Cinco tendencias clave sobre edición digital en 2016 - The Spanish

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LIBER 2016 JORNADAS PROFESIONALES Jueves, 13 de Octubre 13:00 Conferencia y charla Las 12 tendencias que están cambiando el mundo de la edición a nivel global Ponente: Edward Nawotka, Analista internacional y periodista Participa: Javier Celaya, Socio fundador de Dosdoce.com Organiza: Federación de Gremios de Editores de España (FGEE) Lugar: CC1, Sala 1.1. Recinto Gran Via de Fira de Barcelona

Cinco tendencias clave sobre edición digital en 2016 (Resumen de la sesión) Por Ed Nawotka “El sociólogo español Manuel Castells sostiene un buen discurso en torno al estado actual de la edición digital en 2016. “El poder”, escribe, “está basado en el control de la comunicación y la información, ya sea el macropoder del estado (es decir, los editores) y las grandes empresas de comunicación o el micro-poder de organizaciones de todo tipo.” Todo se reduce a que las empresas más fuertes intentan explotar el mercado existente subiendo precios mientras ven bajar las ventas y, por el otro lado, las cada vez más organizadas y poderosas editoriales de autopublicación se apropian de una parte del mercado y de los ingresos. Las ventas del ebook están bajando Los ebooks han dejado de ser novedosos y el porcentaje total de sus ventas respecto al mercado del libro físico, es decir, los libros que podemos comprar en una librería tradicional, ha bajado en la actualidad en EEUU, el mercado digital más maduro del mundo. En ese país las ventas bajaron de 60,5 millones de dólares durante el primer trimestre del año hasta 338,5 millones, un descenso del 15%. Las ventas de ebooks de libro infantil y juvenil han continuado bajando en picado: 24 millones en el primer trimestre, comparado con los 40,6 millones de hace un año. En el Reino Unido, las ventas digitales de uno de los países de las cinco editoriales más poderosas cayeron colectivamente un 2,4% hasta 47,9 millones de unidades. Esto significa un descenso de casi el 21% en ventas de ebooks el año pasado. 1

Las razones son innumerables y de alguna manera siguen siendo un misterio. Para empezar, los usuarios citan la falta de un dispositivo nuevo e innovador que les incite a comprar ereaders. El dispositivo reciente más innovador ha venido de Kobo, que vende lectores digitales en la cadena de librerías independientes La Central, en Madrid y Barcelona. Dicha marca introdujo, con su Aura h20, un dispositivo resistente al agua, al que siguió un nuevo lector Premium, el Aura One, que ofrecía resistencia al agua y una pantalla más grande. Pero lo que puede haber marcado más decisivamente esta tendencia es la clara preferencia que muestran las nuevas generaciones hacia lo impreso, indicando una “vuelta hacia lo analógico”. Solo hay que ver la tendencia nostálgica de los discos de vinilo, fácilmente identificable. Según los investigadores de Codex, el 25% de los compradores de libros, incluyendo el 37% de jóvenes de 18 a 24 años, quiere pasar menos tiempo con sus dispositivos digitales. Dado que los consumidores casi siempre tienen la posibilidad de leer libros en formatos físicos, están mostrando una preferencia de retorno al libro impreso. En la encuesta de abril, el 19% de los jóvenes de 18 a 24 años decía que leen menos ebooks que cuando empezaron a leer en este formato. Son tendencia las nuevas “fiestas de lectura en silencio” o “la happy hour del libro”, donde un grupo de amigos se reúne en una cafetería o un bar para leer tranquilamente todos juntos. A menudo esto implica un libro físico. Según el director de la cadena de librerías Waterstone en el Reino Unido, James Daunt, “las ventajas y desventajas de la lectura digital se están haciendo cada vez más evidentes. El resultado de ello es una vuelta parcial a la lectura en libro físico, mientras que la lectura en digital encuentra su dimensión natural. En concreto, esto favorece a la edición: con buenos libros, es más beneficioso tener el libro físico y real. Una estantería con libros reales hace palidecer a su imitador digital.” Su cadena de librerías dejó de vender dispositivos Kindle en sus tiendas el año pasado. Extrañamente, es el lector más mayor, con problemas de vista, con más ingresos y tiempo libre -cosa que implica más tiempo para viajar- quien se ha convertido en un devoto digital. ¿Pero estos lectores mayores acaban de llegar al mercado? Parece que no: una nueva investigación de Pew, en EEUU, indica que el porcentaje total de personas que leen ebooks se ha detenido. Después de crecer un 11% del 2011 al 2013, Pew encontró que el porcentaje de americanos que leyeron un libro digital el año pasado se 2

