Palabras del Embajador Claudio de la Puente, Exviceministro de Relaciones Exteriores
(Lima, 05 de mayo 2015)
Señora Ministra de RREE, Embajadora Ana María Sánchez,
Señores Congresistas de la Republica,
Señor Viceministro, Embajador Eduardo Martinetti,
Señores ex Cancilleres, señor Secretario General,
Señores Ex Viceministros y ex Secretarios Generales,
Señores Directores Generales y funcionarios diplomáticos,
Queridos colegas en situación de retiro,
Señores empleados administrativos y personal de Servicio,
Queridos alumnos de la ADP,
Señoras y señores:
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Deseo agradecer la presencia de todos ustedes en este acto que, más allá de su contenido formal que preserva una antigua y sana práctica de nuestro Ministerio, encierra un importante significado.
La
juramentación y reconocimiento del Viceministro como nuevo Jefe del Servicio Diplomático es un acto emblemático de la mayor importancia en nuestra vida institucional, una tradición que encarna la continuidad y la solidez de Torre Tagle.
En julio del año pasado, recibí el muy honroso encargo para asumir el Viceministerio de Relaciones Exteriores y la Jefatura del Servicio Diplomático. Debo por ello empezar agradeciendo el gesto de confianza que depositaron en mí el señor Presidente de la Republica y el entonces Canciller Gonzalo Gutiérrez, amigo y colega de tantos años, que se remontan a nuestra infancia. Ha sido un verdadero honor acompañarlo en estos largos meses de su muy exitosa gestión al frente de la Cancillería, reconocida de la manera más visible en el prolongado aplauso que colegas de todas las generaciones, es decir, los profesionales de la Diplomacia, le dieron al final de su notable mensaje de despedida hace solo unas semanas.
Hoy se encuentra al mando de nuestra institución la Canciller Ana María Sánchez, la primera mujer diplomática en ocupar tan alto cargo. Nos llena de satisfacción este hecho como también que los destinos de la Cancillería recaigan en una funcionaria de tan reconocida calidad y competencia. Como ya se lo he expresado, cuente usted, señora Canciller, con nuestro decidido apoyo para el éxito de su gestión,
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sentimiento que estoy seguro compartimos, sin excepción, todos los miembros de esta Casa.
Constituye un privilegio entregar la posta a un colega tan distinguido y con capacidades y cualidades ampliamente reconocidas, como es el Embajador Eduardo Martinetti. Se trata también, por feliz coincidencia, de un amigo de muchos años, desde que estudiamos en la Universidad Católica y más adelante en la Academia Diplomática. Al desearle los mayores éxitos en su gestión no puedo más que manifestar que la jefatura institucional difícilmente hubiera podido recaer en mejores manos.
Señoras y señores:
En los últimos meses se concretaron importantes logros en el desarrollo de la política exterior, como delineó el Embajador Gonzalo Gutiérrez hace unas semanas. Mencionó entre otros elementos, una renovada apuesta por la profundización de las relaciones vecinales y por la integración fronteriza con un contenido de desarrollo económico y social, en un marco más amplio de integración subregional y regional. Hemos privilegiado también la acción diplomática dirigida a fortalecer una inserción ventajosa del Perú en un mundo globalizado y competitivo, y sensible a los progresos de nuestra economía y al crecimiento de nuestro comercio exterior, pero consciente también de los desafíos que plantea el desarrollo social. Esta sólida proyección del Perú se traduce en
una nueva calidad de la relación con 3
importantes socios de diversas regiones. Y ello tiene su vez expresión tangible, por ejemplo, en los progresos hacia la concreción de un régimen de exención del visado en el área de Schengen, y el paso firme al cual avanza el Perú en su incorporación a la OCDE. La extraordinaria vitalidad y vigencia de la Alianza del Pacífico, iniciativa peruana, es bueno recordarlo, es
otra muestra palpable de este
proceso. Ha sido pues una experiencia muy gratificante haber acompañado y apoyado, desde el ámbito de mis responsabilidades, al Canciller Gutiérrez en el desarrollo de tan importantes procesos.
En el nivel Viceministerial, en estos meses me cupo participar en una serie mecanismos políticos con los Vicecancilleres de Ecuador, Colombia, Chile y Bolivia. En esta última reunión, avanzamos en la preparación del Primer Gabinete Binacional peruano-boliviano a efectuarse el próximo 23 de junio. Subrayo igualmente la importancia que tuvo la reunión del mecanismo de coordinación política con el Vicecanciller de Chile, encuentro en el cual abordamos la amplia agenda de cooperación e integración bilateral con la mirada puesta en los intereses del largo plazo, pero también en las preocupaciones inmediatas.
