Las amenazas jaquean a un colegio

27 nov. 2007 - de Maqroll el Gaviero, el bucanero, pirata o lo que sea que hizo grande al escritor colombiano. La presencia de su país natal, a pesar de que ...
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Cultura

Página 10/LA NACION

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Martes 27 de noviembre de 2007

Más de 35 llamadas anónimas en un mes: el gobierno porteño decidió no computar las faltas

Martes visuales

Las amenazas jaquean a un colegio

Los museos salen a comprar

Volvieron a ser evacuados los 3000 alumnos de la Escuela Normal N° 1 por falsas denuncias de bombas Por Nathalie Kantt De la Redacción de LA NACION “Ya está. Llegó la policía. Tenemos que evacuar.” Con sólo vislumbrar, desde su oficina, la llegada del agente policial, la rectora de la Escuela Normal Nº 1, Susana Pérez, supo qué hacer. Levantó el teléfono automáticamente y coordinó la salida de los alumnos que ayer, a las 16, cursaban en los cuatro niveles que funcionan en ese colegio. Y, mirando al subinspector, sentenció: “Necesito que sea rápido”. La rectora ya está acostumbrada: desde el 24 de octubre, la escuela, en avenida Córdoba y Riobamba, recibió más de 35 amenazas de bomba –a veces dos o tres en un mismo día–, según informó a LA NACION el subcomisario de la seccional 17a., Pedro Potocar. Este caso se suma al de la Escuela Superior de Comercio Carlos Pellegrini, que desde mediados de octubre y hasta hace diez días contabilizó más de 50 amenazas de bomba. “En vez de concentrarme en cuestiones educativas, estoy mirando a ver si viene el comisario. Hoy [por ayer], creo que todavía no hubo ninguna amenaza”, había dicho Pérez a LA NACION pocos minutos antes de que la policía diera el nuevo aviso de evacuación. Esa alerta dio lugar a movimientos que ya son habituales para las autoridades, docentes y los 3000 alumnos que estudian allí. Mientras Pérez caminaba por los largos pasillos coordinando la salida de los más pequeños, el subcomisario Potocar se aseguraba por handy de que las calles aledañas estuvieran cortadas al tránsito. Cansados de la nueva rutina, alumnos y padres cortaron ayer el tránsito sobre la avenida Córdoba y exigieron una solución. Además, el gobierno porteño resolvió no computar las faltas esta semana a los chicos del jardín y del primario y entregarles cuadernillos para que estudien en sus casas.

Cadena de mensajes Los alumnos del nivel inicial y de primaria salían por la salida de Paraguay. Allí, algunas madres aparecían buscando a sus hijos. “Nos organizamos por mensajes de texto. Armamos una cadena para avisarnos y se acerca la que puede. A veces, en un mismo día tenemos que salir dos veces del trabajo. No es fácil para nosotras. Y estamos preocupadas”, dijo a LA NACION Patricia Esper, madre de dos chicos de 5º y 6º grado. Corina Marchi, madre de dos niñas de 1º y de 7º grado, es esencial en esa cadena: en cada evacuación, avi-

Premios en educación

DYN

Alumnos y padres cortaron ayer la avenida Córdoba en protesta por las reiteradas amenazas y exigieron una solución

sa a una lista de padres por mensaje de texto y se encarga de cuidar a varios niños hasta que alguien llegue a buscarlos. “Vengo todos los días. Los chicos no están asustados, porque ya no creen que sea cierto, pero sí somatizan. No se pueden dormir y están estresados”, dijo Marchi. Es el caso de Maia, de 3er. grado, que tiene dolor de panza y que a veces le pide a la mamá no ir al colegio. “Al principio los más chicos se ponían a llorar. Hoy nos dejan guardar tranquilos nuestros útiles y después salimos”, agregó su hermana Lara, que esta en 5º. “El viernes pasado tenía a una [hija] en la plaza Rodríguez Peña y a la otra en el Ministerio de Educación de la Nación, a dos cuadras. Es increíble el nivel de locura que estamos viviendo y no sabemos hasta cuándo va a durar”, añadió Nancy Suane, su madre. Mientras los alumnos del secundario caminan hasta Paraguay, entre Riobamba y la avenida Callao, donde esperan poder ingresar nuevamente en el colegio, los más pequeños son llevados por las maestras hasta el Palacio Sarmiento. “La escuela, desde la lógica, es un lugar seguro. Pero las amenazas son rupturas del orden institucional y el colegio se siente impedido de cumplir con sus tareas. Los docentes están preocupados y los padres quie-

