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espectáculos
| Domingo 20 De abril De 2014
Nº 24
Domingo 20 de abril
BIBLIOTECA “Inodoro Pereyra 13” Próximo domingo 27 de abril
Entrelíneas Marcelo Stiletano
El show de la crónica roja O
currió el 13 de noviembre de 1992, cerca de Valencia (España). Al anochecer, en la ruta que une las localidades de Alcácer y Picasent, tres adolescentes de 14 y 15 años hacían dedo para llegar más rápido a una disco en la que se celebraba una fiesta del colegio secundario en el que estudiaban. Pocas horas después desaparecieron y no se supo nada de ellas hasta que el 27 de enero de 1993, 75 días después, los tres cadáveres fueron hallados, ocultos y semienterrados en un lugar de muy difícil acceso. La investigación policial posterior no tardó en comprobar que habían sido vejadas, maltratadas y brutalmente asesinadas. Hoy, a algo más de dos décadas de distancia, la opinión pública española aún recuerda conmocionada el episodio. Y también evoca aquellos luctuosos acontecimientos como el punto inaugural de lo que hoy se conoce en la península como “televisión basura”, sobre todo a partir de la frenética e inescrupulosa pelea entre distintas cadenas por conseguir antes que el resto “primicias” de dudoso gusto con el mayor morbo posible. Aquel dolor irremediable reapareció a fines de 2013, cuando la justicia española puso en libertad, luego
de 20 años de reclusión, a Miguel Ricart, único condenado por el hecho, gracias a la derogación de la llamada “doctrina Parot” a instancias del Tribunal Europeo de Derechos Humanos. De inmediato se conoció el interés de varias productoras y cadenas televisivas por lograr la palabra de Ricart. Y al mismo tiempo creció un debate cargado de indignación y perplejidad. ¿Tiene sentido darle voz y espacio a un hombre que había reconocido su culpabilidad?, fue el primer interrogante planteado. La discusión posterior no pudo ir más allá de un conjunto de conclusiones siempre provisionales. En principio no habría restricciones legales que impidan a un canal de TV dialogar con un asesino confeso. En todo caso, la regla que debería aplicarse responde a criterios valorativos. En este sentido, por ejemplo, las directrices editoriales, valores y criterios fijados por la British Broadcasting Corporation (BBC) mencionan siempre la noción de “interés público” para encuadrar casos como el descripto. El concepto sirve para justificar razonablemente una acción que ayudaría, en principio, a no limitar o condicionar el ejercicio periodístico. Pero a la vez, por estar frente a una situación de extrema sensibili-
dad, la idea de interés público también puede establecer limitaciones. La BBC menciona varias cosas que no deben hacerse en ningún caso: “Hacer que las malas acciones parezcan atractivas, revelar demasiados detalles sobre un delito que pueda ser imitado, celebrar el escarnio y la burla de un proceso judicial, ser testigo de actividades ilegales, justificar o incitar el comportamiento delictivo, inducir a un comportamiento que de otra manera no se hubiera producido y orientar la actividad en alguna dirección”. Ricart, finalmente, logró hablar para un puñado de medios, sin que
quedara aclarado del todo otro punto crucial: ¿qué pasa cuando un medio está dispuesto a pagar, por ejemplo, para asegurarse declaraciones exclusivas en un caso así? Uno de ellos fue Antena 3, que sin embargo decidió no emitir la entrevista que mantuvo con Ricart y había anunciado profusamente en pantalla.Tal vez pesó el recuerdo que desde las redes sociales se hizo de más de un cuestionable comportamiento cometido por esa misma cadena al tratar el tema 20 años atrás. En ese momento (diciembre de 2013) el debate estaba al rojo vivo.
