El San Martín, en la encrucijada

6 sept. 2009 - mo cincuentenario del Teatro Gene- ... TEATRO. Marta Bianchi se luce en una puesta costumbrista ... migliana, del Teatro del Pueblo,.
2MB Größe 10 Downloads 66 vistas
Espectáculos

Domingo 6 de septiembre de 2009

LA NACION/Sección 4/Página 5

TEATRO (Entrelíneas) Por Pablo Sirvén

Marta Bianchi se luce en una puesta costumbrista

El San Martín, en la encrucijada Ojalá que llegue a los 50 con las obras terminadas, las cuentas al día y una buena cartelera

Buena (((

Raíces, de Arnold Wesker, versión de González del Pino y Masllorens. Con Marta Bianchi, Melina Petriella, Julieta Vallina, Mercedes Scapola, Pablo Rinaldi, Ignacio Rodríguez de Anca, Leandro Castello, Alejandro Ojeda y Mario Labardén. Escenografía: Oria Puppo. Vestuario: Marta Albertinazzi. Luces: Jorge Pastorino. Música: Carmen Baliero. Director: Luciano Suardi. En el Regina. Duración:

Continuación de la Pág. 1, Col. 2 Asistir implica comprometerse, involucrarse, percibir y compartir sensaciones con el resto del público, es recibir parte de la energía que los artistas brindan desde el escenario, es abrir la cabeza y el corazón a una experiencia distinta que nos sacude de la rutina cotidiana. Es una pena que la mayoría de los políticos, y no sólo Macri, consideren superflua o innecesaria la costumbre frecuente de entregarse dócilmente a experiencias estéticas y sonoras refinadas. Se pierden, nada más y nada menos, la posibilidad de ser mejores y, consecuentemente, más inteligentes, abiertos y sensibles. * * * Toda esta larga perorata viene a cuento de que es necesario que Macri, personalmente, se involucre lo más que pueda con el ya muy próximo cincuentenario del Teatro General San Martín (coincidirá, encima, con el Bicentenario) para darle a esa magna celebración el brillo del que careció, lamentablemente, el año pasado el centenario del Teatro Colón. Pero el jefe de gobierno porteño prefiere llenar su cabeza de números y hace cuentas asombrosas, cuyos resultados difícilmente lo lleven a algún lado concreto. Es que Mauricio Macri llegó al íntimo convencimiento de que para que la ciudad se desembarace de sus males endémicos y resplandezca necesita 60 mil millones de pesos. Si es así, verdaderamente está en problemas porque sólo dispone de 250 millones libres al año para hacerlo. Más de la mitad de los quince mil millones de pesos que tiene de presupuesto se le van en los sueldos de sus 140.000 empleados; el resto es absorbido por partidas ya asignadas, contratos, obras previstas, subsidios y fondos varios. Si estos números se mantienen, tardaría 240 años en completar su ideal. No sólo no le alcanzarían varias vidas, sino que mucho antes, por suerte, el electorado se inclinaría por alguien que ofrezca soluciones más realizables y rápidas.

En el Teatro del Pueblo

Comienza un ciclo en honor a Roberto Arlt Cuatro semimontados, desde mañana Mañana, en la sala Carlos Somigliana, del Teatro del Pueblo, comenzará el Ciclo Homenaje a Roberto Arlt, con propuestas de teatro semimontado a cargo de un interesante grupo de directores y actores, provenientes del teatro independiente. El Teatro Del Pueblo-SOMI (Fundación Carlos Somigliana) se propuso homenajear la rica y vasta obra de Arlt, íntimamente ligada a la historia del teatro independiente y de la figura de Leónidas Barletta su creador. Para eso se han seleccionado varios textos con el objetivo de acercar al público, en forma libre y gratuita, una amplia pincelada de la obra de este maravilloso autor argentino que está a la altura de los grandes clásicos universales. El ciclo continuará los lunes, hasta el 28 de septiembre, en el Teatro del Pueblo, Av. Roque Sáenz Peña 943 (reservas: 4326-3606).

Aguafuertes Mañana abrirá el ciclo con una charla Cernadas Lamadrid, y se continuará con el montaje que Corina Fiorillo hizo de Aguafuertes porteñas. En este primer semimontado participarán Laura Azcurra, Carlos Kaspar, Nelson Rueda, Sebastián Holz y Lautaro Matute, con proyecciones diseñadas por Fabián Pol. Entretanto, el lunes 14, Gladys Lizarazu dirigirá La fiesta del hierro; el 21, Carlo Argento hará su semimontado de Saverio, el cruel; y el 28, Rubens Correa cerrará el ciclo con su versión de 300 millones. El elenco de actores se completa con Silvina Bosco, Claudio Gallardou, Lucrecia Capello, Luis Campos, Coni Marino, Graciela Pal, Stella Matute, Luis Longhi, Francisco Pesqueira, Claudio Pazos, Gonzalo Morales y Paula Canals, entre muchos otros.

