APARATO GENITAL MASCULINO Está constituido por testículos, conductos genitales, glándulas accesorias y pene.

Testículos: Como los ovarios tienen doble función: producir células germinales y hormonas sexuales; las primeras formarán los espermatozoides y las segundas comprenden a los andrógenos. Ambas funciones comienzan a partir de la pubertad, cuando la adenohipófisis comienza a secretar gonadotrofinas (FSH y LH) que estimulan al epitelio testicular. Cada testículo es un cuerpo ovoide de 4 a 5cm de diámetro, cubierto por una cápsula gruesa o albugínea, que en el borde posterior del testículo se engruesa y penetra en el órgano para forma un tabique vertical incompleto que divide la glándula en dos mitades, denominado mediastino, el cual se halla acribillado de conductos tapizados de epitelio constituyendo la rete testis (rete = red), en la cual se vacían todos los túbulos seminíferos. La región anterior y laterales de los testículos se hallan cubiertas por la túnica vaginal que es un saco seroso derivado del peritoneo. Todo este conjunto se halla alojado en las bolsas escrotales estructuras cubiertas de piel que contienen abundante músculo liso (dartos). Los testículos deben permanecer fuera de la cavidad abdominal para mantener su temperatura algunos grados por debajo de la temperatura de la misma. Los testículos están constituidos en primer lugar por túbulos seminíferos enrollados cuya longitud total es de unos 800m, las paredes de estos conductos están formadas por varias hileras de células epiteliales que se van diferenciando hacia el interior de los mismos para finalmente transformarse en espermatozoides que quedan libres en la luz tubular. El segundo componente importante del testículo está constituido por acúmulos de células endócrinas ubicadas en el tejido conectivo que rodea los túbulos, denominadas células intersticiales de Leydig, productoras de andrógenos (testosterona).

Los túbulos seminíferos están constituidos por epitelio germinativo que comprende dos tipos de células: las células de sostén o de Sertoli y las células seminales espermatogénicas que se disponen en varias capas (entre 4-8). Los túbulos se hallan rodeados de una membrana basal, por fuera de la cual se halla tejido conectivo laxo fibroelástico. Las células de Sertoli son voluminosas y apoyan en la membrana basal; poseen un citoplasma de forman irregular con invaginaciones que rodean y contienen a las células germinales. Poseen núcleos alargados de cromatina fina con nucléolos prominentes. Tienen tres funciones: a- soporte y nutrición de los espermatozoides en formación; b- fagocitar y digerir los restos del citoplasma de las espermátides y c- secretar líquido cuya corriente arrastra los espermatozoides. El epitelio germinal posee dos tipos de células primitivas o espermatogonias que son relativamente pequeñas y profundas: de tipo A que permanecerán como células madre y se dividen por mitosis para formar una reserva continua de células madre y de tipo B que madurarán para formar espermatozoides. Estas últimas luego de varias divisiones mitóticas se diferencian en espermatocitos de primer que hacen la primeras división meiótica (con una profase prolongada que dura unos 22 días) dando origen a los de espermatocitos de segundo orden, mientras se van acercando hacia la luz de túbulo y se produce la segunda división meiótica y quedan transformados en espermátides. De esta manera culmina la espermatogénesis por la cual las células germinales de los túbulos seminíferos maduran y se dividen dando lugar a células cuyo número de cromosomas se ha reducido a la mitad (haploide = 23 cromosomas). Por otra parte desde que una célula se separa de las células madres hasta la etapa de espermátides, forma un grupo celular que se mantiene unido por puentes citoplasmáticos pues en la división celular no se produce completamente la división del citoplasma y además todas esta progenie permanece incluida en profundos recesos de las células de Sertoli, que como ya vimos les proporcionan sostén, protección y nutrición. A partir de las espermátides comienza la espermiogénesis, es decir las modificaciones de las espermátides que se diferencian en espermatozoides, para lo cual el aparato de Golgi forma una vesícula que contiene una partícula densa: el acrosoma, que migra hacia un polo del núcleo y lo rodea como un casquete. Simultáneamente de uno de los centríolos surge un flagelo que formará la cola mientras el otro forma un anillo en torno de la misma. El citoplasma comienza a desprenderse y solo queda parte del mismo rodeando al flagelo y las mitocondrias se ubican en la base del mismo, en el cuello y pieza intermedia. El núcleo se aplana y condensa con forma de almendra. El tiempo necesario para que se complete la espermatogénesis es de aproximadamente 64 días. Recordar que el volumen del semen eyaculado es de 3 a 4ml y contiene 100 millones de espermatozoides por ml. El hombre se considera fértil hasta con 20 millones/ml o cuando en el total del eyaculado se encuentran 50 millones de espermatozoides. Las células de Leydig ubicadas por fuera de los túbulos son las productoras de testosterona, poseen las características de las células secretoras, con citoplasma amplio eosinófilo y rico en lípidos, se hallan rodeadas de capilares fenestrados. Los túbulos seminíferos terminan en tubos rectos y cortos que vacían su contenido en los de las rete testis, de la que parten entre 8 a 15 túbulos eferentes, los cuales poseen epitelio cuboide ciliado que desplaza los espermatozoides y penetran en el extremo cefálico del epidídimo. Este es un conducto único y tortuoso que posee tres segmentos: la cabeza sobre el polo superior del testículo, el cuerpo que recorre el borde posterior del mismo y la cola en el polo inferior que se continua con el conducto deferente. El epidídimo se halla revestido por epitelio seudoestratificado formado por células basales redondas y células prismáticas con microvillis largas e irregulares, mal llamadas estereocilios. Apoyan sobre una membrana basal rodeada por fibras musculares lisas y tejido conectivo laxo rico en capilares.

