ECONOMIA & NEGOCIOS
Domingo 5 de febrero de 2012
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Entrevista
RICHARD BRANSON
“La Argentina necesita que los isleños la quieran”
“Los gobiernos no deberían intervenir tanto”
FLORENCIA DONOVAN LA NACION Son las 10 de la mañana del sábado. Sir Richard Branson, el cuarto hombre más rico del Reino Unido con una fortuna estimada en US$ 4200 millones, según la revista Forbes, llega metódicamente puntual a la entrevista con LA NACION en la residencia de la embajada británica en la Argentina. Amable, el excéntrico Branson –conocido por hazañas como la de cruzar el Canal de la Mancha en un anfibio en apenas una hora, 40 minutos y 6 segundos–, deja entrever su rebeldía en pequeños detalles: durante la entrevista, no lleva puestos zapatos. El fundador del Grupo Virgin, toda una celebridad en su país, pasó por la Argentina con sus hijos, como parte de un viaje regional, en el que anunció que desembarcará en América latina con Virgin Mobile, su empresa de telefonía móvil, con una inversión de US$ 300 millones. También anticipó a LA NACION que espera poder empezar a volar con su aerolínea Virgin Atlantic de Londres a Buenos Aires. –¿Cuáles son sus planes para la Argentina? –Una de las cosas que nos gustaría hacer es empezar a volar con nuestra aerolínea, Virgin Atlantic, a varias ciudades de la región. Y la Argentina está arriba en la lista. Ustedes no tienen mucha competencia en los vuelos a Londres, en realidad, ninguna. Con lo cual Virgin Atlantic puede ser un buen competidor. Esperamos en los próximos años estar volando para acá. También queremos desarrollar Virgin Mobile, que es una compañía de telefonía celular exitosa en Estados Unidos, Europa, Australia… Nos gustaría abrirla en la Argentina. En unos meses, abriremos en Chile y en Colombia; esperamos tenerla en la mayoría de los países de América del Sur. –¿Cuán pronto será esto? –Espero que podamos cerrar un negocio que nos permita abrir Virgin Mobile en los próximos 9 a 12 meses en la Argentina. –Acá estamos acostumbrados a pagar miles de pesos por un celular, cuando en el mundo desarrollado las compañías de telefonía los entregan gratis como parte de los planes. ¿Planea cambiarlo? –Si Virgin Mobile viene, va a traer más competencia, lo que significa mejores costos para el consumidor. Por el momento, la telefonía móvil en la Argentina está dominada por tres jugadores; si se puede lograr que haya cinco o seis, el público terminará pagando menos. No puedo hacer promesas ahora, pero si Virgin viene, el consumidor saldrá beneficiado.
–El gobierno argentino recientemente trabó las importaciones y tácitamente prohibió a las compañías extranjeras transferir sus dividendos. ¿Le inquietan estas medidas? –La Argentina está creciendo tres veces más rápido que el Reino Unido; es difícil para mí darle consejos al Gobierno de cómo deberían hacer las cosas, porque obviamente la Argentina tiene en este momento más éxito que el Reino Unido. Habiendo dicho esto, creo que los gobiernos deberían tratar de no intervenir demasiado. La Argentina es hoy lo suficientemente fuerte de nuevo como para permitir que el Gobierno intervenga los negocios menos de lo que lo hizo en el pasado. Tengo la sensación de que la Argentina podría ser un país más fuerte si relajara las reglas tan estrictas que hoy tiene. Si uno trata de microadministrar una economía demasiado, eso va a retraer negocios. La Argentina es un país muy grande, tiene gente inteligente... si el Gobierno estableciera un marco de reglas, luego se podría operar dentro de ese marco. –Muchas grandes aerolíneas desaparecieron en el último tiempo. ¿Cómo hizo Virgin Atlantic para sobrevivir? –La única manera de sobrevivir en la industria aerocomercial es siendo el mejor. Creamos una aerolínea en la que era un placer volar, y eso no existía cuando empezamos