamos implorando y pidiendo con insistencia, sin embargo, cuando llega el momento de abundancia, por ejemplo, si nos va bien en un negocio, inmediatamente tomamos todo el crédito para nosotros mismos. Nos olvidamos de Dios y, a veces, es la misma mejoría, o las riquezas, o la fama o el poder, los que terminan alejándonos de Dios y poniendo en peligro nuestra vida eterna (de que le vale al hombre tenerlo todo si su alma se pierde?). Cómo a un buen padre, nuestro Dios lo que quiere es que nos mantengamos en sus caminos, obedeciendo sus leyes y preceptos, pero no “para tenernos bajo control” sino para que vivamos una vida de bendición aquí en la tierra y luego una vida eterna en la plenitud de su presencia…que bueno es Dios!!! En la primera lectura vemos que la vida del pueblo de Israel vá a cambiar. De la “vida vieja” de esclavitud y de desierto a una “vida nueva” y plena en la tierra prometida. En la segunda lectura vemos algo parecido. Los que somos de Cristo, antes vivíamos en el pecado, que conlleva a la muerte (vida vieja), pero ahora somos unas nuevas criaturas (vida nueva). No lo merecíamos pero Cristo, con su muerte y resurrección nos reconcilió con Dios Padre. Reflexionemos un momento: soy nueva criatura “en Cristo”. Su vida está en mí. Cómo agradecer esta gracia? San Pablo dice “por eso, nosotros actuamos como enviados de Cristo”. Ahí está la respuesta! ¿ Estoy actuando como enviado de Cristo? Si la respuesta es sí, te felicito. Si es no, entonces piensa en cuáles áreas debes mejorar y empieza hoy mismo, recuerda, el Espíritu Santo está en ti. Déjale obrar y tendrás testimonios que contar. En cuanto al Evangelio de hoy, vemos claramente la necesidad de orar para obtener favores o dones del cielo. Podemos entender que ningún padre dá cosas malas si los hijos piden cosas buenas y necesarias. A veces nos concentramos en pedir sólo cosas materiales (y no está mal,

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si es que son necesarias) pero, San Santiago nos alerta: “No tienen porque no piden. Piden y no reciben porque piden mal, con la intención de malgastarlo en sus deseos de placeres” (Stgo. 4,3). Pidamos también cosas espirituales, como sabiduría de Dios, paz, fortaleza en la fé. Estas cosas nos ayudarán a perseverar en el camino de regreso a la casa de nuestro Padre Bueno. 6 Viernes

Feria o memoria libre: San Bruno, presbítero Verde o Blanco

Lectura del libro de Baruc 1,15-22 Confesamos que el Señor, nuestro Dios, es justo, y a nosotros nos abruma hoy la vergüenza: a los judíos y vecinos de Jerusalén, a nuestros reyes y gobernantes, a nuestros sacerdotes y profetas y a nuestros padres; porque pecamos contra el Señor no haciéndole caso, desobedecimos al Señor, nuestro Dios, no siguiendo los mandatos que el Señor nos había dado. Desde el día en que el Señor sacó a nuestros padres de Egipto hasta hoy, no hemos hecho caso al Señor, nuestro Dios, hemos rehusado obedecerle. Por eso, nos persiguen ahora las desgracias y la maldición con que el Señor conminó a Moisés, su siervo, cuando sacó a nuestros padres de Egipto para darnos una tierra que mana leche y miel. No obedecimos al Señor, nuestro Dios, que nos hablaba por medio de sus enviados, los profetas; todos seguimos nuestros malos deseos, sirviendo a dioses ajenos y haciendo lo que el Señor, nuestro Dios, reprueba. Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 78,1-2.3-5.8.9 R/. Por el honor de tu nombre, sálvanos, Señor Dios mío, los gentiles han entrado en tu heredad, han profanado tu santo templo, han reducido Jerusalén a ruinas. Echaron los cadáveres de tus siervos en pasto a las aves del cielo, y la carne de tus fieles a las fieras de la tierra. R/. Derramaron su sangre como agua en torno a Jerusalén, y nadie la enterraba. Fuimos el escarnio de nuestros vecinos, la irrisión y la burla de los que nos rodean. ¿Hasta cuándo, Señor? ¿Vas a estar siempre enojado? ¿Va a arder como fuego tu cólera? R/. No recuerdes contra nosotros las culpas de nuestros padres; que tu compasión nos alcance pronto, pues estamos agotados. R/. Socórrenos, Dios, salvador nuestro, por el honor de tu nombre; líbranos y perdona nuestros pecados a causa de tu nombre. R/. Lectura del santo evangelio según san Lucas 10,13-16 En aquel tiempo, dijo Jesús: «¡Ay de ti, Corozaín; ay de ti, Betsaida! Si en Tiro y en Sidón se hubieran hecho los milagros que en ustedes, hace tiempo que se habrían convertido, vestidas de sayal y sentadas en la ceniza. Por eso el juicio les será más llevadero a Tiro y a Sidón que a ustedes. Y tú, Cafárnaún, ¿piensas escalar el cielo? Bajarás al infierno. Quien a ustedes

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los escucha a mí me escucha; quien a ustedes los rechaza a mí me rechaza; y quien me rechaza a mí rechaza al que me ha enviado.» Palabra del Señor. Meditación En la primera lectura, tomada del libro del profeta Baruc, Dios les dice al pueblo de Israel, y nos los dice también hoy a nosotros: que hemos desobedecido sus mandatos, porque seguimos nuestros malos deseos, haciendo lo que El, reprueba. Y nos invita a dejar el pecado y a seguir lo que le agrada a Él. En el salmo encontramos una súplica pidiendo al Señor que nos libre, nos socorra y nos perdone por nuestra desobediencia. Por el honor de su nombre. En el pasaje del evangelio las expresiones de Jesús: « ¡Ay de ti, Corozaín! ¡Ay de ti, Betsaida!» Vemos que Jesús, al dirigir su mirada hacia aquellas ciudades de Galilea que habían sido objeto de su preocupación y en las que Él había predicado y realizado las obras del Padre y había hecho tantos milagros, expresó sufrimiento al ver que el anuncio del Reino de Dios no fue para aquellas ciudades una llamada a la penitencia y al cambio. Jesús reconoce que no aprovecharon toda la gracia. A Nosotros, bautizados y guiados en nuestra fe, habiendo recibido innumerables gracias de Dios, tenemos la obligación moral de corresponder a su llamado. Es la conversión la que hace que el hombre viejo dé paso al hombre nuevo; es la renovación diaria de nuestro corazón para Dios. Cada día que empieza es una oportunidad de volver al camino de la voluntad de Dios, de renovar las promesas bautismales y de reconocer los errores cometidos. ¿Qué milagros ha hecho y no he creído? Cada uno en su vida personal puede decir cuántos son los milagros que Dios ha hecho en su propia vida, pero los más comunes son la Eucaristía, la conversión de nuestros corazones, las casualidades que no tienen otro fundamento que el querer de Dios, nuestra propia vida cuando hemos estado padeciendo una enfermedad que parecía incurable o en riesgo de morir, o sin trabajo o con situaciones diversas ... Lo que nos pide Cristo en este evangelio es que reflexionemos sobre todos esos milagros, esas gracias que Dios nos va dando, para que se las agradezcamos como verdaderos hijos, que aman a su Padre. Seamos agradecidos y pidamos la gracia de ver todo lo que Dios nos ha dado. Después de leer el evangelio de hoy, sería bueno preguntarnos si hemos tenido un verdadero encuentro con Jesucristo o sólo nos hacemos llamar “cristianos” por costumbre o tradición. Y si hoy sentimos el llamado de Dios a la conversión, busquemos como nunca antes encontrarnos con Jesucristo, elevándole una oración en la intimidad y clamando su presencia desde lo más profundo de nuestro ser. San Máximo nos dirá: «No hay nada tan agradable y amado por Dios como el hecho de que los hombres se conviertan a Él con sincero arrepentimiento».

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Pidámosle al Señor, que nos ayude a darnos cuenta que para escuchar y poder responder a su llamada, debo limpiar mi mente y mi corazón en el sacramento de la confesión. No soy digno de ser tu discípulo misionero, por eso te pido me ayudes a crecer en la sinceridad y en la honestidad, para que sepa aprovechar los medios espirituales que me ofrece tu Iglesia Que Dios derrame su gracia sobre nosotros y nos ayude a convertirnos a Él. 7 Sábado

Memoria Obligatoria: Nuestra Señora del Rosario Blanco o Azul

Lectura del libro de los Hechos de los Apóstoles 1,12-14 Después de subir Jesús al Cielo, los apóstoles se volvieron a Jerusalén desde el monte que llaman de los Olivos, que dista de Jerusalén tan solo lo que la ley permite caminar en día sábado. Llegados a casa, subieron a la sala, donde se alojaban: Pedro y Santiago, y Juan y Andrés, Felipe y Tomás, Bartolomé y Mateo, Santiago hijo de Alfeo, y Simón Zelotes, y Judas hermano de Santiago. Todos ellos se dedicaban a la oración en común, junto con algunas mujeres, entre ellas María la madre de Jesús, y con sus hermanos. Palabra de Dios. Responsorial: Lc. 1, 46-47.48-49.50-5152-53.54-554 R/ “Bienaventurada eres, Virgen María, que llevaste en tu seno al Hijo del Padre eterno”. Proclama mi alma la grandeza del Señor, se alegra mi espíritu en Dios, mi salvador. R/ Porque ha mirado la humillación de su esclava. Desde ahora me felicitarán todas las generaciones, porque el Poderoso ha hecho obras grandes por mí: su nombre es santo. R/ Y su misericordia llega a sus fieles de generación en generación. Él hace proezas con su brazo: dispersa a los soberbios de corazón. R/ Derriba del trono a los poderosos y enaltece a los humildes, a los hambrientos los colma de bienes y a los ricos los despide vacíos. R/ Auxilia a Israel, su siervo, acordándose de la misericordia -como lo había prometido a nuestros padres- en favor de Abrahán y su descendencia por siempre. R/ Lectura del santo evangelio según san Lucas 1, 26-38 En aquel tiempo, el ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea llamada Nazaret, a una virgen desposada con un hombre llamado José, de la estirpe de David; la virgen se llamaba María. El ángel, entrando en su presencia, dijo: -«Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo.» Ella se turbó ante estas palabras y se preguntaba qué saludo era aquél. El ángel le dijo: -«No temas, María, porque has encontrado gracia ante Dios. Concebirás en tu vientre y darás a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús.

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Será grande, se llamará Hijo del Altísimo, el Señor Dios le dará el trono de David, su padre, reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin.» Y María dijo al ángel: -« ¿Cómo será eso, pues no conozco a varón?» El ángel le contestó: -«El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y la fuerza del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso el Santo que va a nacer se llamará Hijo de Dios. Ahí tienes a tu pariente Isabel, que, a pesar de su vejez, ha concebido un hijo, y ya está de seis meses la que llamaban estéril, porque para Dios nada hay imposible.» María contestó: -«Aquí está la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra.» Y la dejó el ángel. Palabra del Señor. Meditación En la Primera lectura vemos como los apóstoles perseveraban en la oración y María los protegía y los acompañaba a implorar la venida del Espíritu Santo. Ella era la Causa de la alegría y el Consuelo de los afligidos y por eso les animaba. La perseverancia en la oración es lo que nos permite mantenernos orando a pesar de las dificultades y te ayuda a orar, aunque no tengas ganas de hacerlo, porque si pospones la oración para cuando te ‘nazca’, quizás te quedes esperando toda la vida, en cambio sí habitualmente oramos como lo hicieron María y los apóstoles, sin duda mantendremos la fe de que El Señor vendrá en nuestro auxilio. En el salmo, María proclama la grandeza y la misericordia de Dios y reconoce su acción, no solo en su vida, sino en la de su pueblo. La fe en ella, aparece como una mirada más allá de la apariencia que identifica la lógica del amor de Dios y su compromiso con los débiles. Sabemos que María fue indiferente a la soberbia de los poderosos y sensibles la palabra de los humildes. Hoy la Iglesia honra a Nuestra Madre del Cielo especialmente a través de esta devoción mariana de Nuestra Señora del Rosario. En la que sin temor a equivocarnos, María nos propone un modo de creer y de ver a Dios. Sin certezas humanas, ella supo acoger confiadamente la palabra de Dios. La respuesta que ella dio no era algo espontáneo o “lógico”. María dirá que sí, más por confianza y fe, que por conocimiento. Ella apenas podía entender lo que le había sido explicado... y sin embargo, dice que “Sí”. Además, la fe de María será puesta a prueba cada día. Ella quedará encinta. No sabe bien cómo, pero lo cierto es que su corazón está inundado por una luz especial. Sólo por medio de la oración y de la unión con Dios podemos hacernos una pálida idea de lo que ella vivió en su interior. La meditación del rosario produce un gran bien en nuestras almas, pues nos va identificando con los sentimientos de Cristo y nos permite vivir en un clima de intensa piedad. Ante tantas dificultades como a veces experimentamos, y la ayuda que tanto necesitamos en el apostolado para sacar adelante a la familia y acercarla más a Dios, en las batallas de nuestra vida interior, no podemos olvidar que, como en otros tiempos, ha de ser

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hoy el Rosario el arma poderosa, para vencer en nuestra lucha interior, y para ayudar a todas las almas. Así como pedir su intercesión por la paz en el mundo. Recordemos que rezar el rosario no es repetir oraciones maquinalmente sino que es recordar la vida de Jesús en la sagrada Biblia. La Madre de Dios, Mediadora en Cristo entre Dios y los hombres, se prodiga continuamente en servicio nuestro. Ella es nuestra madre en el cielo, es la Santa Madre de Dios, porque nos enseña la virtud de la esperanza, incluso cuando parece que nada tiene sentido. Ella siempre confía en el misterio de Dios, incluso cuando Él parece eclipsarse por culpa del mal del mundo. 8

XXVII Domingo del Tiempo Ordinario

III Semana Liturgia de las Horas

Verde

Dios es el Dueño del Reino y nosotros sus misioneros y sembradores Orientaciones para la Celebración: Colocar el lema del Domingo junto con imágenes o signos de los frutos del Reino que ya se dan entre nosotros y de aquellos frutos malos que nos impiden vivir según el Reino. Se pueden colocar frutos buenos en una canasta y en otra frutos dañados. En la procesión de las ofrendas se puede presentar a los misioneros de los sectores y de la parroquia. En esa procesión, o en la de entrada, se lleva un rosario grande acompañado de la Biblia. Monición de Entrada El Señor Jesús que nos ha hecho sus discípulos misioneros nos reúne para la Celebración Eucarística en este XXVII Domingo del Tiempo Ordinario animados por el lema de este mes:” Vayan y hagan discípulos de todos los pueblos” (Mt 28,19) En este Domingo, el Señor nos recuerda que el mundo es su viña, su campo, su conuco; nosotros somos trabajadores a sus órdenes. Él nos envía al trabajo, a la misión; nos envía a los hermanos que necesitan toda clase a atenciones tanto materiales como espirituales, tanto consuelo como evangelización. Pero, El sólo es su dueño y espera que nosotros demos uvas frutas sabrosas y no agrazones y que sepamos entregarle los frutos de su Reino. Puestos de pie aclamamos con el canto a Jesús, el Hijo del Dueño de la cosecha, que llega a través de su ministro a presidir esta Celebración. Oración colecta Dios todopoderoso y eterno, que con amor generoso desbordas los méritos y deseos de los que te suplican, derrama sobre nosotros tu misericordia,

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para que libres nuestra conciencia de toda inquietud y nos concedas aun aquello que no nos atrevemos a pedir. Por nuestro Señor Jesucristo. LITURGIA DE LA PALABRA Primera lectura: Isaías 5, 1-7 El profeta nos presenta un hermoso poema de amor, pero un amor adolorido y triste. El Señor se lamenta que cuando no somos fieles a Él y a su misión, causamos violencia y lamentos. Es una invitación a serle fieles para que demos esos frutos de amor, justicia y paz. Escuchemos. Lectura del libro de Isaías 5,1-7 Voy a cantar en nombre de mi amigo un canto de amor a su viña. Mi amigo tenía una viña en fértil collado. La entrecavó, la descantó, y plantó buenas cepas; construyó en medio una atalaya y cavó un lagar. Y esperó que diese uvas, pero dio agrazones. Pues ahora, habitantes de Jerusalén, hombres de Judá, por favor, sean jueces entre mí y mi viña. ¿Qué más cabía hacer por mi viña que yo no lo haya hecho? ¿Por qué, esperando que diera uvas, dio agrazones? Pues ahora les diré a ustedes lo que voy a hacer con mi viña: quitar su valla para que sirva de pasto, derruir su tapia para que la pisoteen. La dejaré arrasada: no la podarán ni la escardarán, crecerán zarzas y cardos; prohibiré a las nubes que lluevan sobre ella. La viña del Señor de los ejércitos es la casa de Israel; son los hombres de Judá su plantel preferido. Esperó de ellos derecho, y ahí tienen: asesinatos; esperó justicia, y ahí tienen: lamentos. Palabra de Dios. Salmo Responsorial : 79,9.12.13-14.15-16.19-20 R/. La viña del Señor es la casa de Israel Sacaste, Señor, una vid de Egipto, expulsaste a los gentiles, y la trasplantaste. Extendió sus sarmientos hasta el mar, y sus brotes hasta el Gran Río. R/. ¿Por qué has derribado su cerca para que la saqueen los viandantes, la pisoteen los jabalíes y se la coman las alimañas? R/. Dios de los ejércitos, vuélvete: mira desde el cielo, fíjate, ven a visitar tu viña, la cepa que tu diestra plantó y que tú hiciste vigorosa. R/. No nos alejaremos de ti: danos vida, para que invoquemos tu nombre. Señor, Dios de los ejércitos, restáuranos, que brille tu rostro y nos salve. R/. Segunda lectura: Filipenses 4, 6-9 San Pablo nos recuerda que los discípulos misioneros de Jesús están llamados a descubrir y a tener en cuenta todo lo que es verdadero, noble, justo, puro y laudable y así realizaremos la misión de Jesús sin preocupaciones. Escuchemos. Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Filipenses 4,6-9 Hermanos: Nada les preocupe; sino que, en toda ocasión, en la oración y súplica con acción de gracias, sus peticiones sean presentadas a Dios.

