...los sonidos, los colores, los olores. La quietud, el silencio y el misterio. La luz suave, acogedora. El cielo y la tierra. El juego virtuoso de la sombra y el agua. Las olas, las hierbas y las flores. La intimidad de un paisaje de mar y montaña. El ciclo inmutable de las estaciones. Intento relacionar cada instante con la belleza y vivir con intensidad cada momento. Son las pequeñas cosas las que me llenan de felicidad y me acercan a la esencialidad ya una vida en plenitud. Todo este entorno debe hacer posible una cocina de la estacionalidad y del paisaje del Empordà que me acoge; sobria pero esencial; austera y humilde pero intuitiva, íntima y auténtica. Una cocina que debe conseguir ser el reflejo de nuestra forma de ser. Desde aquí pero con la capacidad de abrirse al mundo, con la aspiración de alcanzar lo universal a través del espacio de lo tan íntimo. El esplendor de la naturaleza. La plenitud de la vida Fina Puigdevall
con el contraste de mermeladas hechas por nosotros;
postres
quesos catalanes, afinados al punto
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de Fonteta;
mató helado, albahaca
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herbáceo y cítrico
limón, tomillo, romero
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un postre goloso;
fresas, nata, menta, azúcar
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con pera;
tarta tatin, nata semi montada, piel de limón
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de hojaldre, cabello de ángel y piñones;
bisbalenc, bailey’s, café
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con diferentes texturas;
chocolate, algaborra, piñón
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con una fruta del tiempo; asesoramiento gastronómico a cargo de Fina Puigdevall chef del restaurante Les Cols de Olot, * * Michelin
albaricoque, vainilla, naranja
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de los cerezos del Mas;
cerezas anís, menta 10% IVA incluido
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