El Ojo Humano El globo ocular con cerca de 25 mm de diámetro es el responsable por la captación de la luz reflejada por los objetos a nuestro alrededor. Esa luz alcanza en primer lugar nuestra córnea que es un tejido transparente que cubre nuestro iris como el vidrio de un reloj. En su camino, la luz ahora pasa a través del humor acuoso, penetrando en el globo ocular por la pupila, alcanzando inmediatamente el cristalino que funciona como una lenta de focalización, convergiendo entonces los rayos luminosos para un punto focal sobre la retina.
En la retina, más de cien millones de células fotosensibles transforman la luz en impulsos electroquímicos que son enviados al cerebro por el nervio óptico. En el cerebro, más precisamente en el cortex visual, ocurre el procesamiento de las imágenes recibidas por el ojo derecho e izquierdo completando entonces nuestra sensación visual. El ojo humano es un órgano de visión en el cual una imagen óptica del mundo externo es producida y transformada en impulsos nerviosos y conducida al cerebro. El está formado por el globo ocular y sus diversos componentes. Básicamente se restringe a una lente positivo (convergente) de alto poder refractivo y está formado por la córnea y el cristalino. Los rayos luminosos, paralelos, venidos del infinito, penetran en el ojo por la pupila, se convergen (con el poder dióptrico positivo) encontrándose en la retina, más precisamente en la fóvea central, proporcionando así visión nítida, lo que ocurre con los ojos de visión normal, conocida como “emétropes”. Una curiosidad: las imágenes que se proyectan dentro del ojo son invertidas, o sea, de cabeza, como el sistema de una máquina fotográfica. Esto es lo que ocurre con todo el sistema óptico, cuando está dispuesto además de su distancia focal. El cerebro hace la inversión de la imagen, colocándola en la posición correcta y nos da la sensación de que están en la posición normal.
El propósito del ojo humano, en el proceso de visión es formar una imagen, en el fondo del ojo, que es conocida genéricamente como “retina”. Podemos considerar que el ojo es un instrumento óptico por tal performance. La necesidad de lentes de aumento enfrente del ojo, es determinado por la inexactitud con que esta imagen es formada en la retina. En los casos en que la imagen, o el encuentro focal, suceden en la fóvea central, provoca una imagen borrosa o desenfocada. Esta imagen es corregida con lentes oftálmicos con poderes dióptricos, que compensan las deficiencias visuales, desde que sean necesarias para hacer la compensación y obtención de buena visión.
Partes del ojo y su función visual: Cornea: Es la parte saliente y anterior del globo ocular. Es totalmente transparente y conjuntamente con la esclerótica, forma el envoltorio externo del globo ocular. La curvatura de la córnea no es esférica. La gran mayoría de las corneas tiene una superficie en la dirección vertical tiene una curvatura ligeramente más acentuada de que en la dirección horizontal. Estas diferencias de curvatura pueden estar situadas en diversas direcciones, originándose de allí la mayor parte de los astigmatismos. La córnea cubre ligeramente el iris y la pupila, por donde pasa la luz. Esta parte del ojo tiene la forma aproximada de un lente negativo y su radio interno es ligeramente menor que el radio externo. Es por tanto la cornea un elemento de suma importancia en el sistema dióptrico del aparato visual, pues con su curva acentuada es el principal medio que hace con que los rayos paralelos que vienen del infinito, se converjan y lleguen juntos a la fóvea central. Iris: Es la parte de color del ojo, con una abertura circular en el centro, llamada pupila. La pupila tiene una apariencia negra, pero es totalmente transparente y todas las imágenes que vemos pasan a través de ellas. El iris está localizado entre la cornea y el cristalino. Ella funciona como si fuese una especie de diafragma de máquina fotográfica. Cuando expuesta a mucha luminosidad, disminuye su abertura central y lo contrario sucede cuando la luz disminuye. Su función es controlar la entrada de luz en el ojo y tiene papel preponderante en la agudeza visual. Humor Acuoso: Se trata de una sustancia semilíquida, transparente, semejante a una gelatina incolora. Esta sustancia llena la cámara anterior del ojo y por su presión interna, hace que la cornea se vuelva protuberante. El humor acuoso es renovado lenta y constantemente y su exceso es evacuado por el canal del Schlemn. Cuando este canal se entupe, el ojo presenta excesiva presión, siendo una de las causas de glaucoma, enfermedad que damnifica la fóvea central, pudiendo causar ceguera parcial. Cristalino: Cuerpo aproximadamente biconvexo, en forma de lente, transparente, localizado inmediatamente detrás del iris, entre la cámara anterior y la cámara posterior del ojo. La función principal del cristalino es permitir la visión nítida en todas las distancias. Cuando se mira de cerca,
el cristalino se torna convergente aumentando su poder de refracción y cuando se mira a distancia, se vuelve menos convergente, disminuyendo su poder dióptrico. Músculo Ciliar: Es el músculo que ayuda al cristalino en la acomodación visual. Cuerpo Vítreo: Es también conocido como humor vítreo. Es una sustancia totalmente transparente, semejante al humor acuoso, que llena internamente el globo ocular, haciendo con que toma la forma aproximada de una esfera, con la protuberancia de la córnea. Esclerótica: También conocida como esclera. Se trata de una capa externa que envuelve el globo ocular. Coroides: Se trata de una membrana conjuntiva, localizada entre la esclera y la retina que liga el nervio óptico a la ora serrata y nutre la retina. También conocido como uvea y es así llamada porque está llena por vasos sanguíneos, en una verdadera trama de pequeñas venas que envuelven el globo ocular, volviendo la cámara posterior un lugar oscuro, condición primordial para una buena visión. Cuando se observa la pupila, se tiene la impresión de que es negra, pero es apenas la cámara posterior que es oscurecida por la coroides, dando esa falsa visión. Retina: Es la capa que envuelve internamente ¾ partes del globo ocular y tiene un papel importantísimo en la visión. Ella está compuesta por millares de células sensibles a la luz, conocidas como fotorreceptores. Estas células se llaman; Conos (pertinentes a la visión acolor) y Bastones (los que dan la visión en blanco y negro y la nocturna). La retina ofrece una agudeza visual de apenas 10% que es una visión deficiente, obtenida cuando se ve solamente la mayor letra del cuadro de optotipos. Fóvea Central: Queda localizada en el fondo de la retina, ligeramente hacia el lado temporal. Es bastante pequeña y es en ella donde se da el encuentro focal de los rayos paralelos que ingresan al ojo. La fóvea es de suma importancia para la visión pues la acuidad visual en ella obtenida es del 100%, o sea, la visión normal de una persona emétrope. Fuera de la fóvea la agudeza visual va gradualmente perdiendo eficiencia, a medida que la concentración de conos se va reduciendo. Básicamente la fóvea está compuesta de tres conos: uno para el color verde, otro para el amarillo y otro para el color rojo. Punto ciego: El ser humano tiene un pequeño punto ciego en el ojo. Queda localizado en el fondo de la retina. Esta situado al lado de la fóvea y es el punto que liga la retina al nervio óptico. Es desprovisto de visión y también se llama “mácula”. Nervio óptico: Es un grupo de fibras nerviosas de forma tubular, con algunas arterias que conducen las imágenes captadas por la retina y fóvea hacia el cortex cerebral. Su punto de enlace es el punto ciego del ojo. Músculos externos: También conocidos como “extrínsecos”. Los globos oculares tienen sus movimientos conducidos por los músculos externos. Dos músculos son conocidos como oblicuos: superior e inferior, ambos son responsables por los movimientos rotativos del ojo.