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Y la paz de Dios, que sobrepasa todo juicio, custodiará sus corazones y sus pensamientos en Cristo Jesús. Finalmente, hermanos, todo lo que es verdadero, noble, justo, puro, amable, laudable, todo lo que es virtud o mérito, ténganlo en cuenta. Y lo que aprendieron, recibieron, oyeron, vieron en mí, pónganlo por obra. Y el Dios de la paz estará con ustedes. Palabra de Dios. Aleluya Yo los he elegido del mundo, para que vayan y den fruto, y su fruto dure -dice el Señor-. Evangelio: Mateo 21, 33-43 Jesús nos recuerda que el único dueño de la finca de uvas es el Padre y que nosotros estamos llamados a ser los misioneros y administradores de los frutos del Reino, que saben entregar lo cosechado a sus mensajeros y especialmente a su Hijo. Escuchemos. Lectura del santo evangelio según san Mateo 21,33-43 En aquel tiempo, dijo Jesús a los sumos sacerdotes y a los ancianos del pueblo: «Escuchen otra parábola: Había un propietario que plantó una viña, la rodeó con una cerca, cavó en ella un lagar, construyó la casa del guarda, la arrendó a unos labradores y se marchó de viaje. Llegado el tiempo de la vendimia, envió sus criados a los labradores, para percibir los frutos que le correspondían. Pero los labradores, agarrando a los criados, apalearon a uno, mataron a otro, y a otro lo apedrearon. Envió de nuevo otros criados, más que la primera vez, e hicieron con ellos lo mismo. Por último les mandó a su hijo, diciéndose: “Tendrán respeto a mi hijo.” Pero los labradores, al ver al hijo, se dijeron: “Éste es el heredero, vengan, lo matamos y nos quedamos con su herencia.” Y, agarrándolo, lo empujaron fuera de la viña y lo mataron. Y ahora, cuando vuelva el dueño de la viña, ¿qué hará con aquellos labradores?» Le contestaron: «Hará morir de mala muerte a esos malvados y arrendará la viña a otros labradores, que le entreguen los frutos a sus tiempos.» Y Jesús les dice: «¿No han leído nunca en la Escritura: “La piedra que desecharon los arquitectos es ahora la piedra angular. Es el Señor quien lo ha hecho, ha sido un milagro patente?” Por eso les digo que se les quitará a ustedes el reino de Dios y se dará a un pueblo que produzca sus frutos.» Palabra del Señor. Meditación La primera lectura, nos habla del amor de Dios por su pueblo y de la falta de correspondencia de este. Describe a Israel como una plantación de Dios, llena de todos los cuidados posibles. Puesta en el mejor lugar, con los mejores cuidados, lo normal era que diera buenos frutos, pero la viña produjo uvas agrias. La viña es ciertamente Israel, que no correspondió a los cuidados divinos, y también lo somos la Iglesia y cada uno de nosotros: «Cristo es

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la verdadera vid, que comunica vida y fecundidad a los sarmientos, que somos nosotros, que permanecemos en Él por medio de la Iglesia, y sin Él nada podemos hacer Meditemos hoy junto al Señor si encuentra frutos abundantes en nuestra vida; porque es mucho lo que se nos ha dado. Frutos de caridad, de trabajo bien hecho, de servicios con amigos y familiares, actos de amor a Dios, pequeños servicios a quienes comparten el mismo trabajo o el mismo hogar. Examinemos también si, a la vez, somos origen de esas uvas agrias que son los pecados, la tibieza, la mediocridad espiritual aceptada, las faltas de las que no hemos pedido perdón al Señor... El pecado es el fruto agrio de nuestras vidas. «Nadie se ve enteramente libre de su debilidad. Nuestros pecados están íntimamente relacionados con esa muerte del Hijo amado, de Jesús: Y, agarrándolo, lo echaron fuera de la viña y lo mataron. San Pablo nos dice en la Segunda lectura,: Que las realidades terrenas y las cosas nobles de este mundo son buenas y pueden llegar a tener un valor divino. Son los asuntos que cada día tenemos entre manos (el trabajo, la familia, la amistad, las preocupaciones que la vida lleva consigo, las pequeñas alegrías diarias...) lo que hemos de convertir en frutos buenos para Dios. Para producir los frutos de vida que Dios espera todos los días de cada uno, necesitamos, en primer lugar, apartarnos de todas las faltas, que ofenden a Dios. Como son los descuidos en la caridad, los juicios negativos sobre los demás, las impaciencias, los rencores guardados, etc. « Porque hacen mucho daño al alma. Cada jornada se nos presenta con incontables posibilidades de ofrecer frutos agradables al Señor: desde el vencimiento primero de la mañana – al levantarnos, hasta esa pequeña mortificación que supone el llevar con buen ánimo el excesivo tráfico o un ligero malestar que nos mantiene indispuestos. Son muchas, en este día irrepetible, las ocasiones de sonreír a los demás, de tener una palabra amable, de disculpar un error... En el trabajo, el Señor espera esos pequeños frutos que nacen cuando nos esforzamos en hacerlo. Para producir estos frutos hemos de empeñarnos en mantener la presencia de Dios a lo largo del día. ¨El que permanece en Mí y Yo en él, ese da mucho fruto, porque sin Mí no podéis hacer nada... En esto es glorificado mi Padre, en que deis mucho fruto y seáis discípulos Míos. Que Dios todopoderoso nos ayude a producir frutos buenos en nuestras vidas para nuestra salvación. Oración de los Fieles El que Preside: Padre, Dueño de la cosecha, te invocamos con toda confianza diciéndote: Haznos verdaderos misioneros de tu Reino. Por la Iglesia universal, y por la Iglesia de República Dominicana, para que siendo fieles a Dios demos los frutos de su Reino saliendo al encuentro de los que están en las periferias geográficas y existenciales. Oremos.

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Para que, las autoridades reconozcan que son sólo administradores de los bienes que Dios regala a su pueblo y sepan devolverle a Dios y a su pueblo los frutos que les pertenecen. Oremos. Por todos los enfermos, las personas ancianas, quienes se sienten en soledad y los demás necesitados, para que a través de nosotros sientan el amor bondadoso de Dios que sale a su encuentro. Oremos. Por los misioneros, para que fieles a la llamada que de Dios han recibido, no desfallezcan en las pruebas de su misión. Oremos. Por esta Asamblea para que especialmente en este mes de Octubre hagamos vida el lema de este mes visitando las familias del sector y llevándoles el mensaje de Salvación y así lleguemos a producir los frutos que el Señor desea de nosotros. Oremos. El que preside: Escucha Padre nuestras oraciones y danos la gracia de dar los frutos buenos de tu Reino y que sepamos que Tú eres su Dueño a quien estamos llamados a dar cuenta como misioneros tuyos. Por Jesucristo nuestro Señor. Oración sobre las ofrendas Recibe, Señor, la oblación que tú has instituido, y por estos santos misterios, que celebramos para darte gracias, santifica a los que tú mismo has redimido. Por Jesucristo, nuestro Señor. Oración después de la comunión Concédenos, Señor todopoderoso, que de tal manera saciemos nuestra hambre y nuestra sed en estos sacramentos, que nos transformemos en lo que hemos recibido. Por Jesucristo, nuestro Señor. 9 Lunes

Feria o Memoria Libre: San Dionisio, Obispo y Compañeros Mártires o San Juan Leonardi, Presbítero Verde, Rojo o Blanco

Comienzo de la profecía de Jonás 1,1–2,1.11 Jonás Ben-Amitai, recibió la palabra del Señor: «Levántate y vete a Nínive, la gran ciudad, y proclama en ella: “Su maldad ha llegado hasta mí.”» Se levantó Jonás para huir a Tarsis, lejos del Señor; bajó a Jafa y encontró un barco que zarpaba para Tarsis; pagó el precio y embarcó para navegar con ellos a Tarsis, lejos del Señor. Pero el Señor envió un viento impetuoso sobre el mar, y se alzó una gran tormenta en el mar, y la nave estaba a punto de naufragar. Temieron los marineros, e invocaba cada cual a su dios. Arrojaron los pertrechos al mar, para aligerar la nave, mientras Jonás, que había bajado a lo hondo de la nave, dormía profundamente. El capitán se le acercó y le dijo: «¿Por qué duermes? Levántate e invoca a tu Dios; quizá se compadezca ese Dios de nosotros, para que no perezcamos.» Y decían unos a otros: «Echemos suertes para ver por culpa de quién nos viene esta calamidad.» Echaron suertes, y la suerte cayó sobre Jonás. Le

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interrogaron: «Dinos, ¿por qué nos sobreviene esta calamidad? ¿Cuál es tu oficio? ¿De dónde vienes? ¿Cuál es tu país? ¿De qué pueblo eres?» Él les contestó: «Soy un hebreo; adoro al Señor, Dios del cielo, que hizo el mar y la tierra firme.» Temieron grandemente aquellos hombres y le dijeron: «¿Qué has hecho?» Pues comprendieron que huía del Señor, por lo que él había declarado. Entonces le preguntaron: «¿Qué haremos contigo para que se nos aplaque el mar?» Porque el mar seguía embraveciéndose. Él contestó: «Levántenme y arrójenme al mar, y el mar se aplacará; pues sé que por mi culpa les sobrevino esta terrible tormenta.» Pero ellos remaban para alcanzar tierra firme, y no podían, porque el mar seguía embraveciéndose. Entonces invocaron al Señor, diciendo: «¡Ah, Señor, que no perezcamos por culpa de este hombre, no nos hagas responsables de una sangre inocente! Tú eres el Señor que obras como quieres.» Levantaron, pues, a Jonás y lo arrojaron al mar; y el mar calmó su cólera. Y temieron mucho al Señor aquellos hombres. Ofrecieron un sacrificio al Señor y le hicieron votos. El Señor envió un gran pez a que se comiera a Jonás, y estuvo Jonás en el vientre del pez tres días y tres noches seguidas. El Señor dio orden al pez, y vomitó a Jonás en tierra firme. Palabra de Dios. Salmo Responsorial: Jon 2,3.4.5.8 R/. Sacaste mi vida de la fosa, Señor En mi aflicción clamé al Señor y me atendió; desde el vientre del abismo pedí auxilio, y escuchó mi clamor. R/. Me arrojaste a lo profundo en alta mar, me rodeaban las olas, tus corrientes y tu oleaje pasaban sobre mí. R/. Yo dije: «Me has arrojado de tu presencia; quién pudiera ver de nuevo tu santo templo.» R/. Cuando se me acababan las fuerzas me acordé del Señor; llegó hasta ti mi oración, hasta tu santo templo. R/. Lectura del santo evangelio según san Lucas 10,25-37 En aquel tiempo, se presentó un maestro de la Ley y le preguntó a Jesús para ponerlo a prueba: «Maestro, ¿qué tengo que hacer para heredar la vida eterna?» Él le dijo: «¿Qué está escrito en la Ley? ¿Qué lees en ella?» Él contestó: «Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón y con toda tu alma y con todas tus fuerzas y con todo tu ser. Y al prójimo como a ti mismo.» Él le dijo: «Bien dicho. Haz esto y tendrás la vida.» Pero el maestro de la Ley, queriendo justificarse, preguntó a Jesús: «¿Y quién es mi prójimo?» Jesús dijo: «Un hombre bajaba de Jerusalén a Jericó, cayó en manos de unos bandidos, que lo desnudaron, lo molieron a palos y se marcharon, dejándolo medio muerto. Por casualidad, un sacerdote bajaba por aquel

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camino y, al verlo, dio un rodeo y pasó de largo. Y lo mismo hizo un levita que llegó a aquel sitio: al verlo dio un rodeo y pasó de largo. Pero un samaritano que iba de viaje, llegó a donde estaba él y, al verlo, le dio lástima, se le acercó, le vendó las heridas, echándoles aceite y vino, y, montándolo en su propia cabalgadura, lo llevó a una posada y lo cuidó. Al día siguiente, sacó dos denarios y, dándoselos al posadero, le dijo: “Cuida de él, y lo que gastes de más yo te lo pagaré a la vuelta.” ¿Cuál de estos tres te parece que se portó como prójimo del que cayó en manos de los bandidos?» Él contestó: «El que practicó la misericordia con él.» Díjole Jesús: «Anda, haz tú lo mismo.» Palabra del Señor. Meditación El mundo de hoy va definiendo sin saber un camino cada vez más alejado del pensamiento de Dios y sus propósitos para cada ser humano en particular, pero también para la humanidad en lo colectivo. La noticia de un mundo alejado de Dios parece no ser nueva, durante toda la historia de la humanidad el hombre ha querido encontrar un camino, que en muchas ocasiones parece ir en otra dirección, no hacia Dios, más bien, lejos de Él y los resultados son siempre los mismos, tormenta, tempestad, camino de muerte y de sombras. Hoy más que nunca las señales de retar a Dios, reclamando “libertad” son cada vez más claras y precisas, el hombre cada vez más cubre sus ojos con vendas, producidas por el deseo de vivir a plenitud una esclavitud disfrazada de libertar y cada día más su vida se va atando a cadenas y detenida por muros que ya Cristo venció, pero que cada uno está empecinado en no soltar. El gran pecado de la humanidad hoy es olvidarnos de esa libertad, la que no nos ata a deseos y pensamientos egoístas, la libertad que nos hace consientes que somos propiedad de Dios, que estando cerca de su amor podemos ser llenados de esa gracia especial que hace que nos veamos como suyos, encontrar y descubrir la bendición que viene de esta cercanía de amor, donde Él mismo nos lleva a este encuentro de amor, donde descubrimos que toda nuestra necesidad es llenada sólo por Él. Una de las actitudes que son más escasas en el hombre y la mujer de hoy es el amor al prójimo, especialmente porque esto requiere un darse, un abandonarse, hoy en día la vida que estamos construyendo nos lleva cada vez más por un camino de egoísmo, donde nuestro primer amor está basado en amarnos a nosotros mismos, se nos hace difícil amar a todos por igual, no sólo amar a los que nos odian y nos hacen daño, realmente esto es difícil si estamos lejos de Dios, pero también se nos está haciendo difícil amar a los cercanos, a los que Dios nos ha puesto en el camino para vivir y caminar juntos, nuestra familia, nuestros hermanos de comunidad, nuestros compañeros de trabajo, en fin, los que día a día viven una relación de cercanía con nosotros. Hoy Dios nos invita a reconocer nuestra debilidad, a reconocer que tan lejos están nuestros pasos de sus propósitos, abandonarnos a su amor, descubrir que sólo en Él somos libres, que ese acercarnos a Él es lo que

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nos lleva, lo que saca de nuestra vida los deseos que vienen empujados por la carne y a hacernos fuertes con su espíritu. Por eso hermanos, hoy pongámonos bajo su luz, una luz que no viene a señalarnos y juzgarnos, viene a mostrarnos que tan lejos estamos de su amor, no para acusarnos y condenarnos, sino para amarnos y atraernos a la gracia de su amor, para poder soltar las ataduras que nos aferran al egoísmo y caminar en la libertad de su amor, reconociendo que nada podemos su Él, que es la raíz de nuestra verdadera libertad. Dejémonos amar por Él este día y que ese amor nos lleve a amarlo a Él por encima de todas las cosas y a amar a aquellos que nos da la gracia de conocer y encontrar en el camino de la vida que nos regala. 10 Martes

Feria o Memoria Libre: Santo Tomás de Villanueva Verde o Blanco

Lectura del libro de profeta Jonás 3,1-10 De nuevo vino la palabra del Señor a Jonás y le dijo: «Levántate y vete a Nínive, la gran capital, para anunciar allí el mensaje que te voy a indicar». Se levantó Jonás y se fue a Nínive, como le había mandado el Señor. Nínive era una ciudad enorme: hacían falta tres días para recorrerla. Jonás caminó por la ciudad durante un día, pregonando: «Dentro de cuarenta días Nínive será destruida». Los ninivitas creyeron en Dios: ordenaron un ayuno y se vistieron de sayal, grandes y pequeños. Llegó la noticia al rey de Nínive, que se levantó del trono, se quitó el manto, se vistió de sayal, se sentó sobre ceniza y en nombre suyo y de sus ministros mandó proclamar en Nínive el siguiente decreto: «Que hombres y animales, vacas y ovejas, no prueben bocado, que no pasten ni beban. Que todos se vistan de sayal e invoquen con fervor a Dios, y que cada uno se arrepienta de su mala vida y deje de cometer injusticias. Quizá Dios se arrepienta y nos perdone, aplaque el incendio de su ira y así no moriremos». Cuando Dios vio sus obras y cómo se convertían de su mala vida, cambió de parecer y no les mandó el castigo que había determinado imponerles. Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 129,1-2.3.4.5 R/. Si llevas cuentas de los delitos, Señor, ¿quién podrá resistir? Desde lo hondo a ti grito, Señor; Señor, escucha mi voz; estén tus oídos atentos a la voz de mi súplica. R/. Si llevas cuentas de los delitos, Señor, ¿quién podrá resistir? Pero de ti procede el perdón, y así infundes respeto. R/. Porque del Señor viene la misericordia, la redención copiosa; y él redimirá a Israel de todos sus delitos. R/. Lectura del santo Evangelio según san Lucas 10,38-42 En aquel tiempo, entró Jesús en una aldea, y una mujer llamada Marta lo recibió en su casa. Esta tenía una hermana llamada María que, sentada a los pies del Señor, escuchaba su palabra.

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Y Marta, se multiplicaba para dar abasto con el servicio; hasta que se paró y dijo: «Señor, ¿no te importa que mi hermana me haya dejado sola con el servicio? Dile que me eche una mano». Pero el Señor le contestó: «Marta, Marta, andas inquieta y nerviosa con tantas cosas; sólo una es necesaria. María ha escogido la parte mejor y no se la quitaran».Palabra del Señor. Meditación La hermosa invitación que hoy recibimos es el arrepentimiento, saber que hemos caminado por el fango, no a olvidar ese fango, ese fango que es la muestra de nuestro pecado es el que nos recuerda que tan grande es su amor que nos limpia y nos saca, para que sepamos de dónde venimos y a donde podemos volver si nos olvidamos de su amor. El verdadero arrepentimiento nos lleva no sólo a pedir perdón, eso no es suficiente, pedir perdón va más allá de unas simples palabras vacías, el verdadero arrepentimiento nos mueve a verdaderas acciones en nuestra vida para no repetir eso que hemos hecho, si sólo pedimos perdón y no hacemos un ejercicio en nuestra vida de luchar y encontrar el camino para no repetir nuestras faltas, esto no basta, este arrepentimiento debe ir acompañado de acciones que provoquen frutos que denotan tu arrepentimiento genuino. El verdadero arrepentimiento viene de la presencia poderosa del Espíritu Santo en nosotros, nos regala la conciencia se vivificar y discernir las acciones que el pecador debe tomar a profundidad para alcanzar la santidad, así esta convicción se estaciona en nuestra mente y en el corazón y podemos reconocer no sólo justicia de Dios, sino también su amor, ese que nos hace anhelar con todas nuestras fuerzas el ser purificado y restaurados por Él. Estas acciones siempre van acompañadas de la profunda oración, esta oración que no conduce a la acción concreta, ESTAR CERCA DE EL, la fe verdadera viene por el escuchar la voz del Señor, especialmente si estamos tristes o atravesando un momento difícil en nuestras vidas, esa voz nos da alegría y consuelo. Si sólo nos acercamos al Señor en busca de un beneficio personal, si existe un anhelo de estar con Él por amor, estaremos con Él con un sentido de obligación y de recibir algo a cambio, así llegaremos a hartarnos y a cansarnos, no encontraremos el sabor, el deseo, la necesidad. La invitación de Jesús hoy no es a que el servicio sea fruto de estar a sus pies, de escucharlo, de estar con Él, recibir su llamada de amor, pero primero a dejarnos amar por Él, estando con Él recibiremos todas las cosas que harán que nuestra respuesta al llamado sea real, que el entregarnos a su amor nos lleve a querer servirle al Él y por Él a los hermanos, ese servicio será un servicio de amor, no de obligación, será la respuesta a un llamado en el amor, donde no será pesado entregarnos, dar de nuestro tiempo, de nuestros dones, de nuestros bienes materiales, entregarlo todo será fruto del amor.

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Ese llamado a servirle siempre se renueva en su presencia, esa presencia que está viva en la eucaristía, en la oración personal y comunitaria, en acercarnos y dejarnos llenar por Él, sabiendo que todo lo podemos en Él que nos fortalece, que nos renueva, que nuestra preocupación por dar lo mejor venga de saber que cuando se acaban nuestras fuerzas empiezan las suyas y esta fuerza sólo la recibimos ESTANDO CON EL. Feria o Memoria Libre: Santa Soledad Torres Acosta, Virgen o San Juan XXIII, Papa Miércoles Verde o Blanco 11

Lectura de la profecía de Jonás 4,1-11 Jonás sintió un disgusto enorme y estaba irritado. Oró al Señor en estos términos: «Señor, ¿no es esto lo que me temía yo en mi tierra? Por eso me adelanté a huir a Tarsis, porque sé que eres compasivo y misericordioso, lento a la cólera y rico en piedad, que te arrepientes de las amenazas. Ahora, Señor, quítame la vida; más vale morir que vivir.» Respondióle el Señor: «¿Y tienes tú derecho a irritarte?» Jonás había salido de la ciudad, y estaba sentado al oriente. Allí se había hecho una choza y se sentaba a la sombra, esperando el destino de la ciudad. Entonces hizo crecer el Señor un ricino, alzándose por encima de Jonás para darle sombra y resguardarle del ardor del sol. Jonás se alegró mucho de aquel ricino. Pero el Señor envió un gusano, cuando el sol salía al día siguiente, el cual dañó al ricino, que se secó. Y, cuando el sol apretaba, envió el Señor un viento solano bochornoso; el sol hería la cabeza de Jonás, haciéndole desfallecer. Deseó Jonás morir, y dijo: «Más me vale morir que vivir.» Respondió el Señor a Jonás: «¿Crees que tienes derecho a irritarte por el ricino?» Contestó él: «Con razón siento un disgusto mortal.» Respondióle el Señor: «Tú te lamentas por el ricino, que no cultivaste con tu trabajo, y que brota una noche y perece la otra. Y yo, ¿no voy a sentir la suerte de Nínive, la gran ciudad, que habitan más de ciento veinte mil hombres, que no distinguen la derecha de la izquierda, y gran cantidad de ganado?» Palabra de Dios. Salmo Responsorial 85,3-4.5-6.9-10 R/. Tú, Señor, eres lento a la cólera, rico en piedad Piedad de mí, Señor, que a ti te estoy llamando todo el día; alegra el alma de tu siervo, pues levanto mi alma hacia ti. R/. Porque tú, Señor, eres bueno y clemente, rico en misericordia con los que te invocan. Señor, escucha mi oración, atiende a la voz de mi súplica. R/. Todos los pueblos vendrán a postrarse en tu presencia, Señor; bendecirán tu nombre: «Grande eres tú, y haces maravillas; tú eres el único Dios.» R/. Lectura del santo evangelio según san Lucas 11,1-4 Una vez que estaba Jesús orando en cierto lugar, cuando terminó, uno de sus discípulos le dijo: «Señor, enséñanos a orar, como Juan enseñó a sus discípulos.»

