La historia de una Ballena
con “GARRA”
Victoria (Ballena 200): la madre de Garra “Victoria fue bautizada por los habitantes de Puerto Pirámides en honor a Vicky Rowntree, Directora del Programa Ballena Franca Austral” Edad estimada en 2011: al menos 45 años
Años de observación: 1972, '73, '74, '76+, '77, '79+, '85+, '91, '94, '97+, 2001 con Garra, 04+. Ubicación: Costa Externa, Golfo San José y Golfo Nuevo. (El símbolo + indica "con cría")
Sus Hermanos
El 25 de agosto de 2001, investigadores del Instituto de Conservación de Ballenas avistaron a Victoria (la ballena 200 del catálogo) en el Golfo San José, y la fotografiaron desde los acantilados junto a su última cría. Debido a una llamativa mancha blanca en el lomo del ballenato similar a la huella dejada por el arañazo de una garra, lo bautizaron "Zarpazo". Con al menos dos meses de edad, Zarpazo fue reidentificado durante el relevamiento aéreo de la población de ballenas realizado a fines de octubre, cuando aún nadaba junto a su madre en el mismo golfo antes de su primera migración. El 25 de septiembre de 2002, una ballena juvenil se enredó en las cadenas del fondeo de un catamarán de avistajes en Puerto Pirámide. Los guías balleneros y buzos locales fueron los primeros en intentar liberarla. La imposibilidad de acceder a las cadenas en el agua los estimuló a tomar la original decisión de vararla para liberarla en la bajamar.
Ballena 200-76 Año de nacimiento: 1976 Años de observación: 1976, '77, '80, '85, '89, y '94 (nunca con cría, probablemente sea macho) Ubicación: Costa Externa, Golfo San José y Golfo Nuevo.
Con el esfuerzo de toda la comunidad, la ballena fue liberada de las cadenas y mantenida fresca en espera de la marea alta. Al atardecer pudo volver al mar, y fue noticia en muchos medios de comunicación. Debido a la llamativa marca en su lomo, este joven macho fue rebautizado como "Garra". El hijo más joven de Victoria había regresado a Valdés con un año de edad.
Ballena 200-79 Año de nacimiento: 1979 Años de observación: '79, '80. Ubicación: Costa Externa.
Ballena 200-85 Año de nacimiento: 1985 Años de observación: '85. Ubicación: Costa Externa.
Los enmallamientos en redes y sogas y las colisiones con barcos son las principales causas de muerte de origen humano entre las ballenas francas del Atlántico Norte.
Ballenato no identificado
Los golfos de Península Valdés aún no tienen alta densidad de sogas, redes y cadenas. Sin embargo, la historia de Garra nos muestra que estos riesgos también existen aquí. Debemos entender las necesidades de hábitat de las ballenas para lograr su conservación a largo plazo.
Año de nacimiento: 1997 Años de observación: '97. Ubicación: Golfo Nuevo.
Garra afortunadamente pudo sobrevivir a pesar de las heridas y al estrés sufrido. Fue reavistado en septiembre del año 2006. Su supervivencia demostró cómo el esfuerzo colectivo puede tener un rol esencial en la conservación de las ballenas en nuestros mares.
Ballena 200-01 (Garra) Año de nacimiento: 2001 Años de observación: '01, '02, ‘06 Ubicación: Golfo San José
Para conmemorar el día en que toda una comunidad se unió para rescatar a Garra, el 25 de septiembre se declaró Día Nacional de la Ballena Franca Austral.
y Golfo Nuevo.
Juveniles Curiosos La curiosidad e inexperiencia de las ballenas juveniles hace que sean especialmente vulnerables a diversas amenazas. Es muy probable que Garra se haya separado de su madre días o semanas antes de quedar atrapado. Las ballenas francas pasan su primer año de vida junto a sus madres, lactando y aprendiendo de ellas. Las ballenas juveniles parecen disfrutar del contacto con algas marinas, con las que frecuentemente juegan frotándolas sobre sus cuerpos sin ningún riesgo. Sogas y cadenas tal vez sean igualmente atractivas… pero letales para las curiosas ballenas. Garra comenzó su vida como ballena independiente de manera bastante alarmante. Esta población de ballenas habita durante parte del año una zona de tráfico marítimo y actividad pesquera en crecimiento. Por ello, es importante restringir la velocidad de los barcos y evitar la permanencia de sogas y redes en hábitats críticos. Evitaremos así que el área de cría se transforme en una zona de amenaza de muerte para las ballenas francas de la Patagonia.
Enmallamientos En Península Valdés fotografiamos ballenas con sogas en su boca y rodeando su pedúnculo caudal. Es el caso de “Azul”, una joven ballena avistada en el Golfo San José en 2004, con una soga enredada en su pedúnculo caudal, que al rozarle la piel le causó heridas en el borde anterior de su cola. Otra ballena fotografiada en el Golfo Nuevo en 2009 también arrastraba sogas en su cola Las redes y sogas, que abundan en los mares, son una trampa mortal para ballenas y delfines. Los animales enredados mueren ahogados, por deterioro en su salud, por cortes en su cuerpo o por la imposibilidad de alimentarse cuando las redes se enganchan en sus barbas.
Esta población de ballenas habita durante parte del año una zona de tráfico maritimo y actividad pesquera en crecimiento. Por ello, es importante restringir la velocidad de los barcos y evitar la permanencia de sogas y redes en hábitats críticos. Evitaremos así que el área de cría se transforme en una zona de amenaza de muerte para las ballenas francas de la Patagonia
La producción de este panel ha sido posible gracias al apoyo de:
Vos podés ayudar Adoptá una Ballena
www.icb.org.ar