Un llamado al Gozo

Autor: Dr. MV. Marcos Céspedes Morales. Misionero en Sevilla España www.generacionmaranta.com

ÍNDICE

Capítulos 1. Introducción, Pág. 3 2. Panorama de la carta Iglesia en Filipo, Pág. 4 3. El Gozo, Pág. 5 4. Implicaciones del Gozo en la vida del creyente, Pág. 7 5. Conclusiones, Pág. 14 6. Bibliografía, Pág. 15

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INTRODUCCIÓN

Un llamado al gozo es un estudio basado en la epístola de Pablo a los filipenses. Deseamos poder analizar desde una perspectiva pastoral cómo podemos vivir una vida llena del gozo del Señor, y mostrar las implicaciones que tiene el gozo en nuestra relación con Dios, en nuestras emociones y en nuestro estado físico.

“La sonrisa y alegría es el mejor medicamento que existe sin receta médica.” Anónimo

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http://www.frasescelebres.net/frases-de-alegria.html

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I. Panorama de la carta iglesia en Filipo. La iglesia de Filipo fue fundada en el segundo viaje del apóstol Pablo entre el 48 al 52 d.C, en Hechos 16. Mientras Pablo estaba en Troas, tuvo una visón de un varón macedonio pidiéndole que pasara por Macedonia, lo que hoy sería gran parte de Grecia y algunos otros países a su alrededor. Según el profesor Rudy González, la población judía en Filipo era pequeña porque la ciudad no contaba con una sinagoga”.

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La primera persona

convertida fue Lidia en Hechos 16:14-15, quien parece ser una joven gentil. La iglesia en Filipo, sería para mi consideración la iglesia más amada por Pablo, no solo por su manera de escribirles sino además porque es la única carta donde Pablo usa el prefijo sol, que significa “con” o “junto con”, por ejemplo en el capítulo 1:7, haciendo del compañerismo el principio de la organización de la carta.3 Mathew Henry comenta sobre esta relación entre el apóstol y la iglesia: “Los filipenses estaban muy profundamente interesados en el apóstol. El alcance de la epístola es confirmarlos en la fe, animarlos a andar como corresponde al evangelio de Cristo, precaverlos contra los maestros judaizantes, y expresar gratitud por su generosidad cristiana. Esta epístola es la única, de las escritas por San Pablo, en que no hay censuras implícitas ni explícitas. En todas partes se halla la confianza y la felicitación plena y los filipenses son tratados con un afecto peculiar que percibirá todo lector serio.”4 Está carta sería escrita desde Roma, según vemos en los versículos 1:13 y 4:22. Pablo se encontraba preso por causa del evangelio. La mayoría de los 2

Dr. Rudy González, Apuntes de la clase de Epístolas Pastorales A.

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Ibet.

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Mathew Henry, Comentario Bíblico, Editorial CLIE en Barcelona 1999.

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estudiosos de las epístolas paulinas coinciden que fue escrita entre el 60 y el 61 d.C. Guillermo Hendrik comenta sobre el propósito de la carta: Desde el principio hasta el final de la carta está bañada en este sol de gozo, podemos entender a Bengel cuando dijo: Summa epistole: Gaudeo. Gaudeo: La esencia de la epístola es: me gozo, gozaos vosotros también. No menos de 17 veces se repite en está epístola la palabra gozo, regocijaos….5 II. El Gozo La palabra gozo o regocijarse aparecen 16 veces en la carta, por lo que tenía mucha importancia para Pablo que los filipenses reconocieran la importancia y las implicaciones que tiene una vida llena del gozo del Señor, pero antes de profundizar en la implicación del gozo en la vida del creyente, me gustaría que hagamos un análisis de la palabra gozo. Según la Concordancia de Strong: “χαρά jará; de 5463; alegría, i.e. deleite calmo:—alegría, gozo, gozoso.”6