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Él les dijo: «Cuando oren digan: «Padre, santificado sea tu nombre, venga tu reino, danos cada día nuestro pan del mañana, perdónanos nuestros pecados, porque también nosotros perdonamos a todo el que nos debe algo, y no nos dejes caer en la tentación.»» Palabra del Señor. Meditación Saber a ciencia cierta que la misericordia de Dios es eterna debería ser siempre una buena noticia, pero los seres humanos tenemos un sentido de justicia que en muchas ocasiones es más duro que el de Dios, claro, siempre y cuando esa misericordia no sea dada a nosotros, por eso en este día es bueno que pensemos que la misericordia es un regalo que sólo le compete a Dios, que sólo viene de Él y como regalo siempre será inmerecido, nada de lo que hagamos podrá comprar o pagar su misericordia. En un mundo como el de hoy, donde a diario nos escandalizamos de como el hombre desea tomar el lugar de Dios, los que al parecer estamos “cerca” de Él quisiéramos que Dios tomara la justicia en sus manos y acabara con todos estos movimientos que atenta con el llamado que Dios nos hace, lo que sucede muchas veces es que tratamos de convencer a Dios de que haga justicia a nuestra manera. Hoy Dios nos enseña que el dolor que Él siente es más grande que el nuestro, porque Él es el creador y dueño de todo y siente más dolor que nosotros, por eso si su misericordia es infinitamente mucho más grande que la nuestra, nos invita a que esa misericordia penetre en nuestros corazones, en nuestra alma, en nuestra mente y nos dejemos rebosar de ella, para ver con ojos de amor, más que de justicia. Lo que nos toca, no es juzgar, el juicio lo tiene el Señor, lo que nos toca es buscar nosotros primero de Él, de ser llenados por Él y que en medio de nuestra realidad, donde el mundo parece alejarse de Él, nosotros hagamos el mayor esfuerzo por predicar no sólo con palabras, sino también con hechos, su reino, que es un reino de amor, de perdón y de misericordia. Es así como podemos ver en el Padre Nuestro como el mismo Jesús nos enseña esta hermosa oración que El dirigía al Padre, Jesús se ha encarnado, siendo hombre y Dios nos muestra al Padre y nos enseña que siempre debemos glorificar su nombre, teniendo la certeza de que el reino de los cielos ha llegado a nosotros a través de Él, como en su persona, en el hacer la voluntad de Dios, Dios hace vida su voluntad en nosotros, de cómo la necesidad de estar con Él nos hace partícipes de esa voluntad que descubrimos en Él. El Padrenuestro es la oración que Jesús ha transmitido a sus discípulos y a través de ellos a toda la Iglesia, enseñándonos que este es el modo que nos conduce a Cristo, donde nos presenta al Padre en el camino de la oración. Por eso hoy, en este día como cristianos debemos invocar a Dios como Padre, dirigiéndose a Él, en el nombre de Cristo y unido en Cristo, diciendo como San Pablo que no vivo yo, es Cristo quien vive en mí, sabiendo, teniendo la certeza que tenemos a un Dios cercano, que nos escucha,

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que está pendiente de nosotros y que siempre estará a nuestro lado para que nosotros alcancemos la promesa de la vida eterna, para nosotros de manera personal, pero también para los nuestros, Que ese Padre de amor hoy y siempre nos acompañe para descubrir cada día que no estamos librando una batalla solos, sino que Él está al frente, armándonos con su verdad, llenado nuestras vidas y encendiendo en nosotros la luz de su Espíritu. 12 Jueves

Fiesta: Nuestra Señora del Pilar Azul o Blanco

Lectura del primer libro de las Crónicas 15,3-4,15-16; 16,1-2 En aquellos días, David congregó en Jerusalén a todos los israelitas, para trasladar el arca del Señor al lugar que le había preparado. Luego reunió a los hijos de Aarón y a los levitas. Luego los levitas se echaron los varales a los hombros y levantaron en peso el arca de Dios, tal como lo había mandado Moisés por orden del Señor. David mandó a los jefes de los levitas organizar a los cantores de sus familias, para que entonasen cantos festivos acompañados de instrumentos, arpas cítaras y platillos. Metieron el arca de Dios y la instalaron el centro de la tienda que David le había preparado. Ofrecieron holocaustos y sacrificios de comunión a Dios y, cuando David terminó de ofrecerlos, bendijo al pueblo en nombre del Señor. Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 26, 1.2.3.4.5. R/ “El Señor me ha coronado, sobre la columna me ha exaltado El Señor es mi luz y mi salvación, ¿a quién temeré? El Señor es la defensa de mi vida, ¿quién me hará temblar? .R/. Si un ejército acampa contra mí, mi corazón no tiembla; si me declaran la guerra, me siento tranquilo. R/. Lo único que pido, lo único que busco, es vivir en la casa del Señor toda mi vida, para disfrutar las bondades del Señor y estar continuamente en su presencia. R. El me protegerá en su tienda el día del peligro; me esconderá en lo escondido de su morada, me alzará sobre la roca. R/. Lectura del santo evangelio según san Lucas 11,27-28 En aquel tiempo, mientras Jesús hablaba a la gente, una mujer entre el gentío levantó la voz diciendo: “Dichoso el vientre que te llevó y los pechos que te criaron. “Pero él repuso: “Mejor dichosos los que escuchan la palabra de Dios y la cumplen.” Palabra del Señor. Meditación La Iglesia, en España y Latinoamérica, celebra hoy la fiesta de Nuestra Señora del Pilar, Patrona de la Hispanidad. Según una tradición muy antigua, después de la pasión y resurrección de nuestro Señor Jesucristo, el apóstol Santiago, el Mayor, hermano del

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apóstol san Juan, hijo de Zebedeo, siguiendo el mandato del Maestro de anunciar el evangelio en todo el mundo, se dirigió a las provincias de España, hacia el año 40. Antes de partir, besó las manos de la Virgen y pidió su bendición. Estando en Zaragoza, según esta tradición, una noche, mientras oraba, oyó voces de ángeles que cantaban: “Ave María llena de gracia...” y, al oírlos, se postró de rodillas y vio sobre un pilar (columna) de mármol a la Virgen (que vivía todavía en su carne mortal) que le decía “… en este lugar obrará la virtud del Altísimo portentos y maravillas… Este pilar permanecerá en este sitio hasta el fin del mundo y nunca faltarán en esta ciudad verdaderos cristianos”. Durante siglos, muchos cristianos han entendido que, así como el pilar es la primera piedra del templo, María es la primera piedra de la Iglesia, el templo de Dios; y que, junto a ella, igual que el día de Pentecostés, va creciendo el pueblo de Dios. El pilar es símbolo del canal de comunicación entre el cielo y la tierra, señal de lo que puede hacer Dios en el hombre y de lo que puede hacer el hombre bajo el poder de Dios. Es lo que nos dicen las lecturas que acabamos de leer. La primera lectura (1 Crónicas 15) nos recuerda, en el símbolo del arca de la alianza, la presencia de Dios en medio de su pueblo. Con la entrada del arca a la ciudad, el pueblo experimenta señales de la presencia de Dios. Por eso, el rey David se asegura de que al Señor se le dé la debida gloria, de que el pueblo disfrute el momento y reciba la bendición del Señor. El evangelio (Lucas 11, 27-28) nos habla de las alabanzas que el pueblo (por boca de una mujer piadosa) le tributa a la Virgen María “bienaventurado (dichoso) el vientre que te llevó”. La misma Virgen María había profetizado, en el Magnificat que “desde ahora todas las generaciones me llamarán dichosa” (Lucas 1,48). Y así ha sido. Llama la atención la respuesta del Señor a la alabanza que el pueblo da a su madre: hay mayor dicha en escuchar la Palabra de Dios y cumplirla. Por eso, decía san Agustín que “la Virgen María fue más dichosa por recibir la fe de Cristo que por concebir la carne de Cristo”. Eso nos ayuda a entender el único mandato de la Madre que recoge la Escritura: “Hagan lo que Él les diga” (Juan 2,5). Hoy, como ayer, la fe y la esperanza de la Virgen María nos alientan en la misión, en el esfuerzo por edificar el reino de Dios. Obedezcamos la voz de la Madre, que nos dice “Hagan lo que Él les diga”. Pidamos al Señor, por intercesión de la Virgen del Pilar, “fortaleza en la fe, seguridad en la esperanza y constancia en el amor.” 13 Viernes

Feria Verde

Lectura del profeta Joel 1, 13-15; 2, 1-2 Vístanse de luto y hagan duelo, sacerdotes; lloren, ministros del altar; vengan a dormir en esteras, ministros de Dios, porque faltan en el templo

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del Señor ofrenda y libación. Proclamen el ayuno, congreguen la asamblea, reúnan a los ancianos, a todos los habitantes de la tierra, en el templo del Señor, nuestro Dios, y clamen al Señor. ¡Ay de este día! Que está cerca el día del Señor, vendrá como azote del Dios de las montañas. Toquen la trompeta en Sión, griten en mi monte santo, tiemblen los habitantes del país, que viene, ya está cerca, el día del Señor. Día de oscuridad y tinieblas, día de nube y nubarrón; como negrura extendida sobre los montes, una horda numerosa y espesa; como ella no la hubo jamás, después de ella no se repetirá, por muchas generaciones. Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 9, 2-3.6.16.8-9 R/. El Señor juzgará el orbe con justicia Te doy gracias, Señor, de todo corazón, proclamando todas tus maravillas; me alegro y exulto contigo y toco en honor de tu nombre, oh Altísimo. R/. Reprendiste a los pueblos, destruiste al impío y borraste para siempre su apellido. Los pueblos se han hundido en la fosa que hicieron, su pie quedó prendido en la red que escondieron. R/. Dios está sentado por siempre en el trono que ha colocado para juzgar. Él juzgará el orbe con justicia y regirá las naciones con rectitud. R/. Lectura del santo evangelio según san Lucas 11, 15-26 En aquel tiempo, habiendo echado Jesús un demonio, algunos de entre la multitud dijeron: «Si echa los demonios es por arte de Belzebú, el príncipe de los demonios.» Otros, para ponerlo a prueba, le pedían un signo en el cielo. Él, leyendo sus pensamientos, les dijo: «Todo reino en guerra civil va a la ruina y se derrumba casa tras casa. Si también Satanás está en guerra civil, ¿cómo mantendrá su reino? Ustedes dicen que yo echo los demonios con el poder de Belzebú; y, si yo echo los demonios con el poder de Belzebú, sus hijos, ¿por arte de quién los echan? Por eso, ellos mismos serán sus jueces. Pero, si yo echo los demonios con el dedo de Dios, entonces es que el reino de Dios ha llegado a ustedes. Cuando un hombre fuerte y bien armado guarda su palacio, sus bienes están seguros. Pero, si otro más fuerte lo asalta y lo vence, le quita las armas de que se fiaba y reparte el botín. El que no está conmigo está contra mí; el que no recoge conmigo desparrama. Cuando un espíritu inmundo sale de un hombre, da vueltas por el desierto, buscando un sitio para descansar; pero, como no lo encuentra, dice: “Volveré a la casa de donde salí.” Al volver, se la encuentra barrida y arreglada. Entonces va a coger otros siete espíritus peores que él, y se mete a vivir allí. Y el final de aquel hombre resulta peor que el principio.» Palabra del Señor. Meditación Las lecturas del día de hoy nos hablan de la victoria de Cristo sobre Satanás y el reino de la oscuridad. Los cristianos somos una nación en lucha contra Satanás y sus fuerzas del mal. Es una realidad a la que muchos cristianos viven, hoy, de espaldas.

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La primera lectura se refiere al “día del Señor”, que es “un día de oscuridad y tinieblas”, “azote de Dios”, pero también día de luz y de promesas, de misericordia y salvación. El profeta Joel habla de tocar la trompeta, como un ejército que se lanza a la guerra y llama al pueblo de Dios, comenzando por los sacerdotes, a pedir misericordia a Dios. El Evangelio nos habla de la realidad del combate espiritual. Cristo, manifestando el poder de Dios, libera a un pobre hombre de un demonio que lo había dejado mudo. Por el Evangelio según san Mateo sabemos que también lo había dejado ciego. Hoy, la violencia, la corrupción, las injusticias, los temores, el odio, la ambición, los pecados de nosotros y del ambiente nos tienen ciegos y mudos. Jesús viene a nuestro encuentro para que veamos y glorifiquemos su nombre con nuestras palabras y acciones. Jesús proclama la llegada del reino con sus hechos y sus palabras. Aprovecha la ocasión para exhortar, usando una parábola. El hombre fuerte del que habla la parábola es Satanás. El hombre más fuerte que lo amarra y lo vence es Jesucristo. Cristo ha venido para deshacer las obras del diablo (1 Juan 3,8). Cristo termina la enseñanza invitando a estar alertas ante las acechanzas del diablo. No basta haber sido liberados del poder de las tinieblas al abrazar la fe, sino que cada día debemos someternos a Dios, debemos resistir al diablo, para que él huya de nosotros (Santiago 4,7). Cristo es nuestra fuerza en el combate. Nos da armas y armadura para que podamos vencer al diablo: “la Verdad, la Justicia, el Celo por el Evangelio, la Fe, la salvación, la Palabra de Dios y la oración, y súplica, en el Espíritu, velando juntos e intercediendo por todos los santos (Efesios 6,10ss.) Él mismo es nuestra armadura en la lucha contra Satanás, decía san Jerónimo. La victoria está ganada en Jesucristo. El salmo nos muestra la actitud que se espera de los cristianos frente al juicio de Dios: confianza y alegría. Cristo, con su sangre preciosa derramada en la cruz, nos ha lavado de nuestros pecados y nos permite acercarnos a Dios como inocentes, libres de culpa. Tengamos siempre presentes las palabras de Jesús “Pero si yo arrojo a los demonios por el poder de Dios, eso significa que ha llegado a ustedes el Reino de Dios”, para cantar junto con el salmista, alegres frente al juicio de Dios sobre el mundo: “Te doy gracias, Señor, de todo corazón y proclamaré todas tus maravillas; me alegro y me regocijo contigo y toco en tu honor, Altísimo.” 14 Sábado

Feria o Memoria Libre: San Calixto I, Papa y Mártir Verde o Rojo

Lectura del libro del profeta Joel 4,12-21 Así dice el Señor: «Que se levanten las naciones y acudan al valle de Josafat; allí me sentaré a juzgar a las naciones vecinas. Empuñen las hoces, porque ya la mies está madura, vengan a pisar las uvas, porque ya está

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lleno el lagar, ya las cubas están rebosantes de sus maldades. ¡Multitudes y multitudes se reúnen en el valle del Juicio, porque está cerca el día del Señor! El sol y la luna se oscurecen, las estrellas retiran su resplandor. El Señor ruge desde Sión, desde Jerusalén levanta su voz; tiemblan los cielos y la tierra. Pero el Señor protege a su pueblo, auxilia a los hijos de Israel. Entonces sabrán que yo soy el Señor, su Dios, que habito en Sión, mi monte santo. Jerusalén será santa, y ya no pasarán por ella los extranjeros. Aquel día los montes destilarán vino y de las colinas manará leche. Los ríos de Judá irán llenos de agua y brotará un manantial del templo del Señor que regará el valle de las Acacias. Egipto se volverá un desierto y Edom una árida llanura, porque oprimieron a los hijos de Judá y derramaron sangre inocente en su país. En cambio, Judá estará habitada para siempre, y Jerusalén por todos los siglos. Vengaré su sangre, no quedarán impunes los que la derramaron, y yo, el Señor, habitaré en Sión». Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 96, 1-2.5-6.11-12 R/. Alégrense, justos, con el Señor El Señor reina, la tierra goza, se alegran las islas innumerables. Tiniebla y nube lo rodean, justicia y derecho sostienen su trono. R/. Los montes se derriten como cera ante el dueño de toda la tierra; los cielos pregonan su justicia, y todos los pueblos contemplan su gloria. R/. Amanece la luz para el justo y la alegría para los rectos de corazón. Alégrense, justos, con el Señor, celebren su santo nombre. R/. Lectura del santo Evangelio según san Lucas 11,27-28 En aquel tiempo, mientras Jesús hablaba a la multitud, una mujer del pueblo gritando, le dijo: «¡Dichosa la mujer que te llevó en su seno y cuyos pechos te amamantaron!» Pero Jesús le respondió: «Dichosos todavía más los que escuchan la palabra de Dios y la ponen en práctica». Palabra del Señor. Meditación El evangelio de hoy es muy breve, pero encierra un gran significado para atender lo que San Lucas enseña respecto de María, la madre de Jesús. Dichoso el vientre que te llevo y los pechos que te criaron, María debería estar muy feliz de tener un hijo así, pero la respuesta de Jesús es “Dichosos más bien los que oyen la palabra de Dios y la ponen en práctica”, hace un mayor elogio a su madre y a todo aquel que se llame cristiano y obedezca su mensaje. María fue la primera que obedeció y puso en práctica las enseñanzas de su hijo, y hoy podemos preguntarnos, ¿estamos obedeciendo? ¿estamos poniendo en práctica lo que el señor nos pide?, más aun, pedimos la intercesión de nuestra madre María, aquella que tuvo en sus manos el primer milagro de Jesús, “Hagan lo que Él les diga” en las bodas de Cana. Pensemos, ¿que nos pasa cuando desobedecemos?, sentimos que todo

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es mentira, que Dios no nos escucha, que todo nos sale mal, tenemos un sentimiento de culpabilidad, de abandono y nuestra fe se quebranta. Es por eso y muchas cosas más, que nuestros oídos, nuestro corazón y nuestro espíritu deben estar muy afinados a la sintonía de Jesús y por sobre todas las cosas hacerle caso a sus directrices, por donde Él nos quiere llevar, que camino tomar, Él va delante ……CONFIA!!! El Señor nos regala la palabra DICHOSO, que significa, bendito, feliz, bienaventurado, y eso somos para Él y eso Él quiere para nosotros, vamos a CREERLE, debes de sentirte feliz, dichoso de saberte hijo de Dios y coheredero de su Gracia. Él no se equivoca, sus planes son perfectos. En este caminar hacia la obediencia vamos a grabar en nuestros corazones cuatro aspectos importantes que debemos tener presente siempre. 1. La oración personal, estar a solas con tu Creador y dejarte seducir en su amor. 2. Escuchar, hacer silencio interior para discernir la voluntad de Dios en nuestras vidas. 3. Obedecer, es decir, poner en práctica lo que el Señor te está pidiendo. 4. Ser Dichoso, porque Él te eligió para ser feliz. Vamos a empezar a poner en marcha nuestras vidas y saber que el mejor camino está en la confianza, obediencia y en el amor. Nosotros los católicos debemos sentirnos privilegiados porque nuestra fe no es huérfana, tenemos madre, padre, y Espíritu Santo, ¡QUE GRAN BENDICION! En nuestros momentos de oración siempre pidamos que el señor nos regale su Espíritu para que podamos creer, obedecer, y poner en práctica todo lo enseñado por El. Esto nos ayuda a parecernos más a Cristo y por ende acercar muchos a la fe. ¡¡¡ANIMO!!! ¡¡¡SE PUEDE!!! ¡No estás solo o sola! María tu madre, te enseñará y así podrás continuar tu vida de fe, ella amó y obedeció primero, ahora nos toca a nosotros!! Reza una decena del Santo Rosario y ofrécelo para que puedas ser obediente a su hijo Jesús. Amen!!!!! 15

XXVIII Domingo del Tiempo Ordinario

IV Semana Liturgia de las Horas

Verde

Invitados y misioneros de la fiesta del Reino Ambientación: Preparar el lugar de la celebración con un sentido festivo como una fiesta de matrimonio. Mantener el Lema y Valor del mes, así como el lema de esta Eucaristía. En la procesión de entrada o en la de las ofrendas, se llevan algunos elementos de una fiesta de matrimonio: comida, bizcocho, bebidas, tarjetas de invitación. Llevemos también el Rosario y la Biblia en la procesión.

