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SÁBADO

| Sábado 10 de noviembre de 2012

mesa para dos

Top 5

Es músico, empresario gastronómico y ahora también escribió un libro: Aim Zorry; “la revolución de hoy es la sinceridad”, dice

Inspiradores de la semana

Zorrito Von Quintiero. “Hay que revivir el pollo al spiedo”

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L

–Con mi amigo Pablo Massey vamos a revivir el pollo al spiedo, hay que revalorizarlo. Somos como los Beavis and Butthead de la cocina [se ríe]. La feria apunta a que la gente pueda acercarse y que descubra la riqueza y la variedad de los productos argentinos. El lema de Masticar es “Comer rico hace bien”, y por eso queremos rescatar el valor de la comida casera y de los productos frescos. Y desde los pollos de Mazzorín que el pobre pollo viene muy vapuleado. En el último viaje a Nueva York, con Pablo recorrimos muchos lugares, y allá hay una tendencia a transformar la comida chatarra en un producto gourmet. Y yo andaba con la idea de poner a la hamburguesa en el lugar que le corresponde. Pero fue Pablo el que hizo foco en el pollo, así que además de ofrecer un rico pollo rostizado en uno de los puestos, el objetivo es abrir un restaurante el año próximo. Con Pablo somos buenos amigos y hace tiempo que queríamos hacer algo juntos. –Alguna vez dijiste que con la música no se gana plata. ¿Con la gastronomía sí? –Con la música seguro que no, al menos para ahorrar. Tal vez ganen bien los artistas principales, los que tienen obra propia. Pero con la gastronomía tampoco [se ríe]. En realidad, cuando puse mi primer restó estaba por tener mi primer hijo y quise buscar estabilidad. Pero después entran en juego las otras variables: vaivenes económicos, crisis, y la inestabilidad país es incertidumbre. Pero es cierto que mis negocios son día a día, y con la música el ingreso es concierto a concierto. –Fuiste uno de los que ayudaron a fundar Las Cañitas. ¿Creés que la zona está saturada? –Creo que cambió muchísimo. Que tiene un grave problema de estacionamiento. Que Las Cañitas ya no es un lugar asociado al buen comer. Está bien para salir y tomar algo con amigos, pero las grandes marcas se fueron y buscaron otras zonas. –¿Como un nuevo polo gastronómico en el Bajo Belgrano? –Éste es un buen lugar para comer, pero no puede crecer demasiado porque el código no permite habi-

político

^ El reelecto presidente de los Estados Unidos se emocionó este jueves en una reunión con colaboradores de campaña a los que les agradeció su apoyo

Texto Soledad Vallejos | Foto Gustavo Bosco

e apasiona tanto el rock nacional como la buena comida. Por eso, Fabián “Zorrito” Von Quintiero (46) eligió alternar su vida entre teclados y cacerolas. Músicos y cocineros: una simbiosis perfecta que le dio grandes satisfacciones y de la que, además, aprendió a sacar provecho. Y le fue muy bien. Dueño de varios restaurantes, su primer bastión fue el Soul Café, cuando la zona de Las Cañitas aún era un páramo gastronómico. Su último éxito es Bruni, en el Bajo Belgrano, un local con impronta italiana y, por supuesto, buena música. También, y mucho antes de la tendencia de los canales gourmet, el Zorrito innovó en la década de los 90 con su programa Gustok, por MTV, donde el anfitrión invitaba a los músicos a cocinar. De hecho, su primera empresa se llamó Músicos que Cocinan SA. Tal vez sea ése el mejor epítome de más de 30 años de carrera. Pero él asegura que el empresario gastronómico (aunque él reniegue de esa expresión) nunca se comerá al músico. De hecho, hace apenas unos meses, el Zorrito estaba tocando en el Times Square de Nueva York, donde acompañó a Charly García en un concierto impecable. Pero cuando baja del escenario vuelve a sus quehaceres culinarios, y ahora está concentrado en lo que sucederá el próximo fin de semana cuando se realice la feria Masticar, que organiza la asociación de cocineros y empresarios ligados a la gastronomía (Acelga). Y Von Quintiero no sólo es uno de sus miembros, sino que fue él quien bautizó a la entidad bajo el sugestivo nombre. –¿A vos se te ocurrió el nombre Acelga? –Sí, tengo fama de buen ponedor de nombres, y cuando lo propuse la aceptación fue unánime. Además, la acelga mata, no es top como la espinaca. Digamos la verdad: Popeye no tenía espinaca en la lata. ¡Era acelga! Yo soy un bicho raro, después de Masticar me voy a tocar a Corrientes, pero creo que desde la chispa que tiene el rock puedo aportar algo distinto. –¿Y qué vas a aportar en esta feria Masticar?

