11 Cosas Que Un Hombre Jamás Te Dirá …pero necesita que sepas para mantenerlo conquistándote Enrique Delgadillo

Voy a iniciar con una advertencia… No intentes confrontar a un hombre con esto… probablemente estarías perdiendo tu tiempo. Es probable que lo niegue (probablemente por el terror de que tus ojos se pongan rojos y les salga algún tipo de rayo láser mortal) y en el mejor de los casos te dirá que esto aplica para todos los demás, pero no a él… …recuerda, él es diferente a toooodos. Listo… quedaste advertida.

¿Porqué es tan difícil entendernos? Cuando se trata de hablar de temas de relaciones, hombres, mujeres, atracción, el amor, y demás cosas que nos interesan, es complicado por dos cosas: 1. Todos creemos que tenemos la razón… basado en lo que hemos vivido, visto y escuchado en el mundo, y defendemos esas creencias con nuestras vidas. 2. Todos experimentamos la vida a través de nuestro propio lente, nuestros sentimientos y pensamientos particulares. Un hombre jamás conocerá lo que es ir al baño en grupo y tardarse media hora, ni tampoco experimentará las ganas de comunicar o desahogarse con sus amigos cuando está estresado ni muere de ganas de ir a platicarles los detalles de su cita de ayer. De la misma forma, una mujer jamás va a experimentar lo que nosotros, desde nuestro punto de vista particular, desde las hormonas que nos hacen funcionar y los activadores sociales a los que respondemos. Entonces cuando ignoramos que existen estas diferencias y que el otro sexo es totalmente distinto a nosotros, lo que sucede es que creemos que nuestra pareja debería de pensar como nosotros, o que deberían de importarle las mismas cosas que nosotros… …y si no, significa que no nos ama o que no congeniamos. No hay nada más lejos de la realidad. Yo jamás de los jamases voy a emocionarme por decorar los muros de la casa con cuadros que digan “Love” y frases cursis como mi esposa, ni le voy a dar mayor importancia a la fecha en la que nos conocimos o cuándo cumplimos meses o años de casados… De la misma forma, jamás esperaría que ella se emocione porque por fin va a salir la nueva edición de Fifa para Xbox, y sinceramente le vale queso quién vaya ganando el campeonato de Fórmula 1, ni mucho menos espero que se levante conmigo a las 7 de la mañana en domingo a ver el gran premio de Italia. …y eso está perfectamente bien. Tenemos diferentes tendencias, ambiciones, incluso fantasías (no lo sé con certeza, pero estoy casi seguro de que ella no me imagina vestido de enfermero sexy).

No significa que no me ame. Significa que es mujer y que tiene sus propias necesidades que yo tengo que aprender a entender y cuidar… …pues qué crees? Que ustedes no se salvan de hacer exactamente lo mismo pero al revés. Hasta cierto punto es lógico, no? Esto fluye en ambas direcciones, no sólo de aquí para allá.

¿Y porqué debería de hacerte caso a ti? Buena pregunta… De hecho no sé si deberías de hacerme caso o no… …porque para saber quién va a usar las cosas que enseño para bien y quien lo va a usar para manipular y engañar a otros es un poco difícil. Yo soy de la creencia de que la ciencia de la influencia, la persuasión y el poder social es algo que creo que todos los líderes y personas buenas en general debemos aprender… pero es peligroso en las manos equivocadas. Yo lo utilizo para crear relaciones excelentes en mi propia vida, y más allá de eso, para servir a más de medio millón de personas que siguen mi trabajo en YouTube, Redes Sociales, y suscriptores en mi sitio web… …la pregunta es, ¿qué harías tú si tuvieras ese tipo de poder de influencia, persuasión y atracción? Diariamente recibo correos, comentarios, y consultas de mujeres de todo el mundo de habla hispana buscando soluciones a este tipo de problemas. Bienvenida a mi mundo. Soy Enrique Delgadillo, creador de viveincreible.com y del programa El Efecto Irresistible, yo ayudo a mujeres a reencontrarse con su autoestima, su confianza, y darles las herramientas para adquirir poder en sus vidas sociales y amorosas… para convertirse en la versión más atractiva, influyente y exitosa de sí mismas. No sé si te identifiques con esto, pero llega un momento en el que nos damos cuenta de que la forma en que hemos venido haciendo las cosas no funciona, por más que intentamos e intentamos… y por demás nos está llevando a circunstancias que NO queremos. Y es como bien decía el buen Einstein, si haces las mismas cosas de la misma forma esperando que algo cambie… estás loca. Por eso la información que tengo para ti aquí te va a servir mucho, pero sólo si sabes aceptarlo como verdadero, y utilizarlo para mejorar tus relaciones con hombres. En corto, tienes tres opciones…