SOLEDAD AZNAREZ

El aniversario que se avecina tiene que ser luminoso y sin retaceos, como sucedió el año pasado con el Teatro Colón

Pero ingeniero al fin, los números siempre imponen su delantera casi excluyente en la cabeza de Macri. Y los del Complejo Teatral de Buenos Aires lo preocupan. Con un presupuesto de 55 millones de pesos anuales, 800 empleados y 300.414 entradas emitidas en 2008, el costo por espectador se elevó a 188 pesos. Se invirtieron quince millones en producción artística y por boleterías sólo volvieron menos de tres millones (ya que las entradas tienen precios subsidiados y en no pocos casos se dan gratis para incentivar en la ciudadanía el saludable rito formador de ir al teatro). Las obras de restauración del edificio que da sobre la avenida Corrientes sufren demoras y suspensiones por causas presupuestarias. Ya se terminó de instalar el sistema de aire acondicionado para las salas, se retiraron materiales con asbesto, por ser cancerígenos, de

salas, escenarios y talleres, y culminó la reforma de la sala Cunill Cabanellas. Actualmente se reemplazan carpinterías metálicas del cuerpo A del teatro, pero están detenidas otras reformas y las obras en el exterior del edificio, se posterga la instalación de dimmers en la sala Martín Coronado y sigue en veremos la sala de ensayo para el Ballet Contemporáneo. El malestar suscitado por el atraso en el pago de sueldos y contratos y la reprogramación de algunos estrenos no deben repetirse en 2010, para que el cincuentenario sea una verdadera fiesta, que no dé pie a nuevos y peores lamentos. Hay varias ideas en danza: sumar presencia en los barrios mediante muestras itinerantes, habrá un concurso para el diseño del logotipo del 50º aniversario y la edición de un libro. Por otra parte, ya está en marcha la realización de un documental, con

guión de Aída Bortnik y dirección de Carlos Orgambide. * * * La gente que abreva poco y nada en la cultura (aparte de lucir precaria, prejuiciosa y lineal) tiende a pensar que gastar en ella es como tirar la plata a la basura. Ignoran sus benéficos efectos sobre los valores democráticos, la espiritualidad, la cohesión social y hasta la economía. Así lo destaca la experta Françoise Benhamou en La economía de la cultura (Ediciones Trilce, Montevideo, 1997): “Las ganancias que la vida cultural le puede aportar a la colectividad no siempre –o casi nunca– cubren los gastos ocasionados. Evidentemente, el interés en estos gastos debe ser evaluado en función de otros criterios que van más allá de la noción económica”.

[email protected]

Escrita medio siglo atrás, los años han mellado el impacto socio-político que la trilogía de Wesker (Londres, 1932) –Sopa de pollo con cebada, esta Raíces y Hablo de Jerusalén– tuvo en su momento. El autor, hoy ennoblecido por la reina Isabel II, fue considerado el representante más notorio de lo que la crítica denominó kitchensink drama, esto es, “drama de la pileta de la cocina”, en alusión a su problemática, referida a la baja clase media en la Gran Bretaña de la inmediata posguerra. De la misma generación de John Osborne, Harold Pinter, Edward Bond, Tom Stoppard, Sheilagh Delaney y otros, mientras muchos de ellos evolucionaron hacia formas de expresión más libres e imaginativas, Wesker fue obstinadamente fiel al realismo social, tal como lo entendía la izquierda de entonces. Es, por consiguiente, un teatro de tesis, con mensaje. Explícito en el extenso parlamento final de Beatie Bryant (a quien su novio, Ronnie –protagonista del anterior panel del tríptico, Raíces–, acaba de abandonar después de tres años de relación), dirigido a su

convencional familia tipo, tan sólo preocupada por las urgencias cotidianas. Este mensaje, por descontado idealista y mesiánico, hoy parece anacrónico y en exceso verborrágico. Beatie (interpretada con entusiasmo por Melina Petriella) proclama haber alcanzado algo así como la iluminación progresista, pero el espectador actual la percibe sólo como una marioneta de Ronnie. A quien nunca se ve, pero cuyo peso dramático es considerable. Lo que queda es una amena comedia costumbrista, con oportunos toques de humor y alguna leve melancolía. Luciano Suardi dirige con su acostumbrada pericia, aunque debe luchar aquí con una desconcertante, nada funcional escenografía de Oria Puppo.

Marta Bianchi y Melina Petriella

El nivel del elenco es homogéneo, pero la verdadera protagonista, que arrasa justificadamente con el fervor del público, es el personaje de la señora Bryant, la madre de Beatie, a cargo de una inolvidable, magnífica Marta Bianchi.

Ernesto Schoo