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Martes 23 de octubre de 2007
Faltan 5 días
El túnel del tiempo Alberto Rodríguez Saá y su transformación personal y política PERFIL POLITICO
Padrinos:
Primeros aliados:
Adolfo Rodríguez Saá y Víctor Saá (su tío)
Oraldo Britos y Vicente Saadi
Partido Unión y Libertad (PUL) 1983-1998
1957. Un Alberto de apenas 8 años disfruta de un día soleado en su casa natal en San Luis. Su hermano Adolfo tomó esta foto.
1950
Partidos que integró:
1960
1998-2007
Fte. Justicia, Unión y Libertad (Frejuli) 2007
1964. Con 15 años, junto a su padre y sus hermanos. La familia forma parte del poder puntano desde 1860.
1970
1993. Asumió como senador nacional en 1983 y renunció en 1994 en desacuerdo con la reforma constitucional que posibilitó la reelección de Menem.
1980
2003. Luego de los 18 años de gestión provincial de su hermano, Alberto acaparó el 91 % de votos y fue elegido gobernador.
1990
2000 2007. Obtuvo su reelección con el 80 %. Días después anunció que, representando al peronismo disidente, sería candidato a presidente. LA NACION
Fuente: archivo LA NACION
Un peronista muy polémico, aunque cultor del bajo perfil Rodríguez Saá busca “nacionalizar” el modelo de San Luis Por Sebastián Iñurrieta De la Redacción de LA NACION A pesar de sus 11 años como senador nacional, el archivo del diario contiene muy pocos recortes periodísticos suyos de aquella época. Su hermano mayor, “el Adolfo”, como lo llaman en su provincia, fue siempre el que acaparó la atención de la opinión pública. En cambio, Alberto Rodríguez Saá siempre fue cultor del bajo perfil, pero sus opositores siempre lo consideraron el ideólogo del poder puntano en las sombras. Sólo en 2003, Alberto Rodríguez Saá tuvo alta exposición, cuando ganó la gobernación de San Luis con el 91% de los votos. Hoy, este fervoroso peronista de 58 años es el candidato presidencial del Frente Justicia, Unión y Libertad (Frejuli) y la fama lo vuelve a señalar, aunque no le guste. La historia de un hermano es la del otro. Ambos estudiaron derecho en la Universidad de Buenos Aires y abrieron un estudio jurídico. Los dos manejan la provincia desde 1983 y ambos enfrentaron causas judiciales por supuesto enriquecimiento ilícito. Fiel al legado familiar, asociado al poder puntano desde 1860, mientras Adolfo fue electo gobernador, Alberto asumió como senador nacional en 1983.
Su labor legislativa despertó polémicas. Por ejemplo, el uso de sus pasajes aéreos del Senado para el plantel del club puntano de basquetbol GEPU o su proyecto para acortar la enseñanza primaria y secundaria tres años para disminuir el gasto educativo. Nunca se consideró menemista. Incluso calificó de “mamarracho” la reforma constitucional de 1994, que permitió la reelección de Carlos Menem y, a modo de protesta, renunció a su banca. Pero pocos vieron en aquella actitud una postura ideológica, ya que su hermano gobernó 18 años seguidos gracias a la reelección indefinida. Sóloen 2006 Alberto la vetó. A diferencia de aquellos años de rebeldía al menemismo, el gobernador puntano hoy comparte la mesa chica del Frejuli con el ex presidente Menem. En 1999 regresó al Senado y renunció en 2001 para ser jefe del gabinete provincial. En los siete días de la presidencia de su hermano, no ocupó ningún cargo. Y en 2003, mientras Adolfo se lamentaba por haber perdido los comicios presidenciales, asumió la gobernación puntana. “Miren a San Luis”, es el caballo de batalla de su campaña. Alberto Rodríguez Saá resalta las autopistas de su provincia, el publicitado bajo nivel de desempleo, el plan de viviendas, la in-
fraestructura y las inversiones. Pero según sus opositores, todo lo que critica de Néstor Kirchner lo hace en su tierra. “Tienen la misma concepción feudal del ejercicio del poder, el nepotismo y la perpetuación en el poder”, coinciden sus opositores. También hablan de “superpoderes”, de la falta de libertad de prensa y de gastos reservados en San Luis. Más allá de las críticas, este año los puntanos lo reeligieron con más del 80% de los votos. Para diferenciar sus estilos de gobierno, dicen quienes conocen a ambos, que Adolfo prefiere el póquer y Alberto, el ajedrez. De hecho, el gobernador puntano promovió el Mundial de Ajedrez en su provincia. Uno es pragmático y el otro, intelectual. Pero Alberto preferiría ser considerado un artista. Es que en su tiempo libre se dedica a pintar figuras abstractas que representarían a extraterrestres. Pero el gobernador se ataja: “No he hablado con ningún extraterrestre”. Está separado de la senadora María Antonia Salino, con la que tuvo tres hijos, y vive en pareja con la actriz Esther Goris. Uno de sus sueños es convertir a San Luis en la Hollywood argentina y lo fomenta con incentivos provinciales a la producción cinematográfica. El domingo, en las urnas, se sabrá el final de esta película.