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Lunes 28 de mayo de 2007

LA NACION/Página 13

Crece la inseguridad vial: tragedias en Buenos Aires, Santiago del Estero y Mendoza

Otro joven murió al ser atropellado en Vicente López Iba en una moto y lo embistió un auto Por Pablo Tomino De la Redacción de LA NACION

GENTILEZA / EL LIBERAL

Así quedó el ómnibus de doble piso de la empresa Urquiza que chocó con un automóvil Peugeot 504, en el que murieron cuatro personas

Hubo 20 muertos en accidentes ocurridos en distintas rutas

El peor fue en San Antonio de Areco; 11 de las víctimas eran chicos; 39 heridos Un total de 20 personas murieron y otras 39 resultaron heridas en distintos accidentes de tránsito ocurridos en las últimas 24 horas en rutas de las provincias de Buenos Aires, Santiago del Estero y Mendoza. El más grave de los choques ocurrió ayer, a las 15.30, en el kilómetro 124 de la ruta nacional 8, a la altura de la localidad bonaerense de Duggan, partido de San Antonio de Areco, en el oeste de la provincia de Buenos Aires. Allí, siete personas perdieron la vida –entre ellas, tres niños– y otra resultó gravemente herida en un choque frontal entre un Chevrolet Vectra y un Volkswagen Gol Country. El accidente ocurrió cerca de las 15.40 y determinó la muerte en el acto de seis personas, de las cuales tres viajaban en el Vectra y las restantes, en el Gol. Los tres ocupantes del Vectra que murieron en la colisión fueron identificados por la policía como Maximiliano Nieto Acevedo, de 26 años; su esposa, Natalia Alvarez, de 23, y el pequeño hijo de ambos, Benjamín, de tres años. Todos eran oriundos de Los Venados, en la provincia de San Luis. En ese auto también viajaba la única sobreviviente del accidente, que sufrió fracturas en la zona nasal y en una costilla y fuertes golpes en la cabeza, el pecho y el abdomen, por lo que anoche permanecía internada en el hospital municipal Emilio Zerboni, de San Antonio de Areco. El médico Jorge Zárate, del área de terapia intensiva, informó a LA NACION que su estado es gravísimo. Los integrantes de la familia que viajaba en el Gol fallecieron en el acto, salvo un niño de 10 años, que fue trasladado al hospital, pero murió a las 18.30. Fuentes policiales dijeron que además del chico también murieron el hermano de 6 años y su madre, María Virginia Jorgensen, que iba acompañada por Ernesto Pavlovsky, de 52 años. La fiscal Ana Argüelles, de la Unidad Funcional de Instrucción Nº 3 de Mercedes, dispuso la realización de peritajes para determinar cómo y por qué se produjo el terrible accidente.

Los motivos y la mecánica del choque eran un misterio al cierre de esta edición; los investigadores suponen que alguno de los conductores se pasó de carril para pasar a un camión y se topó con el otro automóvil que venía en sentido opuesto.

En Quequén Al cierre de esta edición, cinco personas murieron y otras 32 resultaron heridas al chocar un ómnibus de la empresa El Rápido y un camión de carga. Fuentes de la policía vial bonaerense dijeron a LA NACION que la tragedia se produjo a las 22.10 en el kilómetro 85 de la ruta 88. Poco antes de la medianoche, los bomberos aún trabajaban en el lugar del hecho.

En Santiago del Estero En otro accidente vial, ocurrido en la provincia de Santiago del Estero, un hombre y tres niños murieron en las últimas horas del sábado en un terrible choque frontal entre un automóvil y un ómnibus de larga distancia de la empresa Urquiza Dorado.