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Monición de entrada: Nos reunimos alrededor de la mesa de la Eucaristía, sintiéndonos invitados por el mismo Señor, en este vigésimo Octavo Domingo del Tiempo Ordinario. Hemos respondido a su llamada y hemos entrado en la fiesta de su Reino, ya iniciada por Jesús y de la que nos ha hecho sus misioneros al decirnos:” Vayan y hagan discípulos de todos los pueblos” (Mt 28,19) Alimentados y rebosantes de alegría en esta fiesta nos toca salir a los cruces de los caminos, para invitar a todos y a todas a experimentar el gozo que nosotros disfrutamos con el Señor, invitándoles a vestirse de fiesta, que consiste en tener un corazón puro dispuesto a hacer en todo su voluntad. En cada Eucaristía se actualiza esta fiesta y fortalecidos con la Palabra y el Cuerpo y la Sangre del Señor continuamos la misión del Reino en camino a su plenitud que ya pregustamos. Recibamos a Jesucristo que viene a presidir esta Celebración a través de su ministro cantando llenos de gozo. Oración colecta Te pedimos, Señor, que tu gracia continuamente nos preceda y acompañe, de manera que estemos dispuestos a obrar siempre el bien. Por nuestro Señor Jesucristo. LITURGIA DE LA PALABRA Primera lectura: Isaías 25,6-10ª. El profeta Isaías anuncia la gran fiesta del Señor, que es para todas las naciones a las que reunirá como un solo pueblo. Nosotros somos los misioneros que convocamos hoy a esa fiesta, ya iniciada por Jesús en medio de toda la humanidad. Escuchemos. Lectura del libro de Isaías 25,6-10a Aquel día, el Señor de los ejércitos preparará para todos los pueblos, en este monte, un festín de manjares suculentos, un festín de vinos de solera; manjares enjundiosos, vinos generosos. Y arrancará en este monte el velo que cubre a todos los pueblos, el paño que tapa a todas las naciones. Aniquilará la muerte para siempre. El Señor Dios enjugará las lágrimas de todos los rostros, y el oprobio de su pueblo lo alejará de todo el país. Lo ha dicho el Señor. Aquel día se dirá: «Aquí está nuestro Dios, de quien esperábamos que nos salvara; celebremos y gocemos con su salvación. La mano del Señor se posará sobre este monte.» Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 22, 1-3ª.3b-4.5.6 R/. Habitaré en la casa del Señor por años sin término El Señor es mi pastor, nada me falta: en verdes praderas me hace recostar; me conduce hacia fuentes tranquilas y repara mis fuerzas. R/.

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Me guía por el sendero justo, por el honor de su nombre. Aunque camine por cañadas oscuras, nada temo, porque tú vas conmigo: tu vara y tu cayado me sosiegan. R/. Preparas una mesa ante mí, enfrente de mis enemigos; me unges la cabeza con perfume, y mi copa rebosa. R/. Tu bondad y tu misericordia me acompañan todos los días de mi vida, y habitaré en la casa del Señor por años sin término. R/. Segunda Lectura: Filipenses 4, 12-14. 19-20 Como hicieron los hermanos con Pablo, estamos llamados como misioneros del Señor a salir al encuentro de los hermanos necesitados de ayuda material o espiritual para que reciban su consuelo. Escuchemos. Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Filipenses 4,12-14.19-20 Hermanos: Sé vivir en pobreza y abundancia. Estoy entrenado para todo y en todo: la hartura y el hambre, la abundancia y la privación. Todo lo puedo en aquel que me conforta. En todo caso, hicieron bien en compartir mi tribulación. En pago, mi Dios proveerá a todas sus necesidades con magnificencia, conforme a su espléndida riqueza en Cristo Jesús. A Dios, nuestro Padre, la gloria por los siglos de los siglos. Amén. Palabra de Dios. Aleluya El Padre de nuestro Señor Jesucristo ilumine los ojos de nuestro corazón, para que comprendamos cuál es la esperanza a la que nos llama. Evangelio: Mateo 22,1-14 Este Evangelio está dirigido a los dirigentes religiosos y sociales de su tiempo, a quienes se les ofreció en primer lugar la fiesta del Reino de Dios, pero que ellos rechazaron. Hoy nos toca como sus discípulos misioneros a salir al encuentro de toda la gente, para que entren en esta fiesta, cuya única condición para participar es tener un corazón que practica la voluntad de Dios. Escuchemos. Lectura del santo evangelio según san Mateo 22,1-14 En aquel tiempo, de nuevo tomó Jesús la palabra y habló en parábolas a los sumos sacerdotes y a los ancianos del pueblo: «El reino de los cielos se parece a un rey que celebraba la boda de su hijo. Mandó criados para que avisaran a los convidados a la boda, pero no quisieron ir. Volvió a mandar criados, encargándoles que les dijeran: “Tengo preparado el banquete, he matado terneros y reses cebadas, y todo está a punto. Vengan a la boda.” Los convidados no hicieron caso; uno se marchó a sus tierras, otro a sus negocios; los demás les echaron mano a los criados y los maltrataron hasta matarlos. El rey montó en cólera, envió sus tropas, que acabaron con aquellos asesinos y prendieron fuego a la ciudad. Luego dijo a sus criados: “La boda está preparada, pero los convidados no se la merecían. Vayan ahora a los cruces de los caminos, y a todos los que encuentren, convídenlos a la boda.”

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Los criados salieron a los caminos y reunieron a todos los que encontraron, malos y buenos. La sala del banquete se llenó de comensales. Cuando el rey entró a saludar a los comensales, reparó en uno que no llevaba traje de fiesta y le dijo: “Amigo, ¿cómo has entrado aquí sin vestirte de fiesta?” El otro no abrió la boca. Entonces el rey dijo a los camareros: “Atenlo de pies y manos y arrójenlo fuera, a las tinieblas. Allí será el llanto y el rechinar de dientes.” Porque muchos son los llamados y pocos los escogidos.» Palabra del Señor. Meditación En la primera lectura, Dios a través del profeta Isaías nos deja claro cuánto nos ama y cuán grande es su misericordia para con nosotros. El profeta nos indica que hay un día especial donde Dios mismo nos tiene preparado un gran festín, en el que no habrá dolor, ni tristeza, ni sufrimiento y en el que la muerte del pecado será aniquilada, es decir, acabada, fulminada, destruida. Este día es el día de la Salvación que nos llega con Jesucristo. En su sacrificio de cruz vemos hasta dónde es capaz de llegar el amor de Dios por ti, por mí y por todos, un amor que sale a buscarnos allá donde el pecado nos tiene atrapados y nos libera de él, un amor que, en los momentos de prueba, de sufrimientos y adversidades enjuga nuestras lágrimas y se mantiene ahí con nosotros fortaleciéndonos. Así lo testifica San Pablo en la segunda lectura con su “todo lo puedo en Cristo que me fortalece”. Cuántas veces en la vida nos llegan situaciones que parecen desbordar todas nuestras capacidades para superarlas. Pensemos en las personas que sufren enfermedades terminales, la esposa que queda viuda con hijos aún pequeños, los padres que sufren la muerte de un hijo, situaciones económicas difíciles y un sin número de pruebas más. Son escenarios que llevan al límite a quien las vive y parecen terminar con todo aliento de victoria; sin embargo, cuántos testimonios de personas que han podido sobrellevarlas en paz, con fortaleza y con esperanza. Esto no es fruto de la casualidad ni resultado de mucha fuerza de voluntad, sino que es la acción de Dios obrando en el interior de cada uno, llenándolo de paz, entereza, mansedumbre, fuerza y quietud, cumpliendo así la promesa de que El estará con nosotros para siempre y que no nos abandona, sino que nos sostiene en la batalla y nos hace salir vencedores. Ahora bien, en nosotros está la decisión de atender al llamado de Dios y de atenderlo dignamente, como vemos en el Evangelio. El Señor nos invita a una boda con un gran banquete que es la vida de gracia y plenitud a la que nos llama. Lamentablemente muchas veces hacemos caso omiso a esta invitación ya sea por la rutina del día a día, por las distracciones del mundo o los problemas de la vida y dejamos pasar esta oportunidad de encontrarnos con Dios (lo más grande y hermoso que nos puede pasar). Otras veces decimos que sí al Señor pero no lo hacemos de manera radical sino más bien de una forma tibia que tampoco

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agrada al Señor, no estamos “vestidos de fiesta” es decir, con la voluntad firme de amar a Dios y dejar que Él nos transforme, y es entonces cuando el tiempo se nos acaba y sólo queda afrontar la consecuencia de nuestras acciones, ser arrojados allí “donde es el llanto y el rechinar de dientes”. Pidamos al Señor que es el más interesado en salvarnos y que siempre, siempre, siempre sale a buscarnos, que nos dé la gracia de responder con un sí sincero y decidido a su llamado de salvación, que también nos dé la gracia de siempre confiar y descansar en El, para así con mucha alegría y gozo cumplir con la misión que nos destinó desde la eternidad y poder disfrutar de su presencia por siempre. Oración de los Fieles El que preside: A Ti Padre Bueno que nos diste la gracia de responder a la invitación de la fiesta de tu Reino te suplicamos diciendo: Padre, que participemos siempre de la fiesta de tu Reino y seamos sus misioneros. Para que la Iglesia sea la gran misionera de la fiesta de tu Reino, llegue a todos tu amor y todos tengan la vestidura adecuada para entrar en ella. Oremos. Por quienes tienen el poder en República Dominicana, para que pongan su voluntad en encontrar los medios apropiados, para que la fiesta del Reino aumente en nosotros y desaparezca la violencia, la corrupción, el hambre y la miseria en nuestro país. Oremos. Por quienes están pasando dificultades económicas, por quienes carecen de trabajo y de lo necesario para llevar una vida digna, para que convocándolos a la fiesta del Reino seamos solidarios en sus luchas y en la solución de sus problemas. Oremos. Para que más jóvenes estén dispuestos a servir al Reino de Dios en el Sacerdocio y la Vida Consagrada. Oremos. Por esta Asamblea para que a través de la Misión Continental Permanente salga a los cruces de los caminos a invitar a nuestro pueblo a la fiesta del Señor. Oremos. El que preside: Acoge estas súplicas que te hemos manifestado y ya que nos invitaste al banquete de tu Reino sepamos responderte con frutos abundantes y nos mantengamos con la vestidura de tu amor. Por Jesucristo nuestro Señor. Oración sobre las ofrendas Con estas ofrendas, Señor, recibe las súplicas de tus hijos, para que esta eucaristía, celebrada con amor, nos lleve a la gloria del cielo. Por Jesucristo, nuestro Señor. Oración después de la comunión Dios soberano, te pedimos humildemente que, así nos alimentas con el Cuerpo y la Sangre de tu Hijo, nos hagas participar de su naturaleza divina. Por Jesucristo, nuestro Señor.

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16 Lunes

Feria o Memoria Libre: Santa Eduviges, Religiosa o Santa Margarita de Alacoque, Virgen Verde o Blanco

Comienzo de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos 1,1-7 Pablo, siervo de Cristo Jesús, llamado a ser apóstol, escogido para anunciar el Evangelio de Dios. Este Evangelio, prometido ya por sus profetas en las Escrituras santas, se refiere a su Hijo, nacido, según la carne, de la estirpe de David; constituido, según el Espíritu Santo, Hijo de Dios, con pleno poder por su resurrección de la muerte: Jesucristo, nuestro Señor. Por él hemos recibido este don y esta misión: hacer que todos los gentiles respondan a la fe, para gloria de su nombre. Entre ellos están también ustedes, llamados por Cristo Jesús. A todos los de Roma, a quienes Dios ama y ha llamado a formar parte de los santos, les deseo la gracia y la paz de Dios, nuestro Padre, y del Señor Jesucristo. Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 97,1-2-3ab.3cd-4 R/. El Señor da a conocer su victoria Canten al Señor un cantico nuevo, porque ha hecho maravillas: su diestra le ha dado la victoria, su santo brazo. R/. El Señor da a conocer su victoria, revela a las naciones su justicia: se acordó de su misericordia y su fidelidad en favor de la casa de Israel. R/. Los confines de la tierra han contemplado la victoria de nuestro Dios. Aclamen al Señor, tierra entera; griten, vitoreen, toquen. R/. Lectura del santo evangelio según san Lucas 11,29-32 En aquel tiempo, la gente se apiñaba alrededor de Jesús, y él se puso a decirles: «Esta generación es una generación perversa. Pide un signo, pero no se le dará más signo que el signo de Jonás. Como Jonás fue un signo para los habitantes de Nínive, lo mismo será el Hijo del hombre para esta generación. Cuando sean juzgados los hombres de esta generación, la reina del Sur se levantará y hará que los condenen; porque ella vino desde los confines de la tierra para escuchar la sabiduría de Salomón, y aquí hay uno que es más que Salomón. Cuando sea juzgada esta generación, los hombres de Nínive se alzarán y harán que los condenen; porque ellos se convirtieron con la predicación de Jonás, y aquí hay uno que es más que Jonás.» Palabra del Señor. Meditación En la Primera Lectura San Pablo escribe acerca del privilegio y la Misión que henos recibido de anunciar a los gentiles (los no creyentes) la Buena Nueva de que Cristo, el Hijo de Dios los ha liberado del pecado y los llama a formar parte de los santos, del pueblo escogido de Dios Padre. A veces nos quedamos en nuestras comunidades muy cómodos compartiendo con los creyentes, pero que hay de esos hijos de Dios que no conocen de él?, que están esperando que tú y que yo le mostremos el

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amor de Dios que sobrepasa todo nombre y que le mostremos nuestra fe para que al sentir el Amor de Dios, puedan responder a su llamado de vivir en la santidad que nos ofrece. El mundo está en completo caos, falta de amor, de valores, de perdón y lleno de odio y rencor, si nosotros hemos experimentado la Paz en medio de este caos, es nuestro deber como cristianos pasar a otros el Don y la Misión a aquellos que la necesitan para mostrarles la Gloria de Dios Padre. El Salmo nos muestra la Victoria más grande de toda la humanidad: “Dios nos ha regalado a su Hijo, para que Viva entre nosotros y que, por su sacrificio en la Cruz, nos salve del pecado”. Nos dice el salmista: El Señor da a conocer su victoria, que gran privilegio poder ser parte de los hijos de Dios que hemos visto la victoria de Dios, cantemos y alegrémonos pues Dios se acordó del dolor y el sufrimiento de sus hijos en la tierra y ha enviado a su Hijo para que vivamos Alegres Su Salvación. La lectura del Santo Evangelio demuestra como el corazón del hombre no se sacia de pedir signos y señales, siempre quiere más y más. A veces no nos detenemos a ver en nuestra vida, las pequeñas y grandes victorias que Dios nos ha dado, y ahora te pregunto: ¿Has reconocido el actuar de Dios en tu vida cotidiana con milagros de amor, de sanación de providencia económica? O a pesar de ver estos milagros diariamente, aún le sigues pidiendo: “Una señal” para saber si está contigo, si escuchó tu plegaria, si te ama; La respuesta es SI, Dios siempre está contigo. Dios siempre escucha tus plegarias, Dios siempre te ha amado y te ama, a pesar de que a veces tu preocupación no te permita verlo actuar, que Dios te permita en este día ser agradecido/a y visualizar las señales que te da constantemente y así puedas vivir en la alegría de que aunque a veces se tarde en responderte cómo quieres, EL siempre te escucha y te responde en su tiempo. 17

Memoria Obligatoria: San Ignacio de Antioquía, Obispo y Mártir

Martes

Rojo

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos 1,16-25 Hermanos: Yo no me avergüenzo del Evangelio; es fuerza de salvación de Dios para todo el que cree, primero para el judío, pero también para el griego. Porque en él se revela la justicia salvadora de Dios para los que creen, en virtud de su fe, como dice la Escritura: «El justo vivirá por su fe.» Desde el cielo Dios revela su reprobación de toda impiedad e injusticia de los hombres que tienen la verdad prisionera de la injusticia. Porque, lo que puede conocerse de Dios lo tienen a la vista; Dios mismo se lo ha puesto delante. Desde la creación del mundo, sus perfecciones invisibles, su poder eterno y su divinidad, son visibles para la mente que penetra en sus obras. Realmente no tienen disculpa, porque, conociendo a Dios, no le han dado la gloria y las gracias que Dios se merecía, al contrario, su razonar acabó en vaciedades, y su mente insensata se sumergió en tinieblas. Alardeando de

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sabios, resultaron unos necios que cambiaron la gloria del Dios inmortal por imágenes del hombre mortal, de pájaros, cuadrúpedos y reptiles. Por esa razón, abandonándolos a los deseos de su corazón, los ha entregado Dios a la inmoralidad, con la que degradan ellos mismos sus propios cuerpos; por haber cambiado al Dios verdadero por uno falso, adorando y dando culto a la criatura en vez de al Creador. ¡Bendito él por siempre! Amén. Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 18, 2-3.4-5 R/. El cielo proclama la gloria de Dios El cielo proclama la gloria de Dios, el firmamento pregona la obra de sus manos: el día al día le pasa el mensaje, la noche a la noche se lo susurra. R/. Sin que hablen, sin que pronuncien, sin que resuene su voz, a toda la tierra alcanza su pregón y hasta los límites del orbe su lenguaje. R/. Lectura del santo evangelio según san Lucas 11,37-41 En aquel tiempo, cuando Jesús terminó de hablar, un fariseo lo invitó a comer a su casa. Él entró y se puso a la mesa. Como el fariseo se sorprendió al ver que no se lavaba las manos antes de comer, el Señor le dijo: «Ustedes, los fariseos, limpian por fuera la copa y el plato, mientras por dentro rebosan de robos y maldades. ¡Necios! El que hizo lo de fuera, ¿no hizo también lo de dentro? Den limosna de lo de dentro, y lo tendrán limpio todo.» Palabra del Señor. Meditación En la lectura de la carta del apóstol San Pablo a los Romanos, San Pablo nos habla de que “el justo vivirá por su fe”, y qué significa la palabra justo: “Aquel que actúa con justicia”, siendo la justicia el Principio moral que inclina a obrar y juzgar respetando la verdad y dando a cada uno lo que le corresponde. Sabiendo lo que quieren decir estas palabras, vemos como actuando con justicia podremos ser justos ante Dios, él quiere que vivamos a la luz, que dejemos a un lado las tinieblas que quieren arropar el mundo, que podamos ser semilla de amor, de servicio, de paz, siendo defensores de los más pequeños, los que viven en injusticia social, aquellos que no tienen una voz para poder defenderse de sus opresores, y quienes son los opresores?, no son más que todos aquellos que abusan de su poder y causan dolor a las personas, aquellos maleantes, violadores, golpeadores, pero también nosotros podemos ser causantes de dolor si no corregimos con amor fraterno a nuestros hijos y más bien, les golpeamos con ira por sus errores; Cuando nos hacemos de la vista gorda, al ver la violencia intrafamiliar a nuestro alrededor, cuando nos quedamos dentro de nuestra burbuja y no salimos a defender los valores que se están “viendo como normal” en la vida cotidiana. El llegar a ser justos delante de Dios no es tan fácil, pero a la vez no es imposible si nos sensibilizamos con los demás y sus realidades, siendo piadosos, comprendiendo, entiendo y perdonando cada día, esperando

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que Dios al final de nuestros días, pueda vernos justos y dejarnos entrar a la Vida Eterna. El Santo Evangelio muestra la firmeza y dureza de las palabras de Jesús con los fariseos, y te has preguntado por qué Jesús era tan fuerte con ellos?, pues entiendo que Jesús prefiere la sinceridad a la hipocresía, la sencillez a la ostentosidad, la humildad a la arrogancia y el comportamiento de los fariseos era como los llamó una vez: “Sepulcros blanqueados”. Jesús ama a la persona humilde, que reconoce sus debilidades y no se fija tanto de los defectos de los demás, ama a la persona coherente que sigue los Mandamientos de Dios, pero no que juzga a quien no los cumpla, ama al que es puro de corazón y no trata con desdén al pobre y al desvalido sino que es justo con todos y es humilde de corazón. Que en este día le pidamos al Espíritu Santo que limpie nuestro corazón para que no salgan de nuestra boca palabras hirientes y para que en nuestros pensamientos estén los sentimientos que Jesús quiere que alberguemos como cristianos. 18 Miércoles

Fiesta: San Lucas, Evangelista Rojo

Lectura de la segunda carta del apóstol san Pablo a Timoteo 4,9-17a Querido Hermano: Dimas me ha dejado, enamorado de este mundo presente, y se ha marchado a Tesalónica; Crescente se ha ido a Galacia; Tito, a Dalmacia; sólo Lucas está conmigo. Coge a Marcos y tráetelo contigo, ayuda bien en la tarea. A Tíquico lo he mandado a Éfeso. El abrigo que me dejé en Troas, en casa de Carpo, tráetelo al venir, y los libros también, sobre todo los de pergamino. Alejandro, el metalúrgico, se ha portado muy mal conmigo; el Señor le pagará lo que ha hecho. Ten cuidado con él también tú, porque se opuso violentamente a mis palabras. La primera vez que me defendí, todos me abandonaron, y nadie me asistió. Que Dios los perdone. Pero el Señor me ayudó y me dio salud para anunciar íntegro el mensaje, de modo que lo oyeran los gentiles. Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 144,10-11.12-13ab.17-18 R/. Que tus fieles, Señor, proclamen la gloria de tu reinado Que todas tus criaturas te den gracias, Señor, que te bendigan tus fieles; que proclamen la gloria de tu reinado, que hablen de tus hazañas. R/. Explicando tus hazañas a los hombres, la gloria y majestad de tu reinado. Tu reinado es un reinado perpetuo, tu gobierno va de edad en edad. R/. El Señor es justo en todos sus caminos, es bondadoso en todas sus acciones; cerca está el Señor de los que lo invocan, de los que lo invocan sinceramente. R/. Lectura del santo evangelio según san Lucas 10,1-9 En aquel tiempo, designó el Señor otros setenta y dos y los mandó por delante, de dos en dos, a todos los pueblos y lugares adonde pensaba ir él.