Hago un breve paréntesis para expresar mi satisfacción por la reciente superación del lamentable incidente surgido en la relación con Chile. Este feliz resultado deja una vez más en evidencia la importancia del manejo
serio y responsable y también paciente, de la diplomacia
profesional en los asuntos más sensibles que nos impone la agenda exterior. 4
La culminación del proceso de la Haya, que inauguró una nueva etapa en las relaciones con Chile y cuyo primer aniversario conmemoramos en enero pasado, constituye acaso el logro diplomático y jurídico más relevante del Perú en las últimas décadas, e ilustra la importancia de construir políticas de Estado en los temas que atañen a los intereses más sensibles para el país. En el largo derrotero de ese histórico proceso, que se prolongó durante tres gobiernos consecutivos,
se
mantuvo como una constante la paciente labor profesional de Torre Tagle, encarnada en un grupo notable de funcionarios, juristas y técnicos liderados por el Embajador Allan Wagner, quienes tienen bien ganado el reconocimiento de la Nación.
Suscribo asimismo los comentarios formulados por el ex Canciller Gutiérrez sobre la necesidad de concluir el proceso de adaptación normativa que nos permita cerrar en todos sus alcances los compromisos de Estado asumidos por el Perú ante la Comunidad Internacional en el proceso seguido ante la Corte Internacional de justicia de La Haya.
Cerrado este paréntesis, y siempre en el ámbito vecinal, dejo expedita una nueva reunión - que debía realizarse en estos días - de consultas políticas y de la Comisión Viceministerial de Integración Fronteriza con Brasil, socio estratégico cuya relación con el Perú tiene aún un enorme potencial a ser debidamente desarrollado. Quedaron por realizarse, asimismo, similares encuentros con los Viceministros de Argentina, 5
Paraguay y Uruguay, que seguramente serán reprogramados en un futuro cercano. Y con Centroamérica y el Caribe, me fue grato recibir la visita de los vicecancilleres de República Dominicana y Costa Rica en reuniones de consultas políticas impulsando nuevas actividades de cooperación con dichos países. Asimismo, en meses pasados y después de casi tres décadas, se restableció nuestra Embajada residente en Trinidad y Tobago, en un esfuerzo por afirmar nuestra presencia diplomática en el Caribe.
De otro lado, avanzamos en una relación sin precedentes con los Estados unidos y dejamos muy avanzada la negociación de un nuevo acuerdo de cooperación en seguridad y Defensa, que supere el actualmente vigente que data de 1952. Del mismo modo constatamos con especial satisfacción la extraordinaria dinámica y la intensidad y amplitud de los vínculos alcanzados en las relaciones con México y Canadá, socios tan importantes para el Perú.
En las relaciones con Europa, en noviembre pasado se realizó la V Reunión del Mecanismo de Consultas Bilaterales entre el Perú y la Unión Europea, constatando la positiva evolución de una renovada relación asociativa con la Europa comunitaria, la amplitud del diálogo y el espectro cada vez mayor de nuestros intereses convergentes. Del mismo modo, en octubre pasado participe en Moscú en la VIII Reunión del Mecanismo de Consultas Políticas con Rusia a nivel de Vicecancilleres, encuentro en el que avanzamos en la proyección futura de una nueva relación comercial con ese importante país
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euroasiático y preparamos la primera visita oficial de un Jefe de Estado peruano a Rusia, concretada en el mes de noviembre. En enero pasado debí representar al Canciller en Beijing, en la I Reunión Ministerial del Foro CELAC – China, dirigida a profundizar la cooperación entre nuestra región y dicho país, como complemento de la relación de asociación estratégica integral desarrollada con tan importante socio asiático. Del mismo modo, en una de las últimas actividades como Vicecanciller, me correspondió presidir con el Viceministro de Comercio chino, la Comisión Mixta de cooperación con dicho país, en preparación de la próxima visita al Perú del Primer Ministro Li.
En las últimas semanas me fue igualmente grato recibir la visita de los Viceministros de Polonia, Portugal, y Georgia y una delegación de muy alto nivel de la República de Corea, que concluyó la preparación de la tan exitosa visita de la Presidenta Park recientemente realizada a nuestro país.
Con Australia las relaciones y los intereses convergentes alcanzan hoy niveles sin precedentes. Me limitaré a mencionar que, desde que Australia reabrió su Embajada residente en Lima en el 2010, son más de noventa las empresas australianas que tienen presencia en el Perú mientras que las inversiones en minería superan los 5 mil millones de dólares. Queda en la agenda del nuevo vicecanciller la postergada reunión del mecanismo de consultas que estaba prevista a realizarse a mediados de este mes.