Barack OBama

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Franz ackerman pintor e instalador

^ El prestigioso artista alemán expone en el Faena Arts Center un mural de 25 paneles inspirado y compuesto en los últimos meses en Buenos Aires

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adriana HidalgO

Tragos y vinos, una buena dupla ^b^b^ La elección obligada del Zorrito Von Quintiero en un día de calor es un vino rosado: Rivus rosado de pinot. Pero dirá que, en realidad, la bebida elegida tiene que ver con la situación, el momento. “Depende de las circunstancias”, dice a la nacion, sentado a una de las mesas de Bruni, su restaurante del Bajo Belgrano. Porque a la noche prefiere un clásico de la coctelería mundial, y pide un Manhattan.

litaciones en toda la zona. Pero, si estuviéramos en Palermo, la zona ya tendría un nombre. Acá todo es exagerado, hasta llegaron a ponerle Palermo Dead a la Chacarita. Así que, por ahora, es Belgrano Bruni [remata con una carcajada]. –¿Te considerás un visionario en este tipo de negocios? –Visionario es una palabra importante. Y hay muchos como yo. Creo que me adelanto un poco a los hechos y busco buenas alianzas. Soy innovador, pero no soy un hombre de gran empresa. Otra persona, con las ideas y las relaciones que yo tengo, seguro hace mejor negocio que yo. Yo siempre fui una pyme. El programa de cocina de MTV fue algo extraño, nació de un chiste. Pero además de elevar la categoría de la comida en el rock y de que la gente pudiera ver a los músicos fuera de contexto también había gato encerrado. Un poco por eso me dicen zorrito. En ese caso, el gato encerrado era que el programa le daría visibilidad al Soul Café. Los músicos iban a cocinar ahí, y eso ayudó mucho. –¿Hay gato encerrado en todo lo que hacés? –[Vuelve a reír] No. Creo que la revolución de hoy es la sinceridad. Con la sinceridad se puede ser muy

seductor, porque estamos en una época en la que todo está muy lastimado. Y la bondad también es una virtud muy valiosa por estos días. –¿Vos tenés esos dones? –Con algunas personas, sí. Incluso con las mujeres es muy bueno aplicar estas estrategias. Es que ya cerca de los 50 pensás de otra manera. Y ser sincero con los demás y con uno mismo es muy bueno. En 2014 cumplo 30 años con el rock nacional, y también estoy muy orgulloso de todo lo que hice, de ser emprendedor y de haberme dedicado también a otras actividades. –Te faltaba escribir un libro, y el año próximo publicás Aim Zorry. ¿De qué trata? –Sí, como dice el refrán. Tuve un hijo, no planté un árbol pero estoy plantadísimo, y ahora escribí un libro, que cuenta anécdotas de las bandas con las que viajé y de los lugares que visitamos para comer. Es como una guía de restaurantes de todo el mundo curada por mí. Música y cocina, otra vez. –¿Y en qué se parecen un músico y un cocinero? –En la histeria. Pero hay dos clases de cocineros: los que cocinan y los que no. Pero músicos y cocineros se parecen en lo mismo: todos se creen estrellas.ß

editora

^ La Feria Internacional del Libro de Guadalajara premiará a la editora por su tarea al frente de la editorial independiente, fundada en 1952

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inés Ordóñez de lanús

acompañante espiritual

^ Fundadora del Centro de Espiritualidad Santa María, obra que acaba de cumplir 40 años y que actualmente brinda ayuda espiritual a unas 1300 personas.

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Wassily kandinsky pintor

^ Estudio para una improvisación, cuadro del artista ruso fallecido en 1944, se remató en US$ 23 millones este miércoles, un récord para su obra

Gastronomía

Llega Masticar, una feria para paladares exigentes Se realizará desde el viernes próximo; habrá puestos de comida, mercados regionales y clases de cocina Laura Reina LA NACION