En Vine vemos las siguientes explicaciones para la palabra gozo: 1. eufrosune (eujfrosuvnh) se traduce «gozo» en Hch 2.28 (RV, RVR, RVR77, VM, Besson, LBA, NVI); «alegría» en 14.17 (RV, RVR, RVR77, VM, Besson, LBA, NVI). 2. cara (carav), gozo, deleite (relacionado con cairo, gozarse, regocijarse). Se encuentra frecuentemente en Mateo y Lucas, una vez en Marcos (4.16). No se halla en 1 Co, aunque el verbo se usa allí en tres ocasiones; pero es frecuente en 2 Co, donde el nombre se usa en cinco ocasiones (para su uso en 7.4, véase la Nota más adelante), y el verbo en ocho ocasiones, lo que es 5

Guillermo Hendrikson, Filipenses Comentario del Nuevo Testamento, CRC World Literature USA 1981. Pág. 28-29. 6

James Strong, Nueva Concordancia Strong, Editorial Caribe 2002 USA.

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sugerente del alivio sentido por el apóstol en comparación con las circunstancias de la primera epístola; en Col 1.11: «gozo» (VM: «con regocijo»). En ocasiones, este término se usa, por metonimia, de la ocasión o causa del gozo (Lc 2.10; lit.: «os anuncio un gran gozo»); en 2 Co 1.15, en algunos mss. En lugar de caris, que es la lectura apoyada por la gran masa de autoridades (RV, RVR, RVR77, Besson: «tuvieseis una segunda gracia»… Fil. 4.1, donde los lectores reciben la apelación de gozo del apóstol; igualmente en 1 Ts. 2.19, 20; Heb. 12.2, del objeto del gozo de Cristo; Stg. 1.2, donde se relaciona con la entrada en diversas pruebas; quizás también en Mt. 25.21, donde algunos consideran que el término significa, de manera concreta, las circunstancias que acompañan a la cooperación en la autoridad del Señor. La persecución por causa de Cristo.7 Aunque de todas las palabras en griego para gozo, la que considero que describe mejor en la carta el apóstol Pablo, es xapá, porque nos describe el sentir de un hombre preso en Roma, enamorado de Cristo y dispuesto a morir por causa de la predicación del evangelio, el había entendido la clave de la vida del cristiano, aprender a contentarnos con la voluntad de Dios, en otras palabras, vivir en sintonía con la voluntad de Dios, el mismo escribió. “Porque para mí, seguir viviendo es Cristo, y morir, una ganancia. Y si al seguir viviendo en este cuerpo, mi trabajo puede producir tanto fruto, entonces no sé qué escoger. Me es difícil decidirme por una de las dos cosas: por un lado, quisiera morir para ir a estar con Cristo, pues eso sería mucho mejor para mí; pero, por otro lado, a causa de ustedes es más necesario que siga viviendo”. (1:21-24)8 Xapá fue lo que experimento Jesús en el Getsemaní en Mateo 26:42. Más que disfrutar del dolor que tendría que vivir, la clave del gozo estaba en contentarse con la voluntad del Padre para su vida.

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W.E. Vine, Diccionario Expositivo, Editorial Caribe en USA 1995.

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La Biblia Dios Habla hoy

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El pastor Samuel Pérez Millo cita al Dr. Lacueva en su Comentario Exegético de Mateo hablando del Getsemaní: “Fue oído ¿en qué?; ¿en sus gritos por verse libre de la copa del dolor? No, sino en que se cumpliera el destino que el Padre le había asignado (hágase su voluntad)”. 9 Pablo deseaba que los hermanos en la iglesia de Filipo entendieran que el verdadero gozo no es el que podemos experimentar cuando todas las cosas nos van bien, sino en aquellos momentos de nuestras vidas donde no encontramos sentido para el sufrimiento. Es ahí cuando surge en xapá, aceptar con beneplácito la voluntad de Dios para esta circunstancia. Será así como aprenderemos a ver nuestras vidas bajo la perspectiva de Dios y no de nosotros mismos. III. Implicaciones del gozo en la vida del creyente. Hemos entendido que el gozo que tiene tres implicaciones en la vida del creyente, una espiritual, otra emocional y por último una implicación física. Si hay un área en la vida del creyente por donde nuestro mayor enemigo el diablo y sus demonios nos tratan de destruir es tratando de robarnos el gozo, porque si perdemos en gozo, nos desanimamos en nuestra relación con Dios, nos deprimimos porque nos falta el sentido de vivir y nos enfermanos porque nuestras defensas disminuyen con la tristeza. Pablo dice en el capitulo 4:4: “Alégrense siempre en el Señor. Repito: ¡Alégrense!”

