Jorge Coulon, músico:
“Es muy complicado hacerle críticas a este movimiento, porque ha sido impresionante el apoyo que tienen” Transcurrido más de seis meses desde el comienzo del movimiento estudiantil, la gran asistencia a las marchas y a los actos culturales se han mantenido constante, contra el sistema educativo en Chile - Javiera Cartes Jofré (2011) Desde el mes de abril, miles de personas salen a las calles del país a expresar su descontento hacia la educación actual, y las maneras de hacerlo son diversas: bailes, batucadas y representaciones de varios tipos entre los asistentes han sido la tónica de cada protesta. A pesar de que en ocasiones las marchas se ven opacadas por los destrozos y actos vandálicos cometidos por antisociales, siempre cabe destacar el importante rol de los actos culturales al término de cada jornada de movilización. Por ejemplo, humoristas de la talla de Pedro Ruminot y Fabrizio Copano o la presentación de conocidas bandas chilenas como Chico Trujillo, Illapu y Juana Fe, han sido sólo algunos de los artistas que encendieron al público presente en el cierre del “Domingo familiar por la educación”. La también llamada “Marcha de los remolinos” , realizada el pasado 21 de agosto en el Parque O’higgins. Otra de las bandas que se presentaron aquel día fue Inti Illimani. Con 44 años de trayectoria y una estrecha relación con las Federaciones de estudiantes, el grupo ha apoyado el movimiento estudiantil a lo largo del progreso de las movilizaciones. Como explica Jorge Coulon, uno de los integrantes de la banda: “Cuando fue la manifestación del 21, nos pusimos de acuerdo con la gente para estar ahí. Pero cuando no hemos tocado, hemos marchado igual”. Además, Inti Illimani no sólo es reconocido por su apoyo público al movimiento, sino que también por estar presente desde un comienzo de la movilización. Han tocado en las grandes marchas a lo largo del país, asimismo, en los liceos en toma de forma gratuita y con gran éxito entre los estudiantes. Sobre lo que Jorge, comenta “es impagable lo que se siente al escuchar a las nuevas generaciones cantar nuestras canciones en las marchas. Aunque siempre nuestro publico ha sido, más bien, joven”. En cuanto a la convocatoria a las marchas, éstas se pueden dar con meses o, bien, con dos o tres días de anticipación, consiguiendo la misma asistencia masiva. De esta situación, Jorge destaca “Es muy complicado hacerle críticas a este movimiento, porque ha sido impresionante el apoyo que tienen”. Por otro lado, además de la gran cantidad de artistas que apoyan visiblemente las peticiones de los estudiantes, miles de personas marchan por el país silenciosamente. Como Paola Escobar, estudiante de tercer año de Sociología en la Academia del Humanismo Cristiano, quien comenta: “Es increíble ver a tanta gente diferente reunida por una misma causa. Mientras unos bailan, otros cantan y otros simplemente marchan, se deja ver la necesidad de una mejora educacional”. Acerca de los actos culturales y los artistas que se presentan, opina, “es rico ver que muchísimos artistas apoyan la causa, porque además de generar conciencia en su público, entretienen a los asistentes” comenta entre risas. Tras meses de protestas y con un futuro incierto, tanto Paola como Jorge tienen su opinión acerca de sus expectativas del movimiento. La primera explica: “Viendo el panorama de la relación entre el gobierno y la Confech, sólo espero que, ojalá, el movimiento pueda conseguir lo más posible”. Mientras Jorge comenta “Yo espero que este movimiento tenga la capacidad de mantenerse unido... y que sirva para crear conciencia en las clases medias de que no pueden seguir administrando su propia esclavitud”, sentencia.
Jorge Coulon, integrante fundador de la agrupación Inti Illimani Por Javiera Cartes