Espectáculos
Página 2/LA NACION
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Jueves 19 de agosto de 2010
CINE Debate abierto: el interés del público y los riesgos de una saturación
El cine 3D, en el ojo de la tormenta Continuación de la Pág. 1, Col. 5 peran aún el 10 por ciento del total de pantallas cinematográficas disponibles en la Argentina y ya generaron en lo que va del año alrededor del 28 por ciento de la recaudación total. Ese aún exiguo número de salas 3D consigue hoy aportar más del 50 por ciento de los ingresos de las películas estrenadas al mismo tiempo en ambos formatos. Por eso, lo que ocurrió con El último maestro del aire seguramente se repetirá a partir de hoy en el caso de Como perros y gatos 2, que confinará al film de M. Night Shyamalan a las funciones nocturnas. En este caso, la demanda supera largamente la oferta y una lista de espera de 11 títulos en 3D, programados de aquí a fin de año, augura más de un cuello de botella. En septiembre llegarán Step Up, Gaturro y la muy esperada Ga’Hoole, la leyenda de los guardianes (ver recuadro); en octubre, X Games y Resident Evil 4, y en noviembre El juego del miedo 3D y el nuevo film de Harry Potter. Todos quieren ver cine en 3D y todos quieren hacer películas en 3D. Hollywood tiene 60 producciones en marcha para 2010. Y allí la expectativa empieza a chocar con algunos reparos. El respetado crítico de Entertainment Weekly Owen Gleiberman se preguntó hace poco si esa gigantesca apuesta de la industria por el 3D resulta la medida más fidedigna del actual gusto del público. “¿No será que hay éxitos en 3D que son éxitos por sí mismos y no porque aparecen en ese formato?”, se pregunta Gleiberman, citando específicamente el caso de Alicia en el País de las Maravillas, de Tim Burton. Los reparos se ampliaron en el reciente encuentro Comic Con, a tal punto que The New York Times se refirió en una extensa nota a las “formas de resistencia” que aparecen en Hollywood frente al “empujón” que aplica la industria hacia el 3D. El virtual líder de esa tendencia es J. J. Abrams, que dejó en esa convención una frase cargada de significado: “Cada vez que nos ponemos los anteojos, todo empieza a oscurecerse”. ¿Cansancio? ¿Saturación? ¿Rechazo a la unanimidad? Los dichos van en línea con otro dato recogido por el diario, según el cual una encuesta entre fans de El hobbit arrojó un unánime rechazo a la posibilidad de que la futura adaptación al cine se haga en 3D. Las negativas más rotundas pasan por la idea de recurrir a último momento a esa tecnología para que
Boom en números
Oferta y demanda El último maestro del aire (izquierda), fue lo más visto de la última semana, pese a las críticas negativas. La explicación pasa por el interés en ver cine en 3D, extendido a próximos estrenos como Ga’Hoole, la leyenda de los guardianes
1100
N Es el número aproximado de
pantallas de cine en la Argentina.
70
N son las salas en formato 3D.
28.033.579
N Es el número de entradas vendi-
das en lo que va de 2010.
El vuelo de las lechuzas, la historia que viene
5.452.545
N Es el número de entradas ven-
didas en salas 3D en lo que va de 2010, el 19,4% del total.
495.342.624 N Es el total de lo recaudado, en
pesos, en lo que va de 2010.
137.649.226 N Las ganancias en pesos de
las películas en 3D en este año. Representa un 28 por ciento de la recaudación total. Fuente: Ultracine
films originalmente realizados en formato convencional terminen estrenados en 3D. Entre nosotros, en cambio, reina el optimismo y todos auguran que para las próximas vacaciones de invierno se duplicará el número actual (unas 70) de salas 3D. “El nuestro es un mercado todavía poco desarrollado y que está para crecer por el lado del cine y también de contenidos alternativos, como el fútbol y la música. Es todo tan nuevo que tenemos mucho para aprender, y el actual cuello de botella se irá normalizando natural-
UIP
mente con el tiempo”, dijo Martín Alvarez Morales, gerente general de Cinemark. Su par de Hoyts, Pablo Lundahl, dijo que la respuesta del público se debe a que valora al 3D como una opción diferente a lo que se vio hasta ahora: “Es cierto que hay pelí-
culas que no cumplen con las expectativas, pero en el corto plazo la gente se irá poniendo más selectiva. Por ahora, el interés es tan grande que si yo mañana pongo a la venta las entradas para Harry Potter en 3D, las agoto completamente de aquí al estreno en noviembre”.
