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economía
| Viernes 14 de marzo de 2014
Expoagro 2014 | la visión de uno de los principales empresarios
“El próximo gobierno debe mejorar la relación con el campo”, dijo Grobocopatel
De visita en la muestra del sector agropecuario, el empresario agrícola opinó que el sector “tiene que seducir al resto de la sociedad para un proyecto inclusivo”; está asesorando a los gobiernos de Albania y Colombia
Cristian Mira
EnVIADO ESPECIAL
RAMALLO.– “El próximo gobierno va a tener que adoptar una política hacia el agro diferente de la actual y tendrá que mejorar la relación con el campo”, afirmó Gustavo Grobocopatel, CEO del grupo Los Grobo, que ayer recorrió Expoagro. “El desafío para el sector será seducir al resto de la sociedad para un proyecto inclusivo; la brecha entre ricos y pobres se tiene que reducir por el crecimiento del PBI per cápita y no por nivelar hacia abajo”, explicó. Su agenda mensual necesita más de 30 días. Hace unas semanas estuvo reunido con el papa Francisco en el Vaticano, como parte de una delegación de católicos, musulmanes y judíos. Antes fue a Albania, donde asesora a los productores de ese país que trabajan en apenas una hectárea. También estuvo en Colombia, con el presidente Juan Manuel Santos, para asesorarlo en la puesta en producción de cuatro millones de hectáreas para soja y maíz. Y al mismo tiempo trabaja en la integración de las compañías que integran Los Grobo, cuya estructura se modificó con la compra de la empresa de agroquímicos Agrofina. “Mi abuelo, cuando empezó en Carlos Casares, hacía de todo: sembraba, cosechaba, iba al banco y arreglaba los alambres; hoy nosotros nos hemos transformado en una empresa que da todos esos servicios a los productores, es una integración radial”, explicó. “El asesoramiento es vender know-how; detrás de eso habrá empresas argentinas de maquinaria e insumos que podrán vender sus productos a esos países”, dijo. En Expoagro participa, de manera indirecta, en un stand en el que no se vende ni maquinaria agrícola ni soja, y tampoco es visitado por dirigentes políticos. Ese pequeño espacio está a cargo de Paula Marra, su esposa, in-
Paula Marra y Gustavo Grobocopatel, ayer en su local de Expoagro geniera agrónoma de la UBA, como él, que se asoció con mujeres de las comunidades aborígenes warmis, qom y wichí para comercializar artesanías y prendas diseñadas por ellas. Juntas crearon la empresa Matriarca, con la que recorren exposiciones en todo el país y planean exportar. Hacen carteras y tapices con fibras de chaguar, una planta del norte del país, y artesanías con figuras de animales imaginarios. “Con el asesoramiento de especialistas de la carrera de Diseño de la UBA mejoramos la terminación de los productos”, explica Marra. “Trabajamos con ellas en proyectos productivos como la harina de algarroba, la ganadería silvo-pastoril y la
cristian mira
Conferencias para hoy 10.30 a 11
“Problemática del contratista argentino”. Por Jorge Scoppa, presidente de Facma
14 a 15
Mercado de ganados y carnes. Por Víctor Tonelli, Rosgan
“Aplicaciones periurbanas: un enfoque integral”. Ramiro Cid y Fernanda González Maraschio, Instituto de Ingeniería Rural del INTA y subcomisión de BPA del CPIA
12 a 14
16.30 a 17
11 a 12
Presentación de las actividades de CRA 2014. Rubén Ferrero, presidente de CRA, y autoridades de la entidad
Mercado inmobiliario rural: perspectivas 2014. Cristian Beláustegui, presidente de CAIR y autoridades
apicultura”, relata. “Formamos parte de un gran número de iniciativas privadas y públicas para promover el desarrollo local en Chaco, Formosa y Jujuy”, cuenta. Grobocopatel coincide con esa visión. “Estos proyectos catalizan el potencial que hay en la región”, explica. “El empresario argentino debería integrarse más en los temas que exceden su función, como lo político y lo social”, opina. Respecto de los planes de Los Grobo, el productor cuenta que una de las empresas en las que está asociado, Bioceres, junto con Hugo Sigman, de Insud, está de lleno en la carrera de la bioeconomía. “Estamos desarrollando plásticos con vegetales y biomasa para producir energía”, se entusiasma. Este proyecto lo hacen en el laboratorio de Indear, en Rosario, junto con el Conicet. Hace unas