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14 mar. 2013 - vez en cuando deja la curia, toma el subte y se dirige a otros barrios de la ciudad. Sube a un ómnibus y se presenta en una u otra villa a bende ...
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EDICIÓN ESPECIAL | 9

| Jueves 14 de marzo de 2013

BERGOGLIO, PAPA | LA otrA cArA DE UN HoMBrE PÚBLIco

Los Bergoglio, la familia más sorprendida

La hermana, los sobrinos y primos de Francisco lloraron de alegría al verlo por televisión convertido en Su Santidad La explosión de alegría que suscitó en tantos la noticia sobre la elección del cardenal argentino invadió también ayer la casa de María Elena Bergoglio, en Ituzaingó, hermana del flamante pontífice. “Yo estaba en mi trabajo siguiendo el cónclave por Internet y cuando dijeron que era él me tuve que sentar; no lo podía creer, fue como un shock”, contó a la nacion José Bergoglio, sobrino del papa Francisco, quien al salir del trabajo corrió a abrazar a su madre, María Elena. José, de 29 años, dijo que vivía sentimientos encontrados porque, si bien está muy contento, también siente ya la nostalgia porque sabe que no verá tan seguido a su tío. Ahora queda muy lejano el 23 de marzo, el día que esperaba el regreso de su tío, el cardenal. Humilde y reservado, el cardenal Bergoglio no habla mucho de su familia, con la que ha mantenido siempre una estrecha relación. El nuevo papa es el mayor de cinco hermanos, tres varones y dos mujeres: Alberto Horacio, Oscar Adrián, Marta Regina, que ya fallecieron, y María Elena, quien es madre de José y de Jorge. Francisco tiene también otros sobrinos, entre los cuales se destacan dos hijos de Marta Bergoglio de Narvaja. José Luis, que es sacerdote jesuita, y Pablo, dedicado a la gestión educativa. El nombre elegido para su ponti-

ficado quizá sea un homenaje a su padre, José Mario Francisco Bergoglio, además de ser una forma de ponerse bajo la protección del santo de los pobres y desprotegidos de Asís. Ayer, en la familia Bergoglio todo era emoción y hasta una vertiginosa secuencia de recuerdos y anécdotas. Las últimas veces que José vio a su tío, ahora papa, no hablaron sobre el cónclave, aunque eran conscientes de que existía alguna posibilidad de que fuera elegido. Como lo pidió Francisco en su primer mensaje, desde el Vaticano, ayer por la tarde sus familiares en Ituzaingó se juntaron a rezar por él. “Es una persona con una capacidad intelectual y espiritual muy grande y seguramente le va a hacer mucho bien a la Iglesia porque donde estuvo hizo bien”, dijo desde Azul a la prensa Hugo Bergoglio, primo del sucesor de Benedicto XVI. Según él, el arzobispo de Buenos Aires llegó al papado “sin buscarlo; jamás se lo propuso”. “Va a ser un papa muy humano, muy terrenal. Yo lo definiría como un pastor, es la exaltación de las virtudes verdaderas. Siento que es un hombre querido por la gente”, comentó Hugo, que no terminaba de creer lo que había sucedido en su familia. El primo de Jorge Bergoglio admitió que, mientras miraba el anuncio del Vaticano por televisión, no tenía “demasiadas expectativas” de escu-

char su apellido. Feliz e impactado, reconoció que su primo “siempre fue considerado papable”, aunque compartía la duda de muchos especialistas sobre que la edad le jugaba en contra al primo Jorge. Con respecto a la personalidad de Francisco, recordó que el arzobispo viajaba en “colectivo de línea” a la ciudad bonaerense de Azul para visitarlo. “Solíamos charlar mucho, y siempre fue un hombre que hizo un culto verdadero de la austeridad. Vivió toda su vida como lo predicó”, señaló su primo. Anoche, en coincidencia con lo dicho por el primo de Azul, se supo que a Bergoglio le habían enviado un pasaje para viajar en primera clase a Italia, y que prefirió ir en turista como solía hacer. Otro pariente homónimo, Jorge Mario Bergoglio, hijo de una prima del cardenal argentino, habló también con medios periodísticos. Coincidió con Hugo en no tener demasiadas expectativas sobre la designación de su primo al frente del Vaticano. Desde Corrientes, Juan Fernández Xifra, hijo también de una prima