ren respuestas. Es algo muy grave”, admitió la rectora. En el colegio ya casi nadie cree que las llamadas sean efectuadas por los estudiantes, como muchos suponían al principio. “Alegar que son los chicos porque es tiempo de exámenes es muy ingenuo. En tal caso, ya nos habría pasado otra vez”, observó la rectora. Los profesores, en tanto, están cansados. “Antes tardábamos siete minutos en evacuar. Hoy, trece. La continuidad pedagógica está destruida. Evaluamos a los chicos en la calle, bajando las escaleras, bajo un árbol. Y después volvemos al curso como si nada”, dijo María Figueroa, profesora de historia del Liceo N° 4, que funciona en el mismo edificio. La docente Noemí Paradiso, de biología, agregó: “Los propios chicos nos corren para que les tomemos en la calle”. Según señaló Potocar, las llamadas llegan al 911. “Si vienen de un número fijo o de un celular, rastreamos por ese lado e investigamos a nombre de quién está la cuenta. Pero cuando las llamadas son hechas desde teléfonos públicos, no hay manera de saber de quién se trata”, dijo el subcomisario. Las investigaciones se realizan en los juzgados federales Nos. 5, 6 y 12, a cargo de los jueces Norberto Oyarbide, Rodolfo Canicoba Corral y Sergio Torres.

La grave pérdida de los hábitos de estudio Más que el miedo a la bomba, la seguidilla interminable de amenazas que obligan a evacuar todos los días la escuela provoca en los chicos la pérdida de la rutina escolar y de la capacidad de sostener el esfuerzo y la concentración necesarios para el aprendizaje. Así lo estimó ayer, en diálogo con LA NACION, la psicóloga y licenciada en letras Cecilia Contreras, especialista en temas de familia y con reconocida experiencia docente. “La continuidad de amenazas diluye los efectos de la intimidación y produce en los chicos una desensibilización sistemática”, dijo la licenciada Contreras, y explicó que la respuesta biológica y emocional se pierde, así, ante la exposición tan reiterada frente al mismo estímulo. “El pánico, el miedo, los riesgos de taquicardia se ven anestesiados ante la reiteración cotidiana de las amenazas”, precisó. Lo que sí resulta pernicioso, dijo la especialista, es que se afecta el valor de la escuela para disciplinar a los chicos en la rutina diaria del esfuerzo

y la concentración. “Los adolescentes tienen dificultades para mantener su atención mucho tiempo. Esto se educa, como la actividad física: cuando se quiebra el entrenamiento –en este caso, por la falta de clases–, todo ese esfuerzo se desmorona”, explicó Contreras. “Cuando se reanudan las clases, esa rutina y ese esquema de interacción entre el alumno y el profesor se encuentra muy averiado”, agregó. Así, el docente tiene que “recomponer una actitud interna de los chicos hacia el aprendizaje que se evaporó”. Además, la especialista advirtió sobre otro efecto: “La escuela es el lugar donde los chicos se contactan con sus pares, aprenden con los docentes, a quienes toman como modelo o antimodelo, y ése es el ámbito en el que desarrollan su identidad. Si la escuela no está, reemplazan esa realidad con las alternativas de la televisión y la computadora, que les ofrecen un mundo alejado de la realidad”.

La Feria del Libro de Guadalajara

García Márquez honró a Alvaro Mutis Continuación de la Pág. 1, Col. 2

EMILIANO LASALVIA

Filmus premia a Cucchetti

La escuela que enseña a pensar La Asociación de Bancos de la Argentina (ABA), que preside Mario Vicens, entregó ayer los premios del certamen dedicado a la educación, organizado por cuarto año consecutivo. Se recibieron 176 trabajos, sobre el tema “La escuela que enseña a pensar”, y la máxima distinción (15.000 pesos y la publicación de la obra) fue otorgada a la licenciada Patricia Mónica Cucchetti, de San Justo, autora de “El desafío de resolver problemas”. El segundo premio ($ 7000) correspondió a Claudio Jonas y Carlos Roberto Martínez, de Capital Federal, por la obra “La aventura de aprender a pensar”, y el tercero ($ 3000), a Graciela del Rosario Carotti de Strada, de la localidad santafecina de San Justo, por “Los chicos de la aceitera”. Hubo, además, menciones especiales a Silvana Barboni y Melina Porto, de La Plata; Macarena Bozac y Beatriz Quiroga, de Capital Federal, y Mariela Ester Babolené, de Luján de Cuyo (Mendoza). Todos los casos comprenden la publicación del trabajo. Entregaron los premios el ministro de Educación, Daniel Filmus, y los miembros del jurado: el secretario de Educación y futuro ministro, Juan Carlos Tedesco; la directora de Educación de la Universidad de San Andrés, Silvina Gvirtz, y la pedagoga Berta Braslavsky. La tarea de preselección estuvo a cargo de la Fundación Leer.

Mutis. Nada lerdo, con ese argumento como bandera, Volpi lo conminó a Gabo en el estrado que compartían. Por la noche, durante la fiesta que el Grupo Santillana ofreció a escritores, expositores y periodistas en uno de los salones del hotel Hilton, Volpi diría a LA NACION: “¡Es que ya basta! Tenía que decir algo. Fue breve, pero al menos habló”, sonrió con algo de pudor por la travesura. El propio Volpi y su compatriota y colega Ignacio Padilla fueron parte del homenaje de admiración que se tributó a Mutis. La sala Juan Rulfo de la Feria del Libro, guardada para los grandes acontecimientos, no alcanzó. Gente de pie dentro del salón; afuera, otros empujándose para, aunque sea, poner un oído o un ojo en la hendija que dejaban los guardias. La cuestión era ser parte del festejo.

