SEGURIDAD | 21
| Sábado 25 de mayo de 2013
SEGURIDAD Edición de hoy a cargo de Luis Moreiro | www.lanacion.com/seguridad
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Mató a tiros a dos asaltantes que usaban de escudo a una mujer
Atacaron a pedradas a la Federal en la 1-11-14
llevaban como rehén a una clienta; dijo que ya le habían robado tres veces en los últimos 20 días
dañados cuatro móviles; hubo siete detenidos
ezpeleta. Así reaccionó un carnicero al ser asaltado por delincuentes de 17 y 34 años, cuando se
Valeria Musse
CoRRESPoNSALIA LA PLATA
LA PLATA.– El dueño de una carnicería de la localidad bonaerense de Ezpeleta baleó a dos delincuentes armados, uno de ellos menor de edad, cuando ingresaron en su comercio para robarle. Aparentemente, el hombre sorpresivamente decidió resistirse cuando uno de los ladrones tomó a una mujer como escudo. El episodio ocurrió anteanoche, alrededor de las 20.30, cuando faltaban pocos minutos para que cerrara el comercio Carnes Pablito, situado en el cruce de las calles Florencio Varela y Río de la Plata. Según agregaron fuentes policiales del distrito de Quilmes a la nacion, dos hombres armados irrumpieron en el local comercial y, a los gritos, anunciaron a los presentes que se trataba de un robo. Dentro de la carnicería estaba
el propietario, de quien sólo se supo que se llamaba Pablo, dos clientes, un empleado y otra comerciante vecina, una panadera, que se hallaba en el lugar conversando con la gente. Según el relato de las víctimas a los efectivos policiales, en un momento, y mientras los delincuentes les exigían las pertenencias a los presentes, uno de los asaltantes tomó del cuello a la panadera y la empujó hacia el otro lado del mostrador del local para tomar el dinero de la recaudación. “Me la llevó como escudo humano”, dijo a la agencia de noticias Télam un jefe policial que participó de la investigación. La violencia del episodio provocó la ira del carnicero que extrajo una pistola calibre 40 de su propiedad, que guardaba en el local, y comenzó a disparar contra los delincuentes, según agregaron las fuentes policiales consultadas.
Otro caso similar en Ciudadela ^b^b^ Un gendarme mató a
un ladrón e hirió a otro que ayer a la madrugada asaltaron a su hermano, en la localidad bonaerense de Ciudadela. Fuentes policiales informaron a DyN que Rubén Oscar Cantero, de 42 años, llegó a su casa y al ingresar fue sorprendido por dos motochorros. Los ladrones fueron interceptados por el hermano de la víctima, comandante de Gendarmería con el que se enfrentaron a los tiros. Uno de los ladrones cayó muerto y el otro fue detenido con una herida de bala.
El ladrón que tenía como rehén a la mujer recibió un tiro en el tórax y falleció de inmediato. El otro delincuente, también fue alcanzado por las balas, logró huir corriendo del comercio, pero a pocos metros recibió dos disparos más efectuados por el carnicero. Los hombres tenían 17 y 34 años. Respecto de los testigos dentro del comercio, no hubo que lamentar ningún herido, agregaron las fuentes del caso. Los investigadores hallaron a 50 metros del local, y escondida bajo unos arbustos, una moto de baja cilindrada marca Honda con la que se movilizaron los delincuentes. Fuentes policiales informaron que el rodado tenía pedido de secuestro. También se secuestraron dos revólveres calibre 32 y 38, que portaban los ladrones, aunque las pesquisas policiales, en principio, desestimaron que los hombres hubieran alcanzado a disparar.