Estas células estarían relacionadas con la capacitación de los espermatozoides que a partir de aquí se hacen móviles y además tendrían capacidad fagocítica (fagocitan los restos de citoplasma eliminados durante la espermiogénesis) y de absorción de líquido. El conducto deferente es recto, con luz estrecha y pared gruesa, formada principalmente por músculo liso. El epitelio que lo cubre es similar al del epidídimo y externamente posee una adventicia. Antes de penetrar en la próstata presenta una dilatación o ampolla donde desembocan las vesículas seminales. Cuando atraviesa la próstata recibe el nombre de conducto eyaculador, desapareciendo la capa muscular, termina en la uretra prostática. Glándulas accesorias. Vesículas seminales: Son dos y se hallan constituidas por un tubo único de 15cm de longitud enrollado sobre sí mismo y revestido por epitelio seudoestratificado con células secretoras prismáticas, que producen proteínas y fructuosa necesaria para el metabolismo de los espermatozoides. Poseen una lámina propia rica en fibras elásticas y células musculares lisas, que al contraerse durante la eyaculación vuelcan sus productos acumulados en el conducto deferente. Su función depende el estímulo de la testosterona. Próstata: Está constituida por un conjunto de entre 30 a 50 glándulas túbuloalveolares, ramificadas, cuyos conductos desembocan en la uretra prostática. Se halla envuelta en una cápsula fibroelástica con un estroma rico en músculo liso. El epitelio de las glándulas es cilíndrico simple o seudoestratificado cuyas células producen proteínas. Contribuyen a formar el semen y está influenciada también por la testosterona.

Pene: Formado por tejido eréctil que forma tres masas envueltas por una membrana de tejido conectivo, albugínea del pene, externamente cubierta por piel. Las constituyen

masas los cuerpos cavernosos que se disponen dos en la parte dorsal y la tercera en la parte ventral constituye el cuerpo cavernoso de la uretra peneana a la que envuelve en todo su trayecto, en la porción distal se dilata y forma el glande. La albugínea envía tabiques incompletos entre los cuerpos cavernosos de modo que entre ellos se comunican. Estos están constituidos por espacios vasculares revestidos de endotelio. El prepucio es un repliegue de la piel que contiene músculo liso y tejido conectivo.