HISTORIA DE LA REDACCIÓN DEL LIBRO DE JEREMÍAS 1. Colecciones de oráculos en poesía , pronunciados en distintas circunstancias por el mismo profeta y regogidos por su “secretario” o por sus discípulos. Es la «Fuente A» 2. La primera edición del libro , realizada por los discípulos: incluye colecciones de oráculos más los relatos biográficos: a) de tiempos de Yoyaquim: - Jr 26 (609-608) -
19,1-20,6 (hacia el 605) 36 y 45 (605-604)
b) de tiempos de Sedecías - Jr 28; 29 y 51,59-64 (hacia el 594) -
34,1-7 (inicios del asedio del 587) 37,3-38,28 (durante el asedio)
c) tras la caída de Jerusalén: - Jr 39,1-44,30 Con estos relatos, los discípulos pintan un retrato de su maestro, como mensajero auténtico de la Palabra de Dios frente a sus adversarios, fiel a la misión recibida, a pesar de todas las contrariedades. Estos textos quieren imponer a sus contemporáneos la figura del verdadero profeta realizada en la persona de Jeremías. Normalmente se atritubye a Baruj, que habría escrito en Palestina, durante la dominación babilónica (Jeremías ha invitado siempre a sometersea Babilonia) = «Fuente B». 3. La edición deuteronómica (durante el exilio) : inserta breves fragmentos en prosa entre los pasajes poéticos; transforma los relatos en función de nuevos problemas (cf. 32,28-35; 34,17-22); coloca discursos en boca de algunos personajes (40,2-5); lleva a cabo desarrollos redundantes y sobrecargados de ideas y construcciones (7,1-3; 11,1-14; 18,112, etc.). Es la «Fuente C»: discursos en prosa deuteronómica. Incluirían aquí también los cc. 30-31 (“Libro de la consolación”), que pueden remontarse al primer período de la predicación de Jeremías (se habrían dirigido a los israelitas del Norte en tiempos de Josías) y cuyo llamado al “retorno” resultaba especialmente oportuno tanto en tiempos de Godolías como después del exilio = «Fuente D». 4. La edición antibabilónica (postexílica) : realizada tras la caída de Babilonia, inserta oráculos que condenan a la capital enemiga (25,12; 27,7; 50-51) evocan la reunificación de los que están dispersos (3,18; 16,14-15; 23,7-8; 29,10-15; etc.); presnta una visión más negativa de Sedecías, de los que se quedaron en el país y de los que huyeron a Egipto; otronga una gran importancia al sábado (17,19-27) y reinterpreta la alianza davídica aplicándola a la ciudad de Jerusalén (35,15-16). Parece depender de Ezequiel y del Déutero-Isaías. 5. Los textos hebreos y griegos : los traductores griegos trabajaron sobre un original hebreo que en ese momento era más breve, pero siguió creciendo hasta la forma que hoy tiene en el Textus receptus (Texto Masorético).