Carmen del Riego, presidenta de la Asociación de la Prensa de Madrid, dijo, tajante, que la televisión no debía pagar por entrevistas así bajo ninguna circunstancia. Y si alguien como Ricart decide hablar gratis, “hay que aclarar que no podemos convertir esto en un espectáculo”, sostuvo. “La sociedad no debe dar voto a esto. Es el juez el que debe escuchar una confesión, no un medio de comunicación.” Durante la semana que pasó, nuestra TV mostró sendas entrevistas a personas sin identificación que fueron presentadas como motochorros y sicarios del narcotráfi-
co. Esas conversaciones se emitieron originalmente fuera del horario de protección al menor, pero discutidas fuera de él durante un buen tiempo. Y en pleno mediodía, se presentó en el canal de cable C5N un video en el que una niña de 5 años denunciaba, según su madre, abusos contra ella de su ex esposo y padre de la menor. Los títulos catastróficos y recargados, una costumbre permanente en los canales de noticias, se extendieron a todas las señales informativas en los últimos días y a toda hora al citar detalles aberrantes de la muerte de una mujer en Saladillo. Esas señales informativas también se aprovechan desde hace tiempo, casi indiscriminadamente, del recurso (bastante económico por cierto en términos de producción) de convertir en noticia lo que surge de las cámaras de seguridad de la policía y de los municipios del conurbano. Nuestra pantalla enfrenta, en los canales de noticias, la visible contradicción entre un escenario cada vez más propicio para el crecimiento y el desarrollo de los espacios propios para la crónica policial (con un plantel nunca visto de cronistas especializados que abordan los temas desde todos los enfoques posibles durante largas horas de exposición ante las cámaras) y una creciente pérdida de la capacidad de investigación, razonamiento, rigor y equilibrio. Esta incómoda paradoja provoca, sobre todo, que la TV informativa dedicada a la crónica roja pierda sus defensas y termine rendida ante un aluvión de espectacularidad, sensiblería, efectismo y morbo. Editada, musicalizada y servida en bandeja a la hora del almuerzo. El interés público por conocer una realidad que no puede soslayarse, porque la sociedad sufre la inseguridad en carne propia todos los días, termina visiblemente afectado por tamaña deformación. Tarde o temprano, la TV argentina debería darse un debate similar al que estalló en España hace algo más de dos décadas en medio de un dolor irremediable .ß
Lo que viene 20/4 al 26/4 los recomendados de la redacción
cine
Ken Loach: coherencia
1
semana más durará
el personaje de Leticia Brédice en la tira Mis amigos de siempre. Se la llevará Juan Palomino en una participación especial.
80
años cumplirá
Sophia Loren cuando en septiembre se edite su biografía,Ayer, hoy, mañana; homónina a la comedia que protagonizó con Marcelo Mastroianni en 1963.
28
días faltan para
la ceremonia de entrega de los Martín Fierro que según anuncia El Trece transmitirá el domingo 18 de mayo desde el Hilton.
Más que por los cincuenta años de una carrera iniciada en la TV y desarrollada desde 1967 en el cine, a Ken Loach se lo distinguió en Berlín con un Oso de Oro Honorífico por la extraordinaria coherencia de su obra. Lúcido y riguroso, el artista británico sigue atento a las condiciones en que vive la clase trabajadora de su país: de Pobre vaca, su opera prima, en adelante, los temas sociales han conformado el núcleo central de su obra, que acaba de llegar al título número 29 con Jimmy Hall’s, film sobre un líder socialista irlandés que competirá en Cannes y que quizá sea la última ficción que realice el director de Tierra y libertad y El viento que acaricia el prado, ya que en el futuro se dedicará al documental. El aniversario encontró aquí otra feliz celebración: la retrospectiva (18 títulos) que hasta el 27 de mayo desarrolla los martes el British Arts Centre. Inmejorable ocasión para apreciar esa coherencia que Berlín destacó y que no impide que el programa ofrezca variedad de temáticas y géneros. Este martes, por ejemplo, se verán RiffRaff (foto), sobre los trabajadores en negro sin techo ni leyes laborales, en el que expone las condiciones culturales y sociales de la vida obrera durante la era Thatcher; y Como caídos del cielo, donde mezcla ironía, rabia y humor al contar las desventuras de un desocupado para poder comprarle a su hija un vestido de primera comunión. ß
televisión
música
Jack Bauer, De fugaces justo a tiempo encuentros
Fernando López
El reloj que marca el tiempo que resta para el regreso de 24 ya está activado. Falta cada vez menos para que el lunes 5 de mayo se produzca en las pantallas de todo el mundo el regreso de Jack Bauer, seguramente el héroe televisivo más discutido de los últimos tiempos. Para que calmar las ansias (o despertar todavía mayor adrenalina entre los fans, habrá que verlo), se anuncia para pasado mañana un conveniente aperitivo. En el Especial 24: Jack vuelve se prometen develar, con un detrás de escena y la palabra de los protagonistas, varias de las claves de este regreso en formato de miniserie, que retomará las andanzas de un Bauer fugitivo y clandestino, ahora en Londres y algunos años después del final de la octava temporada. En 22 minutos exactos (el tiempo vale aquí más que en ningún otro caso), Kiefer Sutherland y Mary Lynn Rajskub (Chloe O’Brian) y buena parte de los responsables anticiparán lo que ocurrirá en 24: Live Another Day, título que parece extraído de las andanzas del agente secreto incombustible por excelencia, James Bond. De paso, este adelanto servirá para descubrir a un personaje clave, encarnado por Michelle Fairley, la Catelyn Stark de Game of Thrones. Esta vez habrá solo 12 capítulos y una alteración de la marca registrada de la serie (el relato en tiempo real), pero con los ojos siempre puestos en el reloj. ß Marcelo Stiletano