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La gestión de la Cancillería en los últimos meses ha tenido también un espacio para las relaciones con los países de Africa. Cabe destacar que en el 2014 inició su gestión el primer representante peruano en Ghana y hace pocas semanas recibimos la primera visita oficial de un representante de dicho país. Asimismo, recibimos la visita de la Directora General de las Américas de la Cancillería de Sudáfrica, país con el que queda igualmente por concretarse la programada reunión de consultas políticas a nivel de Vicecancilleres.
Nuestras nuevas embajadas en el golfo pérsico vienen trabajando para proyectar más dinámicamente al Perú en esa región de tantas oportunidades. Recientemente el Vicecanciller, como embajador en Arabia Saudita, efectuó una reunión de coordinación con todos nuestros jefes de misión para potenciar las labores de nuestras representaciones proyección
en
y el
seguramente mundo
árabe,
durante en
su
general,
gestión se
nuestra
fortalecerá
notoriamente.
Durante mi gestión como viceministro participe igualmente en el Grupo de Alto Nivel de la Alianza del Pacifico, pudiendo confirmar los significativos avances que ha registrado en solo 4 años de existencia, pero también las extraordinarias perspectivas que aguardan aún a la que ha sido la más audaz y exitosa iniciativa de integración regional. Estos encuentros afirman mi convicción de que la Alianza, que nació como un espacio regional de integración profunda, puede adquirir una nueva dimensión y desempeñar un papel gravitante como mecanismo articulador de una nueva relación transpacífica. Seamos realistas pero 8
no por ello menos ambiciosos en nuestras metas y dotemos a la Presidencia peruana de la Alianza, a iniciarse en julio próximo, de una agenda que le dé un impulso renovado a esta formidable iniciativa de integración.
En estos meses se ha venido impulsando el fortalecimiento de la presencia y la participación del Perú en los foros y organismos internacionales, debiendo destacar las contribuciones sustantivas al debate en curso, en las Naciones Unidas, que habrá de delinear el nuevo marco de la cooperación internacional a través de la agenda post 2015, ajustándola realistamente a las necesidades de desarrollo del país. En el ámbito hemisférico, quisiera destacar el compromiso del Perú con la cooperación y el desarrollo de una nueva calidad en las relaciones interamericanas, que se traduce en el respaldo recibido de los países del hemisferio para que el Perú sea sede de la próxima cumbre de las Américas en el año 2018.
De otro lado, no puedo obviar la tan exitosa organización de la COP 20 en diciembre último. Como Representante Titular de la Cancillería ante el Grupo Multisectorial preparatorio, pude testimoniar el extraordinario trabajo del equipo diplomático que contribuyó de manera decisiva a la impecable organización de tan desafiante mega evento y la exitosa conducción de las complejas negociaciones, que permiten avizorar con mayor optimismo la posibilidad de un acuerdo en la próxima reunión a celebrarse en Paris. Estamos aún a tiempo de reconocer,
a
través
de
las
distinciones
institucionales
que
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corresponda, el extraordinario trabajo de este conjunto de funcionarios y servidores que prestigió una vez más al país.
En el ámbito de la gestión consular, debo destacar los avances registrados en los distintos proyectos del Plan de la modernización a través del Sistema Integrado de Gestión Consular que constituye un verdadero salto cualitativo en la calidad y velocidad de los servicios que brindan nuestros consulados; el Portal WEB único consular; la modernización del parque informático de la red consular; la inauguración de nuevos locales en Madrid, Buenos Aires y próximamente en Barcelona y el fortalecimiento de la gestión migratoria. Del mismo modo, es destacable el avance en los últimos meses en los procesos para la expedición de los pasaportes biométricos, contrapartida indispensable para la oportuna entrada en vigor de la exención del visado en la zona Schengen.
No puedo dejar de mencionar y reconocer los esfuerzos realizados en las labores de planeamiento estratégico como nueva metodología de trabajo y la incansable labor de la Dirección General de Estudios para la definición de los planes estratégicos de política exterior y su alineamiento a la política general del estado.
Señoras y señores:
Los éxitos y los logros institucionales no son el resultado del trabajo individual sino que es una obra colectiva. Quisiera por ello agradecer 10
la contribución de los Directores Generales y del conjunto de funcionarios que, en distintos niveles, me han acompañado en estos meses de gestión al frente del Viceministerio y en las actividades antes reseñadas.