hace 25 años. Empezamos con un avión y ahora tenemos cuatro aerolíneas en distintas partes del mundo, y son muy exitosas. Si sos la mejor aerolínea, o el mejor restaurante o el mejor hotel nunca vas a quebrar. Si uno cede demasiado, recorta y escucha por demás a los contadores, no será exitoso. –Pero hay una tendencia de las aerolíneas de fusionarse. ¿Serán parte de ese proceso? –La fusión de aerolíneas es muy peligrosa desde el punto de vista del consumidor. Significa menos y menos competencia, y cuando eso sucede sólo se obtienen tarifas más caras. Desde el punto de vista de la Argentina, el hecho de permitir que Iberia y British Airways se fusionen no es bueno para el país ni para el consumidor. Los gobiernos deberían permitir que las compañías compitieran y no que se fusionaran. El problema es que las compañías grandes muchas veces también tienen gran influencia sobre los gobiernos. De todos modos, Virgin Atlantic es más chica y tenemos que ser más hábiles, y asegurarnos de seguir siendo una aerolínea de mejor calidad, y creo que seguimos sobreviviendo y prosperando sobre la base de ello. No tenemos planes de formar parte de otra aerolínea gigantesca. –Con Virgin Galactic está in-
OLIVER KORNBLIHTT/ AFV
El dueño de Virgin planea traer su negocio aerocomercial y de telefonía móvil al país; dice que la Argentina sería más fuerte si fuera menos estricta con el control de la economía
cursionando en el negocio de viajes al espacio, justo en un momento en que la NASA desinvierte y cierra programas. ¿Cree que el sector privado reemplazará al público en la carrera del hombre por conquistar el espacio? –El sector privado reemplazará en gran medida al Estado en la exploración del espacio. Virgin Galactic podrá enviar gente al espacio por una fracción del precio que les sale a los gobiernos [N. de la R.: ya vende pasajes a US$ 200.000]; podremos hacerlo de una forma más amigable con el medio ambiente y podremos poner satélites en el espacio por costos más bajos. Y permitirle a la gente ir al espacio, cosa que a los gobiernos nunca les interesó demasiado. Para diciembre de este año estaré yendo al espacio con mis hijos y será el comienzo de una nueva era espacial. Es tremendamente excitante. Construimos un puerto espacial en México, la nave espacial está terminada, y estamos terminando con las pruebas de los propulsores. Estamos muy cerca. Los vuelos iniciales serán suborbitales, luego orbitales y en un tiempo podremos usar nuestras naves para transportar a la gente alrededor del mundo extremadamente rápido, tal vez desde la Argentina hasta Londres en una hora y media. Y ahí podremos hacerle sudar sangre a British Airways –dijo a carcajadas. –Viniendo de la industria discográfico, ¿qué opina de las iniciativas que están saliendo en estos días para evitar la piratería en la Web? –Creo que la industria de la música está casi muerta ya, lo cual es triste. Especialmente, para las bandas nuevas. Cuando yo estaba en la industria firmamos contrato con muchas bandas nuevas: Janet Jackson, los Rolling Stones, Peter Gabriel, Phil Collins… y después las transformamos en grandes estrellas. Apple no había inventado nada, no había Internet ni piratería. La industria casi desapareció y va a ser muy difícil en el futuro. Entiendo por qué están tratando de proteger lo poco que les queda,
RICHARD BRANSON Cargo: dueño de Virgin Edad: 61 años Origen: inglés Disléxico, a los 16 dejó el colegio y creó la revista Student, que fue un éxito en Inglaterra. En 1970 fundó Virgin, una empresa que vendía discos por correo. Al tiempo, firmó con grupos como los Sex Pistols y los Rolling Stones, y se volvió la sexta discográfica más grande del mundo. Hoy, el grupo tiene más de 200 empresas en 30 países, participa en turismo, en la industria aerocomercial, telefonía móvil, TV, radio, música, finanzas y energía.
