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CULTURA
I
REVELACIONES DE BENEDICTO XVI
Martes 23 de noviembre de 2010
LA FE Y LAS VISIONES s QUINTA VISITA AL PAIS
MARTES VISUALES
El Papa dimitiría si no fuera capaz de ejercer su cargo
ALICIA
DE ARTEAGA
Remates y jinetes de a pie por el Mamba
Lo admite en Luz del Mundo, el libro que se publica hoy y que detalla aspectos privados ELISABETTA PIQUE CORRESPONSAL EN ITALIA ROMA.– Nada de rígido, frío e intransigente “pastor alemán”, sino muy humano, humilde, con debilidades y errores. Es el retrato que emerge de Benedicto XVI, según los anticipos del libro-entrevista Luz del mundo, del periodista alemán Peter Seewald, que saldrá hoy a la venta y que está agotado en las librerías italianas después de la repercusión por la apertura, limitada a casos excepcionales, del Santo Padre al preservativo. En la obra, el Papa sorprende por ese cambio de postura y por muchas otras revelaciones. Con palabras simples y directas, por ejemplo, ante una pregunta del autor, asegura que renunciaría al trono de Pedro si sintiera que no puede ejercer el cargo. “Si un Papa se da cuenta con claridad de que ya no es física, psicológica o espiritualmente capaz de ejercer el cargo que se le ha confiado, entonces tiene el derecho y, en algunas circunstancias, también el deber de dimitir”, sentencia Benedicto XVI. De hecho, el canon 332 del derecho canónico permite la dimisión de un papa, aunque habría que remontarse hasta el siglo XV para encontrar a algún pontífice que lo haya hecho. Se sabe que Juan Pablo II, siguiendo el ejemplo de Pablo VI, había escrito una carta de renuncia a su cargo en caso de no tener más las facultades para continuar en él. En Luz del mundo el Papa también asegura que jamás pensó en renunciar a principios de año, en plena tormenta por el escándalo por pedofilia en el clero. “Cuando el peligro es grande, uno no debe huir, debe soportar. Ahora no es seguramente un tiempo para dimitir”, asegura. “Uno puede dimitir en un momento de paz o simplemente cuando no puede seguir más adelante”, agrega el Papa, de 83 años muy bien llevados, que en otro pasaje reconoce: “Empiezo a notar que las fuerzas comienzan a fallarme”. Seewald, autor de otros dos libros-entrevista con el entonces
cardenal Joseph Ratzinger, estuvo con el Pontífice en la residencia de verano de Castelgandolfo del 26 al 31 de julio. El Papa se mostró totalmente abierto a contestar todo tipo de preguntas. Y con sus respuestas contradijo esa imagen de inflexible guardián de la ortodoxia católica que pesa sobre sus espaldas. Benedicto XVI cuenta que su elección para el trono de Pedro, el 18 de abril de 2005, fue un golpe durísimo para él y sus sueños dorados de jubilación. “El hecho de encontrarme de repente ante esta tarea inmensa fue para mí, como todos saben, un auténtico shock. La responsabilidad, de hecho, es enorme –dice–. En efecto, pensé en una guillotina: ahí, ahora cae y te golpea. Estaba segurísimo de que este encargo no había sido destinado a mí y que Dios, después de tantos años fatigosos, me concedería un poco de paz y de tranquilidad.” A lo largo del libro-entrevista también reconoce que jamás le hubiera levantado la excomunión al obispo lefebvriano Richard Williamson (algo que significó una de las peores tormentas de su pontificado, en enero de 2009) si hubiera sabido que era un negador del Holocausto. “No, se debería haber separado ante todo su caso de los demás”, lamenta. A la pregunta de si el Papa es verdaderamente “infalible” o un soberano absoluto, contesta que se trata de algo que muy pocas veces entra en juego, como en el caso de las definiciones dogmáticas: “Obviamente, el Papa puede tener opiniones personales equivocadas [...] Ser papa no significa mostrarse como un soberano lleno de gloria, sino más bien dar testimonio a Aquél que fue crucificado”. Del libro emergen muchos otros detalles sobre el lado más privado de Benedicto XVI. Como, por ejemplo, que no tiene billetera ni cuenta corriente. Que siempre viste sotana y que jamás se pone un suéter. Que le gusta de vez en cuando ver la tele, sobre todo los noticieros, y algún DVD de películas antiguas. Y que le encanta Don Camilo.