…y cada una de ellas te llevará a diferentes circunstancias (y vas a ver que tus amigas y conocidas caen en una de estas tres): a) Puedes ser la mujer que no acepta estos conceptos, que rechaza la idea de que somos diferentes, y opina que los hombres son patanes malintencionados infieles ratas de dos patas… esta es la clásica mujer divorciada siete veces que se amarga la vida hablando sobre cómo los hombres llegaron a arruinarle la existencia. b) Puedes ser la que quisiera tener buenas relaciones con hombres, pero que ignora estos conceptos y sigue haciendo lo que una y otra vez no le ha funcionado… esta es la que aún cree que el amor de película de Disney es posible si tan sólo llegara su príncipe azul a rescatarla. Este tipo de mujeres las podemos encontrar en casa con sus 10 gatos, esperando… esperando… y esperando a que suceda el “milagrito”. c) Puedes ser la mujer empoderada que toma control, que decide educarse sobre cómo funciona la mente de un hombre y se da cuenta de que realmente no somos complicados si analizas el porqué de nuestros mecanismos de atracción, nuestras hormonas y procesos de pensamiento. A esta mujer la encontramos en relaciones excelentes, es independiente emocionalmente y sabe cómo mantener a un hombre enamorado a largo plazo. Conoce los secretos, tanto de su propia mente como la de él, y ella es el tipo de mujer que otras consideran que tiene toda la suerte, o la que le caen todos los hombres buenos. Cabe mencionar que hay más de las primeras dos, por una razón muy sencilla… …es la misma razón por la que también hay más hombres que opinan que las mujeres son complicadas, conflictivas, y difíciles de complacer que sólo quieren arrancarles el corazón y verlos sufrir, que los que creen que pueden realmente crear una relación significativa con una mujer si tan sólo aprende cómo funciona su mundo interior. …la razón es que es demasiado incómodo tomar responsabilidad y tener que hacer algo para cambiar nuestras creencias y nuestra forma de actuar. ¿Sabes algo? Es fácil para una mujer entender la mente de un hombre… ¿Entonces porqué hay muy pocas que lo hacen? …porque es aún más fácil NO hacerlo y ser víctima de las circunstancias. No es que tenga algo de malo que elijas ser un tipo de mujer o la otra… pero cada creencia y decisión te llevará a resultados drásticamente distintos. La pregunta es ¿cuál resultado quieres tú? Lo mejor de todo esto es que está bajo tu control… y si te registraste para nuestro taller gratuito online, vas a descubrir precisamente cómo conseguir ese resultado, y mucho más! Así que antes de comenzar quiero felicitarte porque eres de las chicas que no se conforma con la sabiduría de la tía Juanita (la que se divorció siete veces) y sabes que hay formas de conseguir lo que quieres en su vida romántica. Entonces te dejo con estas 11 cosas que un hombre jamás te va a decir, pero que realmente necesita de que sepas, sobre todo si quieres mantenerlo enamorándote.

