Las 12 es: Estado de Fluidez y Buena Vibración

universo paralelo donde existen muchas versiones de ti mismo, pero con otras cualidades distintas y otras vidas distintas a dos cosas. Uno va a ser un estado.
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Las 12 es: Estado de Fluidez y Buena Vibración Bienvenido a este nuevo audio de las doce puertas o las doce Es. En este audio, te voy a guiar, como siempre hemos hecho, en esta puerta a este universo paralelo donde existen muchas versiones de ti mismo, pero con otras cualidades distintas y otras vidas distintas a dos cosas. Uno va a ser un estado de fluidez, un estado muy necesario si quieres disfrutar más de la vida, vivir más el presente, y estar pues más fluyendo, ¿vale? que al final pues nos hace vivir la vida más plenamente. Y después de esto, vamos a hacer otro estado más que es la vibración positiva. ¿Qué significa esto? Pues significa que vamos a hacer ver, y a hacer también cómo sería tu vida si tuvieras una vibración positiva durante todos los minutos de tu día. Esto al final, atrae cosas positivas, y es por eso que es muy importante que lo trabajemos. Así que como siempre, vamos a ir empezando. Primero, te voy a preguntar si puedes apoyar tus piernas o tus pies cómodamente. Si estás tumbado, apoyarlos bien colocados mientras estás tumbado. O si estás sentado, poner las plantas de tus pies bien apoyadas en el suelo. Genial. Ahora, ¿Puedes poner tus brazos bien apoyados, bien colocados, para este estado de relajación en el que vas a entrar? Perfecto. ¿Puedes tomar una respiración bien profunda manteniendo el aire por unos segundos, y soltándolo lentamente? Perfecto. Y ahora, si aún no lo has hecho, cierra tus ojos. Genial. Y ahora, mientras tienes los ojos cerrados, quiero que empieces a imaginar como si una nube de calma, de tranquilidad, te empezara a bañar desde la cabeza, bajando por la cara, dejando cada músculo, cada fibra relajado. El cuello, los hombros, y conforme va bajando esa nube, vas viendo incluso los colores que tiene. El pecho, el estómago, las piernas, hasta llegar a tus pies. Dejando así todo tu cuerpo relajado. Eso es. Y me pregunto, ¿Cuál ha sido el momento durante estos otros audios que has podido escuchar, u otras sesiones de hipnosis que has podido experimentar en los que te has

                               

 

sentido más profundamente relajado, ahora? ¿Cómo estaba tu cuerpo

colocado? ¿Cómo era tu respiración de profunda, ahora? Eso es, eso es. Y de hecho, para practicar aún mejor esto de poder relajarte rápidamente, vamos a hacer un ejercicio muy fácil. Quiero que centres toda tu atención en los músculos de tu cara, en todos los músculos de tu cara. Y vamos a hacer un ejercicio muy fácil. Cuando cuente tres, vas a apretar al máximo todos los músculos de tu cara, apretando cada músculo, las cejas, los labios, todos los músculos de tu cara, muy apretados. Y los vas a mantener hasta que yo te diga. Uno, dos, tres. Aprieta todos los músculos de tu cara. Eso es. Suéltalos ahora. Eso es, notando cómo se relajan completamente. Eso es, eso es. Notando cómo se estiran, cómo se quedan flojos, relajados. Eso es, ahora voy a contar de nuevo hasta el tres. Vas a volver a apretar todos los músculos de tu cara, y después los soltaremos cuando yo te diga. Uno, dos, tres. Aprieta todos los músculos de tu cara. Eso es, todos, más, más, más, apretados. Suelta los músculos ahora. Eso es. Relajados, totalmente relajados. Muy bien, lo estás haciendo perfecto. Siente cómo se relajan todos los músculos de tu cara, ahora. Eso es. A partir de este momento con cada respiración, tu relajación será más profunda. Tanto o más cómo son ahora los músculos de tu cara. Como están ahora de relajados los músculos de tu cara. Muy bien. Ahora, quiero que prestes atención a toda tu cabeza, y si encuentras alguna tensión, la alivies, la sueltes. Eso es. Ahora, que bajes a tu cuello, y si encuentras alguna tensión, la sueltes. Bajando por los hombros, el pecho, el estómago, la cintura, las piernas, hasta terminar por los pies. Eso es, eso es. Ahora quiero que tomes una respiración profunda, y al soltar el aire te imagines que todo tu cuerpo se relajará más todavía, soltando toda la tensión acumulada. Eso es, eso es. Muy bien, lo estás haciendo perfecto porque tienes una mente maravillosa.

