SEGURIDAD | 17

| Lunes 19 de noviembre de 2012

SEGURIDAD Edición de hoy a cargo de Fernando Rodríguez | www.lanacion.com/seguridad

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Caso Candela: hay una teoría que la Justicia todavía no investigó contradicciones. Mientras la fiscalía avanza con su pista

inicial, sigue sin investigarse la posible venganza por drogas

Gustavo Carabajal LA NACioN

Como una moneda, la investigación del secuestro y homicidio de Candela Sol Rodríguez, ocurrido entre el 22 y el 31 de agosto del año pasado, en Villa Tesei, tiene dos caras. Uno de sus lados representa a la investigación “oficial”, la pista que se reactivó la semana pasada con las detenciones de dos sospechosos que habían sido procesados dos meses después del asesinato y que este año fueron excarcelados por deficiencias en la pesquisa. La otra cara es la del expediente reservado que se formó en la comisión especial del Senado bonaerense para colaborar con la investigación del homicidio. En ese legajo secreto figura la declaración de un testigo –cuya identidad se mantiene en reserva– que aportó los nombres de los dos sospechosos que mantuvieron cautiva a Candela, las direcciones de las tres viviendas en las que la tuvieron secuestrada y la identidad del asesino. Según este testigo, la niña de 11 años fue secuestrada por un conflicto que involucra a integrantes del entorno familiar de la víctima por actividades desarrolladas en la villa Corea, de San Martín, y no en Morón o Villa Tesei, como apunta la investigación oficial de la Justicia. Además sostuvo que la niña estuvo cautiva en villa Corea y no en Villa Tesei. A pesar de las precisiones que aportó este testigo, esa pista –que alude a la presunta actividad de narcopolicías– nunca fue investigada. La línea de la venganza No obstante eso, el abogado de la familia de la víctima, Fernando Burlando, insistió en que no existe en la causa ningún elemento que vincule el secuestro y homicidio de Candela con el narcotráfico.

cÓrdoba

Mató a su hijo de un escopetazo y luego se suicidó Un hombre de 36 años mató de un escopetazo a su hijo de un año y se suicidó, después de una discusión con su esposa, en la localidad cordobesa de Jesús María. El hecho ocurrió anteayer, alrededor de las 19, cuando el hombre desapareció con el niño en su Peugeot 405. El subcomisario Héctor Carmona, de la departamental Colón, dijo a la agencia Télam que a las 18.57 recibió una llamada que denunciaba que el hombre “había salido en auto con la criatura, aparentemente tras discutir con su esposa”. La policía comenzó una búsqueda y encontró al hombre y a su hijo muertos bajo un puente en el paraje Dos Ríos, próximo al río Jesús María.ß

“Antes de tomar cualquier decisión, el fiscal escuchó a 37 testigos, quienes aseguraron que ningún integrante de la familia de Candela estaba relacionado o tuvo alguna vinculación con la venta de drogas. Así que, a partir de esas declaraciones, se pudo abandonar el tema de un posible ajuste de cuentas por el tema drogas y se avanzó sobre lo que realmente fue: una venganza contra el padre. Acá nadie va a descansar hasta encontrar a los responsables de este homicidio”, expresó Burlando. La semana pasada, el fiscal Mario Ferrario, que reemplazó a su colega Marcelo Tavolaro, luego de que los jueces de la Cámara de Apelaciones de Morón recomendaron el apartamiento del primer representante del Ministerio Público que investigó el secuestro y homicidio de Candela, decidió seguir con la línea trazada por su antecesor y acusó a Hugo Bermúdez Rodríguez y a Leonardo Jara por su presunta vinculación en el asesinato. En el escrito de 50 páginas que presentó para fundar los pedidos de detención de Bermúdez Rodríguez y Jara, el fiscal Ferrario detalló la existencia de declaraciones testimoniales que ya estaban en el expediente y que vinculaban a ambos con el asesinato, y recordó que la Cámara de Apelaciones no decretó la nulidad del hallazgo del ADN de Candela en la casa situada en Kiernan al 900, de Villa Tesei, donde se señaló que habría estado cautiva. Según fuentes judiciales, el fiscal sostuvo esta afirmación a partir de una cuestión horaria y en el testimonio de una genetista que concluyó que no “les habría dado el tiempo a los investigadores de haber plantado el ADN de la niña porque uno de los testigos aportó el dato de la vivienda minutos después de la medianoche y el secuestro del frasco de vidrio se concretó tres horas después”.

