TEMA 10: NIETZSCHE INFLUENCIAS DE LA FILOSOFÍA DE NIETZCHE Vitalismo: es una corriente filosófica que se centra en afirmar la vida por encima de lo racional. La vida es lo irracional, lo dinámico, lo emotivo. Las

mayores

influencias

de

Nietzsche

provienen

de

Arthur

Schopenhauer, para quien, tras el mundo y la realidad yace la voluntad que hace que el ser humano desee y sea infeliz, recomendando por ello el ascetismo. El punto de partida del pensamiento de Nietzsche es la crítica a la sociedad occidental, dirigiéndose principalmente a la religión, la filosofía y la moral. Sus obras principales son “Así habló Zaratustra”, “El origen de la tragedia” (Dionisio y Apolonio), “Aurora”, “Gaya Ciencia” y “Humano demasiado humano”.

CRÍTICA A LA CULTURA OCCIDENTAL Nietzsche se propone iniciar su crítica a los valores de la sociedad occidental desde el principio de ésta. Para ello, emplea la contraposición entre lo Apolíneo y lo Dionisíaco.

LO APOLÍNEO Y LO DIONISÍACO Empleó la metáfora de dos actitudes relacionadas con dos dioses griegos: -

Apolo: es el ideal de belleza, armonía y equilibrio. Relacionado con la obra y la forma acabada (escultura, arquitectura…). Es el defensor de la racionalidad y la lógica.

-

Dionisio: representa la desmesura, los impulsos creativos y espontáneos de la voluntad, la embriaguez. Representa la obra y formas inacabadas (la música). Nietzsche afirma que ante el dolor y el sufrimiento de la vida existen las

posturas Apolínea y Dionisíaca. La Apolínea rechaza la vida, creando un mundo ideal de belleza, y la Dionisíaca afirma y acepta la vida en su totalidad.

Autor: Carlos Martín de la Concha Renedo

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Nietzsche afirma que estas dos actitudes se necesitan. La verdadera realización de la cultura griega se basaba en la fusión de ambas posturas. Pero la cultura griega entró en crisis con Eurípides, al eliminar lo Dionisíaco de la tragedia en favor de elementos morales, la vida quedó tapada por un velo de racionalidad. Sócrates continúa con esta labor, seguido por Platón como máximo exponente cuyo pensamiento finaliza con el cristianismo. A partir de entonces, la filosofía fue Apolínea, y lo Dionisíaco quedó en el olvido. El criterio Apolíneo fue incluso exaltado en la Ilustración y el Idealismo.

CRÍTICA A LA FILOSOFÍA PLATÓNICA Tras exponer su crítica a la concepción Apolínea, Nietzsche continúa criticando la tradición filosófica, comenzando con la negación de la Metafísica platónica. Nietzsche afirma que el mundo inmutable de las ideas que crea Platón es pura consecuencia del miedo a enfrentarse a la verdadera realidad, que es puro cambio y complejidad (influencia de Heráclito), y accedemos a ella mediante los sentidos (la realidad es pura apariencia). El hombre es un producto biológico, y la razón es una de sus múltiples características. Nietzsche por tanto niega así el idealismo platónico de alma y cuerpo en el cual el alma debe imponerse. Nietzsche reivindica el cuerpo, que no debe ser reprimido. Para Nietzsche, la realidad es fenoménica y carece de esencias. No existe una perspectiva absoluta. La vida tiene muchas caras y todas son valiosas. No existe una verdad absoluta, ni siquiera la ciencia. La vida es cambiante, y por ello la ciencia debe cambiar también. Si no se somete al cambio cae en el error de la Metafísica. Es la nueva Metafísica. Niega por tanto el idealismo platónico. La única condición importante es estar al servicio de la vida.

CRÍTICA DE LA MORAL JUDEO CRISTIANA (ÉTICA) El cristianismo es la culminación de la decadencia iniciada por Sócrates. Es un platonismo para el pueblo. Autor: Carlos Martín de la Concha Renedo

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Nietzsche afirma que éste surge por la envidia a la clase aristocrática. Por encontrar un sentido último a la vida y al mundo. Por el miedo y el honor ante la muerte. Por ello es una religión de débiles. Cuando el cristianismo crea un mundo nuevo, el mudo que existe deja de tener valor. El cristianismo propugna valores como la sumisión, la obediencia, la resignación que van en contra de la vida. Nietzsche en cambio propone una transvaloración hacia unos valores vitalistas como el cuerpo, la fuerza, la aventura o el instinto. Nietzsche

critica a Kant por su excesivo idealismo influido por el

cristianismo y su moral. Ante esta situación, Nietzsche afirma “Dios ha muerto”. Todo ello en la figura metafórica de Zaratustra. Esta muerte de Dios es la muerte de la Metafísica en general. Después de esta afirmación, no queda nada. Es lo que Nietzsche llama Nihilismo.