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Y les decía: «La mies es abundante y los obreros pocos; rueguen, pues, al dueño de la mies que mande obreros a su mies. ¡Pónganse en camino! Miren que los mando como corderos en medio de lobos. No lleven talega, ni alforja, ni sandalias; y no se detengan a saludar a nadie por el camino. Cuando entren en una casa, digan primero: “Paz a esta casa.” Y si allí hay gente de paz, descansará sobre ellos su paz; si no, volverá a ustedes. Quédense en la misma casa, coman y beban de lo que tengan, porque el obrero merece su salario. No anden cambiando de casa. Si entran en un pueblo y los reciben bien, coman lo que les pongan, curen a los enfermos que haya, y digan: “Está cerca de ustedes el reino de Dios.”» Palabra del Señor. Meditación Hoy la iglesia celebra la fiesta de San Lucas Evangelista, autor del evangelio de Lucas y de los Hechos de los Apóstoles, según nuestra tradición. SAN LUCAS está presente en los momentos más importante del inicio del cristianismo; hombre de FE, bien instruido, que acompañó a PABLO en múltiples ocasiones. Las Lecturas de hoy están directamente relacionadas con el Lema, y el Valor de este mes:” Vayan y hagan discípulos de todos los pueblos” (Mt. 28, 19). En la Primera Carta de San Pablo a Timoteo, podemos ver como dentro de los muchos discípulos de Pablo, algunos lo abandonaron, pero otros fueron a llevar la Buena Nueva a otros pueblos. Jesús no nos dice que la Misión del discipulado será fácil, pero si nos dice que la recompensa será mayor, estar en el Cielo disfrutando de la Vida Eterna. Podemos pensar que ir a todos los pueblos a anunciar el Evangelio es tener que viajar por todo el país y la verdad es que cerca de nosotros hay personas que esperan del mensaje de Dios para sus vidas, que necesitan integrarse a una Iglesia, Comunidad, o Grupo de oración, donde puedan conocer más de Jesús y así dejar que el Espíritu Santo transforme sus vidas. Una forma sencilla de evangelizar es hacer una tarde de oración en nuestros hogares e invitar a los vecinos a pasar un rato y compartir una lectura sobre el Amor y Perdón de Dios. El Salmista también hace referencia a que proclamemos la Gloria del Reinado de Dios y a hablar de sus hazañas, diciendo al final del salmo:” El Señor está cerca de los que lo invocan sinceramente”, como si quisiera darnos ánimo en nuestra misión, para cuando llegue la desilusión humana del servicio, entonces lleguen fuerzas espirituales directamente del Todopoderoso y con nuevos bríos continuar con lo que nos ha encomendado. “La mies es abundante y los obreros pocos” …cada cristiano tiene diferentes dones, pero un mismo llamado: “Ser obreros en la obra de la construcción del reino de Dios”, haciendo que otros se conviertan de su vida pecaminosa y conozcan el amor tan grande que él les tiene y como

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desea recibirlos en un abrazo sanador. Podemos a veces como humanos, pensar que otras personas dentro de la iglesia no hacen nada y que nosotros estamos en muchos ministerios y cansados de nuestro servicio, pero es bueno que recordemos que Dios juzgará a cada uno según los talentos que les ha dado, sabiendo que nuestra recompensa es mayor que nuestro cansancio temporal. ¡Cuántas bendiciones disfrutamos los cristianos en nuestras actividades eclesiales! y cuántas personas hay con el corazón vacío sin conocer sobre la misericordia de Dios, ni de su Palabra, ni de sus Hazañas y milagros. Hoy el Evangelio nos dice: “Pónganse en camino!”. Así que desde donde estás actúa sin preocuparte por los talentos que te faltan, pues el Espíritu Santo irá transformando tu interior y te capacitará según las necesidades de Su Pueblo, y así tú puedas mostrar al mundo que “Jesús está Vivo”. Feria o Memoria libre: San Pedro de Alcántara, Presbítero o San Juan Brebeuf y San Isaac Jogues, Presbíteros y Compañeros Mártires o de San Pablo de la Cruz, Presbítero Jueves Verde, Blanco o Rojo 19

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos 3,21-30a Hermanos: Ahora, la justicia de Dios, atestiguada por la Ley y los profetas, se ha manifestado independientemente de la Ley. Por la fe en Jesucristo viene la justicia de Dios a todos los que creen, sin distinción alguna. Pues todos pecaron y todos están privados de la gloria de Dios, y son justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redención de Cristo Jesús, a quien Dios constituyó sacrificio de propiciación mediante la fe en su sangre. Así quería Dios demostrar que no fue injusto dejando impunes con su tolerancia los pecados del pasado; se proponía mostrar en nuestros días su justicia salvadora, demostrándose a sí mismo justo y justificando al que apela a la fe en Jesús. Y ahora, ¿dónde queda el orgullo? Queda eliminado. ¿En nombre de qué? ¿De las obras? No, en nombre de la fe. Sostenemos, pues, que el hombre es justificado por la fe, sin las obras de la Ley. ¿Acaso es Dios sólo de los judíos? ¿No lo es también de los gentiles? Evidente que también de los gentiles, si es verdad que no hay más que un Dios. Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 129,1-2.3-4.5 R/. Del Señor viene la misericordia, la redención copiosa Desde lo hondo a ti grito, Señor; Señor, escucha mi voz; estén tus oídos atentos a la voz de mi súplica. R/. Si llevas cuenta de los delitos, Señor, ¿quién podrá resistir? Pero de ti procede el perdón, y así infundes respeto. R/. Mi alma espera en el Señor, espera en su palabra; mi alma aguarda al Señor. R/.

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Lectura del santo evangelio según san Lucas 11,47-54 En aquel tiempo, dijo el Señor: «¡Ay de ustedes, que edifican mausoleos a los profetas, después que sus padres los mataron! Así son testigos de lo que hicieron sus padres, y lo aprueban; porque ellos los mataron, y ustedes les edifican sepulcros. Por algo dijo la sabiduría de Dios: “Les enviaré profetas y apóstoles; a algunos los perseguirán y matarán”; y así, a esta generación se le pedirá cuenta de la sangre de los profetas derramada desde la creación del mundo; desde la sangre de Abel hasta la de Zacarías, que pereció entre el altar y el santuario. Sí, se lo repito: se le pedirá cuenta a esta generación. ¡Ay de ustedes, maestros de la Ley, que se han quedado con la llave del saber; ustedes, que no han entrado y han cerrado el paso a los que intentaban entrar!» Al salir de allí, los escribas y fariseos empezaron a acosarlo y a tirarle de la lengua con muchas preguntas capciosas, para cogerlo con sus propias palabras. Palabra del Señor. Meditación Gracias Señor porque de ti viene la ¨redención copiosa¨. Gracias Señor porque ¨no llevas cuentas de mis pecados¨. Gracias Señor porque ¨de ti viene el perdón¨. Dios es un Dios de Perdón y esto sobre pasa todo entendimiento humano. No somos capaces de alcanzar la salvación por nuestra cuenta, ya que no hay obra que podamos hacer para ganarla, tampoco hay declaración que podamos hacer con nuestros labios que nos acerque a la vida eterna. El Evangelio nos recuerda que debemos corresponder a la misericordia que ha tenido con nosotros; por eso, no podemos quedarnos con todo lo que DIOS nos ha dado, no nos quedemos con la llave del saber, es necesario entrar, conocer y repartir en el mundo el conocimiento de CRISTO JESUS. En estos tiempos hay muchas personas que se consideran cristianas, pero viven una FE para ellos solamente. Hemos sido elegidos para llevar el mensaje, vamos a hacerlo con amor y fortaleza; pues la gente espera nuestra invitación, somos instrumento del SEÑOR para realizar la gran obra de la salvación. Dios quiere que le sirvamos, que nos entreguemos por completo a la gran Misión (Mt. 28,19 ¨Vayan y hagan discípulos por todos los pueblos¨), pero no lo pide como condición para la salvación, es todo lo contrario. Dios quiere que nos dejemos llenar de su gran Amor y es el Amor mismo que nos mueve a servirle, a expandir su reino Pidámosle a Dios la gracia de buscarle, la gracia de dejarnos alcanzar por su Amor, y pidámosle la gracia de servirle con alegría. Que no seamos como esos maestros de la ley que bloquean el acceso a Dios. Recordemos que muchas veces nuestro rostro será el único evangelio que algún desconocido leerá. No perdamos el tiempo en pensar que no puedo con esta carga, o que el camino al cielo es muy difícil y no llegaré. Jesús pagó por nuestros pecados y lleva nuestras cargas, el Espíritu Santo nos capacita, nos defiende y nos hace clamar al Padre que nunca nos abandona.

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20 Viernes

Feria Verde

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos 4,1-8 Hermanos: Veamos el caso de Abrahán, nuestro progenitor según la carne. ¿Quedó Abrahán justificado por sus obras? Si es así, tiene de qué estar orgulloso; pero, de hecho, delante de Dios no tiene de qué. A ver, ¿qué dice la Escritura?: «Abrahán creyó a Dios, y esto le valió la justificación.» Pues bien, a uno que hace un trabajo el jornal no se le cuenta como un favor, sino como algo debido; en cambio, a éste que no hace ningún trabajo, pero tiene fe en que Dios hace justo al impío, esa fe se le cuenta en su haber. También David llama dichoso al hombre a quien Dios otorga la justificación, prescindiendo de sus obras: «Dichoso el hombre que está absuelto de su culpa, a quien le han sepultado su pecado; dichoso el hombre a quien el Señor no le cuenta el pecado.» Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 31, 1-2.5.11 R/. Tú eres mi refugio, me rodeas de cantos de liberación Dichoso el que está absuelto de su culpa, a quien le han sepultado su pecado; dichoso el hombre a quien el Señor no le apunta el delito. R/. Había pecado, lo reconocí, no te encubrí mi delito; propuse: «Confesaré al Señor mí culpa», y tú perdonaste mi culpa y mi pecado. R/. Alégrense, justos, y gocen con el Señor; aclámenlo, los de corazón sincero. R/. Lectura del santo evangelio según san Lucas 12,1-7 En aquel tiempo, miles y miles de personas se agolpaban hasta pisarse unos a otros. Jesús empezó a hablar, dirigiéndose primero a sus discípulos: «Cuidado con la levadura de los fariseos, o sea, con su hipocresía. Nada hay cubierto que no llegue a descubrirse, nada hay escondido que no llegue a saberse. Por eso, lo que digan de noche se repetirá a pleno día, y lo que digan al oído en el sótano se pregonará desde la azotea. A ustedes les digo, amigos míos: no tengan miedo a los que matan el cuerpo, pero no pueden hacer más. Les voy a decir a quién tienen que temer: teman al que tiene poder para matar y después echar al infierno. A éste tienen que temer, se lo digo yo. ¿No se venden cinco gorriones por dos cuartos? Pues ni de uno solo se olvida Dios. Hasta los pelos de su cabeza están contados. Por lo tanto, no tengan miedo: no hay comparación entre ustedes y los gorriones.» Palabra del Señor. Meditación Jesús vino al mundo a salvarnos, no porque lo mereciéramos, si no, porque Él nos ama desde antes de crearnos y hasta el fin de los tiempos. Porque su misericordia no tiene fin. Entender que Dios murió para redimirnos de nuestros pecados sin nosotros siquiera pedirlo, pudiera ser

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difícil de asimilar y es por eso que Dios nos da un regalo, su Fe, ¨La certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve¨ Heb. 11,1. Es pues la Fe lo que nos hace seguir a un Dios que no merecemos, es la Fe lo que nos mueve a seguir luchando contra nuestras limitaciones, contra nuestro pecado, contra nuestras debilidades, contra los problemas de la vida. Es la Fe en el Gran Poder de Dios lo que nos hace ver milagros. ¨No te he dicho que si crees verás la gloria de Dios¨ Vivimos en un mundo lleno de fariseísmo, la práctica totalmente desligada de la palabra y el Señor nos llama a cuidarnos de las personas, lugares o situaciones que puedan lesionar nuestra vida espiritual. De todo aquello que puede arrasar la dignidad del ser humano. No llenarnos del ruido del mercado del mundo que vive gritando y vendiéndonos sus necias ideas. El individualismo en que vivimos afecta todas nuestras cosas, afecta hasta la visión de lo que hacemos y de nosotros mismos. Causa ceguera espiritual porque andamos en nuestra verdad. No en la verdad real, sino en la acomodada a nuestros gustos. El mensaje del cristianismo no es ambiguo, es uno solo y Cristo tiene sus criterios bien establecidos. Lo contario de la verdad es la mentira y la mentira siempre está disfrazada de empaques bonitos, tales como el individualismo y las explicaciones propias. Estamos en un mundo donde el que se dice creyente vive nadando en dos aguas, tenemos miedo porque no vivimos en la verdad. Si los criterios de Cristo no han cubierto todos los aspectos de nuestra vida significa que el Espíritu Santo no está haciendo su trabajo en nosotros, no está realizando el trabajo que está llamado a hacer. ¿Por qué no lo hace? Porque encuentra resistencia y esa resistencia solo la podemos vencer nosotros. Pidámosle a Dios que nos ayude a echar hacia adelante, echar hacia arriba, hacia la verdad, la verdad plena. La verdad viene de Dios. Por eso es por lo que Jesús nos dice hoy : no tengan miedo, vivan en la verdad. Vivir en la verdad no como si se tratase de una idea, no como un ejercicio mental o moral, sino vivir en la verdad. La verdad no es, si no es vivida; porque la verdad no es un concepto, la verdad es Dios. 21 Sábado

Feria Verde

Lectura de la carta de san Pablo a los Romanos 4, 13.16-18 Hermanos: No fue la observancia de la Ley, sino la justificación obtenida por la fe, la que obtuvo para Abrahán y su descendencia la promesa de heredar el mundo. Por eso, como todo depende de la fe, todo es gracia; así la promesa está asegurada para toda la descendencia, no solamente para la descendencia legal, sino también para la que nace de la fe de Abrahán, que es padre de todos nosotros. Así, dice la Escritura: «Te hago padre de muchos pueblos.» Al encontrarse con el Dios que da vida a los muertos y llama a la existencia lo que no existe, Abrahán creyó. Apoyado en la esperanza, creyó,

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contra toda esperanza, que llegaría a ser padre de muchas naciones, según lo que se le había dicho: «Así será tu descendencia.» Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 104, 6-7.8.9-,42-43ª R/ “El Señor se acuerda de su alianza eternamente.” ¡Estirpe de Abrahán, su siervo; hijos de Jacob, su elegido! El Señor es nuestro Dios, él gobierna toda la tierra. R/. Se acuerda de su alianza eternamente, de la palabra dada, por mil generaciones; de la alianza sellada con Abrahán, del juramento hecho a Isaac. R/. Porque se acordaba de la palabra sagrada qué había dado a su siervo Abrahán, sacó a su pueblo con alegría, a sus escogidos con gritos de triunfo. R/. Lectura del santo evangelio según san Lucas 12, 8-12 En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Si uno se pone de mi parte ante los hombres, también el Hijo del hombre se pondrá de su parte ante los ángeles de Dios. Y si uno me reniega ante los hombres, lo renegarán a él ante los ángeles de Dios. Al que hable contra el Hijo del hombre se le podrá perdonar, pero al que blasfeme contra el Espíritu Santo no se le perdonará. Cuando los conduzcan a la sinagoga, ante los magistrados y las autoridades, no se preocupen de lo que van a decir, o de cómo se van a defender. Porque el Espíritu Santo les enseñará en aquel momento lo que tengan que decir.». Palabra del Señor. Meditación Los judíos de la época de Pablo, miraban a Abrahán como su predecesor, pero Pablo reivindica la paternidad universal de Abrahán y la saca de los estrechos límites nacionalistas a que la había reducido el pueblo judío. Abrahán es el padre de todos nosotros que compartimos su fe. El salmista, en esa misma línea de Pablo, canta de júbilo diciendo que el Señor no se olvida de la alianza pactada con Abrahán: “Ni aunque transcurran mil generaciones, se olvidará el Señor de sus promesas, de la alianza pactada con Abrahán”. ¿Ha madurado y crecido en nosotros la fe recibida como don? ¿Qué provecho podemos sacar de esta primera lectura que nos presenta la Iglesia en el día de hoy? La fe es un don de Dios, que, en el día de hoy, damos gracias a Dios por haberla recibido gratuitamente a través de aquellos que nos formaron y nos educaron en la fe. El evangelista Lucas exhorta a la confesión sincera y sin temor del Hijo del hombre y promete una recompensa a los que proclamen la verdad y a la vez advierte del juicio que le espera a los que no lo hacen. La blasfemia contra el Espíritu Santo es imperdonable. Es la pérdida de la fe. Es un pecado imperdonable, no porque el Espíritu no perdone, sino porque el que lo comete rechaza convertirse. Se pone al margen de la gracia de Dios. El Espíritu Santo iluminará lo que se tiene que decir cuando se esté

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ante una situación hostil o ante las autoridades de este mundo. El cristiano es testigo de Cristo delante de los hombres. Lucas tiene ante sus ojos, al escribir, la experiencia de la comunidad primitiva, que estaba llamada a dar testimonio de Cristo en medio de la persecución y la hostilidad a los cristianos. “Recibirá cien veces más… y el Reino de Dios con persecuciones”. La entrada en el banquete del Reino de los Cielos lleva consigo las persecuciones por las que tendrá que atravesar el seguidor de Jesús. Siempre habrá situaciones hostiles a la fe, de manera especial si la Iglesia es fiel a su Señor. Sólo cuando le es infiel no es perseguida. Hoy es un buen día para renovar nuestra confianza en el Señor, sabernos amados y elegidos de Dios, renovar las fuerzas para seguir adelante, como dice San Pablo en Filipenses, hacia la meta, para alcanzar el premio al que Dios te llama. 22

XXIX Domingo del Tiempo Ordinario

Primera Semana Liturgia de las Horas

Verde

Domingo Mundial de las Misiones Misioneros del amor y de la gloria de Dios en toda la tierra Ambientación: Colocar las banderas de los países o los colores de los Continentes. Presentar los signos de la misión: sandalias, bastón, mochila…En las ofrendas se pueden presentar los 5 continentes con 5 vejigas de colores diferentes o con paños grandes (verde, rojo, amarillo, blanco y azul). Invitar a los que realizan alguna misión en la Iglesia y en la sociedad a ocupar los primeros asientos y darles una bendición especial con motivo del Día de las Misiones. Se puede colocar un mapa-mundi para recordar nuestros misioneros. Se hace el envío si se hace la Movida Misionera en este día. Monición de Entrada: Nos reunimos para celebrar la Eucaristía en este Domingo Mundial de las Misiones. La Iglesia, desde el principio quiere seguir el llamado de Jesús: “Vayan y proclamen el Evangelio a todas las naciones”. Por eso, dedicamos este día para orar por todos los misioneros y misioneras que dejando su patria van a diferentes países necesitados del Evangelio a servir al Señor y a dar a conocer que sólo el Señor es quien tiene todo el poder y la gloria. Al mismo tiempo en toda la Iglesia universal le ofrecemos nuestro apoyo espiritual y económico a todos aquellos misioneros que realizan su misión en los cinco continentes proclamando y testimoniando el Reino Dios.

