Conferencia Nacional 2013

MAESTROS, SOCIEDAD Y ESTADO Bases para un Acuerdo Nacional por el Maestro Peruano

I. Introducción Foro Educativo convoca a los maestros, la sociedad y al Estado a un proceso participativo para construir en forma consensuada una propuesta de Bases para un Acuerdo Nacional por el Maestro Peruano. Un compromiso por y con los maestros Hoy requerimos refundar la relación entre Magisterio, Sociedad y Estado, identificar consensos y encontrar alternativas de solución a la compleja y delicada situación por la que atraviesa el magisterio nacional y, al mismo tiempo, establecer claros puntos de conexión con la ruta que plantea el Proyecto Educativo Nacional (PEN) cuando se refiere a: “Maestros bien preparados que ejercen profesionalmente la docencia”. En el Perú, la distancia entre reforma educativa y magisterio es de larga data. Hoy tenemos el reto de acortar esa distancia. No es tarea fácil ni será asunto de un día. No cabe duda que para lograr cambios en la educación es fundamental “…asegurar la igualdad de oportunidades y resultados educativos de calidad para todos los peruanos” (PEN); es decir, el pleno ejercicio del derecho a la educación, lo que requiere la participación activa y comprometida de los maestros. Se trata de un tema de vital importancia, presente en el año 2012 con particular fuerza. El maestro estuvo y está en el centro de la coyuntura y está también en el meollo de la agenda de mediano y largo plazo en educación. Convocamos a discutir esta agenda. Son tiempos de forjar convergencias, superar desencuentros y propiciar acercamiento y transparencia entre maestros, sociedad y Estado, con miras a lograr compromisos y cambio en todos ellos. Sólo así tendrán sentido y

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legitimidad las transformaciones que se puedan impulsar en la perspectiva del PEN. Las exigencias de un abordaje multidimensional de la problemática docente. Estamos ante un tema complejo que debemos asumir en un contexto cambiante en el que la educación debe ser repensada y reinventada desde sus mismas bases, recogiendo el debate nacional e internacional. Ello supone asumir cinco dimensiones complejas: a) Una mirada integral y sistémica del problema docente. El desarrollo docente involucra un conjunto de aspectos y dimensiones que van desde la formación inicial y en servicio, hasta la carrera magisterial, los estímulos y reconocimientos y las condiciones de vida y trabajo. b) Docentes con capacidades pertinentes para responder a nuestra diversidad biológica, ecológica y cultural. Esto demanda no sólo una renovación de los procesos pedagógicos, sino una discusión epistemológica de los enfoques de enseñanza y aprendizaje. c) Docentes para una sociedad educadora. Hoy los escenarios de aprendizaje son mucho más diversos, la escuela ha sido desbordada por otros agentes educativos. Los niños, niñas, jóvenes y adultos aprenden en otros espacios y es preciso pensar no solo en docentes para un buen desempeño en aula, sino en maestros capaces de construir una escuela de calidad y a la vez ir más allá de ella. d) Concepciones que renueven los fundamentos científicos de la pedagogía y sus técnicas, para superar prácticas docentes obsoletas. e) La definición de las políticas con la participación de los docentes, lo cual exige la redefinición de su rol en la transformación educativa. Varias de esas dimensiones pueden ser superadas, como el de la formación docente y el de las condiciones de vida y trabajo. En relación a otras dimensiones, existen preguntas abiertas y debate en un contexto que trasunta las fronteras nacionales, tales como el rol de los docentes y su relación con los otros actores y campos de la sociedad. Todas estas dimensiones deben ser vistas en conjunto y en mutua interrelación, planteando propuestas que sean producto de un indispensable consenso.

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El punto de partida. Hoy vivimos un momento crítico de la profesión docente, que guarda correspondencia con el abandono histórico de la educación nacional y con un crecimiento económico que beneficia de manera desigual a la población en general, ahondando las brechas sociales y la segmentación de las oportunidades educativas y de aprendizaje. Hay que remontar el declive de la profesión docente a la vez que fortalecer la educación pública de calidad. Las distancias entre maestros y Estado y entre maestros y sociedad son significativas; hoy el maestro se siente amenazado en lugar de revalorado. La debilidad ética de la institucionalidad pública suscita la desconfianza de los maestros en el aparato público y el sistema de evaluación. De otro lado, el maestro ha sido objeto de desprestigio ante la opinión pública, señalándolo como único responsable del fracaso escolar y de su mala formación -siendo esta responsabilidad del Estado- y haciéndolo objeto de ofensas y expresiones vejatorias de su dignidad. De otra parte, no podemos ignorar los conflictos y divisiones del gremio docente y la existencia de una prédica violentista que tiene eco en algunos sectores de maestros. Configuran este complejo marco también las fuerzas políticas conservadoras que se resisten al cambio, así como los intereses económicos que pugnan por la privatización de la educación. Esta última muchas veces es sinónimo de baja calidad y explotación de maestros contratados. Foro Educativo parte por reconocer el esfuerzo denodado de numerosos maestras y maestros por sacar adelante a sus alumnos desafiando la precariedad de las condiciones de vida y de trabajo; muchos de ellos, además, participan en la construcción de los proyectos educativos locales y regionales. Por ello, las voces y experiencias de estos maestros tendrán un lugar privilegiado en esta conferencia. Este sector de maestros comprometidos e innovadores constituye un punto de soporte para emprender la transformación educativa que el país requiere y que está delineada en el Proyecto Educativo Nacional, haciendo frente a docentes que no asumen reto alguno ni están dispuestos a mejorar su desempeño; no son muchos, pero son y afectan fuertemente la imagen pública del maestro peruano. El esfuerzo que haga el Estado por la transformación educativa y la mejora sustantiva de la profesión docente requiere, como contraparte, el esfuerzo de los maestros que, mejor remunerados, reconocidos y formados, se comprometan a la buena docencia y apuesten por un país que crezca con ruta propia y capacidad de innovación. Asimismo, la transformación necesita una sociedad que actúe como aliada y responsable de los aprendizajes más allá de la escuela. Tenemos la

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oportunidad dorada de un país con crecimiento económico sostenido que debemos aprovechar para la transformación de la educación con calidad y equidad.