“No recuerdo nada de lo que pasó en el local. Sólo reaccioné cuando vi que una de las clientas estaba en peligro. Es muy duro lo que estamos viviendo por la inseguridad. Ya me robaron tres veces en 20 días. Ahora voy a tener que cargar con esto el resto de mi vida”, dijo Pablo emocionado al canal de noticias TN. Agregó el carnicero que la policía suele patrullar la zona, pero a él como a otros comerciantes los jefes policiales les reiteraron que tienen pocas personas y patrulleros en la zona. El propietario del comercio fue notificado sobre la causa caratulada como doble homicidio agravado por el uso de arma de fuego, pero hasta ayer la fiscalía que interviene en la investigación, a cargo de Ariel Rivas, no dispuso que el hombre quedara detenido, ya que los cuatro testigos del hecho aseguraron que se trató de un caso en legítima defensa.ß
palermo
Tres detenidos en una entradera Tres colombianos fueron detenidos ayer en el barrio de Palermo y otros dos escaparon, luego de que intentaron robar en un departamento tras romper la puerta con herramientas. Fuentes policiales informaron que el hecho ocurrió a las 17 en Paraguay al 3500, donde los vecinos alertaron al 911 sobre la irrupción de los ladrones, tres hombres y dos mujeres.ß
santiago del estero
Descubrieron una cocina de cocaína
La periodista Heit seguirá presa La periodista de Coronel Suárez Estefanía Heit, acusada de reducir a la servidumbre a una mujer, continuará presa luego de que la Cámara Penal de Bahía Blanca rechazó el arresto domiciliario que se le había concedido en la casa de su madre. Heit, detenida por maltratos contra Sonia Molina, de 33 años, había sido beneficiada por la jueza de Garantías N° 1, Gilda Stemphelet.ß
general rodríguez
Hallaron calcinada a una mujer Una mujer fue hallada calcinada a un costado de la Autopista del oeste, a la altura de General Rodríguez, y por el hecho quedó detenida su pareja, que se entregó poco después del hallazgo, informaron fuentes policiales. Se agregó que la víctima fue identificada como Noelia Pleus, de 30 años, cuyo cuerpo quemado fue encontrado a un costado de la citada autopista.ß
lanús
Dos detenidos por un homicidio Dos hombres fueron detenidos por el asesinato de una jubilada, de 71 años, que había hecho denuncias sobre malversación de fondos en la sede de un sindicato, cuyo cuerpo descuartizado y quemado fue hallado en un descampado de Lanús en agosto de 2012. Los detenidos están acusados de homicidio calificado.ß
Gabriel Di Nicola LA NACIoN
Los sospechosos advirtieron que iban por ellos. Apenas vieron llegar los automóviles no identificables de la Policía Federal se dieron cuenta de que estaban a punto de “perder” e intentaron resistir a pedradas. Cuatro móviles de la fuerza federal de seguridad resultaron dañados en los parabrisas y los capots en un operativo antidrogas en la villa 1-11-14, en el Bajo Flores. Así lo pudo confirmar la nacion tras el relato de personas que viven en la zona y presenciaron la pedreada que salió de un edificio de Bonorino y Riestra, que estaría tomado. El ataque ocurrió ayer a la tarde cuando personal de la División de Drogas Peligrosas llegaba a la villa para cumplir una orden del juez federal Sergio Torres. El magistrado tiene a su cargo una investigación sobre la comercialización de paco y marihuana con base en la villa del Bajo Flores. Según relataron a la nacion circunstanciales testigos, cuando los vehículos no identificables llegaron a Bonorino y Riestra comenzaron a ser atacados con piedras. “Las piedras eran lanzadas desde el edificio tomado”, agregó un informante. El objetivo de los agresores fue alcanzado: los proyectiles impactaron en el capot y los parabrisas de, por lo menos, cuatro móviles de la Policía Federal. Según pudo saber la nacion no hubo policías heridos como consecuencia de las piedras lanzadas por los sospechosos. El edificio desde donde los presuntos vendedores de la droga tiraban las piedras está sobre Bonorino. En medio del ataque, los sospechosos intentaron escapar hacia los
