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Página 24/LA NACION
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Miércoles 30 de mayo de 2007
Récord en la montaña
Riesgo sanitario en la Capital: el gobierno puso en marcha un plan de higiene
Por los desechos de comida, de noche las ratas invaden la Costanera Norte Se alimentan de los desperdicios de los puestos ambulantes; un equipo especial sale a combatirlas Por Pablo Tomino De la Redacción de LA NACION AP
La higiene de los puestos de venta ambulante de comida en la Capital es un tema que inquieta a las autoridades, aunque las irregularidades aún perduran en distintos puntos de la ciudad. Con un agravante: en la Costanera Norte, sobre la avenida Rafael Obligado –en la zona que se extiende desde el complejo Punta Carrasco hasta el inicio de Ciudad Universitaria–, abundan las ratas, ya que durante la noche se alimentan de los desechos de comida que generan los puestos callejeros, además de los residuos que dejan los pescadores en el lugar. Por esa razón, la Subsecretaría de Política y Gestión Ambiental del Ministerio de Medio Ambiente, junto con la Fundación Mundo Sano y especialistas de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la Universidad de Buenos Aires (UBA), hace días comenzó un programa sostenido para reducir la cantidad de roedores en el área, un problema que, acusan, es de vieja data. Hernán Díaz Saubidet, subsecretario de Política y Gestión Ambiental del gobierno porteño, dijo a LA NACION: “Pusimos en marcha un programa que se extenderá hasta septiembre para hacer estudios por las enfermedades que podrían transmitir estos roedores. Esto no se resuelve en un solo día; tardaremos unos tres meses en hacer un análisis preciso de la situación. La gente que come en los carritos contribuye a la presencia de ratas por la suciedad que genera. Si esos lugares estuviesen limpios, no habría roedores”. Lo cierto es que en la primera etapa de la desratización se cuantificará la población de roedores y se los combatirá mediante la colocación de cebos, mientras que, luego, se colocarán cebaderas y se comprobarán los resultados. Según los especialistas, la Costanera es un lugar propicio para el desarrollo de la rata Rattus norvegicus, debido al acceso al agua. “La Costanera Norte es el sitio óptimo para su proliferación, porque hay una gran variedad de oferta alimentaria generada por la pesca y los puestos ambulantes de comida. Nosotros controlamos las madrigueras con cebos protegidos para que no estén al alcance de la gente; por las noches, recolectamos los animales muertos, que son desechados mediante el circuito de eliminación de residuos patogénicos, para evitar que los cadáveres contaminen”, explicó a LA NACION Héctor Coto, director de la Fundación Mundo Sano. “Los puntos más críticos son la
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Yanagisawa, el alpinista japonés
Alcanzó la cumbre del Everest a los 71 años
MAXIE AMENA
Los desperdicios de comida que quedan en la zona próxima a los puestos callejeros, en la Costanera Norte, ocasionan la presencia de ratas
plazoleta que está frente al acceso al Aeroparque, los lugares cercanos a Punta Carrasco y el otro extremo, próximo a Ciudad Universitaria. Hay trampas para animales y así estimamos los índices de abundancia. En cuanto a la población de ratas, estamos muy por encima de los valores sanitarios normales”, dijo Coto. Consultado sobre si la gente que consume alimentos en los puestos de venta ambulante corre riesgo de contraer alguna enfermedad
Como en Soldati ■ El sistema intensivo de desratización que se aplica en la Costanera ya fue utilizado en Villa Soldati en diciembre pasado. Según el gobierno local, al comienzo del programa, el 10 de octubre último, había roedores en el 46% de las viviendas. Finalizada la segunda etapa, el 20 de diciembre, se registró la presencia de un 10,4% de roedores en las casas. Y en las madrigueras se redujo de 16% a 0,3% la presencia de ratas.
Retiro de un árbol en Palermo “Hace más de dos años que hemos pedido el retiro de un árbol, que está seco y ha levantado la vereda, pero el gobierno no nos ha dado una respuesta. El árbol se encuentra al lado del edificio de la calle Laprida 1833, entre French y Peña. La raíces levantaron la vereda, tanto del edificio en cuestión, como de la casa de al lado. Es una calle de libre estacionamiento y, a media cuadra de allí, hay un escuela primaria”, contó la vecina de Recoleta Amalia Ordóñez, que asegura haber hecho el reclamo correspondiente sin obtener una solución.
que transmitan los roedores, dijo: “La respuesta es «ni»: la presencia de roedores siempre preocupa, pero estos animales, en teoría, no deberían estar en contacto con la comida, porque está al resguardo. En realidad, no es un argumento de peso como para preocupar a las personas”. LA NACION recorrió ayer la Costanera y no advirtió presencia de roedores durante la tarde. “Hay roedores, pero desde que empezaron a desratizar, aparecen muchas ratas muertas. Eso es muy positivo. Pero no hay que confundir: la comida que aquí se vende no está en contacto con estos animales. Y la gente también deja muchos desperdicios en el suelo”, dijo Miguel, un encargado de uno de los puestos frente al Aeroparque. El programa de desratización en la Costanera Norte incluirá, también, charlas con los puesteros para que tomen conciencia de la necesidad de mantener los residuos fuera del alcance de los roedores y extremar las medidas en cuanto a los desperdicios que generan. Y se repetirá en la Costanera Sur, puesto que allí también se denunció la presencia de roedores.