i todo sale como está previsto, les tocará a Mauricio Macri y a Hernán Lombardi cortar la cinta inaugural de la demorada ampliación del Mamba en el viejo edificio ladrillero que fue de Piccardo, antes de que finalice el año del Bicentenario. La fachada restaurada con rigor, un nuevo e imponente hall de entrada y dos salas de 400 metros quedarán habilitados en esta primera etapa de una ampliación que pone en valor las colecciones existentes del Museo de Arte Moderno que Buenos Aires merece. En la primera sala de la nueva era será colgada la colección Ignacio Pirovano, piedra angular del patrimonio, en diálogo con piezas clave del acervo. En la segunda sala, está prevista una exposición consagrada al arte contemporáneo multisoporte y multimedio con el título de “Narrativas inciertas”, con el aporte de la curadora Valería González. Mientras tanto, y para sumar fondos para la ampliación eterna, esta noche los Amigos del Mamba tendrán su velada anual con remate a cargo de Nahuel Roldán, previo desfile de guapos argentinos ataviados ad hoc, que llevarán de la brida de caballos “vestidos” con mantas que reproducen las obras por rematar. Entre los jinetes “de a pie”, se cuentan Cristiano Rattazzi, que es presidente de los Amigos, Oscar Andreani, Giorgio Alliata de Montereale, Ricardo Frers, Jean Nelson, Alejandro Corres, Gino Bogani, Germán Carvajal, Alberto Sendrós, Diego Alexandre y los polistas Alejandro Novillo Astrada y Alvaro Pieres. El escenario no puede ser más adecuado porque la velada de “arte ecuestre”, muy a tono con la temporada de polo, tendrá como marco el Hípico Argentino de Palermo.
S
GRACIELA CALABRESE
El mariólogo francés habló ante una multitud congregada en el teatro Gran Rex
Laurentin habló de las apariciones de la Virgen “Es un fenómeno sensible, un signo material”, resumió ayer SILVINA PREMAT LA NACION “La aparición es un fenómeno sensible, un signo material. Es incierta y, por eso, la Iglesia nunca tiene certeza sobre el hecho de que sea realmente la Virgen la que está allí.” Con tono claro, en un francés pausado, monseñor René Laurentin expuso ayer ante una multitud reunida en el teatro Gran Rex su vasta experiencia sobre las apariciones atribuidas a la Virgen María en distintos lugares del mundo. Teólogo, historiador y mariólogo, Laurentin tiene 93 años. Ayer confesó que está ciego y que quizá sea ésta su última visita a nuestro país. Llegó el sábado, estuvo en San Nicolás con el obispo Héctor Cardelli, dará conferencias públicas en Salta, en Tucumán y en Jujuy, y, desde el viernes, estará en venta su nuevo libro ¿Se aparece la Virgen en Salta?, de la editorial Bonum. Presentado por el padre Eduardo
Pérez del Lago, ex prosecretario de la Conferencia Episcopal Argentina, Laurentin explicó que “hay muchos grados de aparición”. “Los videntes a veces ven a la Virgen delante de ellos o en su interior, con el corazón. La Virgen se les aparece, aunque puede no ser una imagen tan nítida. Hay muchas formas de aparición y de comunicación. Algunos escuchan palabras, pero no tienen visiones y a otros es como si les dictaran los mensajes, un fenómeno bastante raro, pero no es escritura automática”, amplió. Esta es la quinta visita que hace al país para participar de actividades en torno de lo que se conoce como la Virgen del Cerro, en Salta; una advocación –difundida como Inmaculada Madre del Divino Corazón Eucarístico de Jesús– originada a partir de los mensajes que dice recibir de la Virgen una señora de esa ciudad, María Livia Galliano de Obeid. “El obispo de Salta autoriza las apariciones, pero no ve a la viden-
te, se mantiene distante. No autoriza la difusión de los mensajes, pero sí que se celebre una misa una vez al año durante la cual María Livia no hace imposición de las manos.” En un diálogo con LA NACION en 2008, Laurentin había afirmado que es muy difícil diferenciar la autenticidad de las manifestaciones de los supuestos videntes. “La frontera es muy indecisa, pero siempre es un don de Dios”, dijo el experto. Cuando comenzó a investigar los fenómenos vinculados con supuestas apariciones de la Virgen, se conocían unos tres centenares de ellas. Hasta el momento, tiene una lista de 2400 apariciones entre las que se cuenta las de Lourdes, la Medalla Milagrosa, Fátima y, quizá la más polémica, la de Medgugore en Yugoeslavia. Todos esos casos están incluidos en el Diccionario de apariciones, que publicó en 2007. Antes había escrito más de treinta volúmenes sobre La teología de Lourdes.
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Culto católico Santoral. Nuestra Señora de la Consolación. En Santiago del Estero se celebra su fiesta, en Sumampa. Esta imagen es la compañera de la Virgen de Luján con la que arribó al país en 1630. Liturgia. Se lee el libro del Apocalipsis (14, 14-19) y Evangelio de San Lucas (21, 5-9).
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