Pesquisas paralelas Una, de la Justicia; otra, del senado bonaerense

Candela RodRíguez AsesinAdA A los 11 Años

b la versión judicial El nuevo fiscal, Mario Ferrario, mantuvo la línea de investigación iniciada por el desplazado Tavolaro y consideró que el homicidio de la niña fue consecuencia de una venganza contra su padre, Alfredo Rodríguez, por una pelea entre integrantes de una banda de piratas del asfalto. Por eso, la semana pasada, ordenó que Bermúdez Rodríguez y Jara sean nuevamente detenidos b expediente secreto Existe un expediente reservado abierto por una comisión especial del Senado bonaerense que revisó la investigación judicial-policial del caso, de la que surge que el crimen fue consecuencia de un conflicto con familiares de la niña por la venta de drogas en la villa Corea, de San Martín

aveLLaneda

Una jubilada fue quemada y por el caso fue detenida su hija Una mujer de 72 años resultó gravemente herida por quemaduras en su departamento de Avellaneda, y por el hecho una hija de ella quedó aprehendida, bajo la sospecha de haberle prendido fuego intencionalmente. El hecho ocurrió ayer al mediodía, en Suipacha 720, Sarandí. Fuentes policiales informaron a la agencia Télam que una hija de la mujer, que vive en un departamento junto al de la víctima, llamó al 911 y alertó que su madre había resultado quemada al intentar suicidarse rociándose con alcohol y prendiéndose fuego. Cuando la policía arribó al lugar hallaron a la víctima, identificada como Mirta inés Aleprandi, con lesiones desde la cintura hacia arriba,

por lo que fue trasladada al hospital Finochietto, donde ayer permanecía internada en grave estado, con quemaduras del tipo A y B. La hija de la víctima, identificada como Alejandra Fernández, de 26 años, presentaba quemaduras leves del tipo C en las manos y reiteró que su madre se había querido quitar la vida y que ella había intentado apagar las llamas y por eso también se había quemado. Sin embargo, los investigadores constataron que en la comisaría local había antecedentes de una relación conflictiva entre madre e hija. A partir de los datos obtenidos por los detectives, la joven quedó aprehendida e imputada de “lesiones graves”, a disposición de la fiscalía de turno.ß

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Para el nuevo fiscal, el secuestro y homicidio fue producto de una venganza contra Alfredo Rodríguez, el padre de Candela, pergeñada por una banda de piratas del asfalto ante la presunción de que éste se había quedado con el dinero de un asalto. La clave de una llamada Además, el nuevo fiscal tuvo en cuenta la grabación de la llamada telefónica recibida en la casa de Candela una semana después del secuestro, en la que le dijeron a la tía de la niña que consulten con Rodríguez (que estaba en prisión) sobre el destino de una no especificada suma de dinero. “Ahora sí que no vas a ver más a tu hija, ahora sí que no las vas a volver a ver. Hasta que esa c…. [la madre de la niña] no devuelva la guita, no la va ver nunca más. Que le pregunte al marido dónde dejó la guita”, rezaba el mensaje. Cuando se realizó esa comunicación, Candela ya había sido asesinada. El cuerpo de la niña fue hallado casi dos días después, en un descampado de Villa Tesei. “Se trata de una prueba fundamental. La grabación fue analizada por los peritos de la Gendarmería que concluyeron que la voz de la persona que hizo esa llamada corresponde al imputado Jara”, explicó el abogado Burlando. Jara y Bermúdez Rodríguez fueron acusados por el fiscal Ferrario de la privación ilegítima de la libertad, seguida de muerte de Candela, una figura penal para la cual se establece una condena de prisión o reclusión perpetua. Al solicitar la captura de Bermúdez Rodríguez, el fiscal explicó que el acusado “habría quemado pertenencias de la niña en el fondo de la casa situada en Cellini 4085 de Villa Tesei, donde Candela habría estado las últimas horas del cautiverio”. El representante del Ministerio Público Fiscal les habría dado crédito a ocho testigos, uno de los cuales señaló a Bermúdez Rodríguez como el presunto autor del homicidio de Candela. Todos estos elementos habían sido incorporados al expediente por Tavolaro, el fiscal que fue separado del caso. Su reemplazante, Ferrario, dejó de trabajar con la policía bonaerense, le encargó la investigación a la Gendarmería y se quedó con las declaraciones y pruebas que no fueron objetadas en la resolución de la Cámara, que decretó la excarcelación de los ocho imputados originales. Habrá que ver si la Cámara ahora le da o no la razón.ß

La PaMPa

Un hombre mató a tiros a un joven en una discusión Un joven de 25 años fue asesinado de tres tiros en Santa Rosa, La Pampa, en medio de una discusión, y la policía detuvo a un hombre. El crimen ocurrió a las 8 de ayer en una vivienda situada en Río Negro y Chacabuco. La víctima fue identificada como Claudio López, mientras que el detenido es un hombre de apellido Bustamante, de 38 años, según el subcomisario de la seccional 2ª Norberto Corbo. Al parecer Bustamante le disparó a López con un arma calibre 22 y uno de los tiros dio en el pecho y otros dos en las piernas del joven, que murió en la ambulancia mientras era trasladado al hospital local, según informó el oficial pampeano.ß