A. Implicación espiritual. “Ningún hombre vive plenamente, sino vive plenamente en su espiritualidad”10

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Samuel Pérez Millo, Comentario Exegético al Texto Griego del Nuevo Testamento, Editorial CLIE Barcelona 2009. 10

Judith Couchman. Desayuno del alma, Editorial Peniel en Argentina 1998.

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Pablo dice en el capitulo 4:13: A todo puedo hacerle frente, gracias a Cristo que me fortalece.

Cuando nuestras vidas son afectadas por las dificultades de la vida, el diablo no pierde el momento para atormentarnos y desanimarnos, y especialmente en nuestra relación con nuestro creador. Recuerdo como el pueblo de Israel en el desierto había perdido el gozo con el que había salido de Egipto. Aquel pueblo lleno de gozo, ánimo y alegría, ahora era un pueblo triste, amargado y quejoso; había perdido su primer amor, fruto del desánimo que había entrado en sus corazones. Lo primero que sucedió como fruto de lo anterior comentado, fue que se hiciera otro dios, a la imagen de los dioses de Egipto. En otras palabras descendieron romper el pacto con su creador y adorar a otro dios. Cuando perdemos el gozo, comenzamos a perder nuestra confianza en Dios, y comenzamos a hacernos dioses, ídolos humanos que puedan responder a nuestras necesidades, cuando el único que puede llenar nuestra alma necesitada es Dios. Él es la única fuente de gozo, no nuestra economía, ni aún la iglesia. Pablo quería que los hermanos que sufrían entendieran y vieran su condición en la que él se encontraba preso en Roma, pero sabía que todo lo podía en Cristo. Les estaba trasmitiendo esperanza, les estaba diciendo, que pueden confiar en Dios, que no deben perder el gozo. 16 veces menciona la palabra gozo y regocijo en la carta, porque él sabe que el gozo es lo que les mantendría firmes cuando la persecución y el sufrimiento se incrementaran en sus vidas. B. Implicación emocional. “No lo digo porque yo esté necesitado, pues he aprendido a contentarme con lo que tengo. Sé lo que es vivir en la pobreza, y también lo que es vivir en la abundancia. He aprendido a hacer frente a cualquier situación, lo mismo a estar satisfecho que a tener hambre, a tener de sobra que a no tener nada. A todo puedo hacerle frente, gracias a Cristo que me fortalece”. (4:11-13)

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Pablo gozaba de una buena estabilidad emocional, las dificultades no había podido destruir a este hombre, ¿pero cuál era su secreto? Porque la realidad es que cuando perdemos el gozo, nuestras emociones se ven afectadas, nos sentimos desanimados, y solemos terminar deprimidos. Considero que nuestras vidas son un todo, no solo nos vemos afectados espiritualmente como

hemos

visto anteriormente, sino

además

emocionalmente y físicamente. Gordon MacDonald comenta en su libro, “Ponga en orden su mundo interior”: “En la vida de Juan el Bautista hay toda clase de cualidades especialmente dignas de ser admiradas. En ellas vemos una tranquila paz que no está relacionada con la seguridad de una profesión. A menudo dedico tiempo a personas cuyas carreras han fracasado de repente…. Esas circunstancias revelan que quizá su vida estuviera construida sobre una base profesional, en vez de sobre la firmeza y la estabilidad de un mundo interior en el que Dios habla. Juan manifestó también un tipo de gozo que no debe de confundirse con la versión moderna de la felicidad (un estado mental en que todo sale bien), cuando otros pensaban que a él tal vez le preocupaba el terminar como un fracasado, pudieron ver que en realidad estaba bastante satisfecho a pesar de que lo estaba abandonando su auditorio.”

