lunes, 03 de junio de 2013
26 AÑOS NO ES NADA
Uno de nuestros nuevos colaboradores hace pocos días me preguntó: ¿Porqué en la base de datos tenemos algunos textos solo en mayúsculas y sin eñes?. La pregunta me sirvió para contarle una historia que se inició hace mas de 26 años. A principios de la década de los 80 mientras reinaban los computadores de categoría “Main Frame”: IBM, NCR, Digital, Prime, Burroughs, General Automation, Univac, Honeywell, y otras pocas marcas, la industria electrónica empezó a producir microprocesadores programables (Intel 8080, Zilog Z80, Motorola 6800) de donde nacería una nueva tecnología especializada: la computación personal. Tímidamente al principio, surgen el Sinclair ZX81, el TRS80, el Commodore 64, Apple II, que evolucionan posteriormente a equipos mas potentes y versátiles como el IBM PC, Apple Lisa y MacIntosh. Convivían en 1985 los “centros de cómputo” (con aire acondicionado, piso flotante, discos removibles, cintas magnéticas e impresoras de impacto, administrados por “gurús informáticos”), con los nuevos juguetes “personales” que podían ser operados en casa por cualquier persona. En esa época, pocos podrían predecir que solamente en una década, todos los gigantes de la informática iban a desaparecer, y se daría paso a una nueva industria que transformaría a la sociedad. Es precisamente en esa extraordinaria coyuntura de cambio tecnológico, cuando se produce la creación de LEXIS S.A., en donde sus fundadores apuestan a la nueva tecnología emergente, en una utópica visión de administrar, almacenar y distribuir el conocimiento jurídico a través de computadores personales, en un mercado que se encontraba en ese entonces dominado por las imprentas. Ante nuestros ojos desaparecieron el telex, el fax, los discos de vinilo, los casettes, los diskettes, los CD´s, el VHS, la película fotográfica, las pantallas CRT, las impresoras matriciales, y los teléfonos celulares. Hoy convivimos con smartphones “touch”, pantallas LED 3D, tablets con conexión WiFi; y con una hiperconectividad a través de TIC´s y redes sociales. Nos hemos transformado en consumidores y productores de información, desde y para toda la humanidad. En las pasadas dos décadas, la tecnología informática ha incrementado su capacidad de procesamiento y almacenamiento en UN MILLON DE VECES, y los costos han disminuido MIL VECES. La historia demostró que la apuesta de los años 80 fue la ganadora. La producción de libros en papel ha declinado significativamente comparada con la producción digital. La Enciclopedia Británica después de 244 años ininterrumpidos, cerró su imprenta el 2010. Los libros impresos hoy no pueden competir con las bases
de datos documentales.
¿Y cuál fue la respuesta a nuestro joven colaborador? Pues muy simple: Ese computador de los 80, un GA-DM250, en donde se comenzó a cargar la información jurídica, no tenía minúsculas, acentos, ni eñes. Y actualmente mantenemos algunos de esos textos por simple nostalgia.
Leonardo Hernández Walker, MBA, MPA Presidente Ejecutivo LEXIS S.A.