EL NIHILISMO Y SUS ETAPAS Tras afirmar la muerte de Dios, queda el Nihilismo, en el cual no existe el mundo metafísico anterior. Se distinguen así tres etapas del Nihilismo. 1. Nihilismo pasivo: En primer lugar, establece un Nihilismo pasivo: a- Como negación de la vida: se rige por el principio del deber. Valora el mundo idealista inventado. Nietzsche compara esta actitud con la del camello que sirve a su amo y es explotado. b- La muerte de Dios: Dios muere, y con Él, el mundo metafísico. No se niega la vida, se niegan los valores sobre los que se asentaba. Culmina en la Ilustración con el culto a la diosa Razón. c- El último hombre: el hombre toma conciencia de la realidad a la que se enfrenta. En el Nihilismo pasivo existen dos salidas: el suicidio y el aturdimiento.

Por otra parte, existe otra postura que es:

Autor: Carlos Martín de la Concha Renedo

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2. Nihilismo activo: Es un signo de fuerza. Ante la muerte de Dios, se siente alegría. Como muere la Metafísica, con ella mueren los antiguos valores, y por ello se siente alegría. Nietzsche compara esta postura con la del león, pues es una potencia destructiva. El león es un paso más en el camino del Nihilismo. Esta etapa destructora de valores es provisional, pues se tienen que crear nuestros valores. Ante este hecho, tenemos dos opciones: - Vuelta al Nihilismo pasivo. - Pasar a la tercera etapa, la del superhombre. El hombre quiere perecer para dar lugar a algo nuevo. El camello (Tú debes) → León (Yo quiero) → Niño (sí a la vida) Nietzsche rechaza el Nihilismo pasivo de Schopenhauer y representa la vida como una verdadera voluntad de poder. En la vida humana, existen varias fuerzas que se contraponen. Existen fuerzas dominantes y que Nietzsche cataloga de primarias que son propias de una llamada moral de señores. - La moral de señores: aspira a una constante superación de uno mismo, sin respetar las leyes. Por el contrario, existen fuerzas dominadas que Nietzsche clasifica como secundarias y que son propias de la moral de esclavos (camello). - La moral de esclavos: se somete a una ley. Se sujeta a leyes o imperativos de carácter universal. La voluntas de poder es propia de la moral de señores, y es el paso a un tercer estadío. Es la afirmación de la vida. Esta voluntad

de poder se manifiesta principalmente de dos

maneras: * Como creadora de valores: manera de cómo valoramos la realidad. Estos valores creados son eminentemente subjetivos y dependen de cómo no enfrentemos a la vida. - Valores que enriquecen la vida: el orgullo, fuerza, soberbia, alegría… - Valores que empequeñecen la vida: la obediencia, la sumisión, la virtud, la resignación…

Autor: Carlos Martín de la Concha Renedo

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* Como voluntad de verdad: crea una de las perspectivas propias de lo real. Es una manifestación de los conceptos que uniforman la vida.

Además de esto, Nietzsche introduce un nuevo concepto: el eterno retorno. El eterno retorno: Es una nueva concepción cíclica del tiempo y de la vida que se opone a la concepción lineal y propia del pensamiento judeocristiano. Con esta nueva concepción, nada tiene sentido, incluso la vida. La vida no tiene sentido, ni trascendente ni imanente. Por ello, Nietzsche se opone al ideal de progreso ilustrado. El tiempo no tiene una finalidad porque todo vuelve una y otra vez. La vida es generación y destrucción de cosas. Lo único que tiene valor es el instante. Sólo el hombre puede proponer metas. El eterno retorno es la máxima afirmación de la vida. Amamos tanto la vida que deseamos que vuelva a ocurrir en la constante repetición del tiempo. La vida se repite. Aceptar la vida que tenemos aunque hubiera que vivirla innumerables veces.

3. El superhombre. Finalmente, Nietzsche expone el último estadío del Nihilismo, el superhombre, que es fiel a la vida y a la tierra, y supera la prueba del eterno retorno. Afirma la vida. Se producen dos transmutaciones de valores para llegar a él: -

La primera; es la del león y la afirmación de la moral de señores frente a la moral de esclavos.

-

La segunda: es la que simboliza la figura del niño. En el niño está la inocencia, un nuevo amanecer, un juego. El niño que dice sí a la vida. La conducta del niño se crea más allá de los valores del bien y del mal. La vida es un juego: intenso y apasionante. El niño acepta la vida y supera el eterno retorno, aceptando que todo se repite, incluso su vida. Se rige el niño pues por la inocencia de la voluntad. Se conoce a sí mismo como cuerpo, como un individuo viviente en el que la razón no es más que un instrumento para la vida.

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El niño acepta el caos al dormir. Esta es una etapa creadora. Ante la muerte de Dios se abre la posibilidad de crear nuevos valores. El niño crea los valores a su voluntad.

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