pero los gobiernos deben tener cuidado de no destruir Internet en el proceso. –Dijo que “el capitalismo había perdido el rumbo”, pero compró Northern Rock, uno de los bancos salvados por el gobierno británico. ¿Cómo planea administrarlo de manera diferente? –El capitalismo es el único sistema que funciona; todos los demás se probaron y fallaron. Pero creo también que tiene sus fallas, mucha riqueza va para unas pocas perso-
nas y una responsabilidad enorme va con esa riqueza. La gente que tiene suerte de ser exitosa necesita asegurarse de que reinvierte esa riqueza de manera responsable. La mayor parte de mi tiempo la dedico a crear empresas que no dan rédito, sino que buscan ayudar a solucionar los problemas del mundo. Pero hacemos nuevos negocios también. Los bancos en el Reino Unido están muy desacreditados, y con el Virgen Money Bank tendremos uno que trate a la gente bien. –Usted habla mucho de las energías renovables; sin embargo, los países desarrollados suelen ser los que más contaminan y los que luego se niegan a firmar tratados, como el Protocolo de Kyoto. ¿No hay un doble discurso ecológico? –En los Estados Unidos definitivamente sí. Es muy triste ver que Estados Unidos no toma la delantera, porque son los principales contaminadores y no están haciendo realmente lo suficiente para atacar el problema. Pero sí hay muchas compañías en Estados Unidos y en Europa que están tratando. Nosotros invertimos todas las ganancias que hacemos en la industria aerocomercial en energías limpias. En cinco años nuestros aviones estarán impulsados por combustibles que serán 100% libres de carbono. Ya desarrollamos algunos combustibles de este tipo, que sabemos que funcionan en aviones.
Branson no tiene pelos en la lengua. A diferencia de los empresarios locales, que más que nunca en estos días cuidan con recelo cada una de sus declaraciones públicas por el temor a ser reprendidos por el Gobierno, el magnate británico no duda demasiado a la hora de meterse en temas espinosos, como es el caso del conflicto de Malvinas, incluso a pesar de estar alojado con sus hijos en la embajada británica en la Argentina. Según Branson, la Argentina deberá ganarse el favor de los isleños. Así, dice, ellos tendrán la oportunidad de ser “gobernados” por la Argentina en lugar del Reino Unido. –Recientemente, en medio de la escalada diplomática con el Reino Unido por el conflicto de Malvinas, la presidenta Cristina Kirchner llamó en un discurso a los CEO de las empresas inglesas que operan en el país a transmitirle al primer ministro David Cameron si era cierto que nuestro país era “tan terrible”. ¿Qué le diría usted a Cameron después de su visita? –La Argentina es un país precioso, vine aquí con mis hijos, fui a ver tango… Espero que los cuentos de terror de hace 30 años, cuando 30.000 personas desaparecieron y tenían un régimen militar, no sucedan de nuevo. Sospecho que lo de las islas Falklands necesita algo más de tiempo; 30 años parece mucho tiempo, pero todavía la mayoría de la gente de entonces está viva. En algún punto, en el futuro, lo importante es que la Argentina no trate de forzar a los isleños demasiado rápido; ellos necesitan tiempo para sentir que de hecho quieren tener a la Argentina en lugar de al Reino Unido como su gobernante. Y creo que eso podría llevar algunas décadas más, hasta que se olviden del régimen militar por completo. Los isleños y los argentinos deben ser amables entre ellos y dejar de ponerse presión y, con optimismo, en algún tiempo creo que ésta es la mejor chance que tienen los isleños de ser gobernados por la Argentina. Pero se necesita que los isleños lo quieran, no se les puede imponer. –El futbolista Lionel Messi, el tango y el vino malbec son algunos de los mejores embajadores de la Argentina en el mundo. ¿Podría agregarle ahora algo más? –La Argentina tiene gente que está dispuesta a hacer de éste nuevamente uno de los grandes países del mundo. La Argentina se disparó en el pie muchas veces en el último siglo, pero tienen ustedes gente brillante que puede transformarlo en un país brillante, sacar a la gente que queda en la pobreza… No me había dado cuenta del tamaño enorme que tiene la Argentina hasta que vine, y obviamente el mundo estará pidiéndole a la Argentina que ayude a alimentarlo. Para mí es genial que tantos hablen en inglés... Y lo bizarro es que los argentinos y los británicos son muy cercanos, se llevan muy bien, y ha sido así por muchos años... –¿Qué cree que va a pasar con la crisis en Europa? ¿El Reino Unido puede distanciarse del resto de la Unión Europea? –Espero que el Reino Unido no se distancie demasiado del resto de Europa. Porque creo que la Unión Europea es un bloque comercial fantástico. Europa tuvo un problema con el euro, por no establecer reglas lo suficientemente estrictas para evitar que los países se sobreendeuden, pero han aprendido la lección y no va a suceder de nuevo. Espero que este problema se resuelva y podamos volver a encauzarnos.