Más calles peligrosas “En la intersección de Rodríguez Peña y Marcelo T. Alvear, y en Paraguay y Rodríguez Peña, las señalizaciones de línea blanca están totalmente borradas, lo que significa un peligro para cruzar, pues los autos se detienen a punto ya del cruce, lo que convierte en riesgosa a la zona. Los peatones tienen serias dificultades para cruzar, especialmente los ancianos”, contó Aída del Valle Ramos. La vecina agregó: “Ruego que se solucione a corto plazo. Muchas palabras de las autoridades, pero hacen poco, en realidad”.
Alcanzar la cumbre de la montaña más alta del mundo –el Everest, en la cadena del Himalaya– es uno de los principales anhelos de cualquier alpinista que se reconozca como tal. No importan su nacionalidad, idioma, cultura o edad. Y si en el intento por conseguirlo es posible batir un nuevo récord, mucho mejor. Hace una semana, un montañista japonés, de 71 años, logró alcanzar el pico más alto del mundo, a 8848 metros de altura, en Nepal, y así se convirtió en la persona de más edad en conquistar esta cumbre, que integra el conjunto de los 14 montes de más de 8000 metros del Himalaya, distribuidos entre Nepal, la India, Paquistán y China. Según informó ayer la agencia de noticias nipona Kyodo, el alpinista Katsusuke Yanagisawa hizo cumbre en el monte Everest el 22 del actual, con 71 años, dos meses y dos días. “Me siento a gusto y muy feliz. Fui capaz de batir el récord gracias a todos los amigos que me apoyaron”, dijo Yanagisawa a la agencia de noticias japonesa. De esta manera, superó en seis meses el récord de otro escalador, precisamente un compatriota de Yanagisawa, que coronó el techo del mundo en 2006.
Profesor jubilado
GENTILEZA FUNDACION MUNDO SANO
Durante la noche, especialistas atrapan a los roedores con trampas
Veredas reparadas en Caballito En la calle San José de Calasanz al 600, sobre la mano derecha, hacía más de seis meses que parte de las veredas estaban rotas y los vecinos habían tapado uno de los pozos profundos con escombros para evitar posibles accidentes. Pero la semana última fue solucionado por el Ministerio de Espacio Público del gobierno porteño. “Habíamos hecho el reclamo hacía tiempo, y no pasaba nada. Pero, por suerte, la vereda ya fue reparada y el lugar quedó apto para transitar”, contó la vecina María Mangiafico.
Pavimento que se hunde En Azcuénaga al 1100, casi en la esquina con la avenida Santa Fe, se ha hundido el pavimento y se formó un pozo muy profundo. “Tanto, que falta poco para conocer las entrañas de nuestro barrio, que se hunde día tras día sin que nadie repare en él. La Guardia Urbana se ocupa de que los peatones no pongan los pies fuera del cordón de la vereda, pero al bache no le prestan atención”, dijo la vecina Cristina Ezcurra. Y agregó: “En la parada del colectivo 95, también ha nacido un enorme bache”.
Katsusuke Yanagisawa realizó el ascenso junto con una expedición neozelandesa, tras abandonar el campo base en la región autónoma del Tíbet, el pasado 8 de abril. Este avezado alpinista, profesor jubilado de un instituto de la ciudad de Ueda, en la provincia de Nagano (centro de Japón), logró superar la marca anterior que poseía, hasta este momento, Takao Arayama, otro montañista que había logrado el mismo reto en 2006, pero a los 70 años, siete meses y 13 días. A su vez, Arayama ya había batido por sólo tres días la marca anterior de Yuichiro Miura, un esquiador profesional, aunque ya retirado, y también japonés, que subió a la cumbre del monte Himalaya en 2003.
Piden que no se enrejen las plazas “¡No puedo creer cuando veo que están enrejando todas las plazas del barrio de Recoleta! He visto en otros barrios rejas bajas que no obstruyen la visión de las plazas y que permiten el acceso durante el día y la noche. Pero en Recoleta nos están enrejando todos los espacios verdes. En lugar de rejas, ¡debería aumentar la seguridad!”, sostuvo el vecino Santiago Pusso. En tanto, otros vecinos reclamaron que en la plaza Emilio Mitre, en Las Heras y Pueyrredón, están encendidas las luces durante todo el día y las autoridades no lo advirtieron.