El reto de dialogar y concertar una propuesta. Debemos buscar acuerdos sobre lo que requerimos para, en primer lugar, poner al día a la profesión docente en relación al debate internacional y, en segundo lugar, construir propuestas de fortalecimiento de la profesión docente, clave en nuestro país. Estamos convencidos sobre la urgencia de avanzar en el proceso de reconocimiento del valor de la profesión docente. Ello implica remontar el serio deterioro histórico que afecta las condiciones de formación, salarios, condiciones de vida y ejercicio profesional de las maestras y maestros. A la vez, debemos reinventar y renovar el ejercicio de la carrera a fin de garantizar el pleno derecho a la educación de todos los estudiantes, respondiendo con pertinencia y equidad a un contexto de compleja diversidad, desigualdad de oportunidades y ampliación y diversificación de los espacios de aprendizaje. Queremos congregar voces diversas. Por ello convocamos a un amplio diálogo sobre las demandas y necesidades actuales del desarrollo docente y sobre el rol de los maestros en la transformación educativa que el país requiere, la que debe garantizar el derecho a la educación de todas las personas en el Perú. Al mismo tiempo, es preciso forjar una visión prospectiva sobre el maestro peruano que involucre a los distintos actores del Estado y la sociedad, de modo que, en conjunto y desde ahora, se concrete una apuesta nacional decidida por el maestro peruano. Proponemos ajustar el rumbo de las iniciativas de cambio, poniendo por delante la profesión docente. Asumimos el reto del debate y llamamos a participar con solvencia, rigurosidad y honestidad en este diálogo. Está en juego, creemos, la forja de un pacto social con los maestros y por los maestros que otorgue legitimidad al cambio propuesto y comprometa al conjunto de la sociedad en su realización. Queremos un sistema educativo que no sea lejano a las escuelas y maestros sino amigo de sus sueños y esfuerzos. Es claro y urgente hoy que hacer realidad la transformación profunda de la educación supone colocar a los maestros delante de las prioridades de política.

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II. Objetivo: Construir en forma consensuada una propuesta de Bases para un Acuerdo Nacional por el Maestro Peruano.

III. Proceso Debido a la complejidad y trascendencia del tema, la Conferencia Maestros, Sociedad y Estado se desarrollará en dos partes, que serán momentos de un mismo proceso e involucrarán, desde el inicio hasta el final, la discusión y el debate, en los que será estimulada y bienvenida la participación de grupos diversos en las distintas regiones.

PARTE 1. (Febrero 14, 15 y16, 2013) Este primer evento presentará las visiones de expertos nacionales e internacionales sobre el tema y sus diferentes aristas y dimensiones. El objetivo es abrir la agenda de discusión y colocar elementos de reflexión internacional y nacional, a la vez que aportes de la discusión más amplia sobre educación y desarrollo. La Parte 1 está organizada en dos paneles: a) Un panel latinoamericano que muestre la situación actual de la docencia en la región y la manera en que los países han diseñado o han puesto en marcha políticas y medidas para atender los asuntos relacionados con el desarrollo profesional de los docentes y para forjar acuerdos o pactos con y por ellos. b) Un panel nacional que proporcione un marco general del país, sus paradojas y desigualdades, una reflexión sobre el contexto más amplio del desarrollo, sus enfoques y prácticas, para ubicar en él el tema de la educación y el magisterio que requieren el Perú. El objetivo es articular el tema magisterial con el proyecto de país y con los consensos logrados hasta el momento, el Acuerdo Nacional y el Proyecto Educativo Nacional. Los paneles serán seguidos por el trabajo en grupos que presentarán conclusiones y propuestas de procesos de diálogo en distintos espacios y modalidades para continuar el debate a lo largo de los siguientes meses, hasta la segunda parte.

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PARTE 2. (Primera semana de agosto) En este evento se abordarán las demandas y necesidades del desarrollo docente, las cuales abarcan aspectos como formación, evaluación, salarios y condiciones de vida, rol docente, etc. La Parte 2 finalizará con la elaboración de un documento de consenso sobre bases para un acuerdo nacional por el maestro peruano. Para ello, el conjunto del proceso, Parte 1 y Parte 2, será sustentado en el diálogo y el trabajo de grupos. Este segundo evento se organiza en cuatro paneles, en los que estarán presentes representantes del Estado, de los maestros y de la sociedad. Cada panel tendrá dos relatores o sistematizadores que registren las exposiciones y discusiones. A su vez, cada grupo de trabajo contará con un responsableconductor y un relator. Las relatorías de paneles y grupos de trabajo alimentarán a un equipo no mayor de 3 personas que preparan los insumos para la elaboración de las Bases para el Acuerdo Nacional por el Maestro Peruano.

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