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El superclásico

| Domingo 1º De febrero De 2015

Rojo, el color que más resalta en los últimos Boca vs. River

Con los tres de anoche, seis jugadores fueron expulsados entre los partidos de Mar del Plata y Mendoza; si bien el duelo junto a la Cordillera no fue tan tenso, la rivalidad entre ambos se encuentra en ebullición desde noviembre

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ENDOZA (De un enviado especial).– Pasión, entrega, garra, cuchillo entre los dientes. Los clásicos siempre tuvieron un voltaje superior al de cualquier otro enfrentamiento. Y en los últimos, además, se potenciaron las rivalidades. River eliminó a Boca por la Copa Sudamericana 2014, sacó mayor rédito a esa victoria siendo campeón luego y sumó ocho partidos sin caer ante su archirrival. El equipo xeneize cortó la racha en el primer enfrentamiento de 2015, al ganar con suplentes en Mar del Plata por 1-0. Pero, en el medio, hubo pierna fuerte, expulsados. Y hasta acusaciones, sobre todo, apuntando a Leonel Vangioni, ya que hubo dos jugadores de Boca que terminaron lesionados luego de choques con el lateral izquierdo millonario. Eso generó cruces de declaraciones, potenció el debate sobre la actitud y la mala intención. Y si bien en las últimas horas, desde ambos lados, trataron de bajar los decibeles, el fuego sigue encendido. Anoche volvieron a verse las caras y ya a los 18 minutos del primer tiempo había tres amonestados: Leonel Vangioni y Sebastián Palacios vieron la tarjeta amarilla por fuertes infracciones entre sí, separadas por 8 minutos. El de Boca no dudó de responder a la agresión de su adversario. Además, Camilo Mayada le pegó a Fabián Monzón a los 14 minutos y también recibió la tarjeta. Pero el volante de River, desbordado, terminó expulsado con otra amonestación a los 38, tras una falta contra Gago. Por entonces, Boca ya ganaba por

Tevez confirmó la vuelta: junio de 2016 ^b^b^ MENDOZA (De un enviado especia).– Carlos Tevez le puso fecha a su regreso: junio de 2016, cuando venza su vínculo con Juventus: “Lo dije muchas veces, para mí está todo claro. Cuando firmé por tres años con la Juve, había dicho que ése era el último contrato que arreglaba antes de volver a Boca. Ninguno dijo ni comentó nada en aquel momento. Siempre mantuve lo mismo: que al finalizar el contrato, volvía a casa”. explicó el Apache en una entrevista con Tuttosport. En Boca, felices.

3-0 y River estaba preso de los nervios, al punto que Teófilo Gutiérrez le pegó de atrás a Fuenzalida y vio la tarjeta amarilla. La tónica continuó en la mitad final. A los cinco minutos Ramiro Funes Mori se ganó una amonestación por una falta bien evitable, y seis minutos más tarde, Carlos Sánchez habló de más y Abal lo expulsó: el uruguayo estuvo apenas once minutos sobre el césped del Malvinas Argentinas. A los 28, como si River necesitara jugar con menos hombres, Teo Gutiérrez cometió otra infracción brusca, desde atrás, y por segunda vez vio la tarjeta amarilla, es decir, la roja. Boca con once, River con ocho, el partido se volvió anodino durante un buen rato porque el primero no quiso y el segundo no pudo y se resignó a no recibir más castigo. Ya suficiente tenía en lo disciplinario, con tres expulsados, y un saldo de 5-1 en superclásicos en el verano... Es cierto que esta vez, más allá de la catarata de tarjetas, no se trató de un partido picante. No hubo fricciones de ambas partes, venganzas, golpes muy malintencionados ni discusiones, insultos ni amenazas. Hubo menos tensión que en Mar del Plata, y mucha menos que en aquella serie dramática por la Copa Sudamericana. De hecho, algún hincha xeneize comentó que las rojas llegaban tarde, que deberían haber aparecido en aquella semifinal de noviembre. Todo comenzó con el juego brusco del conjunto dirigido por Marcelo Gallardo en el primer cruce, en la Bombonera (0-0), cuando abundó en infracciones y sobresalió aquella violenta falta de Vangioni que sacó de la cancha a Juan Manuel Martínez por un par de meses a raíz de un esguince. El Burrito se quejó luego: “No sé si tuvo mala intención o no. Lo que digo es que recién me llamó a los tres días para pedirme disculpas, no al otro día”. En el partido de desquite, fue expulsado Cata Díaz por una patada de impotencia a Gutiérrez. Ya en enero y en Mar del Plata, se fueron al vestuario antes de tiempo Adrián Cubas, de Boca, y Vangioni, que lesionó a Cristian Pavón por otro par de meses (tobillo, operación incluida), y Jonatan Maidana, de River. Y no habría sorprendido que se fueran antes de tiempo a los vestuarios Emmanuel Gigliotti y Leonardo Pisculichi. Es un verano caliente entre Boca y River. Pero la temperatura viene subiendo desde la primavera. Bah, quizás desde aquel enfrentamiento inicial entre ambos de 1908...ß

