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Agridulce cuento de iniciación Sencillez y sensibilidad

22 ago. 2013 - Ponce. dirección de arte: Diego De Souza. elenco: Francisco Carrasco, Fe- derica Cafferata, Verónica Nonni, Mirta Busnelli, Betiana Blum, ...
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espectáculos

| Jueves 22 de agosto de 2013

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Con colores y sonidos de Sudáfrica

Aventuras de una justiciera adolescente

zambezia (sudáfrica/2012) . ★★★

buena . dirección :

Wayne

cazadores de sombras: ciudad de hueso (mortal instruments: city of bones/ e sta d o s u n i d o s/a l e m ania/2013). ★★★ buena . dirección:

Thornley. guión: Andrew Cook, Raffaella Delle Donne, Anthony Silverston y Wayne Thornley. música: Bruce Retief. diseño de producción: Allan Cameron. distribuidora: Distribution Company. duración: 83 minutos. calificación: apta para todo público. producción animada en 3d

Harald Zwart. guión: Jessica Postigo, adaptado del libro de Cassandra Clare. fotografía: música : arte :

Geir Hartly Andreassen.

Atli Örvarsson. dirección de

Anthony A. ianni. edición: Joel

Negron.

elenco :

Lily Collins, Jamie

Campbell Bower, Robert Sheehan, Jemima West. distribuidora: Diamond Films. duración: 130 minutos. califica-

El halcón Kai, aventurero, pero rebelde

E

n un mercado como el de la animación infantil dominado por las producciones de Hollywood (este año con la fuerte competencia de la argentina Metegol), el estreno de una película sudafricana resulta una bienvenida rareza. Sin embargo, el principal problema de este proyecto de 20 millones de dólares de presupuesto es que –más allá de los hermosos paisajes que recrea, de la bella paleta de colores que regala y de algunos pasajes de música autóctona– apeló a un guión bastante convencional que recicla situaciones y conflictos ya vistos en decenas de films previos, seguramente con la idea de alcanzar así una mayor proyección internacional. Ambientada en la zona de las cataratas Victoria, un espectacular salto de agua del río Zambeze en la frontera entre Zambia y Zimbabwe, Zambezia tiene como protagonista al joven y solitario halcón Kai, que ha perdido a su madre y vive bajo el obsesivo cuidado de Tendai, su sobreprotector padre (un arranque parecido al de Buscando a Nemo). Pero, claro, el ave quiere experimentar la libertad y terminará en la inmensa ciudad del título, donde conviven decenas de especies (aquí empiezan las similitu-

distribution company

des con Ga’Hoole: La leyenda de los guardianes). Allí demostrará su capacidad para volar de manera poco ortodoxa y de improvisar sobre la marcha, y será reclutado para patrullar y custodiar la zona. Pero la convivencia, en principio, no es lo suyo y –ante los problemas que encuentra para adaptarse– al poco tiempo querrá regresar a su aislado hogar. Es cuando aparecen en escena algunos personajes clave, como la bella Zoe y su padre Sekhuru, un pájaro viejo y sabio que sabrá cómo aconsejarlo. Y, claro, también están los malos de la película, como la iguana Budzo, a quien deberán enfrentar sobre el final. Es una lástima que la narración sólo se sostenga en la espectacularidad de las escenas de vuelo (con la cámara acompañando el movimiento de las aves y aprovechando las posibilidades del 3D) y en algunos pasajes que tienen que ver con fiestas tradicionales y momentos musicales. Con una historia un poco más audaz, con personajes más desarrollados, con más sentido del humor y una mayor capacidad para entretener, habríamos estado frente a una verdadera sorpresa del cine africano y no a un producto apenas correcto como el que finalmente se aprecia en pantalla. ß Diego Batlle

Martina Juncadella, como Habi, construye un retrato sobrio y delicado

alfa

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Agridulce cuento de iniciación habi, la extranjera (argentina-brasil/2013). ★★★★ muy buena. dirección y guión: María Florencia Álvarez. fotografía: Julián Apezteguía. música: Santiago Pedroncini. producción: Lita Stantic, Hugo Sigman,

Walter Salles.

montaje: Eliane D Katz. directora de arte: Graciela Galán. sonido: Catriel Vil-

dosola. elenco: Martina Juncadella, Martin Slipak, Lucía Alfonsín, María Luísa Mendonça, Diego Velázquez, Paloma Álvarez. distribuidora: Alfa Films. duración: 92 minutos. calificación: apta para mayores de 13 años.

