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Viernes 14 de diciembre de 2007
FUTBOL
El Mundial de Clubes
Por Nicolás Balinotti Enviado especial
Y
OKOHAMA.– Se lo ve más maduro a Rodrigo Palacio, pese a que sus amigos reconocieron que sintió el impacto Japón y que se le puso la piel de gallina cuando dio sus primeros pasos por Oriente. Los hinchas lo reclaman, le piden una foto que sacan con su propio celular. Camina por el piso 12 del hotel Sheraton Yokohama Bay, juega algún partido de PlayStation y charla con Hugo Ibarra, su compañero de habitación, pero parece más calmo en cuanto a esa autoexigencia que siempre cargó sobre su espalda. Incluso apareció distendido mientras observó desde un palco del estadio de esta ciudad la victoria de Milan, el futuro rival, por 1 a 0, ante Urawa Red Diamonds. Las sonrisas y las bromas con sus compañeros no fueron porque subestime al conjunto italiano, sino porque confía en el potencial xeneize. “Milan es un rival especial, es un grande del mundo con una muy buena historia. Además, cuando estoy concentrado con Boca veo la liga italiana así que conozco a todos los jugadores”, cuenta Palacio, quien además define a Kaká como una “superestrella internacional” y uno de sus preferidos al hablar del juego en equipo, y en este caso no se refiere al juego de la popular consola. Palacio siente que son muy exigentes, que el hincha espera que siempre haga dos goles por partido, aunque él, dentro de sus propios objetivos tiene la necesidad de sentirse decisivo en un choque definitorio como el de pasado mañana: “Ojalá me pueda regalar una gran final ante Milan. No todos tienen la suerte de jugar un partido así”, explica un futbolista que, para muchos, necesita ser más egoísta para explotar mejor sus virtudes.
Rodrigo Palacio se destacó en Boca, pero más allá de que siempre pensó en el equipo por encima suyo, siente que tiene a su alcance un partido clave para consagrarse como ídolo
“Ojalá pueda regalarme una gran final ante Milan”
Con la camiseta azul y oro conquistó 6 títulos: Apertura 2005, Recopa 2005, Copa Sudamericana 2005, Clausura 2006, Recopa 2006 y Copa Libertadores 2007. “Reconozco que la Libertadores fue la que más disfruté”, agrega quien sintió una rara sensación de ser titular por encima de su ídolo Guillermo Barros Schelotto, decisión que tomaron desde 2005 los DT Jorge Benítez, Alfio Basile, Ricardo La Volpe y Miguel Angel Russo. Pero él no se confunde y, como mayor virtud de Boca, destaca la unión que hay en el plantel: “Yo sólo no puedo hacer ganar al equipo, no me parece bien que el hincha piense o diga eso. Un sólo jugador no hace al equipo. La clave del éxito es que nos llevamos muy bien y hasta hay un cierto sentido de familiaridad. Lo mejor que tiene el grupo es el clima en el que se trabaja y la fortaleza de Boca es el equipo, por encima de las individualidades”. Hace unos meses, Lyon ofreció 15.000.000 de dólares por su pase, pero Rodrigo la rechazó porque no quería irse de Boca. Lo mismo sucedió cuando los dirigentes lo ofrecieron como un trueque a Villarreal, de España, por Juan Román Riquelme. Ahora, parece que la postura puede sufrir modificaciones: “Si fuera por mí jugaría toda mi vida en Boca, aunque a fin de año, si existe una chance y al club le conviene, aceptaría tener una experiencia en Europa”, repitió el bahiense durante su estada en Oriente, aunque si emigra le gustaría que fuese a un equipo con pretensiones de “pelear cosas importantes”. Pasó por un momento de bajos rendimientos en la última Copa Libertadores, incluso reconoció que en medio de un partido con Cúcuta, de Colombia, en la Bombonera, estaba tan falto de confianza que deseaba inconscientemente que no le pasen la pelota. No fue casual que después de ese partido que Boca ganó
Palacio, en acción: el delantero, que apuesta a hacer un muy buen partido ante Milan, es uno de los que más autógrafos firma en el público japonés // A . GR ECO / E . ES P EC IA L
128 partidos jugó Palacio en Boca: 96 locales y 32 internacionales
58 goles hizo en Boca: 43 en torneos locales y 15 en internacionales
por 3 a 0, declaró: “Estoy contento con la victoria del equipo, pero no con mi acttuación. Erré muchos goles y si Boca no se hubiera clasificado para la fial de la Libertadores hubiera sido por na cu ulpa mía”. N Ni siquiera se conformó con el gol que le marcó a Gremio, en La Boca: “Anoté uno, pero erré dos increíbles cuando mpezó el segundo tiempo. Por suerte em saccamos la diferencia que queríamos (3-0) porque no puedo errar esos goles n una final...”. en Guillermo Barros Schelotto, hace un G mees le decía a LA NACION: “Rodrigo tiene todo para ser el mejor delantero de la Argentina. Le sobra talento y condiones; quizás lo único que le falte sea cio mo ostrarse fuerte en los momentos que reccibe alguna crítica”, aporta como una forrma de tratar de guiarlo. E El N° 14 destaca la sociedad que armó con n Palermo y, según él, funciona casi a lla perfección: “Esto se da porque dejam mos nuestros egos de lado y trabajamo os para el mejor resultado del equipo”; y sse siente muy cómodo con Riquelme: “L La arenga que nos dio antes de jugar con n el equipo tunecino nos tocó el corazón n. Nos dijo que debía ser el partido de nuestras vidas y se lamentó por no poder jugar”. S Su mejor serie en una llave decisiva fuee, hasta ahora, en la final ante San Pablo o, por la Recopa 2006, donde anotó tres goles (dos en la Bombonera y el otro en el M Morumbí). “Antes del torneo decíamos qu ue el partido con Milan sería algo lindo si se daba, algo inolvidable. Ojalá lo ganemos para quedar en la historia”, se ilu usiona Rodrigo. El apuesta por su cábala, esa colita rebelde en el pelo, su ascenden nte confianza y por tener el ciento por cieento de eficacia en las situaciones de gol que se le presenten. Si es así, Milan podría quedar rendido a sus pies.