Algunas de estas cosas se te van a hacer lógicas, algunas otras absurdas, pero son las cosas que un hombre necesita que sepas para mantenerlo en lo que yo llamo el “estado de conquista permanente” que es tan necesario para llevar relaciones emocionantes a largo plazo. Esto es lo que a veces muere por decirte… pero no lo hará… así que lo escribí en su voz. Y bueno, si aún no has conocido a ese hombre especial, imagina que te lo está diciendo desde el futuro ;)

11 cosas que un hombre jamás te dirá… pero necesita que sepas. 1. No me digas que sí cada vez que quiero verte Ok, vamos a quitar esto del camino de una vez… soy un cazador por naturaleza. La parte primitiva de mi cerebro está naturalmente diseñada para matar animales para comer y conquistar mujeres para tener bebés. Me encanta el reto, la conquista… me emociona. Mi mente está constantemente buscando un reto… y yo quiero que ese reto seas tú. Pero necesito que cooperes… Si todo el tiempo estás disponible para mí y me das todo fácil y no me cuesta mucho, no voy a disfrutar la recompensa… por más que creas que te voy a querer más si lo haces. Una mujer que está disponible TODO el tiempo pierde mi interés después de unos años (o meses), no importa qué tan hermosa o simpática sea. Además, si estás demasiado disponible, estás desactivando uno de los mejores filtros que tienes para saber si un hombre vale la pena o no. Permíteme explicar… Un hombre seguro de sí mismo que tiene confianza, apreciará el reto que presenta el conquistarte. Este tipo de hombre es determinado y actúa deliberadamente. Probablemente tenga éxito en la vida y no sufra de graves problemas de autoestima, por lo que probablemente sea también un buen proveedor y protector. En cambio, un hombre inseguro y orgulloso se decepcionará, se sentirá mal o se enojará si no estás disponible para él todo el tiempo… se creerá merecedor de tu atención por default y hará berrinche a la primera señal de que le costará un poquito de trabajo, y dejará de perseguirte. No quieres un hombre así… deja que se filtren solitos. No estés disponible todo el tiempo. Jamás te lo voy a decir, pero es sexy que una mujer tenga sus propias cosas que hacer y haya un poco de misterio… que me cueste un poquito de trabajo estar contigo.

2. Baja las barreras y los cañones… no soy tu enemigo

No tengo la menor idea qué circunstancias hayas vivido cuando eras niña, ni qué tipo de relación tuviste con tu padre, ni cómo te han tratado los hombres anteriores a mí… …sólo sé que a veces yo pago los platos rotos. Esos celos, las preguntas, la necesidad de revisar mi celular para descubrir mi próximo plan para engañarte con otra, los reclamos porque se me olvidó el día en que cumplimos un año con tres meses y cinco días… …todos estos mecanismos defensivos, como si yo fuera el enemigo buscando cualquier oportunidad para hacerte daño. Esas defensas van a destruir lo que tenemos, y entonces sí, vamos a hacernos daño. Si de cualquier forma vas a decidir estar conmigo, confía totalmente… de otra forma sólo habrá problemas. Las barreras defensivas te protegen… pero también me dejan fuera. Si no puedes confiar plenamente y arriesgarte, y no reconoces que eres una persona independiente que no depende de otros para ser feliz… entonces no estás lista para estar en una relación. No quiero que estés conmigo porque necesitas, sino porque es tu elección y porque te hace feliz. Por cierto, cuando yo muestro mis propios mecanismos defensivos, necesito que alguien me lo diga también.

3. No importa qué tan bonita te arregles, una actitud negativa o insegura mata el efecto ¿Nunca has escuchado a tus amigas hablar acerca del tipo súper galán que se le quita lo guapo en cuanto abre la boca? Es en serio… y seguro has conocido a alguien tan hermoso o hermosa físicamente pero tan feo por dentro que no importa cómo se vista o qué palabras salgan de su boca, el efecto simplemente se pierde. No voy a negar que me fascinas cuando te arreglas y te ves hermosa… me vuelves loco. Pero de nada sirve una envoltura hermosa si adentro la caja está vacía. Muchas mujeres atractivas no se dan cuenta de esto hasta que ya es demasiado tarde… tienen hombres detrás de ellas todo el tiempo, pero se preguntan porqué no pueden llevar una relación a largo plazo. Así de simple (y lo mismo aplica para nosotros los hombres)… a largo plazo una mala actitud, defensiva, negativa, apaga por completo el deseo sexual. El estrés me apaga. No puedo desearte y expresarme sexualmente cuando tengo que estar adivinando ahora qué fue lo que hice mal esta vez. Pero cuando te muestras segura, libre, contenta e independiente… me encantas… y hasta me da miedo perderte.