Tráfico hormiga de marihuana en ómnibus

oPerativos. La Gendarmería arrestó a tres pasajeros y les secuestró once kilos de droga En tres operativos de control en las rutas, la Gendarmería decomisó 11 kilogramos de marihuana que eran transportados por pasajeros de ómnibus de larga distancia que se dirigían desde las provincias del litoral hacia Buenos Aires. Si bien el volumen de las cargas no resulta significativo, estos hechos permitieron verificar la existencia de una ruta del tráfico de drogas que se vale del uso de los servicios regulares de transporte de pasajeros como forma de concretar un movimiento hormiga de la droga, en especial, la marihuana. Según informó la Gendarmería, personal del Escuadrón Zárate-Brazo Largo concretó un operativo de control de vehículos a la altura del kilómetro 115 de la ruta nacional 12, en un lugar cercano a la localidad entrerriana de ibicuy. En ese momento, los gendarmes efectuaron una requisa más profunda al advertir el nerviosismo exhibido por un pasajero durante

Uno de los detenidos en los procedimientos

Foto: gendarmerÍa

el control de rutina de la cabina del ómnibus, que había salido de Puerto iguazú y se dirigía a la localidad bonaerense de San Justo. Fue así como se descubrió que esa persona transportaba más de cuatro kilos de marihuana, que llevaba en paquetes adheridos a su cuerpo y en bultos ocultos en su campera. Procedimientos similares llevados a cabo en la localidad formoseña de Tatané, sobre la ruta nacional 11, finalizaron también con los arrestos de dos personas y el secuestro de paquetes de marihuana. La droga iba oculta en mochilas y, como en el otro caso, adosada a los cuerpos de los sospechosos. En ambas ocasiones, el decomiso de la marihuana fue consecuencia de los controles de ruta y de la verificación de los pasajeros en ómnibus de larga distancia. En esos casos, ante alguna actitud que llama la atención, los gendarmes demoran al sospechoso hasta verificar sus pertenencias, según se explicó.ß

Asesinaron a un policía que intentó defender al vecino

berazategui. El suboficial Rubén Fernández

recibió un tiro al tratar de frustrar un asalto

Sebastián Lalaurette LA NACioN

LA PLATA.– Un capitán de la policía bonaerense fue asesinado de un tiro en el abdomen ayer a la madrugada, cuando intentó frustrar un asalto a un vecino suyo frente a su casa de Berazategui. Con él, suman 28 los oficiales y suboficiales ultimados en lo que va del año en el área metropolitana. Se trata de Rubén Fernández, de 51 años, quien cumplía funciones en la Jefatura Departamental Quilmes, informaron ayer voceros del Ministerio de Justicia y Seguridad. Estaba asignado hacía años a tareas de entrega de correspondencia, pero también patrullaba y prestaba servicios de custodia en partidos de fútbol. La cadena de hechos que desembocó en la tragedia se inició hacia la una de ayer, cuando por lo menos tres delincuentes sorprendieron a Jorge, un vecino del barrio, cuando llegaba a su casa de la calle 13 al 1800, situada junto a la de Fernández, a bordo de su Volkswagen Gol. La esposa de Jorge se había bajado del auto para abrir el portón, cuando los ladrones entraron en acción con la intención de robarles el vehículo o, quizás, irrumpir en la vivienda y saquearla, explicaron a la nacion fuentes policiales. Según contó luego el vecino asaltado, los delincuentes, que habían llegado en un Volkswagen Bora, se metieron en su auto y lo amenazaron con armas; le quitaron el celular y la billetera; lo hicieron tirarse al piso y lo patearon. El curso de los acontecimientos denota que el policía, que vivía en la casa de al lado, oyó los ruidos, comprendió lo que ocurría y salió rápidamente para frustrar el robo. (Vecinos consultados por la prensa dijeron que siempre estaba atento a lo que sucedía en el barrio y que no era la primera vez que intervenía para evitar un ilícito.) Pero, en cuanto se identificó como policía, recibió un balazo en el abdomen. El capitán cayó al suelo, malherido. Desde el piso, hizo varios disparos con su arma reglamentaria, pero no pudo alcanzar a ninguno de los asaltantes,