La colisión sucedió a las 23.30 de anteayer, en el kilómetro 1163 de la ruta nacional 9, al norte de la capital santiagueña. Un vocero policial dijo a LA NACION que las víctimas fueron identificadas como Rafael Ferreira, de 40 años; Naila Stefania Peralta Castagna, de 4; Alejandro Nicolás Peralta Castagna, de 9, y Florencia Ximena Peralta Castagna, de 10. Fuentes policiales aseguraron que un automóvil Peugeot 504 chocó de frente contra un ómnibus de la empresa Urquiza Dorado, que se dirigía a Tucumán, y que habría sido el rodado menor el que habría perdido el control al intentar esquivar una vaca que estaba en la ruta. Los heridos fueron identificados como Andrea Teresita Peralta, madre de los niños fallecidos, y el conductor del ómnibus Rubén Figueroa, que fueron trasladados al Hospital Regional Ramón Carrillo de la capital de Santiago del Estero. Por su parte, los 38 pasajeros que viajaban en el ómnibus, que se dirigía a San Miguel de Tucumán, resultaron con heridas leves, habiendo recibido el

Dolor y duelo en el colegio Nightingale, de San Isidro El dolor inundó ayer parte de la comunidad de San Isidro, donde vivía una de las familias protagonistas del trágico accidente en San Antonio de Areco, en el que siete personas murieron –entre ellas, tres niños– y otra resultó gravemente herida a causa de un choque frontal entre dos automóviles. Incluso las autoridades del colegio Florence Nightingale, situado en el bajo San Isidro, dispusieron para hoy una jornada de duelo con cese de sus actividades, ya que dos de los chicos fallecidos en el accidente concurrían a ese establecimiento. Se trata de un chico de 10 años que viajaba en un Volkswagen Gol y que

había sido internado en coma profundo tras el accidente y que tres horas más tarde falleció, como consecuencia de las graves heridas sufridas. Su hermano, de seis años, murió en el lugar del accidente junto con dos personas mayores, entre ellas, su madre, que fue identificada por fuentes policiales como María Virginia Jorgensen. Ayer, la noticia causó inmenso dolor entre los alumnos del colegio Florence Nightingale, en la medida en que tomaban conocimiento de la triste noticia y de la posterior decisión del cese de las actividades para recordar a una conocida familia de San Isidro.

FACUNDO BASAVILBASO

Nueva señal de tránsito. Ya está demarcada en la calzada, en el cruce de Bartolomé Mitre y Carlos Pellegrini, la señal de “no bloquear cruce”, con la que se busca disminuir los riesgos de accidentes y los altos niveles de congestionamiento en las calles del centro porteño. El gobierno porteño la colocará en unos 70 cruces.

alta médica la mayoría de ellos, según lo manifestaron los encargados de la guardia de dicho centro de salud. En diálogo con LA NACION, el presidente del Concejo Provincial de Seguridad Vial, el ingeniero Daniel Olmedo, afirmó que “la excesiva velocidad, no usar cinturón de seguridad, conducir de noche y los animales sueltos conforman una mezcla peligrosa que deriva en casos como éstos, con gran cantidad de muertos y heridos”.

Accidentes múltiples En Mendoza, en tanto, cuatro personas murieron y otras tres sufrieron heridas en cinco accidentes de tránsito. En el primer hecho dos jóvenes que viajaban en una motocicleta murieron al chocar ayer a la madrugada contra un camión estacionado. El choque sucedió en la calle Vélez Sarsfield al 1300, de San Rafael, y las víctimas fueron identificadas por la policía provincial como Daniel Morales, de 27 años, y Diego Vázquez, de 20. También ayer falleció un joven de 22 años en un choque frontal. La víctima mortal fue identificada como Kelly Aravena, que conducía un Volkswagen Gol que, según la policía, embistió a un Fiat Uno. El accidente fue en el cruce de la ruta nacional 143 y la calle Cero, del departamento de General Alvear. En tanto, el sábado último, un niño de 5 años que iba con su padre en bicicleta murió tras ser atropellados por un Fiat Uno en la esquina de Roma y San José, del departamento de Maipú. La víctima mortal fue identificada como Juan Fernando. En otro choque, un camionero sufrió graves lesiones al caer con su rodado al fondo de un barranco en plena Cordillera, cerca de la localidad de Uspallata. También, otras dos personas resultaron heridas cuando el Renault Clío en el que viajaban, por motivos que se tratan de establecer, quedó fuera de control y chocó contra un árbol.