Los testigos dijeron que quienes arrojaron piedras a la policía son los mismos que se dedican a vender marihuana y paco
Distintos trabajos de inteligencia del personal del Escuadrón 59 de la Gendarmería Nacional permitieron descubrir ayer una importante cocina de cocaína en una zona de montes del paraje Puesto Nuevo, a 25 km al noroeste de la capital de Santiago del Estero. En esa ocasión fueron detenidas dos personas y además se incautaron de varios bidones con precursores químicos.ß
coronel suárez
Bajo Flores. Fueron
El dolor por la muerte de una hija se refleja en los rostros de Fabián Palma y su esposa, Antonia
fernando font/ enviado especial
“Presentía que mi hija estaba en el lugar donde la encontraron” homicidio en salta. La madre de la niña violada y apuñalada pidió que revisaran la casa
de uno de los sospechosos, pero la policía dijo que no tenían orden de allanamiento
Gustavo Carabajal ENVIADo ESPECIAL
JoAQUÍN V. GoNZÁLEZ, Salta. – “Yo presentía que mi hija estaba en el lugar donde la encontraron.” El dramático testimonio pertenece a Antonia, la madre de Claudia Judith Palma, la niña de 9 años violada y asesinada en esta ciudad de 25.000 habitantes. Al cumplirse una semana de la desaparición de la pequeña, en una entrevista con la nacion, la mujer recordó cómo fueron las primeras horas de la desesperada búsqueda y afirmó que le pidió a la policía que revisara la manzana en la que está el almacén donde encontraron la bicicleta de Claudia. Pero los policías le respondieron que no tenían una orden de allanamiento. Su esposo, Fabián Palma, dijo que la policía no tuvo la misma actitud cuando irrumpió en la casa de un vecino del asentamiento Juan Pablo II, donde vive la familia de la víctima. “Parece que los policías hicieron diferencia entre los pobres y la gente de plata. Acá, en el barrio Juan Pablo II, no tuvieron ningún problema en entrar en la casa de un vecino sin orden de allanamiento. Pero cuando mi esposa pidió que buscaran en dos o tres casas de la manzana donde está el almacén en el que apareció la bici de mi hija, los policías dijeron que no podían porque no tenían orden”, explicó.
Fabián y Antonia viven en el asentamiento Juan Pablo II, a un costado de las vías y a una cuadra de la ruta nacional 16. En su casa de piso de tierra no tienen agua corriente ni cloacas. Apenas llega la electricidad al barrio y la cocina a leña cumple la doble función de cocinar los alimentos y de brindar calefacción. “Todo indicaría que los tres detenidos serían los autores del homicidio. Yo estoy conforme con la investigación, pero vamos a seguir con las marchas hasta que algún responsable de la Justicia o de la policía venga a decirme en la cara que el caso quedó esclarecido y que los sospechosos no van a salir de la cárcel”, dijo Antonia. Hace una semana, Claudia, la mayor de las hijas del matrimonio Palma, salió de su casa con un canasto con bollos de pan que hacía su madre y que transportaba arriba de su bicicleta. Nunca regresó. “Al ver que Claudia no volvía comencé a preocuparme. Llamé a mi cuñada, pero nadie sabía nada de ella. Al principio pensé que se había escondido porque había perdido la plata de la venta de los panes. Ya le había pasado eso una vez. Salí a buscarla. No habían pasado más de dos horas cuando fui a la comisaría para hacer la denuncia. Allí me atendieron muy bien. El oficial de guardia convocó a muchos policías y salieron a buscarla”, recordó Antonia.