Además, ¿qué crees que me va a mantener enamorado de ti cuando estemos viejitos?

4. Al momento que yo sienta que te tengo 100% segura, se empiezan a apagar mis mecanismos de conquista… y mi emoción por nosotros No muchos hombres van a admitir esto… sobre todo porque supone un amenaza para nosotros que sepas esto. Es más, conscientemente me encantaría saber que te tengo segura, porque me es cómodo. Pero lo que está sucediendo en mi subconsciente es otra historia. La idea de que somos uno para el otro, o de que somos el amor de nuestras vidas es una idea muy romántica pero a la vez una muy nociva porque nos lleva a la complacencia. Significa que una vez conquistados, ya no tenemos que trabajar más en nosotros para mantener nuestro interés. Para mantener mis mecanismos de conquista encendidos, yo necesito saber que existe una posibilidad de perderte si no trabajo en ser lo mejor para ti… eso ni loco te lo voy a decir cara a cara, y hasta me da un poco de inseguridad que lo sepas… …pero necesito que seas independiente emocionalmente… …necesito saber que no puedo confiarme o descuidarme como persona, no importa si ya hiciste un compromiso conmigo o no. Cuando creemos que ya tenemos segura a una persona, deja de existir deseo por conquistarla, pues ya está conquistada. Tal vez al principio no parezca así… pero espera algunos años. Hey, ¿Porqué crees que tantos matrimonios terminan siendo relaciones monótonas y aburridas, donde las personas ya ni siquiera trabajan en sí mismos, en sus mentes, en su personalidad, o incluso en sus físicos, donde ya no hay motivo para conquistar o enamorar? Fíjate cómo se apaga la chispa en esas relaciones. Se apaga la emoción y la pasión. Comprometerse con alguien no es sinónimo de tenerlo seguro, pues cualquiera se puede desenamorar en cualquier momento, no importa cuántos papeles haya firmado y cuántas promesas le haya hecho a diosito. La realidad es que ninguna persona tiene 100% segura a ninguna otra… ni siquiera en el matrimonio… pero cómo nos gustaría creerlo, verdad? Porque nos es cómodo… Es cómodo creer que ya no tienes que hacer nada para enamorar a la otra persona… casi casi como si ya fuera su obligación querernos o estar con nosotros… es una creencia peligrosa. Tú no tienes la obligación de quererme, ni yo a ti… si eso va a suceder, tenemos que ganárnoslo todos los días con las pequeñas decisiones que tomamos.

Créeme, nos hace bien saber que tenemos algo que perder, y saber que tenemos que ser la mejor versión de nosotros para mantenernos enamorados uno al otro, no importa si sea a los 20 o a los 60… ¿de qué nos sirve creer otra cosa?

5. Soy celoso porque tengo miedo… y no, no es representativo de cuánto te quiero. Realmente no tiene nada que ver con qué tan hombre soy, o cómo te comportas ni cuántos hombres te voltean a ver o te buscan. Los celos son mi propio temor a la incompetencia y a ser lastimado… mi propia inseguridad como hombre. En realidad es muy sencillo… por un lado, si yo me sintiera totalmente competente y tuviera confianza en mí, no tendría porqué sentirme amenazado por otros hombres… …y por otro lado, si de plano no me gusta cómo eres o creo que haces cosas indebidas, debería de poder seguir adelante sin ti… pero tengo miedo de perderte. Debería de ser fácil. Pero no lo es porque soy inseguro. Eso es algo que YO tengo que trabajar, y tiene muy poco que ver contigo. Si soy celoso no significa que te amo más, sólo que tengo más miedo y soy dependiente emocionalmente. …Y ya que estamos en eso, si NO te celo, no significa que no te quiero, sólo significa que también me quiero a mí.