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Hoy, tenemos muy presente a nuestros misioneros en la oración. Pedimos por ellos y también, le pedimos al Señor que nos regale de nuestras comunidades muchas vocaciones a la misión. Con alegría, sintiéndonos todos enviados por el Señor a proclamar su Evangelio, iniciemos nuestra celebración cantando a Jesucristo que llega a presidir esta Celebración a través de su ministro. Oración colecta Dios todopoderoso y eterno, te pedimos entregarnos a ti con fidelidad y servirte con sincero corazón. Por nuestro Señor Jesucristo. LITURGIA DE LA PALABRA Primera lectura: Isaías 45, 1. 4-6 Dios elige a Ciro, un rey extranjero y pagano para cumplir con una misión a favor de su pueblo. Somos misioneros suyos, para que toda la gente sepa que el poder y la gloria son del Señor y que todos los reyes de la tierra están para servirle a El y bajo su dominio.. Escuchemos Lectura del libro de Isaías 45,1.4-6 Así dice el Señor a su Ungido, a Ciro, a quien lleva de la mano: «Doblegaré ante él las naciones, desceñiré las cinturas de los reyes, abriré ante él las puertas, los batientes no se le cerrarán. Por mi siervo Jacob, por mi escogido Israel, te llamé por tu nombre, te di un título, aunque no me conocías. Yo soy el Señor y no hay otro; fuera de mí, no hay dios. Te pongo la insignia, aunque no me conoces, para que sepan de Oriente a Occidente que no hay otro fuera de mí. Yo soy el Señor, y no hay otro.» Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 95,1.3.4-5.7-8.9-10a.10e R/. Aclamen la gloria y el poder del Señor Canten al Señor un cántico nuevo, cantad al Señor, toda la tierra. Cuenten a los pueblos su gloria, sus maravillas a todas las naciones. R/. Porque es grande el Señor, y muy digno de alabanza, más temible que todos los dioses. Pues los dioses de los gentiles son apariencia, mientras que el Señor ha hecho el cielo. R/. Familias de los pueblos, aclamen al Señor, aclamen la gloria y el poder del Señor, aclamen la gloria del nombre del Señor, entren en sus atrios trayéndole ofrendas. R/. Póstrense ante el Señor en el atrio sagrado, tiemble en su presencia la tierra toda; digan a los pueblos: «El Señor es rey, él gobierna a los pueblos rectamente.» R/. Segunda lectura: Tesalonicenses 1, 1-5b Como Pablo, Silvano y Timoteo, tres misioneros de los primeros momentos, animémonos a realizar hoy la misión de Cristo, con palabras, con la fuerza del Espíritu Santo, convicción profunda y con las obras. Escuchemos. .

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Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Tesalonicenses 1,1-5b Pablo, Silvano y Tirnoteo a la Iglesia de los tesalonicenses, en Dios Padre y en el Señor Jesucristo. A ustedes, gracia y paz. Siempre damos gracias a Dios por todos ustedes y les tenemos presentes en nuestras oraciones. Ante Dios, nuestro Padre, recordarnos sin cesar la actividad de su fe, el esfuerzo de su amor y el aguante de su esperanza en Jesucristo, nuestro Señor. Bien sabemos, hermanos amados de Dios, que él los ha elegido y que, cuando se proclamó el Evangelio entre ustedes, no hubo sólo palabras, sino además fuerza del Espíritu Santo y convicción profunda. Palabra de Dios. Aleluya Brillan como lumbreras del mundo, mostrando una razón para vivir. Evangelio: Mateo 22,15-21 Todo misionero y misionera está llamado a proclamar que somos la imagen de Dios y que a El pertenecemos completamente y que damos a los gobernantes lo que le corresponde, pero siempre libres para servir en todo a Dios. Escuchemos. Lectura del santo evangelio según san Mateo 22,15-21 En aquel tiempo, se retiraron los fariseos y llegaron a un acuerdo para comprometer a Jesús con una pregunta. Le enviaron unos discípulos, con unos partidarios de Herodes, y le dijeron: «Maestro, sabemos que eres sincero y que enseñas el camino de Dios conforme a la verdad; sin que te importe nadie, porque no miras lo que la gente sea. Dinos, pues, qué opinas: ¿es licito pagar impuesto al César o no?» Comprendiendo su mala voluntad, les dijo Jesús: «Hipócritas, ¿por qué me tientan? Enséñenme la moneda del impuesto.» Le presentaron un denario. Él les preguntó: «¿De quién son esta cara y esta inscripción?» Le respondieron: «Del César.» Entonces les replicó: «Pues páguenle al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios.» Palabra del Señor. Meditación Gracias Señor por este día y por lo que tu palabra traerá a nuestras vidas. Dios amado, permite que tengamos oídos y corazones atentos a escuchar tu mensaje, comprenderlo, hacerlo nuestro para así realizar la misión para la cual hemos sido elegidos. Ciro, ungido de Dios, fue dotado de cualidades para cumplir la misión que Dios le había encomendado, liberar a su pueblo de las manos de Babilonia. Ciro, fue elegido, fue llamado por su nombre, aún sin conocer a Dios, le fue preparado el terreno y el camino despejado para que obtuviera el triunfo y de esta manera liberara a Israel. Dios tiene el poder de realizar

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grandes cosas aun con aquellos que no le conocen y tú que le conoces, ¿ya estas cumpliendo la misión para la cual fuiste elegido? En este día Dios nos habla y nos recuerda que también al igual que Ciro, él tiene una misión única y especial para cada uno de nosotros. Hay personas que piensan que no están dotados de ningún don especial para poner al servicio de la iglesia y por esto muchas veces no participan activamente en la misma, prefieren apartarse y no involucrarse por el temor de no ser capaz de realizar lo que se le pide, muchas veces prefieren quedarse en un lugar de la iglesia donde no se note su presencia, oran en su casa, pero no experimentan el amor y la fraternidad de vivir en comunidad. Dios te ha capacitado para dar mucho más, al crearte pensó en algo grande para ti, no te quiere solo y apartado, te quiere viviendo y compartiendo los dones que te ha dado. Empecemos con el don más hermoso y grande que hemos recibido el amor; cuantas personas en tu familia, en tu trabajo, en tu sector se sienten solos, tristes, abatidos ¿Qué podrías hacer para que sientan que Dios está cerca de ellos, que los ama? Dios te dice yo soy Dios y no hay otro igual fuera de mí, yo te he elegido, te he llamado por tú nombre, eres mío, me perteneces; Te necesito para que seas mis manos, ojos, pies, brazos, para que tu mirada refleje mi amor y tu sonrisa la alegría que siento al ver a mis hijos, hoy quiero que vayas en busca de aquellos que me necesitan, y buscan una palabra de aliento, de esperanza en medio de la tempestad, una mano amiga que lo ayude a continuar; No tengas miedo, yo te capacito para que cumplas mi misión y te he dejado la fuerza del Espíritu Santo. Hoy que celebramos el día de mundial de las misiones, sin temor y amor ardiente digámosle al Señor: Estoy aquí para hacer tú voluntad, no temo más, cumpliré la misión que me has encomendado. Oración de los Fieles El que preside: Padre, que quieres que todos los hombres y mujeres conozcan la verdad y se salven, te suplicamos diciendo: Que todos los pueblos reconozcan tu poder y tu gloria. Para que la Iglesia sea libre e independiente de todo poder político y económico y pueda llevar con toda libertad el mensaje de salvación a todo el mundo a través de sus misioneros y misioneras. Oremos. Para que sepamos cumplir como ciudadanos responsables el pago de los impuestos al Gobierno y que ellos sepan distribuir las riquezas del país entre todos y todas. Oremos. Por los más pobres de las naciones que sirven los misioneros y misioneras, para que hagan llegar a ellos el consuelo amoroso de Dios y promueven una vida digna como Dios quiere. Oremos. Por los misioneros y misioneras que están cumpliendo su misión en lugares lejanos y difíciles, para que se sientan apoyados y vean los frutos de su trabajo. Oremos.

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Por la Misión en nuestras diócesis y parroquias, para que seamos misioneros y misioneras que salimos a evangelizar a los alejados y perdidos. Oremos. Por esta Asamblea, para que nos comprometamos a trabajar en nuestra Diócesis y parroquia a fin de lograr una Iglesia alegre, comprometida con la realidad y misionera. Oremos. Quien preside: Escucha, Padre, estas oraciones y atiende a todas las necesidades, principalmente a las de los misioneros y misioneras. Te lo pedimos por Jesucristo nuestro Señor. Oración sobre las ofrendas Concédenos, Señor, ofrecerte estos dones con un corazón libre para que tu gracia pueda purificarnos en estos misterios que ahora celebramos. Por Jesucristo, nuestro Señor. Oración después de la comunión La participación frecuente en esta Eucaristía nos sea provechosa, Señor, para que disfrutemos de tus beneficios en la tierra y crezca nuestro conocimiento de los bienes del cielo. Por Jesucristo, nuestro Señor. 23 Lunes

Feria o Memoria Libre: San Juan de Capistrano, Presbítero Verde o Blanco

Lectura de la carta de san Pablo a los Romanos 4, 20-25 Hermanos: Ante la promesa de Dios Abrahán no fue incrédulo, sino que se hizo fuerte en la fe, dando con ello gloria a Dios, al persuadirse de que Dios es capaz de hacer lo que promete, por lo cual le valió la justificación. Y no sólo por él está escrito: «Le valió», sino también por nosotros, a quienes nos valdrá si creemos en el que resucitó de entre los muertos a nuestro Señor Jesús, que fue entregado por nuestros pecados y resucitado para nuestra justificación. Palabra de Dios. Interleccional: Lucas 1,69-75 R/. Bendito sea el Señor, Dios de Israel, porque ha visitado a su pueblo Nos ha suscitado una fuerza de salvación en la casa de David, su siervo, según lo había predicho desde antiguo por boca de sus santos profetas. R/. Es la salvación que nos libra de nuestros enemigos y de la mano de todos los que nos odian; realizando la misericordia que tuvo con nuestros padres, recordando su santa alianza. R. Y el juramento que juró a nuestro padre Abrahán. Para concedernos que, libres de temor, arrancados de la mano de los enemigos, le sirvamos con santidad y justicia, en su presencia, todos nuestros días. R/.

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Lectura del santo evangelio según san Lucas 12, 13-21 En aquel tiempo, dijo uno del público a Jesús: «Maestro, dile a mi hermano que reparta conmigo la herencia.» Él le contestó: «Hombre, ¿quién me ha nombrado juez o árbitro entre ustedes?» Y dijo a la gente: «Miren: guárdense de toda clase de codicia. Pues, aunque uno ande sobrado, su vida no depende de sus bienes.» Y les propuso una parábola: «Un hombre rico tuvo una gran cosecha. Y empezó a echar cálculos: “¿Qué haré? No tengo donde almacenar la cosecha.” Y se dijo: “Haré lo siguiente: derribaré los graneros y construiré otros más grandes, y almacenaré allí todo el grano y el resto de mi cosecha. Y entonces me diré a mí mismo: Hombre, tienes bienes acumulados para muchos años; túmbate, come, bebe y date buena vida.” Pero Dios le dijo: “Necio, esta noche te van a exigir la vida. Lo que has acumulado, ¿de quién será?” Así será el que amasa riquezas para sí y no es rico ante Dios.» Palabra del Señor. Meditación Amado Dios, ven a nosotros, ilumina nuestra mente y corazón para que descubramos que tu palabra es fuente de amor y gracia en la cual encontramos la paz, el gozo y la vida verdadera. Fe, pequeña palabra que nos lleva a tener confianza plena en Dios, ayudándonos a enfrentar tempestades, derribar muros, a saber, esperar y descansar en sus brazos, sin desesperar, ni rendirse. Abraham, padre de la fe, fue capaz de dejar su tierra donde tenía una vida segura y estable, por obediencia a Dios; sin preguntar, ni poner excusas, Abraham tomo lo que tenía y se aventuró a lo desconocido, porque creía en las promesas que Dios le había hecho. Abraham mantuvo su confianza en Dios y sus promesas, a pesar del tiempo que tuvo que esperar para verlas cumplidas y de que no existían posibilidades humanas para que estas promesas se hicieran realidad, él se cuestionaba: ¿cómo tendría una descendencia numerosa? Abraham era un anciano y su esposa no podía tener hijos, pero decidió seguir creyendo, porque conocía a Dios. El pasaje evangélico de hoy, sobre la avaricia y la parábola del rico que agranda sus graneros, es propia de Lucas. El deseo de un hombre anónimo de dividir la herencia por igual con su hermano expresa su fuerte interés por los bienes materiales en detrimento del interés por Dios. Jesús no vino a dividir sino precisamente a liberarnos de lo que nos divide. Por eso Jesús le responde llamando “codicia, avidez y arrogancia” su justicia. Jesús parte de este ejemplo para dar una enseñanza a la totalidad de los discípulos, quienes también sufren del mismo mal. Esta parábola también describe a la persona que hace consistir la propia seguridad en la acumulación de bienes. Es decir, en el que hace depender la vida de lo que tiene, en lugar de hacerla depender de lo que es. Es hijo/a de Dios y no debe sustituir al Padre por las cosas que Él le da. Si hacemos

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depender la vida de lo que tenemos, destruimos lo que somos. Los bienes materiales dan muerte, por cuanto han sido acumulados por miedo a la muerte y dan la vida por cuanto son compartidos con los hermanos más necesitados. Que nuestra fe se mantenga viva y ardiente, a pesar de las circunstancias, porque sabemos qué somos hijos del todopoderoso, y todo lo que permite obrará para nuestro bien, que estas palabras hoy nos sirvan para seguir creyendo en sus promesas y saber esperar confiados, así como lo hizo Abraham, aunque no lo entendamos, aunque no lo veamos, caminamos firme junto a él, viviendo la alegría de ser sus hijos amados y colaborando en la construcción de su reino. 24 Martes

Feria o Memoria Libre: San Antonio María Claret, Obispo Verde o Blanco

Lectura de la carta de san Pablo a los Romanos 5,12.15b.17-19.20b-21 Hermanos: Lo mismo que por un hombre entró el pecado en el mundo, y por el pecado la muerte, y así la muerte pasó a todos los hombres, porque todos pecaron. Si por culpa de uno murieron todos, mucho más, la gracia otorgada por Dios, el don de la gracia que correspondía a un solo hombre, Jesucristo, sobró para la multitud. Por el delito de un solo hombre comenzó el reinado de la muerte, por culpa de uno solo. Cuanto más ahora, por un solo hombre, Jesucristo, vivirán y reinarán todos los que han recibido un derroche de gracia y el don de la justificación. En resumen: si el delito de uno trajo la condena a todos, también la justicia de uno traerá la justificación y la vida. Si por la desobediencia de uno todos se convirtieron en pecadores, así por la obediencia de uno todos se convertirán en justos. Si creció el pecado, más desbordante fue la gracia. Y así como reinó el pecado, causando la muerte, así también, por Jesucristo, nuestro Señor, reinará la gracia, causando una justificación que conduce a la vida eterna. Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 39,7-8ª,8b-9.10.17 R/ “Aquí estoy, Señor, para hacer tú voluntad” Tú no quieres sacrificios ni ofrendas, y, en cambio, me abriste el oído; no pides sacrificio expiatorio, entonces yo digo: «Aquí estoy.» R/. «–Como está escrito en mi libro– para hacer tu voluntad.» Dios mío, lo quiero, y llevo tu ley en las entrañas. R/. He proclamado tu salvación ante la gran asamblea; no he cerrado los labios: Señor, tú lo sabes. R/. Alégrense y gocen contigo todos los que te buscan; digan siempre: «Grande es el Señor» los que desean tu salvación. R/. Lectura del santo evangelio según san Lucas 12,35-38 En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Tengan ceñida la cintura y encendidas las lámparas. Ustedes están como los que aguardan a que su

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señor vuelva de la boda, para abrirle apenas venga y llame. Dichosos los criados a quienes el señor, al llegar, los encuentre en vela; les aseguro que se ceñirá, los hará sentar a la mesa y los irá sirviendo. Y, si llega entrada la noche o de madrugada y los encuentra así, dichosos ellos.» Palabra del Señor. Meditación Ven Señor, toma nuestra mente, corazón y voluntad para que sepamos escuchar tú palabra y hacer vida el mensaje que tienes para nosotros en este día. El vivir preparados y vigilantes porque no sabemos el día y la hora en la cual seremos llamados a la presencia de Dios, no quiere decir, que vivamos con temor o preocupación. El vivir preparado es vivir plena e intensamente junto a Dios, buscando agradarle, estando atento a lo que él nos pide y haciendo de cada día, una nueva oportunidad para ir en busca de aquellos que necesiten. La vida del cristiano es una carrera continua de perseverancia y resistencia que nos llevará a encontrarnos un día con el Señor cara a cara y deleitarnos en su presencia. No importa la cantidad de kilómetros recorridos, ni la velocidad a la que vamos, lo que importa es estar junto a Dios y para él en este caminar, hacernos uno con Cristo para ser testigo de su amor. Para recorrer el camino de Dios, debemos estar dispuesto a obedecer, dejando al Señor actuar en nosotros y a través de nosotros, teniendo un corazón dispuesto a escucharlo, capaz de poner los sueños de Dios por encima de los nuestros. Muchos son los testimonios (Virgen María, Abraham, Pablo…) que aparecen en la biblia, donde vemos a Dios actuando y manifestando su gloria a través de aquellos que fueron capaces de obedecer, la obediencia trae consigo bendiciones, Dios solo quiere lo mejor para nosotros. Obedecer es abandonarnos confiados en los brazos del Señor, sin obediencia, no hay forma de servir y agradar a Dios; el Señor no quiere holocaustos, ni sacrificios sino un corazón, obediente y misericordioso que pueda decir aquí estoy Señor para hacer tu voluntad. El Señor dio su vida por amor a ti e intenta por todos los medios de que puedas vivir la verdadera alegría que da el saberse hijos amados de Dios, de que vivas una vida plena con propósitos, en la cual disfrutes de la paz y el gozo que solo viene de él. Al obedecer dejamos que el Señor sea el dueño y Señor de nuestras vidas, poniéndonos a su servicio y dejando todo aquello que nos aleja de su amor y su voluntad. En este día Señor queremos pedirte que vengas a nosotros y nos muestres cuales son aquellas cosas que nos atan y no permiten seguirte con libertad, que hacen nuestro camino pesado, cuesta arriba, que han hecho que en ocasiones quitemos nuestra mirada de ti y nos paremos a mitad del camino, llenándonos de desesperanza y desconsuelo.

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Pidamos a la virgen María como modelo de obediencia que nos permita saber escuchar a Dios y podamos decir como ella “aquí está la esclava del Señor, hágase en mí según tu palabra”. Que el Señor nos bendiga, nos guarde y nos lleve a la vida eterna. 25 Miércoles

Feria Verde

Lectura de la carta de san Pablo a los Romanos 6, 12-18 Hermanos: Que el pecado no siga dominando su cuerpo mortal, ni sean súbditos de los deseos del cuerpo. No pongan sus miembros al servicio del pecado, como instrumentos para la injusticia; ofrezcan a Dios como hombres que de la muerte han vuelto a la vida, y pongan a su servicio sus miembros, como instrumentos para la justicia. Porque el pecado no los dominará: ya no están bajo la Ley, sino bajo la gracia. Pues, ¿qué? ¿Pecaremos porque no estamos bajo la Ley, sino bajo la gracia? ¡De ningún modo! ¿No saben que, al ofrecerlos a alguno como esclavos para obedecerle, los hacen esclavos de aquel a quien obedecen: bien del pecado, para la muerte, bien de la obediencia, para la justicia? Pero, gracias a Dios, ustedes, que eran esclavos del pecado, han obedecido de corazón a aquel modelo de doctrina al que fueron entregados y, liberados del pecado, los han hecho esclavos de la justicia. Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 123, 1-3.4-6.7-8 R/ “Nuestro auxilio es el nombre del Señor.” Si el Señor no hubiera estado de nuestra parte –que lo diga Israel–, si el Señor no hubiera estado de nuestra parte, cuando nos asaltaban los hombres, nos habrían tragado vivos: tanto ardía su ira contra nosotros. R/. Nos habrían arrollado las aguas, llegándonos el torrente hasta el cuello; nos habrían llegado hasta el cuello las aguas espumantes. Bendito el Señor, que no nos entregó en presa a sus dientes. R/. Hemos salvado la vida, como un pájaro de la trampa del cazador; la trampa se rompió, y escapamos. Nuestro auxilio es el nombre del Señor, que hizo el cielo y la tierra. R/. Lectura del santo evangelio según san Lucas 12, 39-48 En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Comprendan que si supiera el dueño de casa a qué hora viene el ladrón, no le dejaría abrir un boquete. Lo mismo ustedes, estén preparados, porque a la hora que menos piensen viene el Hijo del hombre.» Pedro le preguntó: «Señor, ¿has dicho esa parábola por nosotros o por todos?» El Señor le respondió: «¿Quién es el administrador fiel y solícito a quien el amo ha puesto al frente de su servidumbre para que les reparta la ración a sus horas? Dichoso el criado a quien su amo, al llegar, lo encuentre portándose así. Les aseguro que lo pondrá al frente de todos sus bienes.