Claudia concurría a la escuela situada cerca de la laguna adyacente al asentamiento. Estaba en tercer grado y, según su madre, se había ilusionado con su cumpleaños de 15. Por las tardes ayudaba a su madre con la venta de pan casero, una actividad que le permitía juntar 17 pesos por día. Fabián, su padre, no tiene trabajo fijo y hace changas arriando hacienda. “Cuando mi cuñado me comentó que habían encontrado la bicicleta de Claudia frente al almacén Don Paco, en la esquina de Salta y 9 de Julio, les pedí a los policías que revisaran dos o tres casas porque sabía que en esos lugares vivían personas que habían tenido denuncias por atacar a mujeres. Así me lo comentaron los vecinos. Yo presentía que mi hija podía estar en la zona, donde finalmente la encontraron. Pero los policías me dijeron que no tenían órdenes de allanamiento”, contó la madre de la víctima. Al día siguiente, dos chicos que jugaban en un terreno baldío situado en la misma manzana donde apareció la bicicleta de la niña y donde su madre presumía que podía estar hallaron el cuerpo de Claudia. Tenía tres puñaladas en el cuello, los pantalones por debajo de la cintura y la remera levantada. La autopsia concluyó que había sido salvajemente violada. Además, los forenses indicaron que fue asesinada un día antes del hallazgo. Esto
significaría que pasaron no más de dos horas entre el momento en que los sospechosos la secuestraron, la violaron y la mataron. Hasta el momento, nadie pudo determinar si la niña estaba con vida, cuando Antonia les pidió a los policías que revisaran las casas sospechosas. Los tres imputados detenidos habrían sido identificados por fuentes policiales y judiciales como José Insaurralde, de 47 años; Ramón Leiva, de 67, y Rubén Soria, de 83. Ayer, una versión indicaba que uno de ellos había confesado su participación en el homicidio y acusó a los otros dos de haber planeado el secuestro de la niña. “La maté para no que no sufriera más”, habría dicho uno de los acusados, según un trascendido que se conoció en esta ciudad. Esa versión fue negada por los investigadores policiales y judiciales. Dominados por el dolor, Antonia y Fabián afirmaron que no quieren venganza, sino que buscan que se haga justicia. Mientras tanto, esperan los resultados de los estudios genéticos de las 52 muestras halladas por los peritos en el cuerpo de la niña, en el terreno donde fue encontrado el cadáver y la casa de los imputados. Esos perfiles de ADN serán comparados con las muestras de sangre y cabellos de los imputados. En caso de que el resultado sea positivo, los acusados quedarán a un paso del procesamiento y del juicio oral.ß
pasillos de la villa 1-11-14, pero siete de los imputados fueron detenidos por el personal policial. “Los que arrojaron las piedras son las personas que se dedicaban a la venta de marihuana y de paco”, sostuvo una fuente con acceso al expediente. Según pudo saber la nacion, además de la detención de los siete sospechosos, los investigadores secuestraron más de 500 dosis de paco y marihuana lista para ser vendida. El recibimiento a pedradas fue una sorpresa para los policías a cargo del procedimiento. En los últimos dos años no hubo una situación similar ante un operativo de la Policía Federal. La villa 1-11-14 es una zona caliente para el narcotráfico. El juez Torres tiene a su cargo varias investigaciones sobre venta de paco, cocaína y marihuana en esa zona del Bajo Flores. Algunas de las causas ya fueron elevadas a juicio. A fines del mes pasado, la Policía Federal, por orden del juez Torres, detuvo a 13 sospechosos acusados de integrar una red de narcotraficantes. También en abril pasado, el juez Torres elevó a juicio una investigación donde uno de los acusados es Jhon Paul Revilla Estrada, alias “Burro”, sobrino del otrora sindicado líder del narcotráfico en la villa 1-11-14: Marco Estrada González, más conocido como “Marcos”. Según la investigación del juez Torres y su secretario, Diego Iglesias, el sobrino de “Marcos” formaba parte de una “asociación destinada primordialmente a ejecutar en el interior y fuera de la villa 1-11-14 actos relacionados con el tráfico ilícito de sustancias estupefacientes, incluyéndose entre los mismos la introducción, almacenamiento, fraccionamiento y distribución definitiva de distintas clases de narcóticos, entre las que se verifican aquellas conocidas, como marihuana, cocaína y paco”. Como se ve, a pesar de las detenciones, el negocio de la venta y tráfico de droga en la villa 1-11-14 parece no tener fin.ß