A JULIO CÉSAR, MI NIETO Por Arlina Cantú Llegaste al fin, cosita tan querida, a llenarnos la vida de alegría, y me siento del cielo bendecida porque eres parte de la vida mía. Te bendigo, porque eres de mi niña el fruto más precioso de su amor; te bendigo, porque ha sido tu vida la que ha dado a su vida gran valor. Te bendigo cuando abres tus ojitos, cuando emites sonidos quedamente, cuando duermes, o cuando das de gritos o cuando te sonríes, dulcemente. Te amaré, pequeñito, mientras viva porque sé que tu vida es bendición, porque has dado más fuerzas a mi vida y una nueva alegría a mi corazón. 11-4-92 NIÑO AMADO El buen Dios me ha mandado un regalito para alegrar mis noches y mis días, es un niño que tiene su piquito como un dulce de miel con alegría. Eres mi niño amado, don precioso que la vida me diera, compasiva, y cada día te vuelves más hermoso y cada día me llenas más de dicha. Me parece que escuchas cuando te hablo con lo más dulce que mi labio dice, y que me brindas como hermoso halago ese piquito que sonríe. 11-4-92 Usado con permiso