Los familiares de Bergoglio en Ituzaingó se juntaron ayer a rezar por él Hermanos y primos coinciden en su perfil humilde y terrenal hermana de Francisco, contó a Radio Sudamericana que ver convertido a su pariente en papa “fue el colmo de la alegría”. Igual que José Bergoglio, en el conurbano bonaerense, Fernández Xifra llamó por teléfono en primer término a su madre: “Y lloramos juntos de alegría”. De apellido Colombetti Bergoglio, su madre es prima hermana del fla-

mante sumo pontífice. “El vínculo que tenemos es grande. Es la persona que me ha casado a mí y ha bautizado a mi hija. Es una emoción muy grande”, contó el joven. Sobre el flamante papa, Xifra señaló que es “una persona del pueblo, de un corazón enorme, con los pies sobre la tierra y muy humilde”. “Espero que Dios lo bendiga”, agregó y destacó que “es totalmente transparente y una persona muy accesible. Mi madre y Jorge se criaron juntos”. “Hablaba mucho de su abuela Rosa Bergoglio. Se ve que era muy apegado a ella y también la vinculaba con su vocación al sacerdocio”, recordó ayer a la nacion Francesca Ambrogetti, una de las autoras del reportaje a Jorge Mario Bergoglio, “El jesuita”, publicado por Vergara. “Ella le trasmitió las costumbres piamontesas”, recordó la periodista al contar también que “toda la familia Bergoglio era muy católica e incluso sus padres se conocieron en una actividad de la Iglesia”. Los primeros Bergoglio, con la abuela Rosa a la cabeza, llegaron a la Argentina en 1929, provenientes de Italia. Cuidadosa, trajo el dinero de la familia guardado en el cuello de un tapado de zorro. Quiso la providencia protegerlos del naufragio del Principessa Mafalda. La demora en la venta de los bienes los obligó a cambiar los pasajes que tenían para ese buque por otros en el Giulio Cesare, con el que llegaron a Buenos Aires. En ese libro, Su Santidad tiene un cálido recuerdo de su madre, Regina María Sívori, que quedó paralítica después del quinto parto. “Todos sabemos hacer por lo menos milanesas”, admitió Francisco al contar cómo su madre guiaba a él y a sus hermanos para hacer la comida. Esa tarea también la desarrolló más de una vez en el Colegio Máximo, de San Miguel, cuando no había cocinero los domingos. Evitó hablar de sus habilidades culinarias, pero con una sonrisa ha manifestado: “Nunca maté a nadie”.ß

Una de las imágenes que ayer recorrió el mundo: Bergoglio viajando en el subte de Buenos Aires, en 2008

En julio de 2009, la nacion Revista publicó un perfil de Bergoglio, con especial énfasis en su vida cotidiana a comer con familias que viven en las villas “las sopas que cocinan en enormes ollas”. Y es que Bergoglio, como parte de su misión pastoral, se resaltó, “de vez en cuando deja la curia, toma el subte y se dirige a otros barrios de la ciudad. Sube a un ómnibus y se presenta en una u otra villa a bendecir nuevos comedores populares, a administrar el bautismo, a celebrar la fiesta del santo. Después va a alguna parroquia a dar una misa por las fiestas patronales, o a un acto especial. Y se acuesta muy temprano”. El texto destacó cómo era un día de actividad plena en la vida de Bergoglio. “Cada día, de 4 a 7 de la mañana, el cardenal dedica tres horas a meditar. A las 7 ya recibe gente, tiene reuniones. A las doce y media le sirven un almuerzo rápido. Descansa unos cincuenta minutos y a la una y cuarto ya está en el despacho para empezar el trabajo de la tarde, cuando siguen las audiencias y las reuniones. Las audiencias son agotadoras; sale una persona,

entra otra, y él atiende y atiende...” Como escenario de ésa, su vida cotidiana, el arzobispo jesuita tenía el segundo piso del edificio de la curia, al lado de la Catedral Metropolitana, frente a la Plaza de Mayo. “Se trata de un departamento de cuatrocientos metros cuadrados, una casa magnífica con muebles antiguos y cuadros del siglo XVIII. [...] Muchos libros de espiritualidad y de teología se encuentran en una gran biblioteca, enfrente de su habitación. Ahí tiene también un aparato de DVD y una máquina de escribir eléctrica, ya que no maneja la computadora. Otilia y Elisa, que son sus secretarias, le imprimen todos los mails y se los entregan”, se narró en la revista dominical de la nacion. Fútbol y vacaciones Bergoglio –subrayó la nota– “camina por el pasillo cuando reza el rosario”, “le gusta el fútbol y es simpatizante de San Lorenzo”. También se destacó que “descansa con música clásica a su lado. No se va de va-