                               

 

Ahora quiero que te imagines que estás en lo alto de unas escaleras. Son unas escaleras muy cómodas, muy seguras, de diez peldaños, y tienen una curiosidad. A la derecha, justo en toda la pared que va por la derecha de las escaleras, hay un espejo. Un espejo donde puedes verte de cuerpo entero. Y quiero que te mires, y que es imagen que ves de ti mismo o de ti misma, sea tu mejor versión. Que sea una imagen de ti mismo, de ti misma, que sólo con mirarla digas: “Este, esta, si soy yo”. Que sea tu mejor versión. Así que modifica esa imagen para que sea así, ahora. Muy bien. Ahora que tenemos esa imagen, vamos a ir bajando mientras yo cuento desde el diez hasta el cero, y vas a ir estando más profundamente relajado. Y sabiendo que la imagen que ves a tu derecha, ese reflejo de ti mismo, es cada vez más tu imagen subconsciente de ti mismo, la que te va a acompañar para siempre a partir de ahora. Así que empezamos a bajar. Nueve, ocho, con cada palabra, cada número más profundamente relajado. Siete, seis, cinco, cuatro, tres, dos, uno, y cero. Sueña, sueña profundamente. Eso es, abriéndote a la imaginación. Totalmente relajado, suelto, suelta. Eso es. Y ahora, quiero que te imagines que estás en un camino con mucha luz, muy amplio, muy seguro, que lleva a un bosque. Entras en ese bosque, está lleno de árboles gigantes, y hay uno que te atrae más que los demás. Así que te acercas a ese árbol, te sientas, te recuestas, y mientras miras el cielo, empiezas a tener mucho sueño. Y casi sin darte cuenta te quedas dormido, dormida, sentado en ese árbol. Y empiezas a soñar que vas en una nube, que está sobrevolando ese bosque. Es una nube muy cómoda, muy segura, que te lleva a cualquier sitio que tú quieras, yendo a una altura muy alta, o muy baja, sólo depende de ti para hacerte sentir cómodo o cómoda. Así que quiero que ahora en esa nube, vayas hasta esa ciudad donde están esas doce puertas, esas doce Es, ahora. Y te bajes de la nube, andes hacia ese edificio donde está esa habitación, entres, y mires las puertas, las doce. Algunas ya las has explorado, otras no. Y hay una de ellas que es el estado de fluidez. Quiero que vayas hacia esa puerta que te hace sentir que es la del estado de fluidez, y cuando cuente tres, abrirás la puerta y saltarás a este universo paralelo, donde

                               

 

otra versión de ti mismo o de ti misma vive con un estado absoluto de fluidez, con otras decisiones, otro tipo de vida, puede que incluso otra pareja, otro trabajo, pero en un estado de fluidez que es lo que queremos absorber nosotros. Así que cuando cuente tres, saltarás a este sitio, a este universo paralelo. Uno, dos, tres. Abre la puerta y salta a este universo paralelo. Quiero que empieces a ver a esta versión de ti mismo o de ti misma. Cómo va pasando el día, y va yendo a trabajar, estando con su pareja, viviendo, pero con un estado de fluidez total, dejándose llevar, viviendo el presente, viviendo el momento. Y quiero que le observes, porque él no puede observarte ahora mismo, todavía. Quiero que le observes por veinte segundos. Que mires qué hace en su vida, cómo se mueve, qué cosas tiene, qué cosas no tiene, para aprender el máximo de él o de ella. En veinte segundos volveré a hablar contigo. Eso es, lo estás haciendo genial, porque tienes una mente maravillosa. Ahora, cuando cuente tres, él te va a poder ver, ella te va a poder ver, y vas a poder comunicarte. Os vais a ver, a sentir, y quiero que os digáis todo lo que necesitéis deciros para que a partir de ahora, tu estado sea de fluidez en tu vida, siempre que lo necesites. Uno, dos, tres. Empezáis a hablar, te empieza a dar las claves más importantes para esto. Y quiero que durante diez segundos, absorbas todas las claves que puedas. En diez segundos volveré a hablar contigo. Eso es, muy bien, lo estás haciendo genial. Y ahora, cuando cuente tres, os vais a abrazar, sintiendo lo que os hace sentir agradecer que existan todas estas versiones, todos estos universos paralelos. Uno, dos, tres. Y os abrazáis con tanto sentimiento que os fundís, y absorbes en ti mismo la vibración de ese estado de fluidez en tu vida. Notas como cada célula, cada fibra de tu cuerpo, se carga de más y más fluidez. Eso es, eso es, eso es. Y ahora tomas una respiración profunda, dejando que se selle con tus células este estado de fluidez. Y cuando cuente tres, saltarás de nuevo por esa