semanas, el agro se vio conmovido con el anuncio de la compra del 51% de nidera por parte del grupo chino Cofco. “Es una noticia positiva, forma parte de una tendencia global de grandes grupos de China y Japón que buscan empresas de la Argentina para crecer”, explica. Los Grobo vendió el año pasado su compañía en Brasil al grupo japonés Mitsubishi y luego compró la compañía norteamericana de agroquímicos Agrofina. “nosotros soñamos con ser una empresa global, la Argentina necesita más multinacionales de la alimentación”, afirmó. Según Grobocopatel, el agro argentino está en condiciones de agregar valor a sus productos, pero cree que eso no se logra en el corto plazo. “Hay que crear confianza y una estrategia comercial de largo plazo para ingresar en mercados como el de China o la Unión Europea”, afirma. “También debemos fomentar el espíritu emprendedor en el país”, sostiene. “no está mal vender granos”, añade. Los Grobo creó una fábrica de pastas secas en Chivilcoy y aún mantiene un molino harinero en Brasil. ß
Los chinos proponen su propia versión de Precios Cuidados consumo. Buscan conformar una lista
con marcas producidas por cooperativas
Alfredo Sainz LA nACIOn
Los Precios Cuidados podrían tener su versión en chino. Los autoservicios orientales presentaron a la Secretaría de Comercio una propuesta para comenzar a ofrecer una canasta propia de productos a precios congelados con la particularidad de que las empresas fabricantes no serían las multinacionales de consumo masivo, sino cooperativas y fábricas recuperadas de alimentos, bebidas y artículos de tocador y limpieza. El origen del producto, sin embargo, no sería la única diferencia con respecto al programa vigente de Precios Cuidados. La otra novedad de la canasta que comercializarían los chinos es que el Estado tendría un papel más activo, ya que la logística y entrega de los productos a cada uno de los cerca de 10.000 autoservicios chinos que funcionan a nivel nacional estaría en manos de una empresa estatal. El proyecto fue presentado esta semana por la Cámara de Autoservicios y Supermercados Propiedad de Residentes Chinos (Casrech) –la entidad más antigua que agrupa a los autoservicios chinos que operan en el país y la más cercana a la embajada china en Buenos Aires– al secretario de Comercio, Augusto Costa, y a su segundo, Ariel Langer. Los chinos se encargaron no sólo de fijar los lineamientos de cómo podría funcionar el programa y también se contactaron con más de 25 cooperativas y fábricas recuperadas para definir una lista preliminar de productos que podrían participar del acuerdo. A grandes rasgos, la idea de los chinos es replicar la actual canasta de Precios Cuidados, pero reemplazando las primeras marcas y los proveedores líderes por propuestas menos conocidas. Así, en lugar de las yerbas Amanda y Unión, la lista china incluye las marcas Flor de Jardín y Tucangúa, que son elaboradas por las dos cooperativas del mismo nombre. Las galletitas
no serían las de Arcor o Terrabusi, sino las que aportan las firmas Maxim y Grisinópolis, y en lugar del azúcar Ledesma, la canasta oriental cuenta con una marca que entrega la Red Cañera provincial de Misiones, mientras que para la provisión de aceite estaría a cargo de la Asociación de Productores Agropecuarios de Cuyo. Distribución estatal El punto más polémico de la propuesta china es que el Estado se tendría que hacer cargo de la logística de los productos, ya sea en forma directa a través de la creación de una empresa estatal o tercerizando los servicios en alguna distribuidora. “Lo que proponemos nosotros es ofrecer nuestro canal de venta para llegar a los consumidores de menores ingresos. El Estado se tendría que hacer cargo de la distribución, lo que aseguraría no sólo que no haya faltantes, sino también el mantenimiento del precio porque nosotros nos comprometeríamos a marcar con un 25 por ciento el precio de lista que nos envíen los proveedores”, explicó a la nacion Danilo Pecci, uno de los operadores de Casrech. En Casrech además destacan que su propuesta también tendría un impacto social favorable, ya que les permitiría a las fábricas recuperadas y a las pequeñas cooperativas canalizar parte de su producción, que generalmente no puede ingresar en las grandes cadenas de supermercados. Los autoservicios chinos adhirieron formalmente al programa Precios Cuidados a mediados de enero pasado, pero en los hechos prácticamente no hay ningún comercio de la colectividad que hoy esté ofreciendo los productos que integran esa canasta oficial. Los comerciantes de la colectividad explican que el principal obstáculo que tienen para sumarse al acuerdo es que los proveedores no les están entregando la mercadería con los precios convenidos con el Gobierno.ß