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Como citábamos anteriormente, el gozo es contentarnos con la voluntad de Dios para nuestras vidas, aunque considero que es algo sobrenatural, porque humanamente no es posible estar lleno de gozo, mientras perdemos a alguien a quien amamos, o atravesamos por alguna enfermedad que nos produce dolor. El gozo viene de Dios y Pablo al escribirles a los Gálatas en el capitulo 5:22, presenta el gozo como un

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Gordon MacDonald, Ponga en orden su mundo interior, Editorial Betania Puerto Rico 1989.

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fruto del Espíritu. Por lo tanto no es posible tener gozo (xapá) si no hemos nacido de nuevo; no es algo natural, es un resultado de tener al Espíritu Santo en nuestros corazones. Además, este fruto estará sujeto a nuestra dependencia diaria del Espíritu como citábamos anteriormente. Está dependencia la podremos mantener a través de las disciplinas espirituales, como la oración, el ayuno, la meditación, la comunión con otros hermanos, el estudio de la Palabra. Dennis J. Mock nos comenta sobre esta dependencia: “Sin el ministerio del Espíritu Santo en la vida del creyente no habría crecimiento en él hacía la madurez espiritual.”12 Es necesario que hagamos de las disciplinas espirituales nuestra arma, para que Dios produzca a través de su Espíritu el gozo que necesitamos para vivir en este mundo como hijos de Dios. Muchas serán las crisis que afectarán nuestras emociones, pero si cultivamos una fuerte relación con Dios, a través de la dependencia de él por medio de su Palabra, la oración, la adoración y la meditación, podremos decir como Pablo en el capitulo 1:21. “Porque para mí, seguir viviendo es Cristo, y morir, una ganancia”. Dios es la fuente inagotable de estabilidad emocional frente a las dificultades y sufrimientos de esta vida. El secreto de Pablo para una vida estable emocionalmente llena de gozo en medio de tanto sufrimiento era una dependencia total de Jesucristo diariamente, no solo en los momentos de dificultad. Él sabía que su mundo interior dependía de su relación con su creador. C. Implicación física.

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Dennis J. Mock, Manual de vida Espiritual, Impreso en Denton USA 1995.

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“Un instante de gozo del corazón vale más que dos horas de placer de los sentidos. “13 (August von Kotzebue) En la Biblia de Estudio de las Américas dice en el Salmo 51:8. “Hazme oír gozo y alegría, Haz que se regocijen los huesos que has quebrantado”.

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Cuando nuestras vidas se encuentran desanimadas sin gozo, nuestro cuerpo físico que está conectado con nuestro espíritu y con nuestras emociones, comienza a experimentar dolencias musculares. Se han hecho varios estudios donde se revela que cuando nos encontramos deprimidos nuestras defensas inmunológicas disminuyen, permitiendo la entrada de enfermedades oportunistas. Algunas de las opiniones sobre el gozo como terapia frente a nuestras enfermedades física: La risa está localizada en la zona prefrontal de la corteza cerebral, la parte más evolucionada del cerebro. En esta zona, según los expertos, reside la creatividad, la capacidad para pensar en el futuro y la moral. Sin embargo, conforme cumplimos años y se nos supone más sabios, perdemos la espontaneidad de dejarnos llevar por la risa, de buscar la carcajada o de encontrar la parte cómica a las situaciones. Por eso, hay veces que conviene aprender a reír, o a recordar cómo se reía. Sigmund Freud atribuyó a las carcajadas el poder de liberar al organismo de energía negativa. Esta capacidad fue científicamente demostrada cuando se descubrió que el córtex cerebral libera impulsos eléctricos negativos un segundo después de comenzar a reír. En lógica relación con esta evidencia, en los últimos lustros se ha afianzado la risa como terapia.