                               

 

puerta de tránsito hacia la habitación, y volverás a estar en esa habitación de las doce Es. Pero ahora, con este estado de fluidez integrado en tu cuerpo. Preparado. Uno, dos, tres. Salta por esa puerta y vuelves a la habitación. Tomas una respiración profunda, ahora, y notas como algo ha cambiado para siempre. Eso es. Y ahora, miras alrededor, esas otras puertas, y ves que una te llama más la atención que las demás. Es la de la vibración positiva. Así que te acercas a ella, sólo tú sabes cuál es. Y cuando cuente tres, abrirás y saltarás dentro, a ese universo paralelo, donde otra versión de ti mismo o de ti misma está viviendo su vida siempre con una vibración positiva. Uno, dos, tres. Abres la puerta y saltas a ese universo paralelo, y empiezas a ver cómo esa versión de ti mismo, de ti misma, se mueve por la vida. Te voy a dejar veinte segundos para que le sigas, le veas, porque de momento él no puede verte, y veas qué es lo que hace, qué obtiene con esta vibración positiva. En veinte segundos volveré a hablar contigo. Eso es, muy bien, lo estás haciendo genial porque tienes una mente maravillosa. Y ahora, cuando cuente tres, podréis interactuar. Podrás preguntarle qué hace para tener esa vibración positiva, qué consigue con ello, cómo ha hecho, cuál es su estrategia. Y te lo va a contar todo, cada una de las claves, y las absorberás de manera inconsciente, casi sin darte cuenta. Para aplicarlas en tu vida, en tu universo, a partir de ahora. Uno, dos, tres. Y empezáis a hablar. En diez segundos, volveré a hablar contigo, mientras tú te comunicas ahora con esta versión de ti mismo, de ti misma. Eso es, muy bien, eso es. Ahora quiero que os abracéis, para agradecer lo que hacéis el uno por el otro. Y cuando os abracéis, notáis tanto sentimiento que te fundes con esta versión de ti mismo, o de ti misma, notando como cada célula, cada fibra, cada nervio de tu cuerpo absorbe esa vibración positiva. Esa vibración que te vas a llevar a tu universo, para usarla siempre. Eso es. Y

                               

 

tomas una respiración profunda sellando este cambio en tu cuerpo en cada fibra. Y ahora, cuando cuente tres, saltarás de nuevo por esa puerta de tránsito a esa habitación donde están las doce puertas, con esta nueva habilidad de vibrar positivamente a partir de ahora. Uno, dos, tres. Salta por esa puerta, y vuelves a ese universo paralelo. Miras las doce puertas mientras tomas una respiración profunda, ahora. Eso es. Y notas cómo tu cuerpo ha cambiado, cómo tus células ahora vibran distinto. Y con esa nueva vibración, sales de la habitación. Empiezas a caminar por la calle, y de repente estás de nuevo en esa nube, esa nube mágica que te lleva donde tú quieres. Y en esta ocasión, te lleva a ese bosque, donde de repente despiertas sentado en un árbol. Te levantas, empiezas a andar, sales del bosque, hasta llegar al camino, y a llegar a las escaleras de diez peldaños. Esas escaleras que ahora contaré del uno al diez, y las subirás sintiéndote genial, volviendo al momento presente, pero ahora con ese cambio que has hecho. Con ese cambio para tener un estado de fluidez, y para tener un estado de vibración positiva. Así que ahora, voy a empezar a contar y eso es lo que sucederá. Uno, notando toda la energía subiendo por los pies, la rodilla, la cintura, el pecho. Dos, tres, notando cada célula, cada fibra cada nervio de tu cuerpo volviendo a la vida. Cuatro, cinco, notando toda la cara refrescada como por aire de montaña. Seis, siete, toma una respiración bien profunda. Eso es. Ocho, nueve, diez, ojos abiertos, completamente despierto, despierta y alerta. Uno, dos, tres, cuatro, cinco, seis, siete, ocho, nueve, y diez. Ojos abiertos, totalmente despierto, o despierta y alerta. Bienvenido a tu nueva vida. Genial. Te habló Nacho Muñoz. Nos vemos en el siguiente audio. Mientras tanto, vive tu vida con pasión.