6. Mi programación natural me pide hacerte feliz… si no lo logro me siento incompetente Es posible que también me esté fallando ese aspecto contigo… y por eso es un trabajo de dos. Pero ahí te va mi lado de la historia. El ser humano es el más feliz cuando tiene propósito, cuando está contribuyendo, cuando sus metas trascienden lo individual e incluye a otros en su visión. Tan sólo fíjate en lo amargados y miserables que son las personas egoístas que sólo viven para ellos sin importarles nada o nadie más. Dicen por ahí que ser hombre no se trata de aprender a cuidar de sí mismo, sino de aprender a cuidar de otros. Una de las cosas que más activa mis mecanismos naturales de felicidad es el saber que tengo el poder de proveer, de darte lo que necesitas, y de hacerte feliz. Por eso cuando sólo sabes contar cuántas cosas se me olvidaron hacer este año, cuántas veces no te llamé, y cuántas veces no te respondí un mensaje al momento que lo vi, me siento incompetente. Me siento así porque no estoy cumpliendo con mi propósito natural de mantener satisfecha a mi mujer… y después de un tiempo, eso me amarga al grado de cuestionar para qué lo sigo intentando… y entonces mis ganas por hacerte feliz mueren también.

No tienes que buscar mucho para encontrar a tu alrededor ejemplos de hombres (y mujeres también) que ya se rindieron y dejaron de intentar por falta de reconocimiento y una sobra de reclamos. No soy perfecto, y nunca lo seré… pero algo debí haber hecho bien para que estés conmigo. Si tan sólo pudieras reconocer las cosas que hago bien, así como reconoces las que hago mal, nuestra historia sería otra. …y si yo cometo este mismo error contigo, por favor házmelo saber de la manera más amorosa que puedas.

7. No puedo leer la mente… trato, pero nunca lo logro del todo Me encantaría poder decir que tengo un lector de mentes integrado para satisfacer todas tus necesidades y para entender cada cosa que sientes. Desafortunadamente, la evolución no lo consideró necesario. Soy el modelo austero de tu hombre perfecto. Cuando me nace hacer algo por ti, lo vas a saber… cuando no, necesito que me pidas lo que quieres. El problema es que si te esperas a ver cuando me “nace” y no me nace… estoy en problemas contigo. No soy adivino, pero sí quiero complacerte. Por favor no esperes que adivine cuando te sientes mal, cuando estás enojada, cuando quisieras que yo haga algo por ti, etc. Los hombres tendemos a ser las criaturas más literales y directo al grano que existen… por favor, si quieres algo, dímelo directo, no con actitudes extrañas esperando a ver a qué hora me doy cuenta de que quieres algo. Trato de leerte la mente, te juro, pero a veces estoy tan enfocado en unas cosa que no estoy pensando en otras. A propósito…

8. Es en serio, no puedo leer el periódico y escucharte hablar al mismo tiempo Desafortunadamente (o afortunadamente), la evolución nos dotó a hombres y mujeres con diferentes habilidades basadas en nuestros roles antiguos en tribus nómadas hace miles de años. A los hombres cazadores y proveedores de alimento nos dotó de un gran poder de enfoque. Hey, necesitamos asegurarnos de que cuando salimos a cazar, lo hagamos bien… o la aldea simplemente morirá de hambre. Ahora, sé lo que estás pensando… hoy no tenemos que salir a cazar animales salvajes para sobrevivir, sin embargo mi cerebro sigue programado para hacer una sola cosa a la vez, y hacerla bien. Si te fijas, soy relativamente bueno para actividades que requieran de cálculo mental y enfoque como aventar una lanza o tirar una flecha a un mamut (o cosas súper útiles así). Pero cuando estoy pensando en una cosa, casi nada me puede distraer de lo que estoy haciendo.