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Pero si el empleado piensa: “Mi amo tarda en llegar”, y empieza a pegarles a los mozos y a las muchachas, a comer y beber y emborracharse, llegará el amo de ese criado el día y a la hora que menos lo espera y lo despedirá, condenándolo a la pena de los que no son fieles. El criado que sabe lo que su amo quiere y no está dispuesto a ponerlo por obra recibirá muchos azotes; el que no lo sabe, pero hace algo digno de castigo, recibirá pocos. Al que mucho se le dio, mucho se le exigirá; al que mucho se le confió, más se le exigirá.». Palabra del Señor. Meditación “Nuestro auxilio es el nombre del Señor. ”, esta es la frase que hoy hemos repetido en el Salmo responsorial, ¡que alivio! ¡que alegría! Nos ha tocado vivir en tiempos en los cuáles el demandante día a día muchas veces nos envuelve en su rutina y sin darnos cuenta vamos perdiendo la libertad que ya Jesús nos ha ganado. La vida de hoy nos entretiene, nos distrae, de manera que olvidamos con frecuencia la verdad de la salvación en Cristo. Sin embargo, es Él nuestro auxilio, es el mismo Dios, que en su eterna misericordia, evita que nos volvamos esclavos de nuestra realidad mundana que nos quiere apartar de la misión encomendada a todos aquellos que hemos sido tocados por su amor y hemos aceptado su salvación, anunciar que Cristo está vivo. Habiendo sido nosotros rescatados, estamos llamados vivir en libertad, en desapego de las cosas que nos atan a la realidad del mundo, a los deseos egoístas, de ambición desmedida, al quererme satisfacer yo en todo sin fijarme en el sacrificio que hago de los demás o en que sencillamente los aplaste para lograr lo que quiero. Nuestro llamado es a anunciar la buena nueva de Dios siendo testimonios vivos. Es el mismo Señor que nos ayuda a ser bondadosos, a ser desinteresados, a realizar obras de misericordia, a sacrificar mi crecimiento individual por el bien común. Es Él que nos ayuda a realizar la labor que nos encomendó. El llamado que recibimos por medio de la palabra es a estar atentos, vigilantes, pues nos dice el mismo Señor “estén preparados porque cuando menos los piensen llegara el Hijo del hombre”. El propio Jesús llama dichosos aquellos que en el momento del encuentro cara a cara con el Padre puedan exhibir de manera humilde y sincera lo poco que hizo para extender el Reino de Dios aquí en la tierra, no en un lugar lejano sino en su familia, en su lugar de trabajo, en su comunidad. Es una alegría el saber que es el mismo Dios que nos ayuda a mantenernos firmes ante los momentos de debilidad. Es un alivio poder contar con sus fuerzas para mantener la libertad ya ganada en la cruz. Es la mejor noticia saber que es El Señor es nuestra ayuda, quien pone en nosotros la chispa que nos lleva a servirle, a buscarle y a dejarnos cargar en sus brazos. Nuestra ayuda viene del que conoce nuestra necesidad y nuestra debilidad, de aquel que nos hizo y nos rescató, del que nos encomendó hacer lo que cada cual puede.

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Fijemos pues nuestra atención en el Señor, sirviéndole con alegría y acudiendo a Él cada vez que nos creamos incapaces de lograr con nuestras fuerzas lo que debemos alcanzar cuando estamos en Él. 26 Jueves

Feria Verde

Lectura de la Carta del Apóstol San Pablo a los Romanos 6, 19-23 Hermanos: Uso un lenguaje corriente, adaptándome a su debilidad, propia de hombres; quiero decir esto: si antes cedieron sus miembros como esclavos a la inmoralidad y al desorden, para el desorden total, pónganlos ahora al servicio de la justicia para su santificación. Cuando eran esclavos del pecado, la justicia no los gobernaba. ¿Qué frutos daban entonces? Frutos de los que ahora se avergüenzan, porque acaban en la muerte. Ahora, en cambio, emancipados del pecado y hechos esclavos de Dios, producen frutos que llevan a la santidad y acaban en vida eterna. Porque el pecado paga con muerte, mientras que Dios regala vida eterna por medio de Cristo Jesús, Señor nuestro. Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 1,1-2.3.4.6 R/. Dichoso el hombre que ha puesto su confianza en el Señor Dichoso el hombre que no sigue el consejo de los impíos, ni entra por la senda de los pecadores, ni se sienta en la reunión de los cínicos; sino que su gozo es la ley del Señor, y medita su ley día y noche. R/. Será como un árbol plantado al borde de la acequia: da fruto en su sazón y no se marchitan sus hojas; y cuanto emprende tiene buen fin. R/. No así los impíos, no así; serán paja que arrebata el viento. Porque el Señor protege el camino de los justos, pero el camino de los impíos acaba mal. Lectura del santo evangelio según san Lucas 12, 49-53 En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «He venido a prender fuego en el mundo, ¡y ojalá estuviera ya ardiendo! Tengo que pasar por un bautismo, ¡y qué angustia hasta que se cumpla. ¿Piensan que he venido a traer al mundo paz? No, sino división. En adelante, una familia de cinco estará dividida: tres contra dos y dos contra tres; estarán divididos el padre contra el hijo y el hijo contra el padre, la madre contra la hija y la hija contra la madre, la suegra contra la nuera y la nuera contra la suegra.». Palabra del Señor. Meditación La venida del Salvador al mundo ha representado para la humanidad un antes y un después, nos ha provisto de unos lentes nuevos que nos permiten ver la cosas de una manera diferente. Nos dice el mismo Jesús que no ha venido a traer paz, sino más bien división. Jesús ha llegado para

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transformar nuestros pensamientos; algunos han decidido probarse esos lentes y comenzar a ver la vida de la manera en la que nos la presenta Cristo, no obstante otros, se niegan a aceptar esa realidad de la salvación y siguen sumergidos en un mundo de obscuridad al cual quieren atraer a otros. Esta es la división que se presenta, el contraste entre aquel que ha acogido la buena nueva en su corazón y el que la rechaza. Nuestra sociedad experimenta la dura realidad de una disputa entre aquellos que se cierran a Dios y que desean vivir en el caos y aquellos que desean asegurar por los medios que tengan a su alcance que la semilla de la palabra de Dios encuentre tierra fértil para crecer, desarrollarse y dar buen fruto en aquellos que aún no tienen el carácter suficiente ni la experiencia de vida necesaria para reconocer el buen y el mal fruto que el mundo le ofrece. Es nuestra responsabilidad mantenernos conectados a la fuente del amor, a la orilla del río de la Gracia de Dios, de manera que podamos resistir a cualquier cambio socio-cultural y a su tiempo le brindemos a la sociedad un fruto agradable al paladar, atractivo a la vista de quienes lo observen, producto de una relación sólida y estable con Dios. Mantengamos nuestra vida, unida a Dios, por medio de la oración, la asistencia frecuente a los sacramentos, la formación, el servicio, apelando a su misericordia siempre, esta será la garantía de que el fruto que demos sea bueno. Cuando aceptamos la salvación en Jesús, aceptamos ser trasplantados a la orilla de esa fuente de vida. Mantener nuestra confianza en el Señor es lo que luego nos va a permitir se cuidados por él, ser podados, nuestras raíces abonadas y nuestra hojas limpiadas y en el tiempo de Dios daremos su fruto. Hace tiempo mi padre me dijo: “mi hijo, que sólo el pesar de los años te obligue a bajar tu mirada”. No te limites en el Señor, aliméntate de Él, sírvele, búscalo en tu despertar día a día, infla tu pecho de su presencia y el te recompensará. Ofrezcamos pues a la sociedad la alternativa adecuada, permitámosle al Señor que nos levante, entre la gran variedad de alternativas, permitiéndonos ser el lugar donde otros encuentren la protección y el descanso; que podamos brindar frutos de madurez espiritual que sirvan de sustento a nuestra comunidad como consecuencia de haber confiado siempre en su auxilio salvador. 27 Viernes

Feria Verde

Lectura de la carta de san Pablo a los Romanos 7, 18-25 Hermanos: Sé muy bien que no es bueno eso que habita en mí, es decir, en mi carne; porque el querer lo bueno lo tengo a mano, pero el hacerlo, no. El bien que quiero hacer no lo hago; el mal que no quiero hacer, eso es lo que hago. Entonces, si hago precisamente lo que no quiero, señal que

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no soy yo el que actúa, sino el pecado que habita en mí. Cuando quiero hacer lo bueno, me encuentro inevitablemente con lo malo en las manos. En mi interior me complazco en la ley de Dios, pero percibo en mi cuerpo un principio diferente que guerrea contra la ley que aprueba mi razón, y me hace prisionero de la ley del pecado que está en mi cuerpo. ¡Desgraciado de mí! ¿Quién me librará de este cuerpo presa de la muerte? Dios, por medio de nuestro Señor Jesucristo, y le doy gracias.! Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 118,66.68.76.77.93.94 R/. Instrúyeme, Señor, en tus leyes Enséñame a gustar y a comprender, porque me fío de tus mandatos. R/. Tú eres bueno y haces el bien; instrúyeme en tus leyes. R/. Que tu bondad me consuele, según la promesa hecha a tu siervo. R/. Cuando me alcance tu compasión, viviré, y mis delicias serán tu voluntad. R/. Jamás olvidaré tus decretos, pues con ellos me diste vida/. Soy tuyo, sálvame, que yo consulto tus leyes. R/. Lectura del santo evangelio según san Lucas 12, 54-59 En aquel tiempo, decía Jesús a la gente: «Cuando ven subir una nube por el poniente, dicen en seguida: “Chaparrón tenemos”, y así sucede. Cuando sopla el sur, dicen: “Va a hacer bochorno”, y lo hace. Hipócritas: si saben interpretar el aspecto de la tierra y del cielo, ¿cómo no saben interpretar el tiempo presente? ¿Cómo no saben juzgar ustedes mismos lo que se debe hacer? Cuando te diriges al tribunal con el que te pone pleito, haz lo posible por llegar a un acuerdo con él, mientras van de camino; no sea que te arrastre ante el juez, y el juez te entregue al guardia, y el guardia te meta en la cárcel. Te digo que no saldrás de allí hasta que no pagues el último céntimo.» Palabra del Señor. Meditación Las palabras de Pablo en la primera lectura son el ejemplo más sincero y claro de nuestra entera dependencia de la misericordia de Dios para mantenernos en el camino de la santidad. Por nuestros propios medios somos incapaces de no sucumbir ante la constante tentación. Nuestra inclinación natural al pecado sobrepasa nuestra voluntad más no excede la gracia de Dios, nunca será mayor que la misericordia divina. Constantemente nos vemos separados de la experiencia del amor de Dios por nuestro descuido y a la vez terquedad de no recurrir a la misericordia y querer pelear nosotros la batalla contra el pecado. “Soy tuyo, sálvame, pues voy buscando tus leyes” dice uno de los versos del Salmo; esta debe ser nuestra constante actitud: buscar conocer más los preceptos del Señor y apelar constantemente a su misericordia. ¿Por qué, pues, no juzgan por ustedes mismos lo que les conviene hacer ahora? Porque muchas veces no somos capaces de ver lo inminente,

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ver que vamos directamente a irnos por el precipicio, no podemos siquiera darnos cuenta que no estamos haciendo lo correcto. ¡Enséñame a buscarte! ¡Muéstrame tus preceptos! Dame tu gracia. Esta es la constante súplica que debemos hacer al Señor. El no quiere que pagues ningún centavo por razón de tu adversario que te venció, Jesús desea que apeles siempre a su gracia, que recuerdes que ya el saldó en la cruz la deuda causada por tu pecado. Sencillamente debemos pedirle diariamente: Señor muéstranos tu gracia y danos tu misericordia. Pidámosle que nos permita experimentar nueva vez su mano que nos lleva sobre la tentación, sobre la duda, sobre el peligro. Recordemos que nada nos podrá separar de su amor manifestado en Cristo Jesús, siempre y cuando nos abandonemos a esa Gracia. Volviendo a las palabras de Pablo, estas nos evocan esperanza. Antes que mantenerme en la aflicción y la frustración de no poder vencer la tentación, debemos tener la certeza de que Dios nos ofrece su ayuda siempre y nos saca del pecado. Esta es nuestra esperanza y nuestra verdad que Jesús nos ha salvado y que somos libres del pecado. Vivamos pues con el deseo de conocer con claridad sus preceptos, con el anhelo de querer ser fiel a Él, reconociendo en todo momento que Él es el único bueno y capaz y que siempre está presto a brindarnos auxilio cuando no estamos cumpliendo sus mandatos. Sólo con su gracia nos basta. Oremos con la oración de San Anselmo: “Enséñame a buscarte y muéstrate a quien te busca; porque no puedo ir en tu busca a menos que tú me enseñes, y no puedo encontrarte si tú no te manifiestas. Deseando te buscaré, buscando te desearé, amando te hallaré y hallándote te amaré”. No podemos hacer nada fuera de su gracia y todo dentro de ella. 28 Sábado

Fiesta: San Simón y San Judas, Apóstoles Rojo

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Efesios 2,19-22 Hermanos: Ya no son extranjeros ni forasteros, sino que son ciudadanos de los santos y miembros de la familia de Dios. Están edificados sobre el cimiento de los apóstoles y profetas, y el mismo Cristo Jesús es la piedra angular. Por él todo el edificio queda ensamblado, y se ha levantado hasta formar un templo consagrado al Señor. Por él también ustedes se van integrando en la construcción, para ser morada de Dios, por el Espíritu. Palabra de Dios. Salmo Responsorial:18, 2-3.4-5.6 R./ “A toda la tierra alcanza su pregón”. El cielo proclama la gloria de Dios, el firmamento pregona la obra de sus manos: el día al día le pasa el mensaje, la noche a la noche se lo susurra. R/ Sin que hablen, sin que pronuncien, sin que resuene su voz, a toda la tierra alcanza su pregón y hasta los límites del orbe su lenguaje. R/.

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Lectura del santo evangelio según san Lucas 6,12-19 En aquel tiempo, subió Jesús a la montaña a orar, y pasó la noche orando a Dios. Cuando se hizo de día, llamó a sus discípulos, escogió a doce de ellos y los nombró apóstoles: Simón, al que se puso de nombre Pedro, y Andrés, su hermano, Santiago, Juan, Felipe, Bartolomé, Mateo, Tomás, Santiago Alfeo, Simón, apodado el Celotes, Judas el de Santiago y Judas Iscariote, que fue el traidor. Bajó del monte con ellos y se paró en un llano, con un grupo grande de discípulos y de pueblo, procedente de toda Judea, de Jerusalén y de la costa de Tiro y de Sidón. Venían a oírlo y a que los curara de sus enfermedades; los atormentados por espíritus inmundos quedaban curados, y la gente trataba de tocarlo, porque salía de él una fuerza que los curaba a todos. Palabra del Señor. Meditación Cuando Jesús iba a tomar decisiones importantes, o se iba a enfrentar a pruebas (como su Pasión, o las tentaciones del desierto), era común verlo pasar un tiempo a solas con el Padre orando. Siempre buscando la Presencia de Dios en cada decisión. Cuando tienes que decidir algo importante, ¿consultas con tu Señor? ¿dedicas tiempo a hacer silencio, para discernir la voluntad de Dios, o pedir la luz del Espíritu? No siempre percibimos una respuesta rápida de parte de Dios, pero una cosa es segura: Si entregamos a El nuestras decisiones, estas serán bendecidas por El. ¿Y qué pasa cuando No escuchamos Nada, cuando sentimos que Dios “no dijo nada”? en ese momento podemos tomar la decisión que traiga mayor paz a nuestro corazón, y confiar en que Dios ha bendecido nuestra inteligencia, aunque No lo hayamos sentido. Jesús pasó la noche orando, y escogió a 12 discípulos para convertirlos en Apóstoles, es decir, sus delegados, los encargados de la Iglesia. Sus generales más importantes. Pero de entre ellos, hubo uno que fue el Traidor que lo entregó, Judas Iscariote. Parecería que Jesús se equivocó eligiendo a Judas, pero No: Jesús respeta nuestra libertad. Y además Judas siempre recibió la Gracia de Dios para obrar el bien y para arrepentirse del mal, es decir que si obró mal, fue enteramente su decisión. Y otra cosa muy importante: Dios siempre tiene el Poder para producir un Bien Mayor, en medio de las situaciones de maldad (por su dolorosa Pasión, Muerte y Resurrección fuimos salvados). ¿Te ha pasado que a veces has tomado algunas decisiones aparentemente equivocadas, aún después de haber orado? ¿Cómo respondemos a esto? Los caminos de Dios son misteriosos, y No todo sale como lo previmos. Lo primero es tener confianza en la Providencia de Dios, que siempre tiene el Poder de sacar un bien Mayor detrás de cada situación dolorosa o indeseada. Luego podemos evaluar si podemos revertir o modificar la decisión tomada. Si esto No es posible sin causar mayores daños a uno mismo o a los demás, entonces debemos abandonarnos absolutamente en las manos

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del Señor, y pedirle que, con su Poder, saque el Mayor Bien posible de toda circunstancia. Si aprendemos a poner nuestras decisiones en manos de Dios, y aprendemos a abandonarnos confiados en su Amor, entonces podremos salir victoriosos de toda situación en nuestras vidas. Y podremos junto con el cielo “proclamar la gloria de Dios y pregonar la obra de sus manos”. Aleluya! 29

XXX Domingo del Tiempo Ordinario

II Semana Liturgia de las Horas Verde Día de la Caminata Mariana en la Arquidiócesis de Santo Domingo y en otras Diócesis y Parroquias Somos misioneros del amor de Dios y a los demás Ambientación: Colocar en lugar visible el lema de este domingo. Llevar en la procesión de entrada unos cuantos periódicos junto a la Biblia y al Rosario. Hacer papelitos para cada uno con el mandato del Señor. Se pueden llevar signos que expresen el amor a Dios y a los hermanos. Monición de entrada Hoy celebramos el Trigésimo Domingo del Tiempo Ordinario y el ultimo del mes de octubre, en el cual hemos sido enviados a participar de la Misión de toda la iglesia con el lema “Vayan y hagan discípulos de todos los pueblos” (Mt 28,19). En este último Domingo del mes de Octubre ofrezcamos al Señor todos los frutos que hemos cosechado con nuestro trabajo misionero, en nuestras familias, nuestros Sectores y parroquia, a través de las visitas a los hogares y el rezo del Santo Rosario. La Palabra nos recuerda que la misión constante y permanente será predicar con el testimonio y con `palabras el gran mandato del amor total y absoluto a Dios al mismo tiempo que amamos a los hermanos y a nosotros mismos. Es lo que Jesús nos enseñó con su propia vida y que se actualiza en cada Eucaristía, que iniciamos con cantos de alegría aclamándolo a El que que viene a presidir nuestra celebración a través de su ministro. Oración colecta Dios todopoderoso y eterno, aumenta nuestra fe, esperanza y caridad, y, para conseguir tus promesas, concédenos amar tus preceptos. Por nuestro Señor Jesucristo.

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LITURGIA DE LA PALABRA Primera Lectura: Éxodo 22, 20-26 Todo el libro del Éxodo nos cuenta el compromiso de Dios con su pueblo y presenta un conjunto de mandamientos sociales que expresan que amarlo a El pasa por el amor a los demás especialmente por los más pobres. Escuchemos con atención. Lectura del libro del Éxodo 22,20-26 Así dice el Señor: «No oprimirás ni vejarás al forastero, porque forasteros fueron ustedes en Egipto. No explotarás a viudas ni a huérfanos, porque, si los explotas y ellos gritan a mí, yo los escucharé. Se encenderá mi ira y los haré morir a espada, dejando a sus mujeres viudas y a sus hijos huérfanos. Si prestas dinero a uno de mi pueblo, a un pobre que habita contigo, no serás con él un usurero, cargándole intereses. Si tomas en prenda el manto de tu prójimo, se lo devolverás antes de ponerse el sol, porque no tiene otro vestido para cubrir su cuerpo, ¿y dónde, si no, se va a acostar? Si grita a mí, yo lo escucharé, porque yo soy compasivo.» Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 17,2-3a.3bc-4.47.51ab R/. Yo te amo, Señor; tú eres mi fortaleza Yo te amo, Señor; tú eres mi fortaleza; Señor, mi roca, mi alcázar, mi libertador. R/. Dios mío, peña mía, refugio mío, escudo mío, mi fuerza salvadora, mi baluarte. Invoco al Señor de mi alabanza y quedo libre de mis enemigos. R/. Viva el Señor, bendita sea mi Roca, sea ensalzado mi Dios y Salvador. Tú diste gran victoria a tu rey, tuviste misericordia de tu Ungido. R/. Segunda Lectura Tesalonicenses 1, 5c-10. El misionero como Pablo se alegra por los frutos de su predicación en Tesalónica, pero se alegra más, porque los que se han convertido a Cristo se vuelven ellos misioneros por medio de su testimonio de vida. Escuchemos. Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Tesalonicenses 1,5c-10 Saben cuál fue nuestra actuación entre ustedes para su bien. Y ustedes siguieron nuestro ejemplo y el del Señor, acogiendo la palabra entre tanta lucha con la alegría del Espíritu Santo. Así llegaron a ser un modelo para todos los creyentes de Macedonia y de Acaya. Desde su Iglesia, la palabra del Señor ha resonado no sólo en Macedonia y en Acaya, sino en todas partes. Su fe en Dios había corrido de boca en boca, de modo que nosotros no teníamos necesidad de explicar nada, ya que ellos mismos cuentan los detalles de la acogida que nos hicieron: cómo, abandonando los ídolos, se volvieron a Dios, para servir al Dios vivo y verdadero, y vivir aguardando la vuelta de su Hijo Jesús desde el cielo, a quien ha resucitado de entre los muertos y que nos libra del castigo futuro. Palabra de Dios.

