POLITICA

Viernes 12 de junio de 2009

I

LA REUNION DE LA OIT Y PROBLEMAS EN AEROLINEAS

Y DERECHOS HUMANOS

Cristina usará un avión de Repsol

Murió Almirón, ex jefe de la Triple A

Tras el desperfecto que sufrió el Airbus 340 en Quito, optó por emplear un jet privado; no se informó quién lo paga FRANCISCO OLIVERA LA NACION No quiso subir al avión de Aerolíneas Argentinas. Apenas enterada del desperfecto que el Airbus 340-300 que usa habitualmente había sufrido en uno de sus motores en Quito –adonde llevó al seleccionado argentino de fútbol para jugar con Ecuador–, la presidenta Cristina Kirchner dio la orden: cambiar de aeronave para partir mañana a Ginebra, sede de la reunión de la Organización Internacional del Trabajo (OIT). A Aerolíneas no le sobran aviones. El Tango 01, aeronave oficial, corre riesgo de embargo por la deuda impaga con los tenedores de bonos públicos. Sobre Oscar Parrilli, secretario general de la Presidencia, recayó ayer la misión de buscar alternativas. Algunos de los empresarios a los que se pensaba en recurrir, todos propietarios de jets privados, no estaban ayer en Buenos Aires: Eduardo Eurnekian, en Italia; Carlos Bulgheroni, en Paquistán. El elegido fue el español Antonio Brufau, presidente de Repsol YPF, que compró, en febrero pasado, un magnífico Gulfstream 5, capaz de volar a 55.000 pies por sobre la zona

No se reveló el montó del contrato de alquiler, que operadores privados ubican en alrededor de unos 600.000 dólares de turbulencias. El avión llegará hoy desde Brasil. La petrolera se lo cederá al Gobierno, que lo utilizará para los funcionarios de mayor confianza, es decir, para no más de 12 pasajeros. Detrás, en vuelos de línea, acompañará la delegación oficial. Hasta anoche, las condiciones del uso de la aeronave no estaban claras. En Presidencia dijeron a este diario que se trataba de un contrato de alquiler con Repsol. No revelaron sin embargo el monto, que operadores privados ubican en unos 600.000 dólares para las 60 horas que durará la visita a Suiza. Voceros de YPF, en cambio, dieron otra versión: no se trata de un contrato entre el Gobierno y la petrolera, dijeron, sino que el acuerdo es con Aeropuertos Argentina 2000, que a su vez se encargó de buscar avión y eligió el de Brufau. Algo que en el concesionario de Eurnekian negaron con malhumor por la consulta: “No existe ningún contrato con el Gobierno. Aeropuertos no tiene nada que ver con los aviones”. La historia reciente de los Kirchner con aviones es rica en anécdotas y, a

Y EN SANTA FE

veces, por usar una figura afín a la cuestión, turbulenta. En la mañana del viernes 15 de mayo pasado, el Lear Jet 60 del Banco Macro reposaba, misterios de la política, en la plataforma militar del Aeroparque Jorge Newbery. Momentos después despegó hacia la Patagonia. El ilustre pasajero: Néstor Kirchner. En el sector aeronáutico dicen que a Jorge Brito, presidente del banco, no le hacen gracia estas aventuras aéreas. La Presidenta suele en cambio ser bastante más cuidadosa con todo. Hasta en detalles como su pelo. No por nada, ya en los tiempos de Cristina como primera dama, la Fuerza Aérea tuvo que aplicarles a los helicópteros afectados a esos viajes el “sistema de freno de rotor principal”, como se conoce en la jerga al que le permite a una aeronave girar motores con las palas quietas. Ideal para peinados imperturbables. En realidad, los pilotos están acostumbrados a todo. Casi no se sorprenden al recordar, risueños, aquel viaje que, en los primeros años del kirchnerismo, hizo el Tango 10, un Lear Jet 60 de la Fuerza Aérea, para trasladar a la desenvuelta Florencia Kirchner y un grupo de amigas desde Río Gallegos a Buenos Aires por un recital.

El año pasado había sido extraditado

Reconciliación Esta vez son cuestiones de Estado. Aunque los técnicos aeronáuticos no consideraban anoche aún desactivado el uso del Airbus 340-300 –tenían previsto reacondicionarlo hoy con camas y asientos más cómodos–, en el Gobierno explicaron a LA NACION que se había desechado el avión de Aerolíneas ante la posibilidad de que el fabricante francés ordenara, por el accidente con Air France, un recambio de piezas que afectara la visita presidencial. El momento elegido para usar el Gulfstream 5 de Brufau es el propicio para que YPF y el Gobierno recompongan relaciones después de algunos desencuentros. El más estruendoso, una reunión que los Eskenazi, socios locales de la petrolera, mantuvieron el jueves 30 de abril pasado con el senador Carlos Reutemann. En el recinto estuvieron ese día otras dos personas: Marcelo Blanco, presidente del Deustche Bank Argentina, y el senador José Pampuro. Un encuentro probablemente trivial, pero que enojó a Kirchner y levantó rumores entre directivos de YPF. Por ejemplo, el que dice que el ex presidente intentó acercarse, para buscar otro socio para la empresa, a los españoles de Repsol. Los dueños del avión que llevará a Cristina.