Fábrega prometió a bancos no bajar la tasa REunIÓn. Admitió que el BCRA está preocupado por la alta inflación
Martín Kanenguiser LA nACIOn
El presidente del Banco Central, Juan Carlos Fábrega, les aseguró a los bancos extranjeros que, preocupado por la inflación y la estabilidad cambiaria, no reducirá el nivel de las tasas de interés. En un almuerzo que mantuvo el martes pasado con miembros de la Asociación de Bancos de la Argentina (ABA), el funcionario dejó en claro que “el nivel de tasas no va a volver a los niveles previos” a la suba registrada desde principios de año, que la ubican en torno al 30 por ciento anual. Fuentes que participaron del encuentro comentaron a la nacion que el diálogo fue muy constructivo y que se ratificó la percepción previa de que Fábrega actúa “con mucho sentido común”, a diferencia de otros funcionarios del área económica. “Es razonable, tiene diálogo con la Presidenta y se anima a hablarle con convicción a diferencia de su predecesora”, indicaron. La intención principal del presidente del BCRA, al igual que ocurrió en sus encuentros con los bancos nacionales reunidos en Adeba y con los públicos y cooperativos de Abappra, fue brindar una señal de tranquilidad y, sin adelantar medidas, ratificar el rumbo de la política monetaria. Al respecto, dejó en claro que, aunque otros funcionarios –entre ellos, algunos directores de la entidad– quieran empezar a bajar las tasas ante el freno que se observa en la actividad económica en general y en los créditos en particular, se actuará con mucha cautela para no repetir la crisis cambiaria de enero último. Para no mostrarse solo en esta cruzada, Fábrega les transmitió a los banqueros que el ministro de Economía, Axel Kicillof, también está preocupado por la cuestión inflacionaria y que hará su aporte desde la política fiscal, para que todo el peso no recaiga sobre la política monetaria. Sin embargo, ante la desconfianza del sistema financiero, les pidió paciencia “porque es un equipo joven que se está acomodando y que necesita tiempo para transmitir sus mensajes al poder político”, o sea, a la presidenta Cristina Kirchner. De todos modos, entre los banqueros hay divisiones entre aquellos que comulgan con esta visión y que afirman que Kicillof hará todos los ajustes necesarios para que el Gobierno no zozobre antes del final de su mandato y quienes, en cambio, creen que priorizará su potencial carrera política personal. “El mi-
Para no mostrarse solo, Fábrega juró que Kicillof también se preocupa por la inflación, pero pidió que le den tiempo nistro estaba muy preocupado en enero, pero ahora cree que ganó la pulseada”, dijo alguien a quien consulta con cierta frecuencia. En todo caso, tanto Kicillof como otros referentes del oficialismo creen que las tasas deben volver a bajar. El diputado y presidente del Credicoop y miembro de Abappra, Carlos Heller, dijo a la nacion que “la suba de tasas de interés debe ser un instrumento transitorio, que debe ser sucedido por estabilidad y luego por una baja gradual” a medida que se verifique el ingreso de dólares del agro en los próximos meses. Más allá de la cuestión monetaria, los banqueros esperan a ver si el Gobierno concreta el tan anunciado recorte de los subsidios o si, por lo menos, los congela para que la inflación los reduzca en términos reales, para que no sólo el sector privado –tanto las empresas como los asalariados– sea el que hace el ajuste sin la ayuda del Gobierno. Dada la baja credibilidad de los hacedores de política económica, los banqueros no creen que vaya a ocurrir que el Gobierno anuncie un plan antiinflacionario integral y rezan para que el número de inflación de febrero del Indec, que se conocerá el lunes próximo, sea creíble para que la calma actual dure por lo menos algunas semanas más.ß