ha mantenido invariable, fijándose en un 28% durante los dos últimos años, y parece que el crecimiento total se ha parado. El precio sigue siendo el gran reto en lo digital Para los editores más grandes, Penguin Random House por ejemplo, los ebooks ahora representan un 30% de sus ventas totales. Pero en 2016, las grietas han empezado a aparecer. Para poner un ejemplo, en el grupo editorial más grande del mundo, PRH, los ingresos globales cayeron un 10,7% en la primera mitad de 2016 debido a una bajada de las ventas de libros digitales. Bertelsmann, propietario del 53% de Penguin Random House, expuso que los ingresos de PRH bajaban un 10,7% cada año, llegando a alcanzar en la primera mitad de 2016 1,5 mil millones de euros. En Lagardère, propietario de Hachette, las ventas de ebooks alcanzaron su cúspide en 2013 y también están bajando –ahora solo representan el 9% de sus ingresos. De hecho, las 5 editoriales más poderosas de lengua inglesa reportaron bajadas en ventas totales, incluyendo los ebooks. La cuestión, según se dice, es que es el ajuste de precios lo que ha impulsado (hecho subir) los precios en EEUU –a menudo iguales o a veces más caros incluso que los libros impresos. Incluso el backlist (el fondo de libros de las editoriales) tiene un precio similar en digital que el de las ediciones usadas de los mismos títulos online. La constatación de esta situación de los precios, ha hecho que los consumidores vuelvan a las bibliotecas, la mayoría de las cuales ahora ofrecen ebooks. El vendedor (servidor, plataforma) de libros digitales más grande utilizado por las bibliotecas, Overdrive, registró un incremento de dos dígitos en la circulación de ebooks durante los últimos años, y docenas de bibliotecas han registrado más de un millón de descargas digitales anuales. En Europa, donde los precios de los libros son más altos, los ebooks pueden variar de un precio muy barato, desde 99 céntimos, hasta un precio alto equivalente al del libro físico. Esto ha conllevado variaciones muy amplias en la demanda. En Alemania, por ejemplo, la marca Tolino logró con éxito hacerse con una parte del mercado significativa frente a amazon.com, la entidad dominante. Lo consiguieron en parte con una publicidad y marketing inteligentes, dado que la marca se estableció ella misma a través de tres de las cadenas de librerías más importantes, quienes ofrecían acceso inmediato –y esto se ha de destacar– a los dispositivos en una gran variedad de puntos de venta. 3

¿Por qué las grandes editoriales han incrementado precios? Algunos creen que es para dar ventaja a la escalada de ventas a favor del libro físico, que es un campo en el que los grandes editores mantienen una gran ventaja, pues dominan la distribución y el espacio de venta frente a los revolucionarios editores de autopublicación. Puede deberse a ello, pero también a que simplemente el conocimiento del mercado del libro físico vs el libro electrónico sigue estando en desarrollo: a diferencia de los libros impresos, el coste de la producción, el almacenaje, la venta y la entrega de los ebooks es mucho más bajo, de manera que cada dólar o euro que pueden ganar requiere una pequeña o nula inversión. Pero aquí no controlan los canales de distribución. Con mucha diferencia en todo el mundo, amazon.com es quien lo domina (o Kobo o Tolino o algunos distribuidores más pequeños a nivel local). Amazon reclama grandes porcentajes en las ventas de ebooks a los editores y, con el fin de obtener un nivel de beneficio “aceptable”, o al menos similar al de los libros físicos, éstos suben los precios. Los precios son más altos ahora, pero con esta bajada de ventas, es de esperar que los editores tengan que explorar de nuevo la alternativa de bajar los precios. Aumento de la autopublicación digital a pesar de la bajada de los ingresos El precio ha sido una de las claves más importantes para la autopublicación, donde los precios reducidos a menudo no pasan de 5 o 6 dólares o euros por libro, y ha sido utilizado para atraer a nuevos lectores. Lo que ha pasado es que los lectores consideran a menudo que esos libros son “suficientemente buenos” para el precio que están pagando. La autopublicación ha quedado confinada principalmente a títulos de ficción y de género (romántica, misterio, thrillers…), así como a memorias/autobiografías. En la bajada de ingresos de libros digitales de las grandes editoriales, observamos que muchos de los libros autopublicados, libros que son (o solían ser) de menor calidad, se venden a aquellos lectores que no comprarían libros al precio estándar de las editoriales tradicionales. También ha habido un aumento considerable del número de títulos autopublicados en el mercado. En Estados Unidos, Bowker (la agencia del ISBN americana) señala un aumento del 21% en los registros de ISBN entre 4