Se produce música como se vive. Un disco, por ejemplo, es resultado de los modos de vivir de sus creadores (improvisadores, obsesivos, entre otros tantos estilos). Con los conciertos pasa algo similar. Ya casi no existen los proyectos de tiempo completo. En general, los músicos abarcan todo lo que pueden, a veces por necesidad económica otras por necesidad artística. Un músico de orquesta toca con un organismo y en sus ratos libres despunta el vicio con conjuntos o como solista. Y qué decir de un instrumentista o cantante de jazz, capaz de mutar todo el tiempo hacía los géneros más variados. La sociedad entre el pianista Adrian Iaies y la cantante Roxana Amed es la coincidencia de las mutaciones interiores de cada uno. Es coincidente y recurrente, porque una de las actividades previstas por Amed durante su paso por Buenos Aires (ella vive en Estados Unidos) es el ciclo de conciertos con Adrián Iaes. Se vuelven a juntar para alimentar esa sociedad que tiene sus impasses pero que no se disuelve. Varias veces se cruzaron en un escenario. En julio de 2010 grabaron juntos el CD Cinemateca finlandesa y en 2012 Roxana participó como invitada del disco que Iaies y Horacio Fumero titularon Conversaciones desde el arrabal amargo. Con este ciclo aseguran que la química no se extinga; que se renueve. ß
Mauro Apicella
Ciclo Ken Loach
Especial 24: Jack vuelve
Amed - Iaies
Riff Raff y Como caídos del cielo. El martes, a las 17 y a las 20, en el BAC, Suipacha 1333. Entrada libre.
Con Kiefer Sutherland y Mary Lynn Rajksub Por Fox, pasado mañana, a las 22s
Cinemateca finlandesa Café Vinilo, Gorriti 3780. El viernes y el sábado, a las 21.
teatro
Tolcachir vuelve a casa
Tras una temporada exitosa en la porteña sala Timbre 4, Emilia armó sus valijas y partió a Brasil, Chile, México y Europa (la obra se presentó en varias ciudades de Francia e Italia). La creación de Claudio Tolcachir, el mismo autor y director de La omisión de la familia Coleman (ya un clásico del off, ahora a punto de desembarcar en pleno Paseo La Plaza, de la avenida Corrientes), Tercer cuerpo y El viento en un violín, regresa a su hogar, en la sala de Boedo. Emilia es la historia del encuentro entre un hombre, ya adulto y con una familia propia, con la mujer que fue su niñera. “¿Qué es ser solidarios para nosotros? Creo que la tragedia moderna habita en la desconexión que sufrimos frente al dolor de los demás. Frente al amor de los demás. La solidaridad muchas veces toma forma de calmante para nuestra propia incomodidad. En esos casos estamos siendo solamente solidarios con nosotros mismos”, escribe Tolcachir. Carlos Portaluppi, Gabo Correa, Elena Boggan, Adriana Ferrer y Francisco Lumerman son los intérpretes de esta puesta argentina. Claudio Tolcachir también montó Emilia en España, con Malena Alterio y Gloria Muñoz, entre otros, una versión que actualmente recorre salas de la Madre Patria.ß Laura Ventura
Emilia De Claudio Tolcachir Funciones, viernes, a las 21; sábados, a las 21 y a las 23.30 Sala, Timbre 4, México 3554
clásica
Comienzo en el Mozarteum
Con la pulcritud y delicadeza de un violinista, toca un instrumento dotado de empuje, sonoridad y acento heroicos. Se llama Hakan Hardenberger, nació en Suecia y, sin discusión ni competencia, es el trompetista más prestigioso del mundo. Viene por segunda vez a Buenos Aires, después de su visita anterior hace 21 años, para actuaciones en los abonos del Mozarteum Argentino. Será el solista de dos conciertos para trompeta y orquesta, uno de Telemann y otro del contemporáneo francés André Jolivet. También el conjunto instrumental que lo acompañará repite su visita que se produjo para el Mozarteum en el 2011. Se trata de la Orquesta de Cámara de Munich, una de las agrupaciones musicales alemanas con mayor cantidad de distinciones artísticas, conquistadas en Europa, que completará el programa de su doble presentación con Danzas del húngaro Sándor Veress, la Décima Sinfonía de Mendelssohn y el Divertimento para cuerdas de Bartók. Así, mañana y el martes quedará inaugurada la 62a. temporada del Mozarteum, en el Colón, en un despliegue que contará con calificados organismos internacionales, algunas de las más brillantes batutas de la actualidad y célebres estrellas de la interpretativa instrumental y vocal que ocuparán el escenario como solistas de conciertos o en programas unipersonales, con repertorios de especial atractivo e interés musical.ß Jorge Aráoz Badí
Orquesta de Cámara de Munich Solista, Hakan Hardenberger Teatro Colón, lunes y martes