En la trastienda

Muestras Patrimonio argentino

Todo lo que pasa detrás de las vidrieras

Atípico Enero de 2011 marca definitivamente un nuevo estilo de verano porteño. Una caravana de turistas circula por Florida, visita las muestras y pregunta a quemarropa dónde quedan el Malba y el Rosedal. Uno de los must imperdibles para los visitantes es la última cuadra palaciega de Buenos Aires: avenida Alvear entre Rodríguez Peña y Montevideo. Foto obligada al Palacio Maguire, con esa invasión de raíces que lo vuelve, casi, fantasmagórico.

Helmut en el mar Nacido en Villa Ballester, Helmut Ditsch vivió años en Viena y pintó en su taller de los bosques vieneses, los mismos que inspiraron a Strauss, telas enormes de factura hiperrealista. El interés de los banqueros por esas superficies gélidas le permitió empinar la cotización de la obra que ahora conquista a locales y veraneantes en Mar del Plata.

Paisaje de San Juan, 1924, del maestro Lino Enea Spilimbergo FOTOS GENTILEZA BANCO NACION

Juan Stopani

pág.

Viernes 14 de enero de 2011

22

Es un artista genial que formó parte de las huestes ditellianas y conquistó halagos aquí y allá. De París a galería Del Infinito (Quintana y Callao) se traslada su talento que es sinónimo de felicidad, explosión de color y de formas. El piano de cola emplumado es en sí mismo un argumento para agradecer a Juan Stopani que exista.

Punta con arte La Península marca la agenda del verano también en el arte. Liliana Porter, Lasarte, Milo Lockett, Gallery Nights y la visita de los popes de la Feria de Anticuarios Maastricht (Holanda) en primer plano.

Un tesoro pintado en dos siglos

E

La muestra del Centro Cultural Borges, curada por Roxana Olivieri, reúne obras del acervo artístico del Banco Nación hasta el momento sólo accesible, en despachos y corredores del edificio diseñado por el arquitecto Alejandro Bustillo. POR ELBA PÉREZ Para La Nacion

l efecto Bicentenario, efemérides en sus postrimerías, reaviva sus contenidos como una onda expansiva, como pleamar que no se agota. Ojalá así sea, y prenda de lo dicho es la feliz determinación del Banco de la Nación Argentina de dar visibilidad pública al ingente acervo artístico hasta el momento sólo accesible, en despachos y corredores, al personal de la Casa Central diseñada por el arquitecto Alejandro Bustillo. Pero toda visibilidad demanda conocimiento, certificación, arrojo, decisiones arduas. Esta faena no menuda afrontó la licenciada Roxana Olivieri, curadora de la muestra que se exhibe en el Centro Cultural Borges. La elección del lugar no es baladí. En plena entraña histórica, próxima a la iglesia y convento de Santa Catalina de Siena –hospital de sangre en tiempo de las invasiones inglesas– vecina al Rectorado de la Facultad de Filosofía y Letras, en el edificio que sustenta el más importante centro muralístico del país y bajo la advocación del poeta que refundó Buenos Aires… La enumeración torna huera toda otra alegación. Olivieri trabajó sobre el patrimonio