H

ay una historia de ribetes curiosos, inusuales en esta ópera prima de María Florencia Álvarez. Un punto de partida que hasta podría parecer disparatado: una chica del interior viene a la ciudad a entregar unas artesanías, entra en contacto casualmente una comunidad musulmana y queda prendada de ese universo completamente desconocido. Inicia a partir de allí un derrotero que en la superficie parece estar relacionado con un descubrimiento religioso, algo así como una conversión, pero que en el fondo tiene mucho más que ver con la búsqueda de la identidad que cualquier jovencita de esa edad (apenas 20 años) atraviesa siempre con alguna cri-

sis como telón de fondo. En poco tiempo, Analía (interpretada con sobriedad y delicadeza por Martina Juncadella, recientemente premiada por su labor en la obra La laguna de Agostina López) cambia de nombre (dice llamarse Habiba Rafat) y de hábitos, intenta aprender el idioma y las costumbres de esa comunidad, conoce a un par de buenas amigas e incluso se enamora por primera vez. Es en una ceremonia musulmana donde escucha la sentencia de una experimentado imán: “Nuestra conducta en esta vida debería ser similar a la del extranjero en el lugar que no le pertenece: tomar lo mínimo indispensable para subsistir y continuar camino a su propio destino”. Ese consejo sabio es el

que terminará cifrando el camino de Analía, previo paso por una serie de situaciones algo incómodas provocadas por el engaño que elige como primera estrategia de supervivencia en un mundo ajeno. Más que una película sobre la tolerancia, habida cuenta de los prejuicios que toda la comunidad musulmana sufre desde el famoso atentado contra las Torres Gemelas, Habi, la extranjera es una historia de iniciación, un cuento agridulce sobre el paso de la adolescencia al adultez. Una de las virtudes de la película es eludir con inteligencia la gravedad (las escenas en el hotel familiar con una pequeña recepcionista empecinada en hablar un precario inglés son un buen ejemplo) y los mandatos de la buena conciencia (una mujer discute con su pareja y amenaza con tirarse por una ventana, él le exige “que no sea arriba del auto”). Se trata de una película cálida, sencilla y bien provista de detalles sugerentes para quien esté bien dispuesto a los descubrimientos, como la propia protagonista.ß Alejandro Lingenti

ción: apta para mayores de 13 años.

L

a acción de esta versión cinematográfica de las novelas de Cassandra Clare se centra en Clary (buen trabajo de Lily Collins), una muchacha completamente normal que vive en Brooklyn con su madre hasta que, junto a su amigo Simon, ve a un muchacho encapuchado cometer un asesinato en una discoteca sin que nadie parezca percatarse del crimen. Muy pronto, otras visiones comienzan a asombrarla: un raro símbolo en una taza de té, una niña que aparece y desaparece, hasta que duda de su cordura. Como si esto fuese poco, su madre desaparece y así ella comienza a descubrir el mundo de los cazadores de sombras, mitad ángeles y mitad humanos. Rodeada de demonios, brujos, vampiros, hombres lobo y otros habitantes sobrenaturales del mundo de las sombras, Clary se une a Jace, un joven cazador de sombras para hallar y proteger una antigua copa que dictará el destino de su madre. El director Harald Zwart supo relatar con pericia esta trama mediante un clima terrorífico y alucinante, y así el film atrapa y seguramente permitirá al público juvenil seguir con apasionado entusiasmo las peripecias de la heroína y de sus amigos. Un elenco de parejos méritos, una buena concepción de efectos visuales y una impecable fotografía apoyaron esta historia que como Crepúsculo, tendrá sus varias continuaciones. ßAdolfo

