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eDITORIALeS | CARTAS
| Viernes 6 de febrero de 2015
Fundado por Bartolomé Mitre el 4 de enero de 1870 Número 1, Año 1 “la nacion será una tribuna de doctrina” Director: Bartolomé Mitre
La Argentina pierde libertad económica En el último índice de Heritage Foundation, nuestro país ha vuelto a mostrar un claro retroceso, manteniéndose entre las economías denominadas reprimidas
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lo largo de toda la última década, la Argentina ha ido perdiendo sistemáticamente todo tipo de libertades, entre ellas, la libertad económica, dato que ha quedado claramente expuesto en el índice que anualmente elabora la Heritage Foundation. En la última revisión de ese análisis, nuestro país aparece lamentablemente en el puesto 169, sobre 178 naciones analizadas, dato que, por cierto, no resulta sorpresivo. Ocurre que el deterioro de la libertad económica se ha acelerado enormemente en los últimos tiempos. En rigor, la ubicación de la Argentina en ese ranking es la peor desde 1995, cuando comenzó a ser elaborado. Hoy nuestro país aparece entre las economías denominadas reprimidas, junto a la República del Congo, Corea del Norte, Irán y Venezuela, entre otras naciones. Estar en esa franja nos exime de mayores comentarios. Por lo demás, la realidad de nuestro país habla por sí misma. Nuestro deterioro de la libertad económica ha sido vertiginoso. En 2002, antes de la lamentable gestión kirchnerista, la Argentina estaba ubicada en el puesto número 44. Al año siguiente, con Néstor Kirchner en la presidencia, nuestro país cayó nada menos que 68 lugares. Desde entonces, se ha mantenido en caída libre. Esto es lo que normalmente ocurre cuando el Estado se transforma en enemigo de las empresas y de sus propios ciudadanos, a quienes vigila y hostiga, mientras los sofoca con una presión tributaria sin precedente en nuestra historia. En lugar de asociarse a ellos y de promover el emprendedorismo, en busca de un crecimiento económico sostenido, los intimida y confronta. El Estado policíaco es consecuencia de la visión autoritaria de su papel, que pretende para sí el monopolio de todas las definiciones, incluidas las de contenido económico, creyéndose infalible y marginando a quienes tienen la sabiduría y la experiencia que los gobernantes, en su soberbia, desprecian. En América latina hay ejemplos muy diferentes: Chile aparece en el séptimo lugar del ranking, entre
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los países con más libertad económica del mundo. Colombia, en la ubicación 28, y Uruguay, en el puesto número 44. Nuestro país sólo supera en ese ranking a los dos países totalitarios de nuestra región: Cuba y Venezuela. Nuestro retroceso, por profundo y constante, causa honda preocupación. Para comprender la importancia de estar bien ubicados en el ranking de libertades económicas, basta promediar el PBI per cápita de los primeros 35 países y dividirlo por el PBI per cápita de los últimos 35. Allí podremos observar que los ciudadanos de los países más libres son casi siete veces más ricos que los ciudadanos de los países más reprimidos. Respecto del problema de la desigualdad, es cierto que los países libres no han logrado ser menos desiguales. Sin embargo, si se toma el promedio de los ingresos del quintil más pobre de los países más libres y se lo divide por el correspondiente de los países más pobres, se obtiene un resultado alentador: los pobres de los países libres también son cerca de siete veces más ricos que los pobres de los países reprimidos. Por último, el profesor Steve Horwitz ha demostrado con datos del IRS de los Estados Unidos, equivalente a nuestra AFIP, algo que tal vez sea aún más importante que la desigualdad: la capacidad de movilidad social en los países más libres. En los Estados Unidos, ubicados en el puesto 12, el 86 por ciento de las familias consideradas pobres en 1979 dejaron de serlo en 1988. Es decir, en menos de una década habían salido de la pobreza. Un informe de la Universidad de Michigan, con otra serie de datos, muestra un resultado similar: el 96% de las familias consideradas pobres en 1975 habían dejado de serlo en 1991 o sea quince años más tarde. El gran desafío para los próximos gobiernos argentinos será escalar en los indicadores de libertad económica, así como en los de calidad institucional, de manera de lograr que nuestro país vuelva a ser un lugar de gran movilidad social, tal como prometía el anhelo popular de “M’hijo el dotor”.