Las tortas de Maru, las pastas de Donato, los ahumados de Francis, los platos vitamínicos y naturales de Juliana y los bocados de Narda. Sí, todos juntos en un mismo lugar. El sueño de todo sibarita se hará realidad el viernes próximo cuando comience Masticar, la primera feria gastronómica organizada y curada íntegramente por cocineros y empresarios del rubro . Masticar reunirá en El Dorrego (Zapiola 50; entrada general, $ 30), durante tres días, a los chefs más emblemáticos de nuestro país agrupados en la Asociación de Cocineros y Empresarios Ligados a la Gastronomía Argentina (Acelga), que a pesar de la diversidad de estilos y perfiles comparten valores y objetivos comunes, como revalorizar y posicionar a la cocina argentina en el mundo. Dolli Irigoyen, Narda Lepes, Fernando Trocca, Germán Martitegui, Donato De Santis, Hernán Gipponi, Tato Giovanonni, Maru Botana, Francis Mallmann, Pamela Villar, Juliana López May, entre muchos otros, se harán presente en el predio de Colegiales cedido para la ocasión por el gobierno de la ciudad de Buenos Aires, socio en este evento, con propuestas para los paladares más exigentes. Además de promover la

cocina argentina a través de sus más prestigiosos representantes, esta feria tiene entre sus objetivos invitar a la gente a comer bien, a recuperar algo de la cocina casera y a hacer un lado la comida chatarra o al paso. De ahí que su leitmotiv no es otro que “comer rico hace bien”. El punto de partida de este proyecto surgió por el interés en común de los miembros de Acelga de concientizar a la sociedad sobre la importancia de la buena alimentación. Es por ello que se enseñará a tomar conciencia del valor de los productos frescos, locales y de estación, contó uno de los organizadores, que asegura que, a pesar del peso de los apellidos, los precios que habrá que pagar en los restaurantes, puestos de comida y de fuego vivo serán más que accesibles. Por ejemplo, el restaurante Sucre, de Fernando Trocca, ofrecerá estofado de osobuco a de ternera a $ 30; en Los Gordos, de Luis Acuña, el ojo de bife costará $ 35; las afamadas pastas de Italpast podrán degustarse desde $ 20; los fettuccine fatto in casa de Donato costarán $ 35, y los que quieren algo más fresco podrán degustar un sándwich de pollo orgánico al spiedo en pan pita con yogurt, menta y especias en Rollong Chicken, de Pablo Massey, también por $ 35. Los golosos tendrán la posibilidad de saciar su gula con las delicias dul-

Parte del grupo de chefs y empresarios que participarán de la feria ces de Maru Botana, que promete alfajores, cookies, budines, cuadrados y barritas de cereal desde 10 pesos. O pasar por Nucha, que ofrecerá una gran variedad de cookies, biscottis y alfajorcitos a precios promocionales. Porque lo rico y bueno no necesariamente debe ser caro. Pero Masticar no será sólo una feria culinaria y una excusa para

comer rico y bien. Será, además, un gran mercado de productos regionales, especialmente seleccionados por los chefs con un criterio estrictamente culinario, para que la gente se anime a hacer alguna receta en su casa. Quesos, fiambres, huevos, frutas, dulces, verduras, mieles y lácteos –entre muchos otros productos–

Foto: MAStICAr

podrán ser degustados y además se podrá aprender acerca de su origen y de su calendario estacional. “Por su variedad de climas, por su geografía privilegiada, nuestro país cuenta con insumos de gran calidad, que se producen a lo largo y ancho del territorio. Pero las distancias, la falta de infraestructura y la escasa información hacen que muchas ve-

ces esos productos no se conozcan o resulten difícilmente accesibles. El Mercado apunta a acortar esas distancias, a allanar esos caminos, facilitando el encuentro entre productores rurales, maestros queseros, fiambreros, cocineros, empresarios, meros amantes de la gastronomía y comensales”, explicaron los organizadores. Los amantes del vino podrán adentrarse en los “túneles”, espacios en donde se podrán disfrutar y degustar vinos de ocho bodegas premium de la Argentina. Quien asista al túnel participará de una experiencia de cata con un recorrido programado por sommeliers del Centro Argentino de Vinos y Espirituosas (CAVE). Y también habrá túneles cerveceros, para los que quieran disfrutar de una buena pinta. Masticar será, también, un lugar de aprendizaje, ya que habrá clases de cocina dictadas por los chefs y habrá un ciclo de charlas en el cual también participarán nutricionistas y empresarios (ambos sin costo adicional, con cupo limitado), en las que se tratarán temas como la diabetes, la celiaquía y nutrición infantil, la gastronomía y el deporte entre otros. El viernes Narda Lepes y Luis Acuña enseñarán a despostar un chancho y Maru Botana junto a Nucha enseñarán los secretos de las tortas; el sábado, Juliana López May y Máximo Cabrera contarán los secretos de la comida saludable y el domingo Donato De Santis develará la técnica para un amasado perfecto. Sin duda, una feria irresistible, que será una fiesta para los paladares más exigentes.ß