Quisiera agradecer de manera muy especial, a los distinguidos colegas que trabajaron en mi gabinete, al Ministro Consejero Rodolfo Coronado, a quien tuve la fortuna de conocer muchos años atrás, cuando aún no se decidía a postular a la Academia Diplomática, desde entonces he seguido su carrera ascendente marcada por la excelencia profesional y la mayor lealtad institucional. A él y a los jóvenes y brillantes colegas diplomáticos que me han acompañado de manera directa, mi mayor gratitud, como también al equipo de eficientes secretarias, personal de servicio y choferes, – cuya situación de ingresos merece una justa y cuidadosa revisión – mi reconocimiento más sincero por facilitar mi labor y brindarme el concurso de sus servicios con la mayor lealtad y eficiencia.
Agradezco igualmente a nuestros distinguidos colegas en situación de retiro, quienes merecen todo nuestro respeto y consideración, a la Asociación de Funcionarios Diplomáticos en Retiro, que preside la Embajadora Nita Gamio de Barrenechea, como también el contacto personal con muchos colegas retirados, pero no por ello ausentes, quienes siempre me brindaron una palabra amiga, una voz de aliento y el mejor consejo que proviene del valor insustituible de la experiencia.
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Compartimos la convicción de que es imprescindible continuar fortaleciendo la institucionalidad del Servicio Diplomático, en la búsqueda de un equilibrio virtuoso entre la experiencia y aportes de las generaciones mayores con la aproximación renovada que, sobre esas bases, pueden construir los diplomáticos más jóvenes. Por ello, renuevo una vez más mi confianza en el futuro de nuestra institución en la seguridad de que los jóvenes que siguen y que asumirán nuestras responsabilidades estarán a la altura de los nuevos desafíos de nuestra política exterior.
En este contexto, constituye un verdadero privilegio institucional que el Embajador Allan Wagner, paradigma de la excelencia y de profundo compromiso con nuestra institución, haya asumido recientemente la Dirección de la Academia Diplomática. Al lado de una formación de la más alta calidad y exigencia académica, confiamos en que se sabrá inculcar en las nuevas generaciones la vocación de servicio al país y los valores fundamentales para el desempeño de las futuras responsabilidades como representantes del Perú en el exterior.
En este mismo marco, aguardamos con expectativa la aprobación del proyecto de DS de modernización que, bajo el liderazgo del ex Canciller Gutiérrez, dejamos a consideración de la señora canciller. Desde luego, todo trabajo puede ser objeto de revisión y afinamiento y, en esa perspectiva, estoy seguro que con el renovado impulso que dará la Alta Dirección a este proyecto, quedarán consagrados sus alcances más importantes como la especialización, la mejora en la calidad de los servicios que brinda la Cancillería en el exterior, la 12
utilización de tecnologías modernas, nuevas y mejores prácticas de manejo presupuestal, un óptimo manejo de nuestros valiosos recursos humanos, y modificaciones reglamentarias que le otorguen mayor racionalidad y eficiencia al proceso de promociones, entre otros aspectos. Este proyecto de modernización tiene como contrapartida la impostergable nivelación de los haberes
de los funcionarios
diplomáticos, que es de toda justicia, y para cuyo fin disponemos ya de un proyecto final acordado en todos sus detalles con el Ministerio de Economía y Finanzas. Al agradecer la extraordinario labor de los colegas que trabajaron denodadamente en la elaboración de estos dispositivos, confiamos, señora Canciller, que tendrá usted la satisfacción de lograr su próxima aprobación para beneficio del Servicio Diplomático.
Para concluir, quisiera mencionar que en el ejercicio de las más altas responsabilidades, somos aves de paso, y debemos tener presente que esta antigua y tan valiosa institución de la que formamos parte se construye y se renueva día a día con el trabajo y esfuerzo cotidiano, con nuestros actos y nuestras omisiones, con nuestros aciertos y con las lecciones aprendidas. No olvidemos finalmente que nuestros colegas y el personal administrativo y de servicios del Ministerio, además de funcionarios y servidores públicos que se deben al Estado y que deben ser celosos en el cumplimiento del deber, son también personas que tienen derechos y que merecen todo nuestro respeto, nuestra lealtad y nuestra consideración. Por ello, y me dirijo en especial a los más jóvenes, tengamos siempre presente estos valores y el alto honor que representa nuestra pertenencia a esta Casa, Torre 13
Tagle, institución tutelar de los más altos intereses del Estado y de la Nación.
Muchas gracias.
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