Vandalismo en la ciudad
os vándalos fueron un pueblo bárbaro de la Antigüedad, de origen germano oriental, procedente de la península escandinava, a orillas del mar Báltico. El término “vandalismo” pasó a significar un tipo de devastación, como la que ellos realizaban y que se aplicó más tarde a quienes demostraban un espíritu de destrucción que nada respeta ni valora. Así, vándalo alude contemporáneamente a quien destruye por destruir, sin sentido ni justificación, aunque a ese delito pueda sumarse ocasionalmente el robo. En verdad, a esta altura de la civilización, los actos de vandalismo mantienen una cuota de la barbarie del pasado aplicada a cosas materiales y encuentran su lugar propicio en las grandes ciudades, como Buenos Aires, cuyos paseos, plazas, monumentos, jardines, obras de arte, juegos de niños y luminarias, entre otros bienes públicos, vienen siendo objeto frecuente de un empecinado ejercicio de rotura y deterioro. Tanto es así que son pocos los espacios públicos que han quedado al margen de esa práctica perversa que no considera ni los valores de la belleza ni de la utilidad, así como tampoco lo histórico ni lo patriótico. La mayoría de los habitantes de la Capital seguramente ha sufrido al ver la chocante obra de los vándalos de nuestro tiempo. El sentimiento de desagrado que provocan esos actos regresivos se ha podido experimentar al ver el monumento a Bernardino Rivadavia, ubicado en plaza Miserere; en la plaza Irlanda; en la plaza Martín Fierro,
OTRAS OpINIONES
Nicolás Maduro, en el aire Nombre diario, País
o bien, frente al monumento a Julio A. Roca, en el cruce de la Diagonal Sur y Perú. Los daños se han reiterado en el Obelisco –obra que identifica a la ciudad como muy pocas–, en el Rosedal, en el parque Centenario o en el Rivadavia, donde se han roto o mutilado obras de arte de los jardines y canteros. Un párrafo especial merece la escultura de El pensador de Rodin, original de un gran artista que fundió la obra tres veces. Una quedó en París, otra fue a Filadelfia y la tercera –por una gestión especial– se radicó en Buenos Aires. Dañada varias veces, finalmente ha sido cercada por un vidrio de seguridad. Hasta ese punto debió llegarse a fin de protegerla. Últimamente, la loba romana ubicada en el parque Lezama, que con Rómulo y Remo compusieron un conjunto escultórico donado por Italia, sufrió la pérdida de las figuras infantiles. Es casi obvio, pero necesario, hacer referencia a los gastos que han provocado las continuas reparaciones y los medios a los que se viene acudiendo para defenderlas del asedio de los vándalos, entre ellas el enrejado de parques y plazas. Esas precauciones pueden no gustar, pero se justifican ante quienes no respetan nada: ni el arte, ni la historia, ni los juegos infantiles. Es de lamentar que quienes producen esos daños prácticamente no reciben sanción. Resulta abrumador pensar que se hayan cometido miles de esas faltas y que la gran mayoría haya sido archivada por carencia de pruebas o imposibilidad de identificar a los culpables.
Mientras la economía y la calidad de vida se siguen deteriorando, la respuesta del gobierno consiste en evadir sus responsabilidades y achacar los inocultables problemas a todo a quien se le ocurra, excepto a su pésima gestión. Actualmente el alza de los precios sólo se puede medir por el recuerdo de que antes eran mucho más bajos. La escasez se constata por el largo de las colas para abastecerse y por los militares armados para custodiarlas; el debilitamiento de la economía, por la proliferación de productos básicos importados. La segunda reacción ha sido aumentar los controles y las amenazas. La
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tercera reacción fue culpabilizar a otros e insistir en que le habían declarado una guerra económica al gobierno. La cuarta reacción ha consistido en anunciar nuevas políticas que no se materializan. Ante la falta de jefes que pudieran enfrentar los problemas económicos, el propio presidente tomó el relevo. Luego de un intervalo entre sus viajes, apareció nuevamente en cadena, pero no dijo nada. Parece obvio que no hacer nada ante una situación desesperada es la peor actitud. Pero ese parece ser el camino escogido por Nicolás Maduro para dirigir la economía desde el aire.
