19 NAVARRO_42-43 LEGUINA.qxd 22/02/17 17:07 Página 19
TRIBUNA Por Pere Navarro*
Hambruna en África (otra vez)
L
a Red de Sistemas de Alerta Temprana para la Hambruna (FEWSNET en sus siglas en inglés) está llamando la atención sobre un fenómeno inminente de hambruna especialmente en algunos países de la zona del Cuerno de África. Esta semana pasada organizaciones internacionales como la FAO ya han declarado oficialmente la situación de hambruna en regiones de Sudán del Sur. Una hambruna que afectaría a más de 100.000 personas. Lo realmente trágico de estas alertas es que, según su propio lenguaje, eso significa que ahora ya están muriendo de hambre muchas personas, especialmente niños. Sólo en Sudán del Sur el riesgo puede ampliarse a cinco millones de personas antes del verano. Otros países en riesgo inminente son Nigeria, Yemen y Somalia con lo cual estaríamos hablando de unos 17 millones de personas. Para que nos hagamos una idea, una cifra que equivale a más de un tercio del total de la población de España. Las causas de esta situación son diversas pero, en el caso de Sudán del Sur, van ligadas claramente al conflicto armado que en los últimos años impide el cultivo de las tierras, el desarrollo económico y una intervención eficaz sobre el terreno por parte de las organizaciones humanitarias que intentan paliar el sufrimiento de la población. Todo ello sumado a una situación de sequía pertinaz cuyo origen es el fenómeno meteorológico conocido como El Niño y quién sabe si también el calentamiento global del planeta producido por un
cambio climático que avanza cada vez más rápidamente. Hace pocos días hemos visto en Barcelona una gran manifestación de apoyo a los refugiados que, bajo el lema “Casa Nostra, Casa Vostra”, proponía que los responsables de los diferentes países europeos ejecutaran una serie de medidas urgentes con el objetivo de acoger refugiados y evitar, así, la tragedia cotidiana de un Mediterráneo que ya es la tumba de demasiadas personas que buscan desesperadamente un oportunidad de supervivencia. Sin embargo, me temo que la solución es mucho más complicada que la de levantar barreras y acoger a los desplazados. La mayoría no van a tener ni siquiera las fuerzas o los recursos necesarios para pagar a los traficantes de personas para poder huir del desastre. Es imprescindible una acción internacional contundente para, en primer lugar, ofrecer los re-
La solución es mucho más complicada que levantar barreras y acoger a los desplazados. La mayoría no van a tener ni siquiera las fuerzas o los recursos necesarios para pagar a los traficantes de personas para poder huir del desastre
cursos para afrontar la emergencia y garantizar la vida de las personas afectadas. Y, en segundo lugar, ejercer la autoridad internacional para acabar con los conflictos; democratizar las instituciones de esos países; y apostar fuertemente por la creación de una economía en la zona que garantice los recursos y la tecnología necesaria para impedir nuevos episodios de emergencia. Sé que la Presidencia de Trump en EE UU y el auge de los nacionalismos en Europa van en sentido completamente contrario a lo que sería necesario en este momento, pero no debemos olvidar que en nuestras democracias deciden los votos y los votos dependen de que realicemos con convicción una labor incansable para concienciar a nuestros conciudadanos de que hay que salir solidariamente de esta emergencia o las crisis se irán agravando cada vez más. Hace pocos días se han cumplido 10 años del fallecimiento de Ryszard Kapuscinski, extraordinario periodista polaco enamorado de África, el cual en su libro Ébano, obra maestra sobre ese continente, afirma hablando de los africanos: “Su vida es un martirio, un tormento que, sin embargo, soportan con una tenacidad y un ánimo asombrosos”. En nuestras manos está acabar con el martirio. l *Exmiembro de la Ejecutiva Federal del PSOE.
nº 1189. 27 de febrero–5 de marzo de 2017
19