Otra de espías, pero con mascotas Como perros y gatos 2 se apoya en una trama de escaso vuelo que parodia a 007 y en los efectos visuales 3D
Sensible, bella y entretenida. Si la relación entre contenido de calidad y tecnología 3D dependiera de una película, esa película sería Ga’Hoole, la leyenda de los guardianes. El film, que estrenará Warner el próximo 30 de septiembre en la Argentina, aspira a ser para los relatos de fantasía lo que Avatar fue para la ciencia ficción. Aunque con un guión más sólido que la maravilla visual de James Cameron. Dirigida por Zack Snyder (300 y Watchmen), la película está basada en la serie literaria juvenil creada por Kathryn Lasky, que ya lleva quince entregas. En la Argentina están editadas las primeras dos novelas, La captura y El viaje, cuyo contenido fue utilizado para el guión de la película. En una suerte de Tierra Media a la J.R.R. Tolkien, la autora imaginó un mundo habitado por lechuzas y una lucha entre las diferentes especies por el control de su universo dividido entre el cielo y la tierra. En el centro del relato aparece Soren, un pichón de lechuza común (Tyto Alba)que es secuestrado por una terrible organización que pretende esclavizar a sus congéneres para utilizarlos en la guerra por el poder.
Terreno fértil para combinar la animación de última generación que el estudio ya había utilizado en Happy Feet, el pingüino con las posibilidades del 3D, las primeras imágenes de Ga’Hoole, mostradas hace unos días a la prensa local, impresionan (ya se pueden ver los avances en los cines). En los poco más de quince minutos exhibidos se pudo ver a los diferentes protagonistas del film en toda su animada belleza. Además de Soren, aparecen sus compañeros de aventuras Gylfie, un tipo de ave rapaz conocido como mochuelo duende o enano, de tamaño pequeño pero gran inteligencia, Digger, un mochuelo excavador que será el más cómico del grupo y Twilight, un búho grande que funcionará como una especie de protector de sus amigos dispuestos a salvar su mundo de la tiranía. Para ello, deberán encontrar a los guardianes de Ga’Hoole, una orden secreta de lechuzas siempre listas para pelear por el bien. El único problema del plan es que ninguno está seguro de que exista más allá de los relatos de las leyendas de tiempos lejanos que sus padres les contaban en el nido. Con posibilidades de transformarse en la saga fantástica que reemplace a la de Harry Potter, Ga’Hoole, la leyenda de los guardianes, bien podría ser también la mejor cara que el 3D que viene tiene para ofrecer.
Natalia Trzenko
Julieta Zylberberg se luce como la reprimida protagonista del film, adaptado de la novela de Martín Kohan
Regular (( Como perros y gatos 2, la venganza de Kitty Galore (Cats & Dogs: The Revenge of Kitty Galore; EE. UU/2010, color, hablada en inglés y en versión doblada al castellano). Dirección: Brad Peyton. Con Chris O’Donnell, Jack McBrayer y varios animales amaestrados. Guión: Ron J. Friedman y Steve Bencich. Fotografía: Steven Poster. Música: Christopher Lennertz. Edición: Julie Rogers. Presentada por Warner en salas 2D y digitales 3D. 84 minutos. Apta para todo público. El programa incluye el corto Coyote Falls.
Once años separan a la película original Como perros y gatos de esta secuela, que a juzgar por sus resultados intenta sobre todo sacar provecho del irresistible atractivo que por ahora despierta cualquier estreno en 3D. Esta novedad marca la diferencia a tal punto que los efectos visuales, convertidos en amos y señores, reducen a la mínima expresión la presencia humana, bastante significativa en el comienzo de la historia. Una historia familiar dominaba el film de 2001: la obsesión de un científico por hallar un remedio a las alergias de las mascotas abría una módica aventura de espionaje, en la que perros y gatos se convertían en enemigos irreconciliables. Algunas de esas mascotas (los canes Butch y Lou; el felino Mr. Tinkles) reaparecen en una segunda aventura que parodia a las películas de James Bond desde la secuencia de los títulos, en la que reaparece la voz más familiar en términos musicales para los devotos de 007, la de Shirley Bassey. En este caso, la excusa argumental es una nueva operación encubierta del equipo canino ultrasecreto, al que se suma un perro policía castigado por el fracaso de una operación. Y de nuevo una gata (la Kitty Galore del título) aparece como villana, construida en trazos gruesos a imagen y semejanza de las enemigas de James Bond. La novedad es que se queda tan solo como ellos, porque varios de su especie también se organizan en una red de agentes secretos, cuyo líder respon-
DISTRIBUTION COMPANY
Cuando el mal se vuelve angustiante cotidianidad El secundario en 1982, como metáfora de la sociedad Muy buena (((( La mirada invisible (Argentina-EspañaFrancia/2010). Dirección: Diego Lerman. Con Julieta Zylberberg, Osmar Núñez, Marta Lubos, Gaby Ferrero y otros. Guión: Diego Lerman y María Meira, basado en la novela Ciencias morales, de Martín Kohan. Fotografía: Alvaro Gutiérrez. Dirección de arte: Yamila Fontán. Presentada por Distribution Company Argentina. Duración: 97 minutos. Calificación: sólo apta para mayores de 16 años.