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La Presidenta en China Mao La señora Presidenta sigue patinando en falso. Ya una vez supo compararse con Muammar Khadafy y recibir con honores a los dictadores Bashar al Assad, de Siria, y Teodoro Obiang, de Guinea Ecuatorial, ambos tristemente célebres por su crueldad y nulo respeto por los derechos humanos. Sin duda, “el líquido deslizante “sigue cubriendo los espacios que elige para caminar y expresarse. La evidencia de ello es que días atrás, a poco de su llegada a China, elogió con especial fervor al fundador de “La revolución cultural”, Mao Tsé Tung, refiriéndose a él como “ El gran timonel”... Ignoraba tal vez, que fue el asesino más despiadado del siglo XX y, sin duda, uno de los mayores de la historia de la humanidad. Marta Escobar
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Vulgaridad Es inconcebible la falta de respeto de la jefa de Estado en China, burlándose de los chinos porque no pronuncian la letra “r” ¡Y pensar que en el exterior nos representa a todos los argentinos! ¿Pensará el gobierno chino que todos los argentinos aprobamos esta vulgaridad? Graciela Aguerre Yanzi
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Déjà vu En 1954-55, cuando era evidente que su poder ya se había empezado a resquebrajar, el presidente Juan Perón se jugó a orquestar un convenio estrambótico de gran alcance. En eso consistió su desopilante proyecto energético de entregar media Patagonia a una empresa petrolera extranjera, a la que hasta permitía instalar control policial y militar privado en las zonas concesionadas. Pero la historia parece ahora repetirse. Cuando se vislumbra el fin del ciclo kirchnerista, en medio de un desmadre fenomenal de las instituciones y con la economía sumergida en una creciente estanflación, acontece algo similar a lo que tantos años atrás sirvió de marco para el final de aquel período peronista. Paralelamente a la decadencia, el gobierno actual arremete en estos días con la firma de un descomunal convenio con China que pretende entregar en forma directa los importantísimos yacimientos de potasio y litio que tiene nuestro país, da lugar a proceder a adjudicaciones directas de obras de infraestructura y se adquieren compromisos para arreglos bilaterales relacionados con explotaciones de petróleo y energía nuclear. Y esto nos provoca una sensación de déjà vu que nos transporta sesenta años atrás y nos ayuda un poco a entender este nuevo y lamentable grand finale. Cuando ya baja el telón, otra vez…
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rompan diarios en una conferencia de prensa, juzguen a los jueces o se extralimiten con la oposición. ¿Algún día nuestros dirigentes aprenderán que el poder no permite todo? Oscar Bravo DNI 4.366.129
Nisman Usualmente (en países con democracias genuinas y efectivas), cuando un gobierno enfrenta una falla muy grave en el cumplimiento de alguna función a su cargo, se anuncia la renuncia o despido del responsable de esa área. Si hay sanciones a subalternos, no suelen ser parte del anuncio inicial. La responsabilidad primordial se atribuye, con razón, a quien ejerce la autoridad a ese nivel en nombre de la ciudadanía, y controla el desempeño de esos subalternos. En el “reino del revés” que es la Argentina, la custodia del fiscal Nisman ha sido sancionada, pero evidentemente debían operar en forma autónoma, porque ninguno de sus superiores parece haber sido afectado. Guillermo Gil
CI 5.602.976
En la Red El tuit de la Presidenta en China Facebook
“No es para menos, es un papelón que un presidente de visita se les burle” María Haydée Urbina
“Me pregunto qué les estamos entregando a los chinos, mientras nos distraen con los tuits” Norma Volpini
“La Presidenta siempre tuvo un profundo desprecio por las instituciones, por los opositores, por los ciudadanos comunes y ahora por los chinos” Roberto César Pavía
“Quien no se respeta a sí mismo no respeta a nadie” Clarice Bardolla Gelinski
Pablo F. Marchetti
DNI 6.002.426
vilegios de manera obscena, para subirme la carga impositiva, para gastar mi plata en publicidad oficial o para cambiar las reglas de juego cada vez que se les ocurre a funcionarios iluminados. Y también harto de que no me pidan opinión para saber lo que necesito para aumentar la creación de riqueza y fomentar la inclusión. En definitiva, estoy harto de vivir en un régimen de libertad condicional y bajo sospecha en un país de “buena gente”. Voy a votar al candidato que me respete. Es decir, que yo tenga que pedir menos veces permiso y que, a su vez, me pida permiso para definir y asignar mi contribución para el sostenimiento del Estado de una manera austera, transparente y responsable. Por ahora, viendo el panorama, mi voto es en blanco. Espero poder cambiar de idea antes de que llegue octubre. Guillermo Paniego
DNI 11.451.145