Con la colaboración de Mariano Obarrio

Paradoja

ARCHIVO

El Airbus 340-300 que usa la Presidenta, en ocasión del viaje a Qatar; sufrió un desperfecto en Quito

La CGT pidió reformar el FMI Desde la OIT, en Ginebra, Gerardo Martínez elogió el modelo argentino El delegado titular de la representación de la CGT ante la Organización Internacional del Trabajo (OIT), Gerardo Martínez, aseguró ayer en Ginebra que la crisis financiera internacional no la pagarán los trabajadores. “No seremos la variable de ajuste de esta crisis como lo fuimos en la década pasada”, dijo el miembro del consejo de administración del organismo y secretario de Relaciones Internacionales de la central obrera. En sintonía con la línea fijada por el gobierno de Cristina Kirchner, el sindicalista inauguró su participación en la 98ª asamblea general de la OIT. Martínez advirtió: “El G20 determinó que el FMI (Fondo Monetario Internacional) será el organismo financiero para el salvataje. Los trabajadores decimos que primero hay que transformar y reformular esa entidad porque mantiene las

Por NIK

Hallaron archivos de la dictadura El procurador general de la Nación, Esteban Righi, anunció ayer el hallazgo de archivos de la policía de la provincia de Santa Fe que contienen información sobre las tareas de inteligencia que realizaba la fuerza durante la última dictadura militar. La búsqueda de antecedentes sobre dirigentes del radicalismo, como Marcelo Stubrin y Mario Negri; la detención de una militante del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP) que permanece desaparecida, y el seguimiento de representantes de organismos de derechos humanos son algunas de las actividades represivas que surgen de los documentos. Se trata de miles de partes diarios de la Dirección de Inteligencia (D2) de la policía santafecina que estaban conservados en el archivo de la provincia. Los descubrió Mabel Colalongo, a cargo de la fiscalía federal ante los tribunales criminales orales de Rosario. “Lo importante del hallazgo es que se obtuvo prueba documental que se va a incorporar a los juicios y que va a aumentar las posibilidades de esclarecer los hechos investigados”, dijo Righi.

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mismas condiciones que antes y no queremos volver atrás”. Martínez recalcó que en América latina “hay gobiernos que descartaron las políticas neoliberales de los años 90 y reconstruyeron el papel del Estado para garantizar una sociedad más justa”. Y destacó que “el gobierno y la sociedad argentina quieren ser protagonistas de un cambio estructural”. Elogió las gestiones presidenciales tanto de Néstor como de Cristina Kirchner: “Hay un nuevo modelo de Nación. Se generaron puestos de trabajo que se reflejan en la caída de los índices de desempleo y en el desarrollo productivo, con inserción social”. El dirigente sindical dijo que la Argentina “reconstruyó su tejido social y recuperó leyes que protegen la participación y la dignidad de los trabajadores, y mantuvo activas

las paritarias, que contemplaron mejoras de las condiciones laborales y salariales”. Al mismo tiempo, ponderó la “valentía y la decisión del Gobierno de recuperar los fondos de pensiones y jubilaciones para garantizar la seguridad social en manos del pueblo”. La presidenta Cristina Kirchner hablará el lunes próximo en la asamblea general de la OIT, donde también participarán los presidentes de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, y de Francia, Nicolas Sarkozy. Mañana viajará la jefa del Estado a Ginebra acompañada por el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, y una delegación de la CGT, presidida por su secretario general Hugo Moyano, el adjunto Juan Belén, Jorge Viviani y Héctor Daer. Además de Martínez, ya están en Ginebra los sindicalistas Andrés Rodríguez y Juan Carlos Schmid.

El ex jefe operativo de la Triple A Rodolfo Almirón murió el viernes pasado, en un hospital de Ezeiza, justo después de que se suspendiera, por sus problemas de salud, la causa que se le seguía por integrar una banda dedicada a la represión ilegal en los años 70. Almirón, de 73 años, había sido extraditado desde España, en marzo de 2008, por orden del juez federal Norberto Oyarbide. Según fuentes judiciales citadas por DyN, Almirón había sufrido en abril pasado un accidente cerebrovascular que lo obligó a permanecer internado, primero en el Hospital de Ramos Mejía y, más tarde, en el centro asistencial municipal de Ezeiza. Si bien para ese momento Almirón había sido beneficiado con arresto domiciliario, su hermana –que vivía con él– había explicado que no podía hacerse cargo de su cuidado, y por eso había sido hospitalizado y una junta de médicos forenses determinó que no estaba en condiciones de defenderse. Oyarbide firmó una resolución que suspendió el proceso judicial. Almirón vivió 33 años en España, incluso allí llegó a jubilarse. La principal imputada de la causa es la ex presidenta María Estela Martínez de Perón, que logró que España negara su extradición. A Almirón se le imputaban los asesinatos que la Triple A perpetró de 1974 a 1976, como el del bebe Pablo Laguzzi –hijo de Raúl Laguzzi, por entonces decano de la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires (UBA)–; del diputado Rodolfo Ortega Peña y del subjefe de la Policía bonaerense Julio Troxler.

Detienen a un ex policía en EE.UU. La Oficina de Inmigración y Aduanas de los Estados Unidos detuvo anteayer a Juan Méndez, ex policía argentino de 67 años, acusado de violar las leyes de inmigración de ese país y buscado en la Argentina por su presunta participación en la represión ilegal durante la dictadura.