Lo d dijo Russo
“BBoca también tieene sus figuras” YO OKOHAMA (De un enviado especial)).- “Milan no me sorprendió: tácticam mente jugó como lo imaginaba. Tien ne individualidades de peso y muy impo ortantes como Kaká, pero Boca tamb bién tiene sus figuras”, sostuvo el entr renador xenize, Miguel Angel Russo, q que observó el partido desde el palco del estadio Internacional de esta dad, junto con las autoridades de la ciud entidad de la Ribera. Ell director técnico estimó que la final e entre su equipo y los italianos, a jug garse aquí, pasado mañana, “será m muy cerrada y ninguno de los dos arriesgará nada”. Además, agregó: alquier error que cometamos pue“Cua de re esultar fatal, por eso debemos estar m muy concentrados”. Ru usso, que ya había advertido que pre efería tener a Milan como rival en la a definición, no quiso opinar demasiado sobre su futuro en Boca, aunque dejó un mensaje: “No quiero hablar de la continuidad, estamos por jugar una final y punto. Yo vine a trabajar y acá estoy”.
Gennaro Gattuso, un admirador de los boquenses
Los futbolistas xeneizes presenciaron el partido de Milan vs. Urawa desde uno de los palcos del estadio Internacional, de Yokohama
// A. G RECO / E. ES PECIAL
“Si viviera en la Argentina y tuviera que elegir entre River y Boca no lo dudo: elegiría a Boca siempre, por su hinchada y su historia. Es una especie de Milan sudamericano, ya que siempre gana torneos internacionales”, sostuvo Gennaro Gattuso, el combativo mediocampista de Milan.
Un rival conocido y que conserva el poderío de hace cuatro años El plantel azul y oro presenció el éxito de Milan, el adversario de la final; los italianos anhelan un desquite YOKOHAMA (De un enviado especial).– Los equipos europeos y sudamericanos deberán acostumbrarse a que ya ha dejado de ser un trámite el arribo a la final del Mundial de Clubes. Como anteayer le costó a Boca imponerse sobre Etoile, ayer fue el turno de Milan, que superó apenas por 1-0 a Urawa Red Diamonds, de Japón. De esta manera, pasado mañana, italianos y argentinos definirán el certamen. El ganador alcanzará los 18 títulos internacionales y será el club con más conquistas en el planeta, algo así como el nuevo rey de copas. El resultado por la mínima diferencia encerró algunas confusiones, pues Milan no terminó contra las cuerdas ni mucho menos, sino que desperdició varias ocasiones para estirar el marcador. Fue un triunfo que se caía de maduro desde el comienzo, pese al ímpetu de los jugadores locales. Milan no se jacta de ser un equipo de maravillas. Es conservador, sabe estudiar durante las primeras acciones al rival y después apela a la magia de Kaká, que, cuando se asocia con Seedorf, puede ser fatal. Entre ambos trazan la prosa futbolística más elegante del equipo. Pero para que las estrellas italianas puedan sobresalir, es necesaria una telaraña detrás de ellos que recupere la pelota y administre correctamente los tiempos y el juego. En este rubro, Ambrosini y Pirlo forman una sociedad de hierro, que promete batalla en el enfrentamiento con los xeneizes. Boca deberá preocuparse tanto por Kaká y Seedorf como por ese medio campo de toque preciso y de mucho control de pelota. Boca deberá estar atento al juego aéreo de Ambrosini y Gilardino, en caso de que éste no sea reemplazado por Inzaghi. En definitiva, Boca deberá estar inquieto porque enfrente estará un equipo que desea desquitarse de aquella final de hace cuatro años, jugada aquí mismo, por la Copa EuropeoSudamericana que ganó el conjunto argentino por penales, tras la igualdad 1-1. Carlos Ancelotti, símbolo de Milan como jugador y ya hace un tiempo como técnico, aguarda ansioso la final. Un éxito significará un desquite personal, pues fue él quien priorizó el Mundial de Clubes por sobre el calcio, pese a las críticas de los hinchas milaneses. “Sabíamos que los japoneses iban a ser difíciles y complicados, y con Boca será igual. Pero el partido cambiará por la histo-