Frente opositor Es cada día más frecuente el pedido dirigido a la oposición para que se una y, de ese modo, pueda enfrentar con más posibilidades al kirchnerismo. No es un reclamo sensato. Es bueno que se unan los que piensan parecido y tienen la misma visión de los graves problemas que padece el país y cómo resolverlos. Querer que “toda” la oposición se junte es una apelación a lo mágico, a lo milagroso, casi una frivolidad. Emilio Adrián Cappuccio
DNI 4.268.973
Check in por la Web Mi esposa, de apellido López, intentó varias veces hacer el web check in para un vuelo doméstico de Aerolíneas Argentinas. Sorprendida al no poder hacerlo porque la página web le pedía siempre volver a intentarlo, llamó a Aerolíneas y ¿cuál fue la respuesta del operador que la atendió?: “Señora: usted no puede hacer el web check in porque su apellido es muy común”. Por la presente quiero advertir a los Rodríguez, los Fernández, los Pérez y todos los que tengan apellidos muy “comunes” que no intenten hacer el check in por Internet porque para admitirlo seguramente uno debería tener un apellido poco común, como Watson o Rumpelstiltskin. O quizá fue la excusa inventada por el telefonista al no saber qué responder al reclamo. Eduardo Núñez
DNI 14.537.303
Colón Con cierta esperanza leí que la Corte Suprema resolverá si no es inconstitucional la ley que aprobó el convenio firmado entre los gobiernos nacional y porteño (Capitanich y Rodríguez Larreta) para el vergonzoso traslado del Monumento a Colón. Quiera Dios que se revea esta injusta y triste medida y que volvamos a tener a nuestro querido almirante otra vez en el lugar del que nunca debió ser desplazado. Silvia Bayá C. de Lagache
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El protocolo Me sorprendí con los dichos de la señora Karina Vilella, asesora de relaciones públicas, ceremonial y protocolo, en lanacion.com. Ella expresó algo que jamás dirá nuestra disciplina. No defiendo a la Presidenta, sino simplemente recuerdo que el protocolo está formado por normas. En todo caso, podría decirse que la jefa de Estado procedió con sus tuits de una manera incorrecta de acuerdo a su alta investidura, pero no “protocolarmente inaceptable”. Roberto Sebastián Cava
Académico de Número de la Academia Argentina de Ceremonial
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No sorprende Nuestra máxima autoridad se burla, públicamente, porque a los habitantes de China, país que acaba de agasajarla, les resulta complicado pronunciar correctamente algunas palabras en castellano. Dejando de lado su pésimo sentido del humor, no nos puede sorprender que otros funcionarios, de menor jerarquía,
Urribarri 2015
Residuos en Pinamar
Recientemente viajé por las provincias de Corrientes, Chaco, Santiago del Estero y Salta. Todo el recorrido estaba jalonado por carteles de “Urribarri 2015”. Algún fiscal debería investigar con qué fondos se pagó esa publicidad. Excepto que haya sido con fondos propios del candidato, las otras opciones, fondos de Entre Ríos o de la Nación, constituyen un delito punible.
El 4 de junio de 2012, la Municipalidad de Pinamar, con muy buen criterio, promulgó la ordenanza 4102/12, que prohíbe el uso de bolsas de polietileno en la totalidad de los comercios. Por otro lado, en 1995 se dispuso (ordenanza 1862/96) que la totalidad de las viviendas tienen que tener en su frente contenedores para residuos con tapa, con una capacidad de aproximadamente medio metro cúbico y a una altura no inferior al metro y medio, para evitar la rotura de las bolsas por parte de los animales. Excelente medida. Ahora, la contradicción entre las dos ordenanzas: si los envases de plástico, vidrio o cartón no se encuentran en bolsas de polietileno depositados en los contenedores, la empresa encargada de recoger los residuos hogareños no los lleva. ¿En qué quedamos? ¿Reducimos el uso de bolsas de polietileno para mejorar la vida en el planeta o las seguimos usando?
Bernardo Garaicoechea
DNI 4.52.5116
Hartazgo Trabajo en el ámbito empresario desde hace muchos años. Y, tal como canta Serrat, “harto ya de estar harto, ya me cansé”. Estoy harto de pedir permiso para comprar y vender, para importar y exportar, para contratar y descontratar personal, para viajar, para comprar y vender dólares. Pero también estoy harto de que no me pidan permiso para destruir nuestra moneda local, que funcionarios y legisladores se suban salarios y atribuyan pri-
Oreste Hugo Cantarelli
DNI 5.385.330
las notas más leídas de ayer en lanacion.com De la eDición impresa
1. Furia en el mundo árabe por la ejecución del piloto. 2. La secta de Cristina y sus incondicionales, por Luis Majul. 3. Citaron para hoy a declarar a Stiusso por una llamada clave a Nisman.
De la eDición online
1. El monje budista momificado que “no está muerto”. 2. Qué dijo el piloto del avión de TransAsia antes de estrellarse en un río de Taiwán. 3. El tuit de Cristina desató indignación y ofensa en las redes sociales chinas.