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http://www.sabidurias.com/tags/gozo/es/9982

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Biblia de Estudio de las Américas

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Cuando reímos, el cerebro emite una información necesaria para activar la segregación de endorfinas, específicamente las encefalinas. Estas sustancias, que poseen unas propiedades similares a las de la morfina, tienen la capacidad de aliviar el dolor, e incluso de enviar mensajes desde el cerebro hasta los linfocitos y otras células para combatir los virus y las bacterias. Las endorfinas desempeñan también otras funciones entre las que destaca su papel esencial en el equilibrio entre el tono vital y la depresión. De ellas depende algo tan sencillo como estar bien o estar mal. Como se puede comprobar, aprender a reír es algo más importante de lo que parece a simple vista.

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Por lo tanto, no permitamos que el enojo, el desanimo y las mentiras del diablo hallen cabida en nuestras mentes, porque su único deseo es enfermarnos y alejarnos de nuestra satisfacción de seguir a Cristo. Como pastores o líderes siempre estamos sujetos a presión, stress y agotamiento. John Sanford, consejero pastoral aconseja: “Todo hombre necesita aprender a vivir su profesión. Tenemos que pensar que nuestro trabajo es como una carrera de un corredor de largas distancias que no se puede agotar corriendo la primera parte de la carrera a un paso que no va a poder mantener”.

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“No se aflijan por nada, sino preséntenselo todo a Dios en oración; pídanle, y denle gracias también. Así Dios les dará su paz, que es más grande de lo que el hombre puede entender; y esta paz cuidará sus corazones y sus pensamientos por medio de Cristo Jesús”. (4:6) Tenemos que desafiarnos a confiar en Dios y aprender a gozarnos en nuestro ministerio, y especialmente en toda nuestra vida.

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http://www.atinachile.cl/content/view/94372/La-ciencia-lo-avala-reirse-mejora-la-salud.html

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H.B London; Neil B Wiseman, Pastores en alto riesgo, Editorial Unilit USA 2005.

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CONCLUSIONES “No se aflijan por nada, sino preséntenselo todo a Dios en oración; pídanle, y denle gracias también. Así Dios les dará su paz, que es más grande de lo que el hombre puede entender; y esta paz cuidará sus corazones y sus pensamientos por medio de Cristo Jesús”. (4:6) El gozo del Señor en nuestras vidas es un resultado de una relación profunda con el Espíritu Santo a través de las disciplinas espirituales. No tiene que ver solo con una vida llena de alegría, sino con un estado de aceptación de la voluntad de Dios para mi vida. Este fruto tiene tres implicaciones en nuestras vidas: 1. Produce una fuerte conexión con Dios. 2. Produce estabilidad emocional en la vida del creyente. 3. Produce un estado físico de bienestar.

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BIBLIOGRAFÍA

1. http://www.frasescelebres.net/frases-de-alegria.html 2. González, Rudy, Apuntes de la clase de Epístolas Pastorales A. 3. Henry Mathew, Comentario Bíblico, Editorial CLIE en Barcelona 1999. 4. Hendrikson, Guillermo; Filipenses Comentario del Nuevo Testamento, CRC World Literature USA 1981. Pág. 28-29. 5. Vine, W.E; Diccionario Expositivo, Editorial Caribe en USA 1995. 6. Samuel Pérez Millo, Comentario Exegético al Texto Griego del Nuevo Testamento, Editorial CLIE Barcelona 2009. 7. Couchman. Judith; Desayuno del alma, Editorial Peniel en Argentina 1998 8. MacDonald, Gordon; Ponga en orden su mundo interior, Editorial Betania Puerto Rico 1989. 9. Mock, Dennis J.; Manual de vida Espiritual, Impreso en Denton USA 1995. 10. http://www.sabidurias.com/tags/gozo/es/9982 11. http://www.atinachile.cl/content/view/94372/La-ciencia-lo-avala-reirse-mejorala-salud.html 12. London, H.B; Neil B Wiseman, Pastores en alto riesgo, Editorial Unilit USA 2005.

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