c. Martínez

Padre e hija descubren su vínculo a bordo de un Citroën 3CV

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Sencillez y sensibilidad road july (argentina/2010) . ★★★ buena. dirección y guion: Gaspar Gómez. fotografía: Máximo Becci. música: Maxi Amué. edición: Alberto Ponce. dirección de arte: Diego De Souza. elenco: Francisco Carrasco, Federica Cafferata, Verónica Nonni, Mirta Busnelli, Betiana Blum, Laura Morales Rúpulo. distribuidora: Oeste Films. duración: 88 minutos. calificación: apta para todo público.

D

espués de haber protagonizado un pequeño fenómeno de popularidad en Mendoza, donde fue vista por unas 10.000 personas, a pesar de haber sido presentada de un modo tan independiente como había sido producida, sin demasiado apoyo publicitario ni inversión en marketing, esta producción mendocina llega a las pantallas locales y no debe descartarse que pueda obtener aquí una respuesta parecida. Tiene a su favor la sencillez de su entrañable historia, la autenticidad que sólo puede dar la familiaridad con el mundo que retrata (es una road movie que se despliega en la ruta 40 y sus alrededores, con el fondo de los paisajes del sur de Mendoza y entre personajes creíbles y queribles que hablan en mendocino) y la empatía que generan en el espectador por la naturalidad con que viven este inesperado encuentro entre una chica de 10 años, huérfana de madre, y el padre, de cuya existencia no tenía hasta entonces noticia alguna. Como bien dice su director, formado en la Escuela Regional de Cine y Video de Cuyo, se trata de “un

viaje a la paternidad”. Es decir del descubrimiento mutuo de un padre y una hija, expuesto con amable sencillez, y clima afectuoso, sin caer en la fácil apelación emotiva ni en los lugares comunes de tanto culebrón televisivo. Un hecho circunstancial los pone en contacto. La tía que viene haciéndose cargo de la nena desde la muerte de su hermana se presenta un día en la casa del hombre –un tipo inestable y bastante inmaduro que vende mercaderías importadas de todo tipo– y le informa no sólo de la muerte de la que fue su novia hace una década sino también de la existencia de la que todos conocen por July, fruto de aquella relación. Total, que Santiago, que así se llama el que repentinamente se ha descubierto padre, deberá asumir por lo menos un compromiso, el de llevarla hasta San Rafael, a la finca de su abuela materna, en el modesto pero noble Citroën 3CV que emplea en su profesión. Por supuesto, sin que ella sepa del parentresco que los une. La road movie se pone en marcha y desde el principio se sabe de la química que hay entre los dos

actores protagonistas –Francisco Carrasco y Federica Cafferata– y que será fundamental para dotar al film de cierta calidez sencilla y encantadora. Como suele suceder en las road movies, lo importante no son tanto los episodios que saldrán al paso de los viajeros durante el camino (aunque hacen su aporte al humor y la aventura y justifican que la experiencia se prolongue más allá de las pocas horas que demandaría el trayecto) sino el desarrollo del vínculo, que se manifiesta en los gestos y las actitudes de ellos dos y que el espectador acompaña con simpatía, interés y una tenue emoción, gracias al cuidado de los diálogos que ponen el acento en la naturalidad y evitan cualquier artificio manipulador, y a la ternura que se va colando sutilmente sin necesidad de efusiones. Otros méritos destacables de la película tienen que ver con el aprovechamiento del ambiente –en lugar de postales turísticas, imágenes ilustrativas de la realidad geográfica y humana de la provincia– y en el sensible tratamiento de los personajes secundarios, entre los que vuelve a sobresalir la variedad de matices con que Mirta Busnelli es capaz de enriquecer al personaje que le toca en suerte por pequeño que sea. El desenlace es otro acierto del guionista y realizador, lo mismo que el uso expresivo de la banda sonora.ß Fernando López