Turismo

Página 12/LA NACION

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Domingo 4 de julio de 2010

[ POLITICA ]

Clase intermedia, más por menos Cada vez más aerolíneas ofrecen la opción de viajar en butacas anchas, con mayor espacio entre asientos que en turista, pero a menor costo que la ejecutiva ¿Quién no escuchó hablar de aquellos ideogramas chinos que se utilizan tanto en la palabra crisis como en oportunidad? Sin duda es lo que pensaron también los responsables de varias compañías aéreas que están proponiendo una nueva clase intermedia entre la de turismo y la de negocios, con buenos servicios a un menor costo, con objeto de captar una nueva franja de pasajeros. Según Carola Harteneck, gerente de Comunicación y RR.PP. de Air France en la Argentina, esta clase es “un producto creado por la crisis financiera mundial, para poder captar pasajeros que habitualmente viajaban en business y tuvieron que achicar sus costos”. Pero rápidamen-

En la clase Premium Voyageur de Air France hay un 40% más de espacio que en Turista

te también fue ocupada por habitués de las clases turistas que con un poco más de dinero pueden viajar en una categoría superior. Varias empresas ya habilitaron esta clase intermedia en sus vuelos de larga distancia, entre ellas Air France y Qantas en sus viajes desde y hacia Buenos Aires. En cuanto a Alitalia, la empresa también lanzó una clase similar llamada Classica Plus, que ya está operando entre América del Norte e Italia. En el transcurso de 2011, también estará disponible en el vuelo a Buenos Aires, según confirmó a LA NACION Fabio Fantini, responsable de Alitalia en Buenos Aires. Para vuelos dentro del continente,

Lan lanzó a fines de 2008 su clase Premium Economy. Semejanzas y diferencias Las ventajas de esta nueva clase intermedia no son sólo monetarias. El confort se ve ampliamente mejorado, con más espacio entre asientos, butacas más anchas y una cabina con menos personas para tener un servicio de a bordo más personalizado. En el caso de la Premium Voyageur de Air France, cuenta Carola Harteneck: “El pasajero de esta clase tiene un 40% más de espacio que en la clase Voyageur (Económica), con un asiento de 48 cm más de ancho, y un apoyabrazos de 10 centímetros”. El asiento de Premium Voyageur se

A AIR

ILEZ

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NCE

FRA

reclina a 123 grados. Como en la clase Ejecutiva, cada pasajero Premium tiene una pantalla de 10,4 pulgadas, audífonos de alta fidelidad, una lámpara de lectura individual, un tomacorriente eléctrico para laptop y una mesa. También cuenta con otros privilegios similares a la clase Affaires, como el neceser de aseo, una manta de pura lana, una almohada de pluma y una botella de agua. En algunas compañías (no es el caso de Air France), los pasajeros de la clase intermedia pueden acceder a los salones VIP antes de embarcar o durante los vuelos en tránsito. Una ventaja más para quien elige esta fórmula para viajes de negocios, no sólo para descansar, sino para mantenerse informado a través de la prensa y las pantallas a disposición de los viajeros, sin olvidar la posibilidad de usar los business center con computadoras y acceso a la Web. En cuanto a las principales diferencias entre la clase intermedia y la de negocios, en el caso de Air France, además del asiento y el espacio, está el menú, similar al de la clase económica. Carola Harteneck concluye: “En nuestros vuelos, el menú de la Premium Voyageur es diseñado por Michel Nugues, miembro de Les Toques du Ciel y tiene dos opciones de plato caliente. Y vale la pena mencionar que se ofrece a los viajeros licores y vinos seleccionados por Olivier Poussier, nombrado Mejor Sommelier del Mundo en 2000”. Finalmente, y no es un detalle menor, la franquicia de equipaje en una clase intermedia es habitualmente similar a la de la clase de negocios. Un dato para tener en cuenta cuando las compañías son cada vez más estrictas en cuanto al peso y la cantidad de valijas despachadas.

Junto a Cristina Fernández, Enrique Meyer, flamante ministro

El turismo consigue su esperado ministerio Organismos y asociaciones del sector coincidieron en celebrar la creación de la nueva cartera El esperado anuncio sobre la creación del Ministerio de Turismo, la semana última, cosechó una colección de aplausos y felicitaciones por parte de empresarios y trabajadores del sector, que históricamente reclamaban la medida. “La jerarquía alcanzada y la importancia que se le da al sector es una oportunidad impostergable para consolidar los logros alcanzados y renovar el compromiso de seguir trabajando en beneficio de nuestro país y de nuestra actividad”, dijo la Asociación Argentina de Operadores de Viajes y Turismo (Aaovyt). Por su parte, el presidente de la Asociación de Agencias de Viajes y Turismo de Buenos Aires (Aviabue), Fabricio Di Giambattista, aseguró: “Desde hace años los empresarios turísticos reclamamos que nuestra industria, por ser una gran generadora de inversiones nacionales y extranjeras, y de empleo genuino, tenga un lugar en el gabinete nacional”.

“La creación del Ministerio de Turismo es una vieja asignatura pendiente”, dijo en tanto el presidente de la Federación Empresaria Hotelera Gastronómica de la República Argentina (Fehgra), Oscar Ghezzi. “Esta iniciativa es la piedra fundamental para la implementación de políticas públicas más agresivas a favor del desarrollo de nuestra actividad”, agregó. La decisión gubernamental fue celebrada también por otras asociaciones y organismos como Destino Argentina o la Organización Mundial de Turismo (OMT). Todos felicitaron, asimismo, a Enrique Meyer por su designación como ministro de Turismo de la Nación. “Hoy, el turismo en la Argentina como fuente exportadora es la cuarta más importante. Y tiene posibilidades de seguir creciendo porque la región está libre de problemas de terrorismo, religiosos, raciales, y eso hace que la gente recorra con tranquilidad nuestro país”, sostuvo el designado ministro. El cambio de secretaría a ministerio tiene razón en el crecimiento de la actividad, su contribución a la generación de empleo, la entrada de divisas y la reconversión de las economías regionales.