Tu cerebro es diferente… tú tienes lo que se conoce como “pensamiento en red”. Hace milenios tú eras la que estaba recolectando, cuidando a los niños, ayudando con las labores de la aldea, etc, y eso requería de una gran habilidad de “multitasking” o hacer muchas cosas al mismo tiempo. Así es, no es ningún mito. Mujeres pueden poner su atención en varias cosas a la vez. Nosotros normalmente batallamos cuando hay más de un factor en la ecuación. Pregúntale a cualquier hombre porqué tiene que bajarle el volumen al estéreo del coche para echarse en reversa. Literalmente puedes poner tu atención en diez cosas a la vez… por eso a veces me quiero dar un tiro cuando escucho 10 mujeres hablando al mismo tiempo en sus reuniones interrumpiéndose constantemente. Dios mío, ¿como le hacen? Otra cosa es que cuando tu hablas, utilizas mil palabras y le das vueltas con miles de detalles… en cambio, yo voy al grano con lo que quiero decir. Por eso es un poquito irritante cuando estoy tratando de enfocarme en hacer otra cosa y tú quieres que hablemos sobre cómo llegaste a la conclusión de qué color pintarte el cabello. No puedo pedir que sepas lo que se siente… sólo puedo decirte lo que yo siento. Es más, hay una gran probabilidad de que tú te frustres cuando YO no soy tan platicador y abierto con mis sentimientos y no puedas hablar conmigo como lo haces con tus amigas. Lo siento, estamos programados diferente. La clave está en entendernos y llegar a acuerdos, no juzgarnos y empezar a discutir sobre porqué no te pongo atención o porqué tú todo el tiempo quieres hablar. Yo también prometo tratar de entender tus mecanismos y necesidades, si tú entiendes los míos… hecho?

9. Cuando estoy estresado, mi mente se cierra, y lo que MENOS quiero es comunicar y desahogarme con alguien Nuestras diferencias son muchísimas… y nuestro cerebro reacciona de forma distinta al estrés. Para empezar, tú como mujer te estresas más fácilmente… esto es porque tu cerebro está hecho para resolver detalles, las cosas del día a día, lo micro. Mi cerebro está hecho para resolver lo macro, las cosas grandes, la supervivencia de la tribu, las decisiones de vida o muerte. Todos tenemos una cosa más o menos del tamaño de una almendra en nuestro cerebro llamada la amígdala. Esta es la parte del cerebro que se encarga de las emociones, el miedo, el estrés, etc. Pues resulta que la tenemos de diferente tamaño, tú y yo, dando como resultado diferentes niveles de tolerancia al estrés. Que no te sorprenda si un día me ves totalmente tranquilo por un asunto que a ti te está volviendo loca.

También, cuando yo estoy estresado por algo… me gusta resolver mis conflictos emocionales o existenciales en mi propia cabeza, no en comité. Yo no busco desahogarme con alguien y contar los detalles de mi vida a mis amigos o a mi pareja… me gusta resolverlos dentro de mí, y cuando estoy listo, entonces puedo comunicarlos al mundo. Así que si un día me notas callado o distante, es buena idea preguntarme primero antes de echar a andar tu imaginación y pensar en mil cosas que tienen que ver contigo… a veces simplemente estoy estresado o preocupado por otras cosas. Muchos hombres no sabemos que tú como mujer cuando te estrellas quieres hablar, comunicar, y desahogarte, entonces te voy a pedir algo… si yo no me doy cuenta de esto, dime tus necesidades y trataré de entender también. No asumas que voy a saber por default. La clave es saber que tiempo es de nosotros (juntos) y qué tiempo es de nosotros mismos (nuestro espacio personal). Cuando establecemos estos límites, ya no hay sorpresas.