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Aleluya El que me ama guardará mi palabra -dice el Señor-, y mi Padre lo amará, y vendremos a él. Evangelio: Mateo 22, 34-40 Todos somos misioneros con palabras y obras de este gran y único mandamiento del amor a Dios y a los demás que El nos regaló como hermanos. Escuchemos. Lectura del santo evangelio según san Mateo 22,34-40 En aquel tiempo, los fariseos, al oír que Jesús había hecho callar a los saduceos, formaron grupo, y uno de ellos, que era experto en la Ley, le preguntó para ponerlo a prueba: «Maestro, ¿cuál es el mandamiento principal de la Ley?» Él le dijo: «“Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con todo tu ser.” Este mandamiento es el principal y primero. El segundo es semejante a él: “Amarás a tu prójimo como a ti mismo.” Estos dos mandamientos sostienen la Ley entera y los profetas.» Palabra del Señor. Meditación Es famosa la frase de San Agustín “Ama y haz lo que quieras”. Esta es la primacía del Amor. Si podemos resumir Todo el Evangelio en una sola palabra, esta sería sin duda “Amor”. Pero amor a qué o a quiénes? El Evangelio de hoy nos da la respuesta: Amar a Dios sobre todas las cosas y amar al prójimo como a mí mismo. La frase completa de San Agustín es: “Ama y haz lo que quieras. Si callas, callarás con amor; si gritas, gritarás con amor; si corriges, corregirás con amor; si perdonas, perdonarás con amor. Si tienes el amor arraigado en ti, ninguna otra cosa sino amor serán tus frutos”. Como podemos ver es un amor que No es egoísta, no busca su propio bien, sino que fija su Mirada en el Señor y lo que a El le agrada, y luego es un amor que busca el bien del prójimo, sobre todo al prójimo más necesitado como nos recuerda la primera lectura. Y el alma que No es egoísta, que busca agradar y amar a Dios, y amar al prójimo como a sí misma, es un alma que encuentra su propia plenitud y realización. En cambio, el alma que busca su propio bien primero, que se pone en el centro, y deja que el egoísmo corroa su interior, es un alma que termina triste, insatisfecha e infeliz. Pero tampoco es un amor “dulzón” que nunca corrige, que solo Acepta al hermano como es, y le celebra su error. El verdadero Amor, la verdadera Misericordia Acoge, pero No solo acoge. También el amor verdadero ilumina la conciencia, sana, levanta, instruye y finalmente envía. Eso quiere decir que si verdaderamente amamos al hermano, seremos capaces de acogerlo tal como es, pero también nos ocuparemos de iluminarle la conciencia, Sanar sus heridas (como el Buen Samaritano),

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Levantarlo, Instruirlo y Enviarlo a la misión. Todo esto con amor, paciencia y compasión, respetando el proceso de crecimiento de cada persona. Todo esto lo entendí mejor cuando me convertí en padre de dos niñas. Usualmente tenía una partida de dinero mensual para mis propios gustos (helados, ropa, salidas, etc.), pero a partir del nacimiento de mis hijas, la prioridad del presupuesto pasó a ser la leche de las niñas, su salud, su vestimenta y su Seguridad, junto con las necesidades de mi esposa. Luego, si queda dinero, entonces tomo algo para mí. Pero esto No me produce ninguna ansiedad. De hecho, saber que están bien y tienen todo lo que necesitan, es mi mayor satisfacción (encuentro gozo y plenitud en la felicidad de ellas, aunque compre menos cosas para mí). También entendí mejor que El que Corrige, Ama. El Padre Nos Ama, y como nos Ama, Nos Corrige. A mí me importan mis hijas, las amo. Por eso las cuido y las corrijo de las cosas que le pueden hacer daño (Normalmente son cosas como: No te subas allí, No comas eso, Obedece a tu mama, Comparte con tus amiguitos, etc.). Para ellas resulta molestoso que las corrija, pero yo sé que es para su bienestar. No tengamos miedo de amar, de darnos al prójimo con un amor real, y cuando sea necesario corregir, hagámoslo con amor. Amén. Oración de los Fieles El que preside: Padre, te pedimos con toda confianza a una sola voz: Padre, que te amemos sobre todo y que nos amemos unos a otros Por el Papa, los obispos, sacerdotes y todos los miembros de tu Iglesia, para que con palabras y obras enseñemos vivir el mandamiento primero y único del amor. Oremos. • Para que en todas las naciones se ame a Dios sobre todo realizando su voluntad y amándonos unos a otros. Oremos. • Para que en nuestros corazones y en nuestros hogares demostremos el amor a Dios, compartiendo nuestros bienes y a nosotros mismos con los más pobres, los que viven en soledad y los que sufren. Oremos. • Para que esta comunidad aquí reunida se convierta en comunidad de misioneros y misioneras que viven y enseñan a vivir el mandamiento principal de amor a Dios y a los hermanos. Oremos. • Por nuestros jóvenes, para que de ellos el Señor llame a muchos, para proclamar su Palabra como misioneros hasta los confines de la tierra. Oremos. El que preside: Padre, escucha nuestras oraciones y danos la gracia de amarte y servirte sobre todas las cosas y amar con tú mismo amor a quienes nos ha dado como hermanos y hermanas. Por Jesucristo nuestro Señor. Oración sobre las ofrendas Vuelve tu mirada, Señor, sobre las ofrendas que te presentamos, para que nuestra celebración sea para tu gloria y tu alabanza. Por Jesucristo, nuestro Señor.

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Oración después de la comunión Lleva a su término en nosotros, Señor, lo que significan estos sacramentos, para que un día poseamos plenamente cuanto celebramos ahora en estos ritos sagrados. Por Jesucristo, Señor nuestro. 30 Lunes

Feria Verde

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos 8,12-17 Estamos en deuda, pero no con la carne para vivir carnalmente. Pues si viven según la carne, van a la muerte; pero si con el Espíritu dan muerte a las obras del cuerpo, vivirán. Los que se dejan llevar por el Espíritu de Dios, ésos son hijos de Dios. Han recibido, no un espíritu de esclavitud, para recaer en el temor, sino un espíritu de hijos adoptivos, que nos hace gritar: «¡Abba!» (Padre). Ese Espíritu y nuestro espíritu dan un testimonio concorde: que somos hijos de Dios; y, si somos hijos, también herederos; herederos de Dios y coherederos con Cristo, ya que sufrimos con él para ser también con él glorificados. Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 67, 2 y 4,.6-7ab.20-21 R/ Nuestro Dios es un Dios que salva Se levanta Dios, y se dispersan sus enemigos, huyen de su presencia los que lo odian. En cambio, los justos se alegran, gozan en la presencia de Dios, rebosando de alegría. R/. Padre de huérfanos, protector de viudas, Dios vive en su santa morada. Dios prepara casa a los desvalidos, libera a los cautivos y los enriquece. R/. Bendito el Señor cada día, Dios lleva nuestras cargas, es nuestra salvación. Nuestro Dios es un Dios que salva, el Señor Dios nos hace escapar de la muerte. R/. Lectura del santo evangelio según san Lucas13, 10-17 Un sábado, enseñaba Jesús en una sinagoga. Había una mujer que desde hacía dieciocho años estaba enferma por causa de un espíritu, y andaba encorvada, sin poderse enderezar. Al verla, Jesús la llamó y le dijo: «Mujer, quedas libre de tu enfermedad.» Le impuso las manos, y en seguida se puso derecha. Y glorificaba a Dios. Pero el jefe de la sinagoga, indignado porque Jesús había curado en sábado, dijo a la gente: «Seis días tienen para trabajar; vengan esos días a que los curen, y no los sábados.» Pero el Señor, dirigiéndose a él, dijo: «Hipócritas: cualquiera de ustedes, ¿no desata del pesebre al buey o al burro y lo lleva a abrevar, aunque sea sábado? Y a ésta, que es hija de Abrahán, y que Satanás ha tenido atada dieciocho años, ¿no había que soltarla en sábado?» A estas palabras, sus enemigos quedaron abochornados, y toda la gente se alegraba de los milagros que hacía. Palabra del Señor

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Meditación Es especialmente reconfortante la Carta a los Romanos, y especialmente el capítulo 8, donde el Señor nos llama a tomar la dignidad de hijos de Dios, y a vivir según el Espíritu. San Pablo escribió desde Corinto, en el invierno del año 57-58, la Carta a los Romanos, para preparar su llegada a Roma, donde ya había un buen número de cristianos, que procedían del judaísmo y del paganismo. Y contrapone el Apóstol dos modos de vida: vivir según la carne o vivir según el espíritu. ¿Qué significa “vivir según la carne”? Consiste en dejarse vencer y guiar por las pasiones desordenadas. “Los que viven según la carne no pueden agradar a Dios” y el fruto de este modo de vida es la esclavitud del pecado y la muerte. “Vivir según el espíritu” significa buscar a Dios por encima de todas las cosas y luchar, con su Gracia, contra la propia inclinación al mal y al pecado. Esta tarea sería imposible, si contásemos sólo con nuestras fuerzas, pero Cristo ha venido en la carne para condenar el pecado y para darnos su Espíritu. La vida en el Espíritu es un yugo llevadero y una carga ligera, porque brota del Corazón manso y humilde de nuestro Redentor; de Aquél que nos dice, a nosotros que con frecuencia vivimos inmersos en las preocupaciones de este mundo, con la tentación de pensar que este mundo es lo único que existe: “Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados y yo os aliviaré”. 18 años es mucho tiempo. Para alguien enfermo o aquejado de alguna dolencia física o emocional, es una verdadera prueba de persistencia. Tratemos de imaginar la situación de la mujer encorvada: seguramente ya estaba resignada a morir con su enfermedad, acostumbrada a mirar hacia abajo, con la autoestima destruida, siempre caminando despacio y sin esperanzas de encontrar solución… hasta que se encontró con Jesús. El Evangelio nos narra que Jesús AL VERLA, la llamó y la sanó. No importó que era sábado, que era día de reposo, o que habían fariseos que le iban a reclamar por esto. Sí, hay ocasiones en que Jesús simplemente “Nos ve” y nos sana. Esta mujer No tuvo que suplicar mucho, no tuvo que hacer grandes demostraciones de fe, ni demostrar que era “buena” o merecedora de la compasión. Simplemente el Poder y la Misericordia de Dios la alcanzaron. Pidamos hoy con Fe al Señor que “nos Mire”. Que ponga su Mirada en nuestro dolor o situación desesperada, y que simplemente muestre su Amor y su Misericordia para con nosotros. Con la certeza de que Jesús nos escucha y nos sana. Amén.

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Feria

Martes Verde o Blanco 8º Aniversario de la muerte de Mons. Roque Adames Rodríguez, Obispo Emérito de Santiago de los Caballeros. Verde o Blanco O Bien: Se puede celebrar como clausura del mes del Rosario la Memoria: Nuestra Señora del Rosario Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos 8,18-25 Hermanos: Sostengo que los sufrimientos de ahora no pesan lo que la gloria que un dia se nos descubrirá. Porque la creación, expectante, está aguardando la plena manifestación de los hijos de Dios; ella fue sometida a la frustración, no por su voluntad, sino por uno que la sometió; pero fue con la esperanza de que la creación misma se vería liberada de la esclavitud de la corrupción, para entrar en la libertad gloriosa de los hijos de Dios. Porque sabemos que hasta hoy la creación entera está gimiendo toda ella con dolores de parto. Y no sólo eso; también nosotros, que poseemos las primicias del Espíritu, gemimos en nuestro interior, aguardando la hora de ser hijos de Dios, la redención de nuestro cuerpo. Porque en esperanza fuimos salvados. Y una esperanza que se ve ya no es esperanza. ¿Cómo seguirá esperando uno aquello que ve? Cuando esperamos lo que no vemos, aguardamos con perseverancia. Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 125,1-2ab.2cd-3.4-5.6 R/. El Señor ha estado grande con nosotros Cuando el Señor cambió la suerte de Sión, nos parecía soñar: la boca se nos llenaba de risas, la lengua de cantares. R/. Hasta los gentiles decían: «El Señor ha estado grande con ellos.» El Señor ha estado grande con nosotros, y estamos alegres. R/. Que el Señor cambie nuestra suerte, como los torrentes del Negueb. Los que sembraban con lágrimas cosechan entre cantares. R/. Al ir, iba llorando, llevando la semilla; al volver, vuelve cantando, trayendo sus gavillas. R/. Lectura del santo evangelio según san Lucas 13,18-21 En aquel tiempo, decía Jesús: «¿A qué se parece el reino de Dios? ¿A qué lo compararé? Se parece a un grano de mostaza que un hombre toma y siembra en su huerto; crece, se hace un arbusto y los pájaros anidan en sus ramas.» Y añadió: «¿A qué compararé el reino de Dios? Se parece a la levadura que una mujer toma y mete en tres medidas de harina, hasta que todo fermenta.» Palabra del Señor. Meditación Porque la creación, expectante, está aguardando la plena manifestación de los hijos de Dios…..así es hermanos en Cristo, en la lectura el Apóstol San Pablo, muestra como en nuestra vida de fe, vamos descubriendo

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como la transformación que Dios se va realizando en nosotros, alcanza a quienes nos rodean, a veces de forma sutil, y en otras ocasiones de forma más impactante. Hay hambre, hay sed, el mundo necesita que los hijos de Dios se manifiesten, que se muestren al mundo. En medio de sus circunstancias, con humildad, con libertad, con dignidad. Y aunque las tentaciones, y los sufrimientos que se van presentando pueden impedir temporalmente que gocemos de la gloria de Dios que ha de manifestarse, la obra de Dios sigue su curso inquebrantable, impostergable, transformando la vida de sus hijos. En el Santo Evangelio según San Lucas el Señor Jesús, que es infinitamente bueno, utiliza la parábola del grano de mostaza, una semilla tan pequeña que luego produce un árbol tan grande. Pero para que esta semilla pueda llegar allí necesita morir, debe quebrantarse, solo así puede transformarse en un árbol tan frondoso, que se convierte en hogar escogido de muchas aves. Así, en nuestras vidas, luego de momentos de profundo dolor es cuando más crecemos en nuestro interior. Y al ver la semilla de mostaza llega a mi mente la palabra humildad, pequeñez, y es que allí en lo pequeño, en lo sencillo, se manifiesta la grandeza de la obra transformadora de Dios. La parábola de la mujer que introduce un poco de levadura en las 3 medidas de harina y logra fermentarla, nos muestra como esa levadura actúa, provoca el cambio. Pero es la harina la que cambia, es la harina la que se ensancha, es la harina la que crece. Así es Dios no se impone, te toca, se acerca y te muestra su mensaje de esperanza y te deja en libertad. En medio de la situación que estés pasando y en medio de tu realidad de dolor, Dios se manifiesta. Y su presencia viva nos proclama que por mucho que podamos sufrir en este mundo terrenal será poco, será nada, comparado con la dicha inmensurable que viviremos en el cielo junto a Él, en su reino. Hoy es un día maravilloso. Hoy Jesús te muestra una nueva oportunidad para experimentar la victoria de Dios en tu vida, hoy se manifiesta el tesoro inmenso de nuestra fe. Hermano, hermana, urge fermentar el mundo con nuestras vidas, en medio de nuestras circunstancias. No esperemos la vida perfecta, la circunstancia perfecta, comencemos hoy, allí donde estas, en la escasez o en la abundancia, permitamos a otros conocer su obra, permitamos a Dios proclamar su victoria, proclamemos todo lo que Dios ha transformado, restaurado, sanado, y que con ello la Salvación alcance a otros y su gloria se manifieste. Permitamos que más hermanos puedan gritar a viva voz “El Señor ha estado grande con nosotros y estamos alegres”.

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OCTUBRE TERMINA PERO LA MISION SE SIGUE De manera especial a través de LA MISION CONTINENTAL PERMANENTE COMO UN PROCESO DE INICIACIÖN CRISTIANA EN 4 ETAPAS Y CAMINANDO AL RITMO DEL PLAN NACIONAL Y DIOCESANO DE PASTORAL La Iniciación Cristiana es un proceso pedagógico por el cual se va introduciendo a una persona y a un grupo de personas en la vida cristiana de modo que se vuelvan “discípulos y misioneros que respondan a la vocación recibida y comuniquen por doquier, por desborde de gratitud y alegría, el don del encuentro con Jesucristo” (DA 14). La Misión sigue las cuatro etapas propias de la Iniciación Cristiana tal como la propone el Ritual de Iniciación Cristiana (RICA) 1. PRIMERA ETAPA: ANUNCIO DEL KERIGMA, que se inicia con la preparación a la Misión, el visiteo a las casas, el anuncio del Kerygma en la CASA MISION, el inicio de las pequeñas comunidades y se prolonga hasta el Retiro del Compromiso. Su duración mínima es de 6 meses. 2. SEGUNDA ETAPA: DISCIPULADO, que comprende 7 unidades o 7 pasos de profundización de la fe que se inicia con la Historia de la Salvación hasta llegar a la oración cristiana. Su duración mínima es de 7 años. 3. TERCERA ETAPA: ILUMINACION, PURIFICACION, RECEPCION DEL BAUTISMO Y RENOVACION PROMESAS BAUTISMALES. Se realizará en el Tiempo de Cuaresma después de terminar el Discipulado y culminará en la Pascua. 4. CUARTA ETAPA: MYSTAGOGIA. Comienza en el Tiempo de Pascua y en ella profundizamos el misterio de nuestra salvación celebrado en los sacramentos y nos disponemos a la misión permanente en nuestra vida. Su duración mínima es seis meses. Luego continúa la Catequesis permanente. Este proceso se realiza en pequeñas comunidades que una vez iniciadas realizan todo este proceso. Por supuesto que no que hay que esperar que acabe todo ese proceso para comenzar otro grupo o comunidad. Al contrario, cada año o dos veces al año se realiza la

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Misión en su Primera Etapa para iniciar el proceso con nuevas personas, de modo que en unos años la Parroquia se convierta en COMUNIDAD DE COMUNIDADES que están en diferentes etapas. PARA REALIZAR ESTA MISION PERMANENTE SE NECESITA: 1. Los misioneros y misioneras. Los mejores misioneros y misioneras son los que han vivido la experiencia de haber recibido la Misión y están viviendo en comunidad. Por eso, los misioneros y misioneras deben estar en comunidad. El primer y principal curso para misionero o misionera es vivir la experiencia de la Misión y estar en comunidad. Así comunicará una experiencia y no una teoría. De ahí, que la primera misión se realiza con un pequeño equipo parroquial que proclama el Kerygma y da inicio a las primeras comunidades. Después de un año, se tendrán muchos más misioneros. 2. Formación y preparación de cada Misión en los que todos los misioneros y misioneras viven de nuevo la experiencia del anuncio del Kerygma predicado para ellos. Para cada tema se forman equipos que lo comunican a los demás. 3. Definir la sectorización y la red de mensajeros para que podamos llegar a más personas y familias. 4. Organización para la Misión y sus cuatro Etapas a nivel arquidiocesano, diocesano, zonal y parroquial. 5. Equipos de Seguimiento a las comunidades en sus diferentes etapas. De los que están en comunidad y se les nota con liderazgo, un mejor nivel de formación, espíritu de fe, madurez y buenas relaciones con los demás se eligen y se preparan para ser el Equipo de Seguimiento de las Comunidades y con ellos se conforma la Comisión Parroquial de Comunidades y sus Equipos Especializados en cada Retiro.

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