Vicente López fue otra vez escenario de un trágico accidente de tránsito, en el que un joven de 18 años murió luego de que un vehículo embistió la motocicleta en la que viajaba, que era conducida por un amigo suyo. El episodio, que se suma a la muerte de Francisco Vrech, de 16 años –arrollado el 21 de abril último en la Avenida del Libertador e Yrigoyen–, ocurrió a las dos de la madrugada del viernes pasado en el cruce de la avenida Maipú y Alberdi, Olivos. Por causas que se investigan, la motocicleta en la que viajaba Gastón Reparaz, la víctima mortal, se dirigía por Maipú hacia el Norte y en el momento en que disminuyó su marcha para girar a la izquierda y tomar Alberdi un Renault Mégane azul la embistió. El conductor de la moto de 110 cm3 –identificado por fuentes policiales como Emanuel Ibáñez– salió ileso, mientras que Gastón Reparaz se habría golpeado la cabeza contra el parabrisas del Mégane, por lo que debió ser internado de urgencia. Ninguno de los dos llevaba puesto casco. Investigadores del caso analizaban ayer si alguno o ambos vehículos habían pasado el semáforo en rojo. El propietario del automóvil, Ignacio Mezzarrobba, según lo informado por la policía, detuvo su marcha y pidió el correspondiente auxilio, algo que también relató ayer a LA NACION Alberto Reparaz, padre de Gastón. “Según me han contado, la moto en la que iba mi hijo hizo una maniobra que se está tratando de establecer y un vehículo que venía a muy alta velocidad la atropelló. La policía dijo que iba a 60 kilómetros, pero por las frenadas que quedaron en el asfalto, creo que iba a una velocidad superior. El conductor se detuvo. Lo único que digo es que aquí no hay controles serios de tránsito y que otra vez un accidente se llevó una vida sana, a un chico que nunca le hizo mal a nadie y que esa noche se iba a bailar con sus amigos”, contó Alberto Reparaz en el velatorio de Gastón, rodeado de familiares y con un inmenso desconsuelo. Tras el accidente, la víctima fue trasladada al hospital de Vicente López con fracturas múltiples, contusiones graves y lesiones neurológicas irreversibles. Falleció horas después. “Los médicos no pudieron hacer nada y apenas lo recibieron me notificaron de la gravedad de la situación. Es un dolor interminable porque, para peor,

hoy no hay testigos de lo sucedido y nadie nos quiere dar una mano. Gastón hacía dos semanas había empezado en su primer trabajo”, dijo Alberto. El hombre también sostuvo que el amigo de su hijo, que conducía la moto, no pudo contar detalles de lo sucedido porque “está en estado de shock”. “El conductor del vehículo hizo su declaración, pero en la policía no me informaron nada”, agregó Reparaz.

Sin testigos LA NACION recorrió el lugar del accidente y no consiguió testimonios de lo sucedido. Empleados de un local gastronómico que está en Maipú y Alberti, y vecinos de la zona aseguraron no haber visto el choque. “¡El auto que

Gastón Reparaz, de 18 años

mató a mi hijo iba a 120 kilómetros por hora, por favor, tiene que haber testigos! Que la policía castigue a los conductores imprudentes”, repetía ayer, entre llantos, Cristina, la madre de Gastón Reparaz. A su lado, Alicia Soria, vecina y concejal de Vicente López por el Frente para la Victoria, ponía un manto de sospecha sobre lo sucedido. “Habría que ver si el vehículo no venía corriendo una picada. Tengo la sospecha de que la policía lo primero que dijo es que el automóvil venía por el carril rápido. No sé a quién tratan de cuidar”, dijo Soria. En tanto, en la comisaría 1a. de Olivos, donde estaban secuestrados los vehículos participantes de la tragedia, no dieron información del caso cuando LA NACION solicitó hablar con la autoridad responsable.

FOTOS DE NICOLAS FAIG

Informe de nuestras corresponsalías

Cristina y Alberto Reparaz, padres de Gastón, ayer, en el velatorio de su hijo