10. Cada vez que me dices lo bien que estoy haciendo algo, me dan ganas de hacerlo aún más y mejor Esto va a ayudarte e conseguir lo que quieres de mí inteligentemente… ¿Te acuerdas de ese pequeño aspecto que mencioné sobre el reconocimiento? Me encanta. …y no es que mi autoestima necesite que me reconozcas cada cosa que hago, pero me gusta cuando lo haces porque me haces sentir ADMIRADO por ti y no hay mayor satisfacción para un hombre que eso… …sentir que la mujer que ama lo admira. Cada vez que reconoces que hice algo bien, me dan ganas de hacerlo más y mejor la siguiente vez… se vuelve parte de mi identidad, parte de quien soy, y me hace sentir propósito al hacer las cosas. No te voy a decir esto jamás… pero si utilizas bien esto, me tendrás como cachorrillo feliz a tu lado dispuesto a casi lo que quieras de mí… casi. (Tip ninja: En la sesión del Jueves te voy a enseñar cómo usar esto y las palabras mágicas para que un hombre no se pueda resistir a hacer lo que quieres).

11. Me encanta que cambies de look, que te vistas diferente de vez en cuando, y que provoques mi imaginación. Ok, ahora sí, guardé para le final el que más va a parar de pestañas a ciertas mujeres… (¿te acuerdas de la tía Juanita?) Pero en realidad es algo que vas a usar a tu favor. Recuerda, no luches contra la naturaleza de nuestro cerebro… mejor sé lista y úsala a tu favor!

Mis deseos son bastante simples en realidad… dame variedad, dame novedad, dame un reto, y me tendrás entretenido durante meses a la vez. Esto se lo debo a una sustancia llamada dopamina que enciende mi motivación como pocas cosas. Tú también tienes un poco de esto, pero no lo sientes igual que yo. La variedad le agrega emoción a mi vida, me da satisfacción. La realidad es que jamás voy a hacer algo sólo porque sí… ni tú tampoco. Todas las decisiones que tomamos y las cosas que hacemos son motivadas por hormonas en nuestra sangre… emociones. Conseguir que una persona, ya sea hombre o mujer, se mantenga enamorada de ti, sólo requiere de saber cómo activar estas hormonas… y aquí te estoy dando la llave de oro. Novedad, variedad, y reto. Eso me motiva, me mantiene enfocado tratando de conseguir eso que quiero, y eso que quiero puedes ser tú… si tú también lo quieres ser. Hey, sé que en nuestro mundo moderno y civilizado no puedo convertirme en macho alfa y tener 40 mujeres… pero un poco de variedad en la relación hace mucho por mi emoción y mi atracción… y realmente lo aprecio cuando lo haces. (Vamos a hablar más sobre todo esto en la sesión en vivo del Jueves… así que no faltes!)

No es difícil entendernos Bien, pues ahí tienes tan sólo algunas cosas que nos suceden en la cabeza a los hombres, que probablemente sean difíciles de entender o descifrar cuando eres una mujer tratando de llevar una relación emocionante con un hombre. Dale chance… no lo juzgues tanto. Mejor aprende cómo utilizar sus mecanismos masculinos a tu favor. Se la mujer inteligente, no la tía Juanita (la de los 7 divorcios). Tip ninja extra… recuerda esto: Si estás enamorada de un hombre, no es por decisión consciente tuya… sino que él está haciendo su trabajo para activar esos sentimientos en ti… Si él está enamorado de ti, no es porque él lo haya decidido hoy por la mañana cuando se levantó… es porque tú lo estás inspirando en él… y eso sigue estando en tus manos. Cuando tomamos responsabilidad y control de estos mecanismos, podemos crear la relación que queremos y amarnos hasta el fin de la historia. ¿Quieres aprender cómo hacer esto mucho mejor? ¡Asiste a nuestra sesión online para mujeres en la que te registraste! Hablamos pronto,

Enrique Delgadillo Creador de viveincreible.com y El Efecto Irresistible