NACIMIENTO Jorge Mario Bergoglio nació en el barrio de Flores el 17 de diciembre, hijo de un matrimonio de italianos, formado por Mario Bergoglio (empleado ferroviario) y Regina (ama de casa)

1936

LA ESCUELA Egresó de la escuela secundaria industrial E.N.E.T Nº 27 (ahora E.T.Nº 27) Hipólito Yrigoyen, con el título de técnico químico

1955

LOS COMIENZOS EN LA IGLESIA A los 21 años decidió convertirse en sacerdote. Ingresó en el seminario del barrio de Villa Devoto. El 11 de marzo de 1958 ingresó en el noviciado de la Companía de Jesús

1957

LA ORDENACIÓN Se ordenó sacerdote el 13 de diciembre. Fue maestro de novicios en Villa Barilari, en San Miguel, y profesor de la Facultad de Teología

1969

PRIMEROS CARGOS El 31 de julio fue elegido Provincial de la Argentina, cargo que ocupó durante seis años

1973

RECTORADO Hasta 1986 fue rector del Colegio Maximo y de la Facultad de Filosofía y Teología de San Miguel

1980

LIBROS Publicó su primer libro Meditaciones para religiosos. Con el paso de los años editó otras diez publicaciones

1982

OBISPO El 20 de mayo el papa Juan Pablo II lo nombró obispo titular de Auca y auxiliar de Buenos Aires

1992

ARZOBISPADO Tras la muerte del cardenal Antonio Quarracino, asumió como arzobispo de Buenos Aires

1998

CARDENAL El 21 de febrero el papa Juan Pablo II lo creó cardenal, titular de San Roberto Bellarmino

2001

ENFRENTAMIENTO CON EL GOBIERNO El entonces presidente Néstor Kirchner anunció que no asistiría al tedeum del cardenal Bergoglio en la Catedral Metropolitana. Entonces el arzobispado de Buenos Aires decidió suspender la ceremonia religiosa

2005

CONFERENCIA EPISCOPAL En noviembre terminó su mandato como presidente de la Conferencia Episcopal Argentina, cargo que ocupó desde 2005

2011

EL NUEVO PAPA Después de la renuncia de Benedicto XVI el cónclave lo eligió Papa. Escogió como nombre Francisco

2013

Ciudad de Buenos Aires

Flores

archivo

El hombre detrás del cardenal “El hombre detrás del cardenal. Da misa en las villas, viaja en subte y opta por la austeridad en sus costumbres.” Así presentó la nacion a monseñor Bergoglio, desde ayer el papa Francisco, en la nota de tapa de la revista del domingo 26 de julio de 2009. El texto de Any Ventura rescataba los aspectos menos conocidos del entonces arzobispo de Buenos Aires. “Elige alimentos frugales y sanos, y toma un vaso de vino de vez en cuando. Le gustan la fruta, el pollo sin piel y las ensaladas. Salvo excepciones, como aquella vez en que comentó con humor: «¡Qué bueno!, voy a un convento de monjas a comer bagna cauda»”, se enumeró en la nota. También recordó que el sacerdote jesuita tiene la costumbre de almorzar y cenar solo. “No acepta ir a comer afuera, no come en ningún lado que no sea la curia. No se queda a comer en las parroquias. No va a comer a una casa de familia.” A veces, “muy pocas”, se queda

El camino hacia Roma

caciones; no va a ningún lado, salvo cuando viaja a Roma, por trabajo”. Respecto de su relación con esa gran ciudad italiana, de la que a partir de ahora es obispo, se rescató que le gustaba recorrerla en transporte público –en subterráneo, colectivo y tren–. Y se precisó una debilidad cuando estaba en Roma: “Le gusta caminar por la capital italiana y tomar ristretto en las cafeterías, apoyado en el mostrador”. En otro pasaje, se reveló, según el círculo íntimo del ahora papa Francisco, que Bergoglio solía “ir a confesarse a la iglesia de El Salvador” y que era habitual encontrarlo “en la fila del confesionario de un jesuita anciano”. También se recordaban “gestos conmovedores” del cardenal, “como aquella vez en que recibió una carta de una familia boliviana que estaba sin vivienda y movió cielo y tierra para conseguirles un lugar hasta que finalmente sacó plata de su bolsillo para que se instalaran en una casa”.ß

Fuente: Vatican Information Service y elaboración propia / LA NACION