28

efectivos caídos En lo que va del año, 14 policías de la bonaerense, 12 de la Federal y 2 de la Metropolitana murieron en hechos delictivos

que se subieron al Bora y escaparon. El auto fue hallado luego en la villa Los Álamos, en Quilmes. Alertados por los disparos, varios vecinos de la cuadra salieron a la calle. Uno de ellos llamó al 911; otro sacó su camioneta y llevó al capitán al hospital El Cruce, de Florencio Varela. Allí fue ingresado de urgencia en el quirófano, pero murió a la media hora, mientras era operado. Fernández estaba casado y tenía dos hijos, de 18 y 20 años. Vivía en el barrio desde hacía varios años, junto con su familia; en una casita al fondo de la suya habita su madre. “Era un excelente muchacho y un vecino bastante gaucho”, dijo ayer a la nacion un comisario que trabajó con él. Hasta anoche no había detenidos por el hecho. Por testimonios recogidos en el barrio se sabe que los ladrones tienen unos 20 años. El fiscal Daniel ichazo, del Departamento Judicial Quilmes, investiga el caso. Ya cuenta con los resultados de la autopsia y con el automóvil que utilizaron los delincuentes. El caso de Fernández es similar a otro ocurrido el 15 de octubre en el barrio porteño de Mataderos, donde el ex sargento Simón Gonçalves Martines, de 67 años y policía federal retirado, fue asesinado cuando quiso frustrar un asalto en la casa de un vecino suyo. Pero también en la provincia de Buenos Aires habían ocurrido otros hechos parecidos este año. El 24 de octubre, un policía fue herido en Villa Galicia, Lomas de Zamora, cuando se tiroteó con bandidos que asaltaban a una jubilada; en enero, otro efectivo, Néstor Aranda, fue ultimado en Banfield por ladrones que tenían de rehenes a dos mujeres.ß

Críticas al intendente de Coronel Suárez PoLéMica. Lo acusan de haber difundido datos

del secuestro y abuso que sufrió Sonia Molina Mientras Sonia Marisol Molina continúa recuperándose de las consecuencias de los tres meses en los que estuvo cautiva en la casa de la periodista Estefanía Heit y el pastor Jesús olivera en Coronel Suárez, el conmocionante caso, a falta de novedades concretas de la pesquisa, suma polémicas. Ayer, el sitio web La Brújula 24 (LB24), de Bahía Blanca, publicó que el intendente de aquel distrito del sur bonaerense, Ricardo Moccero, podría verse envuelto en un conflicto con la Justicia por el protagonismo que tuvo en el caso desde el primer día, en especial, por haber difundido detalles de la causa, en el inicio del trámite, y de exponer inconvenientemente a la propia víctima. Fuentes judiciales citadas por La Brújula 24 calificaron de “lamentable y vergonzosa” la actuación de Moccero, en relación con la detención de olivera y Heit. “El jefe comunal de Coronel Suárez dijo que vio los videos que comprometerían a la pareja; recorrió la casa donde se habrían producido los hechos; se entrevistó durante horas con la víctima, y hasta quiso filmarla en la cama del hospital”, dijeron las fuentes a LB24. “Si este señor [por el intendente] tomó conocimiento de la prueba antes que la fiscal, podría tener serios problemas y hasta se pondría en riesgo el futuro de la investigación”, insistieron las fuentes consultadas por el sitio web bahiense. Fuentes gubernamentales confiaron ayer que Moccero recibió “indicaciones” –tanto a nivel judicial como a nivel político– de que era “conveniente” que tanto él como los integrantes de su gabinete “dejen de hablar” del caso que mantiene conmocionados a los 40.000 habitantes de Coronel Suárez, donde ayer circulaban fuertes rumores de que el jefe comunal pediría una licencia,

aduciendo “razones personales”. La polémica estalló cuando comienza la cuenta regresiva hacia el jueves, cuando se prevé que Sonia Molina pueda recibir el alta médica y, acto seguido, ser trasladada a Bahía Blanca a contar ante la Justicia su versión de los hechos. De víctima a victimaria Ayer, Héctor Navarro, presidente de la Red de Apoyo para las Víctimas de Sectas (Ravics), sostuvo que los adeptos a esos grupos “suelen tener un coeficiente intelectual mayor” que el común de la gente y que, en ese sentido, Estefanía Heit es “el prototipo de víctima captada por un líder psicópata que luego se convierte en victimaria”. Navarro, abogado especialista en

“Si este señor tomó conocimiento de la prueba antes que la fiscal, podría tener serios problemas y se pondría en riesgo la investigación” sectas que trabajó como perito en resonantes causas como la de los Niños de Dios, explicó: “Así como el líder de una secta es un psicópata, el adepto suele tener un nivel de inteligencia superior al promedio. Se trata de gente culta, instruida, como Heit, que es periodista, que tiene otras aspiraciones generalmente vinculadas a la solidaridad, a la necesidad de hacer algo por la naturaleza, por el mundo, que están por encima de lo que la gente común aspira“, explicó. “Ella [Heit] terminó haciendo lo mismo que él, siendo cómplice de él“, sostuvo Navarro.ß