WARNER
El perro policía Diggs está mucho más aprovechado en este film familiar que su dueño, Chris O’Donnell
de al nombre de Lazenby (otro guiño para los fanáticos de 007, al punto que en la versión original tiene la voz de Roger Moore). Así se pierde uno de los escasos atractivos de la primera parte. Para evitar protestas y posibles reclamos de favoritismo, ahora perros y gatos son aliados: el único enemigo es el felino más malo y más desagradable de todos. Como para marcar aún más las diferencias, Kitty Galore resulta ser un animatronic armado en un laboratorio de efectos visuales; el resto son animales verdaderos, llevados a la acción gracias a un batallón de efectos digitales. Esa acción resulta más vertigino-
sa que precisa y más artificiosa que coherente. La trama desborda en menciones y referencias a películas muy conocidas (además de Bond se cita a Arma mortal, El silencio de los inocentes y muchas otras que auguran una tercera entrega), pero el divertimento se agota rápido y todo se limita a mostrar del modo más llamativo posible cómo todos estos animales bien adiestrados son capaces de hablar y de desafiar la ley de gravedad, mientras los escasos actores de carne y hueso (Chris O’Donnell y el excelente comediante de 30 Rock Jack McBrayer) quedan totalmente desaprovechados.
Al menos es posible disfrutar de un fantástico prólogo con el regreso de los Looney Tunes. En una nueva aventura de tres minutos con el Coyote y el Correcaminos, a la que sólo le hace falta bajar un poco el pie del acelerador, el 3D refulge en los entrañables escenarios surgidos de la inventiva de Chuck Jones y el espíritu de la historia original se mantiene intacto, así como un comentario musical digno de Carl Stalling. A diferencia del producto principal, esperamos en este caso con avidez nuevas aventuras.
Marcelo Stiletano
Corre 1982 y la Guerra de las Malvinas está muy cerca de convertirse en una dura realidad. Los alumnos del Colegio Nacional de Buenos Aires dejan transcurrir, ajenos a la tragedia, los monótonos días entre libros de texto, exámenes y preocupaciones de adolescentes. Entre ellos se desplaza María Teresa, una preceptora que vigila con ojos escrutadores a esos muchachos que ven en ella a un ser desprovisto de calidez y de humanidad. Sexualmente reprimida, se obsesiona por aplicar a cualquier precio las reglas más severas y así, comienza a esconderse en los baños de los varones para sorprender a los que fuman y delatarlos ante Biasutto, el jefe de preceptores. Poco a poco, María Teresa hace de ello un hábito oscuramente excitante, una rigurosa vigilancia tan inflexible como cotidiana. El director Diego Lerman logró, con
indudable capacidad, dejar fuera de campo las funestas persecuciones y los horrores de la dictadura militar para apuntar directamente a esos protagonistas que recorren un micromundo de delaciones y de maldades. Narrado de una manera tan minimalista como exhaustiva –elementos destacados en la novela original–, el film logra un clima casi siniestro en torno de esa mujer que, desde su soledad, se transforma en alguien dispuesto a la dictadura más atroz para conseguir algo de lo que siempre careció: la humildad y la comprensión. El realizador, que ya había dado indudables muestras de su talento en Tan de repente y en Mientras tanto, logró aquí una metáfora de los años más duros de la reciente historia argentina. Y lo hizo con enorme calidad tanto artística como técnica, ya que la labor de Julieta Zylberberg logró, sin duda, encarnar con enorme fervor a esa María Teresa deshumanizada, en tanto que Osmar Núñez, como Biasutto, logró imponer su capacidad actoral a ese preceptor digno exponente de una etapa de terror y persecuciones. La excelente fotografía y la impecable dirección de arte son otros puntos sobresalientes de este film que obliga a la reflexión por el camino de una cotidianidad tan simple y, a la vez, tan angustiante.
Adolfo C. Martínez