EN LA TRASTIENDA
ARTE | MUESTRAS
FICHA. Estados de la materia, con obras de Grippo, Bairon, Battistelli, Harte y Pastorini. Curada por Mercedes Casanegra. En la Fundación Klemm (M.T. de Alvear 626, subsuelo), hasta fin de mes.
L Influencias. ¿Qué une la
obra de Tomás Espina con la de Antonio Berni? Eso lo dirá el joven ganador del premio arteBA-Petrobras ‘09 el miércoles 24, en el museo que alberga la colección de Amalia Lacroze de Fortabat. Fue convocado por Arnet para participar de un homenaje a grandes artistas que incluye mesas redondas, visitas guiadas y documentales (www.coleccionfortabat.org.ar).
EL CAOS PRIMIGENIO Una huella de ese instante en el que el magma indefinido se convierte en cosmos perdura en la exposición Estados de la materia, en la Fundación Klemm
POR DANIEL MOLINA Para La Nacion - Buenos Aires, 2009
T
Juanito Laguna en Fortabat L De todo un poco. En
nombre del gobierno porteño, Florencia Braga Menéndez destacó la “voluntad de mirar con el mismo respeto lo moderno y lo contemporáneo” en el programa Cultura para todos, impulsado por Arnet, que también sumó este año proyecciones de videoarte a las Gallery Nights, y celebró el concurso que premiará con 50.000 pesos una escultura o instalación para Puerto Madero. Se reciben proyectos hasta el 31 de julio (www. arnet.com.ar). En tanto, hasta pasado mañana se puede participar de Influencias, un “premio a la innovación” en diseño e Internet (www. influencias.org). L En marcha. Se lanzó la cuar-
ta edición del concurso Petrobras Buenos Aires Photo, con premios de 14.000 y 6000 pesos. Hay tiempo para participar hasta el 11 de septiembre (www.artealdia.com).
24 | adn | Sábado 13 de junio de 2009
anto el pensamiento religioso como la razón primitiva suelen fundar el origen de todas las cosas en el instante en que surge el cosmos a partir del caos primigenio. El caos no es un mero desorden, sino el magma indefinido que contiene todo en potencia. Es la matriz de lo que será, pero en ella todo carece de forma. El proceso por el que los seres se constituyen (según se narra en la Teodicea, de Hesíodo, en la Biblia o en las cosmogonías mesopotámicas) implica un cambio radical en los estados de la materia. Por lo general se pasa de lo gaseoso a lo líquido y de lo líquido a lo sólido (“de la noche, hizo luz”). Pero eso es, en el fondo, una simplificación casi absurda, porque en el caos nada es ni sólido ni líquido ni gaseoso. Todo está en transmutación. La gran pregunta, una de las que funda el pensamiento occidental en su alborada griega, es: cómo es posible que haya algo –nosotros, los ríos, las pulgas, los planetas– en vez de que no haya nada. Cómo es posible que haya surgido todo lo que existe. Lo que existe (que antes era parte de lo indefinido) ahora tiene forma. Una huella de ese instante en el que el caos se convierte en cosmos perdura en la muestra Estados de la materia, que reúne obra de Elba Bairon (La Paz, desde 1967 vive y trabaja en Buenos Aires), Leo Battistelli (Rosario, 1972), Víctor Grippo (Junín, 1936- Buenos Aires, 2002), Miguel Harte (Buenos Aires, 1961) y Ariadna Pastorini (Montevideo, 1965, desde 1985 vive y trabaja en Buenos Aires). Los artistas convocados por la curadora Mercedes Casanegra no sólo pertenecen a generaciones diferentes, sino que sus producciones surgen de preocupaciones que tienen poco y nada en común. Sin embargo, vistas en conjunto, estas obras parecen haber sido creadas especialmente para esta muestra, que
funciona como un espacio de resonancias en el que cada obra vibra metafórica y formalmente en las otras. Desde hace una década, Battistelli viene reflexionando sobre lo transitorio a través de la metáfora del agua: sus esculturas, instalaciones y fotografías congelan lo fluyente. Su obra Nado brinda una imagen poética muy sutil de las burbujas que produce el cuerpo de un nadador que atraviesa el Paraná en estilo mariposa. Hay una insistencia en el detalle, la luz, lo fugaz que transforma las obras de este artista en bellísimos memento mori: aun en medio de la gloria, no olvidamos que somos mortales. Bairon produce objetos que están en busca de su forma definitiva; sin embar-
go, nunca alcanzan el estado completamente definido. Sus sensuales esculturas orgánicas dibujan sutiles instancias que recorren la materia hacia su consolidación. Ella es una artista más preocupada por el proceso que por el resultado. Mejor dicho: su resultado es poner en evidencia el proceso por medio del cual las cosas devienen lo que son. De la muy amplia obra de Grippo –un artista que trabajó con materia orgánica y con mecanismos de producción de energía; era un físico-químico inspirado en la alquimia– aquí se presenta una serie de su última muestra individual, Anónimos, unos yesos patinados que remiten a la figura humana, pero desdibujada, sin rasgos reconocibles. Fruto de una mirada tierna, dolida de sus desti-
LEO BATTISTELLI. Nado, 2006, porcelana translúcida sobre backlight