Di Zeo, anoche, en la tribuna; sobre él no pesó el derecho de admisión

r. pristupluk/ e. especial

Di Zeo y Mauro Martín, un pacto que quedó a la vista de todos Los barras de Boca se mostraron juntos y “en funciones” por primera vez tras amenazas recíprocas; no tuvieron impedimentos para ingresar al estadio MENDOZA (De un enviado especial).– Eran ellos, apoyados sobre un paravalanchas del estadio Malvinas Argentinas. Sin secuaces que los representaran en la tribuna. Allí estaban juntos Rafael Di Zeo y Mauro Martín –acompañados por Marcelo Aravena–, a cara limpia y decididos a comandar la barra brava de Boca sin ningún tipo de intermediarios. Con total margen de acción, en definitiva. Por primera vez se mostraron los dos en funciones, señal de que el pacto se consumó y goza de buena salud. Tanto tiempo enfrentados, con amenazas de sangre y fuego, finalmente arreglaron para que las dos facciones pudieran convivir en la búsqueda de los mismos intereses. Es un acercamiento que fue alentado por la entidad xeneize y por el Gobierno de la Provincia de

Buenos Aires, con la idea de evitar serios incidentes en plena temporada estival, un tesoro que quiere cuidar el kirchnerismo como imagen en pleno año electoral. Di Zeo ingresó en el centro de la tribuna de Boca como si fuese una celebridad, vivado por los hinchas que lo rodeaban y que incluso le sacaban fotos. Luego se acomodó al lado de su viejo enemigo, Mauro Martín, el mismo que hace un tiempo lo había amenazado con cortarle el cuello, gesto que quedó patentado en una escalofriante foto en la Bombonera. La pregunta es cómo ingresaron en la cancha, si sobre ellos pesaba el derecho de admisión. Miguel Mestre, el comisario a cargo del operativo, respondió a La NacioN: “Nosotros consultamos a los organizadores del evento [Torneos]

y nos confirmaron que no había ninguna restricción para que estos hinchas entraran al estadio”. Además, Mestre aseguró que se encontró en persona con Di Zeo y Martín alrededor de las 18 en el estadio: “Me dijeron que habían hecho una tregua y que no iba a pasar nada. Que así como llegaron a Mendoza se iban a ir de la provincia sin provocar ningún disturbio”. En el operativo hubo 850 efectivos y no se registraron incidentes. Habrá que ver cómo sigue esta reciente alianza entre Di Zeo y Martín. En Mar del Plata, para los partidos con River y Vélez, los violentos estuvieron representados por sus segundas y terceras líneas. Aquí, decidieron exponerse. El campeonato de 30 equipos sumará más capítulos de esta triste historia.ß