2014 y 2015, y un aumento del 375% desde 2010. En cuanto a los libros impresos, CreateSpace de Amazon registró el mayor número de títulos en el ISBN, un total de 423.718 en 2015; y para libros digitales Smashwords registró 97.198 títulos en el ISBN en el mismo año. Observaciones: las estadísticas no lo explican todo, ya que Bowker incentiva, por ejemplo, que los autores registren distintos ISBN para distintos formatos y plataformas de distribución, provocando que un título pueda tener múltiples ISBN a la vez. Y al mismo tiempo Amazon KDP –un actor dominante en el mercado de la autopublicación digital– no requiere ISBN para publicar en su plataforma, con lo que puede que muchos títulos autopublicados no estén registrados. La tendencia hacia la autopublicación no ha pasado desapercibida a Penguin Random House. En España, donde se dice que el 25% de los libros publicados son autopublicados, Penguin Random House Grupo Editorial recientemente se ha asociado con la sevillana Lantia para ampliar y profesionalizar su propia plataforma de autopublicación, megustaescribirlibros.com, y así crecer hacia los mercados latinoamericanos. Auge de los libros Audio y Video descargables Se trata del negocio digital que más rápidamente está creciendo, ocupando ya el 50% de los datos online. Para finales de 2017, se calcula que esta cuota alcanzará el 70%. Los editores y productores de contenido deberían mirar en esta dirección; los que están adelantándose al mercado están enfocando sus negocios a producir “contenido video relacionado con el libro”. Algunos editores ya han contratado a jóvenes YouTubers –como se llama a los productores de contenido– para producir videos donde desempaquetan envíos de libros o para producir videos relacionados con reseñas de libros. La mayoría de editores utilizan el video exclusivamente para acciones de marketing, pero los productores de contenido más avispados lo están aprovechando como una extensión de su producción de contenido, ya sea produciendo cortometrajes o como extensiones de podcast o blog. Aun así, en los foros convencionales, para los editores tradicionales el crecimiento mayor está en la venta de libros audio digitales, que creció un 5

35,3%, mientras en Overdrive (el proveedor de contenido digital para bibliotecas) la circulación de libro audio digital alcanzó los 43 millones de préstamos, lo que equivale a un crecimiento del 36% respecto a 2014. La asociación de editores de libro Audio de Estados Unidos (APA) calcula que las ventas de libro Audio sumaron más de 1.77 mil millones de dólares en 2015, una subida del 20,7% respecto a 2014. 9.630 títulos más fueron publicados en formato audio respecto al año anterior, llegando en 2015 a los 35.574 libros audio publicados. Esto significa un aumento de 29.374 títulos audio más publicados por año desde hace apenas 5 años. Es de suponer que un número muy alto de estas ventas, si no la casi totalidad, corresponde a descargas, si tenemos en cuenta que la producción y la distribución de estos soportes físicos son cada vez más raros y costosos. En cuanto al género, la ficción es el formato clave: el 90,4% de las ventas totales de audio es ficción. Una oportunidad para la venta de derechos Para los editores de lengua española, el impulso en libros video y audio ofrece una nueva oportunidad para aquellos que buscan vender los derechos de sus títulos. ¿Por qué? Porque los acentos y la dicción son lo suficientemente distintos entre los diversos países de lengua española (de México a Argentina) como para justificar una versión diferenciada para cada país. Es más, el formato video ofrece la oportunidad a los editores de lengua española de mostrar sus distintos estilos visuales en la manera de explicar cada historia, cosa que la prosa no siempre permite. Ello también puede fomentar una curiosidad adicional, y conllevar una consiguiente fragmentación de las ventas. Además, también cabe destacar la evolución y el desarrollo de plataformas digitales de derechos como The Spanish Bookstage, que ofrece información sobre la situación de los títulos que se están moviendo y vehicula eficientemente el proceso de adquisición de derechos por parte de la comunidad editorial global. Por supuesto, existen otras estrategias para impulsar la venta de los derechos: una es la de permitir a editoriales de otros países que se junten en la compra de derechos. Por ejemplo, editoriales independientes en distintos países de Latinoamérica -México, Perú, Chile y Colombia- podrían juntar recursos para presentar una oferta competitiva para un título por el 6

que está pujando también PRHGE para su publicación en Latinoamérica. Otra estrategia, por muy ingenua que parezca, es la de producir un mayor número de bestsellers internacionales. ¿Quién es la “Elena Ferrante”, el “Karl Ove Knausgaard” o el “Jonas Jonasson” español? Este tipo de autores sirven de embajadores para que los editores profundicen más en los catálogos de estas editoriales. Hace demasiado tiempo que un escritor como Carlos Luis Zafón captó la atención de una audiencia global y produjo decenas de millones de copias vendidas. ¿Será, quizás, un autor autopublicado el que resaltará próximamente y marcará la diferencia? Como ha escrito Castells: "la nueva economía se basa en la cultura, la cultura de la innovación, la cultura del riesgo, y la cultura de las expectativas y, en última instancia, la cultura de la esperanza en el futuro." Respecto a la edición, la existencia de la esperanza en el futuro es demasiado a menudo la única garantía que tenemos.”

Más información: The Spanish Bookstage C/Llacuna 162 nº101 08018 Barcelona www.thespanishbookstage.com Contacto: Anna Ascolies [email protected]

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