Seedorf, autor del gol milanés
// REUTERS
ria y la experiencia que tienen los argentinos. El rendimiento de Kaká será clave en la final. Ellos no son tan fuertes en defensa como en ataque, con Palermo, el hombre más peligroso”, dijo el entrenador. Diferente de Ancelotti, la mayoría de los jugadores no toma como un desquite el nuevo cruce con los xeneizes. Kaká, fiDiscreto
Urawa (Japón)
0 1
Milan (Italia)
Ryota Tsuzuki Hajime Hosogai Marcus Tanaka Keisuke Tsuboi Nene A Keita Suzuki (c) Yuki Abe A Makoto Hasebe Takahito Soma Washington Yuichito
5 5 6 5 6 6 6 5 6 6 4
Dida Massimo Oddo Kakha Kaladze Alessandro Nesta A Marek Janculovsky Massimo Ambrosini (c) Andrea Pirlo Gennaro Gattuso Clarence Seedorf Kaká F Alberto Gilardino
DT: Holger Osieck
DT: Carlo Ancelotti
Cambios ST: 30m, Nobuhisa Yamada por Tanaka, y 40m, Tadaaki Hirakawa por Soma. Suplentes: Yamagishi, Ono, Tsutsumi, Koike, Uchidate, Nishizawa, Okano, T. Tanaka, Hironouchi y Kato.
Cambios ST: 17m, Filippo Inzaghi por Gilardino; 34m, Paolo Maldini por Jankulovsky, y 46, Cristian Brocchi por Seedorf. Suplentes: Fiori, Cafu, Emerson, Kalac, Simic, Favalli, Gourcuff, Bonera y Serginho.
GOL
ST: 22m, Seedorf (M). ARBITRO
ESTADIO
PUBLICO
Jorge Larrionda, de Uruguay (bien)
Internacional, de Yokohama
67.005
5 5 5 6 5 7 7 6 7 8 5
gura en el éxito de ayer, ya se imagina el partido con los argentinos. “La verdad es que no pienso el match como una revancha. Sabemos que vamos a tener enfrente un equipo aguerrido, que juega muy bien y tiene experiencia en este tipo de partidos. En una final ninguno es favorito, pero esperemos poder controlar nosotros las acciones”, dijo el brasileño, que se retiró con un dolor en el tobillo izquierdo. Según informaron fuentes del club italiano, sería únicamente un golpe que no le ocasionaría inconvenientes para estar pasado mañana en la definición. Seedorf, autor del tanto del triunfo frente a los japoneses, opinó acerca de lo que significa enfrentar a los xeneizes. “Es bonito y romántico volver a enfrentar a Boca porque lo respetamos mucho y tiene una afición muy importante, así que esperamos disfrutar del partido, como nos sucedió con Liverpool en la final de la Copa de Campeones que ganamos.” Los antecedentes de Maldini encierran argumentos válidos para que él haya sido el único jugador italiano que manifestó tomarse la final como una revancha o duelo personal. “En mi caso, la cuarta espero que sea la vencida. Ya perdí con Vélez, San Pablo y Boca, en 2003. Y ahora, por suerte, tengo la oportunidad de volver a estar en una final en Japón. Ojalá que esta vez sea a mí a quien le toque festejar”, dijo el experimentado defensor. Si bien es aventurado estimar cambios en Milan, Ancelotti ensayaría en estos días incluir a Inzaghi como delantero titular en lugar de Gilardino. Sin Ronaldo, el DT demasiadas alternativas en ataque no tiene. Pipo ya le había ganado la pulseada a su compañero en la final de la Liga de Campeones ante Liverpool, en Atenas. Más allá de la formación, pasado mañana Milan intentará sacarse el estigma y vencer a Boca para así alcanzar la cima del mundo. ¿Boca tiene la fórmula para ganarle a Milan? Son tiempos distintos. El único que perdura de que aquel plantel de 2003 es Sebastián Battaglia y en el club milanés continúan Dida, Maldini, Cafú, Seedorf, Pirlo, Gattuso, Ambrosini, Kaká e Inzaghi. El anhelo de revancha del equipo italiano no será menor que el deseo de Boca de conquistar el mundo nuevamente.
El brasileño Kaká sigue sumando galardones Recientemente, el mediocampista brasileño de Milan, Kaká, ganó el balón de oro otorgado por la revista France Football. Ayer, volvió a sumar un premio: esta vez la revista británica World Soccer lo eligió como el “Jugador del Año”. En segundo lugar quedó el argentino Lionel Messi.