“Ni el Papa me hace cambiar de decisión”, dijo el juez

y la estúpida acción de levantar un freno de mano. Ahora, el hábil penalista ... José Jacinto Arce, uno de los sospe- chosos del crimen de Rosana Galliano,.
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Información general

Domingo 27 de enero de 2008

LA NACION/Página 23

El asesinato de Rosana Galliano

La situación de Gabriel Alvarez y de Ariel Cohelo, en Punta del Este

“Ni el Papa me hace cambiar de decisión”, dijo el juez uruguayo Los argentinos, acusados de homicidio, están en un penal saturado de presos Por Mariano Wullich Enviado especial PUNTA DEL ESTE.– Algunos hablan de lo que tendrán que enfrentar de ahora en más el realizador de fiestas comerciales y promotor de marcas, Gabriel “Gaby” Alvarez , y su ayudante, Ariel “Blas” Cohelo de Oliveira, los dos, presos en el penal de Las Rosas. Otros, compungidos, miran hacia abajo y ya no encuentran la arena, porque las vacaciones se terminaron con la muerte de Gloria Pérez del Cerro y Fernando Cicciardi. Es que el accidente de la imprudencia o de la impericia destrozó demasiado; aquí, dos vidas; en la Argentina, dos familias. Es el juez de San Carlos, Juan José Benítez Caorsi, quien hoy tiene que manejar lo irreparable, pero con la firmeza de evaluar la responsabilidad de quienes viajaban en el Honda Civic y se llevaron por delante la moto de Gloria y Fernando: “Ni el Papa me hace cambiar de decisión”, dijo el magistrado al procesar a Alvarez y a Cohelo de Oliveira luego de las declaraciones encontradas de los dos imputados, que revelaron una pelea y la estúpida acción de levantar un freno de mano. Ahora, el hábil penalista uruguayo Joaquín Reyes intenta trasladar de la cárcel de Las Rosas a su defendido Alvarez. Argumenta, y es cierto, que en ese penal está hacinado, que hay casi 500 reclusos cuando no debería haber más de 200. Esgrime los miedos de quien, hasta hace unos días, vivía en el complejo llamado Chic, en José Ignacio, y pasaba sus tardes en el parador Movistar de la playa Montoya. Alvarez y Cohelo de Oliveira comparten hoy un pabellón en Las Rosas, junto a presos veteranos que mucho saben de códigos carcelarios, pero de los cuales varios de ellos están más cerca de la libertad. LA NACION pudo saber que los dos argentinos procesados por doble homicidio culposo pasan sus horas en

ARCHIVO

José Arce, esposo de Rosana, asesinada en El Remanso

Arce estuvo preso por consumir drogas Reconoció su encierro en los EE.UU.

MAXIE AMENA/ENVIADO ESPECIAL

En el penal de Las Rosas, en Uruguay, hay otros cuatro argentinos detenidos

una situación de incómodo confinamiento y que “Blas” Cohelo de Oliveira ni siquiera tiene un colchón. Que el encono entre ambos habría menguado por el lógico hecho de estar rodeados de un entorno que suele ser hostil.

Traslado En Uruguay, la Justicia decide sobre la libertad de los hombres, pero no sobre el lugar del confinamiento. Esto depende del Ministerio del Interior; entonces, es la policía la que debe o no tomar la decisión del traslado. El comisario de Maldonado no puso objeciones a esto, pero todavía se espera la decisión del jefe policial de Montevideo. Claro que la excepción resultaría, para el futuro, que diversos abogados intentaran el mismo recurso, más

aún cuando en Las Rosas hay otros cuatro argentinos (dos mujeres y dos varones) detenidos en los últimos dos meses por distintas causas: facilitación de hurto, lesiones y robo. Como se dijo al comienzo, son muchos los que quieren saber sobre el futuro de sus conocidos, pero no son tantos los que quieren acercarse a Las Rosas, a la causa y hasta el mismísimo entorno. Aquí está el hermano de Alvarez y hoy llegará a Punta del Este la hermana de Cohelo de Oliveira, de profesión abogada. Otros amigos y personajes que tienen que ver con el trabajo de las relaciones públicas prefieren no hablar porque, de alguna manera, para las marcas o firmas que representan no es conveniente estar cerca de un hecho policial, y esto ya ha sucedido

otras veces con noticias de ese calibre que involucraron a otros RR.PP. Aquí la muerte golpeó duro y el cónsul argentino en Punta del Este, Carlos Cherniak, se desdobló en las tareas que le corresponden, pero priorizó el traslado de los cuerpos de Gloria y Fernando, aunque la agilización de los tramites no fue fácil por la burocracia existente por parte de la morgue de Maldonado. Cherniak fue quien informó y contuvo a las familias y ayer volvió a la cárcel para interiorizarse sobre la situación de Alvarez y de Oliveira, quienes hace unos días pasaban sus mejores horas entre José Ignacio y Montoya, y hoy despuntan sus peores momentos en el penal de Las Rosas. Mientras tanto, Gloria y Fernando ya no están: irreparable.

José Jacinto Arce, uno de los sospechosos del crimen de Rosana Galliano, confesó durante una entrevista radial que estuvo preso 30 meses por tenencia de marihuana en los Estados Unidos. El abogado de Arce, Ramiro Rúa, admitió a LA NACION que su defendido “efectivamente estuvo detenido dos años y medio [condenado en 1995]”, pero que fue “por tenencia de cocaína” y justificó que Arce “estaba muy nervioso en la entrevista [radial] y que por eso se equivocó”. Pero las contradicciones de Arce no se limitaron a ese tema. Cuando la periodista Alicia Barrios, de Radio 10, le preguntó si sospechaba de alguien por la muerte de su esposa, dijo: “No soy Dios para señalar a nadie”. Sin embargo, con anterioridad, en declaraciones públicas, había pedido que se investigara a su cuñada, Mónica Galliano, a un heladero y a un jardinero. Entre otras cosas, Barrios le preguntó cuál era su relación con las drogas actualmente y, ya evidentemente molesto, contestó: “Yo no soy un drogón”. Rúa aclaró a LA NACION que si bien el viudo solía consumir cocaína hace 13 años, luego de haber estado en prisión “dejó ese hábito”. Además, Arce admitió haberle disparado a un perro. “Le agarró rabia y, por el bien del animal y la seguridad de todos, lo sacrifiqué y lo quemé para matar las bacterias”, explicó el viudo.

Pero no quiso responder por qué su esposa no lo dejaba ver a sus hijos. El año pasado, la mujer había interpuesto en su contra una denuncia por violencia familiar, que no prosperó. El viernes, tanto el viudo como los padres de Rosana, Reinaldo y Graciela Galliano, fueron aceptados como particulares damnificados en la causa. Arce, a pesar de ser investigado como posible instigador del crimen, pudo adquirir ese privilegio ya que su autoría material está descartada. De esta manera, puede acceder a la causa e incluso pedir medidas de prueba. No obstante, si el fiscal que dirige la investigación, Marcelo Pernici, encuentra pruebas suficientes para imputarlo, detenerlo e indagarlo, su participación como querellante será revocada. El crimen de Galliano ocurrió a las 22 del 16 de este mes, en su casa quinta del barrio privado El Remanso, en el partido bonaerense de Exaltación de la Cruz, cuando cenaba con su hermana. En ese momento, recibió una llamada en su celular. Era Arce. Como no tenía buena señal, salió al parque, donde la asesinaron de cuatro balazos. Tras el crimen, Arce fue acusado por la familia Galliano de ser el homicida, ya que mantenían una relación conflictiva.

Paula Soler