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Fe de erratas

Ficción y realidad A dos voces, Volpi y Padilla leyeron un texto que escribieron “a cuatro manos” en el que se mezclan ficción y realidad en partes iguales e irreconocibles. “Y ahora que sé que nunca conoceré Guadalajara”, el nombre del relato. Hicieron emocionar a Mutis. Porque cuenta una historia que refiere a una parte de la obra creada por el homenajeado sobre la vida y la obra de Maqroll el Gaviero, el bucanero, pirata o lo que sea que hizo grande al escritor colombiano. La presencia de su país natal, a pesar de que vive en México desde la mitad de su vida, estuvo marcada por la ministra de Cultura de Colombia, Paula Moreno, y por Belisario Betancur, ex presidente de ese país. “No hubiéramos encontrado un mejor lugar para hacerle este homenaje porque ésta ha sido su casa”, dijo la ministra Moreno, que transmitió la satisfacción de su gobierno. Simpático, en el atril, el ex presidente Betancur dijo: “Como a todo político, me gustan los aplausos. Por eso, para que hoy me aplaudan, voy

Es una buena noticia saber que los museos presentan en sociedad el resultado del shopping de los últimos años. Al hacerlo, desactivan la profecía dramática lanzada por Robert Hughes, australiano, crítico de Time, cuando a fines de los Por Alicia años 80 vaticide Arteaga nó que los perdedores del boom del arte serían los museos. Tiene su lógica: pocos quieren cuadros que los harán millonarios de la noche a la mañana. ¿Cuánto puede valer hoy, por ejemplo, el divino Rembrandt que donó Vanderbilt al Metropolitan de Nueva York en 1920? Sin embargo, hay un atajo inesperado que ha cambiado la corriente y favorece el crecimiento del acervo de los museos: comprar arte contemporáneo. Obras de artistas vivos, que están a tiro de presupuestos magros, especialmente si son latinoamericanos. Es probable que la colección completa de las nuevas adquisiciones presentada el martes último en el MoMA cueste bastante menos que un solo Warhol, pero enriquece el patrimonio. Y el gesto tiene un poder legitimador absoluto. Para un argentino, entrar en las salas del MoMA tiene una cuota de emoción extra, porque la obra que abre la muestra es una tinta de León Ferrari; allí también están Kuitca, Xul Solar, Félix González Torres, Cildo Meireles, Horacio Cóppola, Leonilson... El museo está comprando y sabe hacia dónde va. El vienes próximo, el Malba presentará su colección de arte contemporáneo, donaciones y adquisiciones, celebrada por un valioso catálogo, con prólogo de Marcelo Pacheco y texto de la curadora Inés Katzenstein, bajo la advocación de “Líneas y contrapuntos de una colección en proceso”. Advierte Inés: “Primero conformar una plataforma de arte argentino sobre la cual comenzar a pensar en el arte de la región”. Prior y Pierri abren la selección, en la que conviven nombres, estéticas, técnicas y pertenencias muy diversas. El Malba también sabe adónde va. Completa este panorama la presentación que el viernes, a las 19, hará el Museo de Bellas Artes de “los nuevos ingresos” a la colección. La buena noticia de las compras viene precedida de una iniciativa feliz que implementó arteBA, con su programa de matching funds, para que los museos puedan comprar, activen la dinámica del mercado y promuevan la legitimación de lo nuevo.

AFP

Alvaro Mutis recibe el homenaje afectuoso de García Márquez

a leer un texto de García Márquez sobre Alvaro Mutis”. Se ganó genuinamente la ovación de la tribuna. Y leyó aquel texto con que Gabo celebró los 70 de su amigo. ¡Había que ver las risitas pícaras de Mutis y de Gabo que recordaban, como chicos, esas nunca olvidadas maldades juveniles! “Después de que se jubilara fue un milagro cómo escribió ocho libros en seis años. Para entender su obra, es suficiente revisar una de

sus páginas. Es un hombre vidente, que sabe que nunca encontraremos el paraíso perdido. Sin falsos pudores, con todo el corazón, cuánto lo admiramos, ¡carajo!”, había leído García Márquez aquella noche en el palacio presidencial. Otro amigo de Mutis se sumó al homenaje. El reconocido chelista mexicano Carlos Prieto, otro viejo compañero de andanzas del escritor, le ofreció dos movimientos de la Suite N° 3 en Do mayor de Bach.

La prioridad de la literatura ■ GUADALAJARA.– “El mundo entero vive una liquidación de la especie humana. No creo que haya una fórmula para salir.” Alvaro Mutis respondió con contundencia a la pregunta sobre la violencia en su Colombia natal, en un diálogo con periodistas previo al homenaje que le hizo la FIL. A su lado estaba Santiago Mutis, su hijo poeta. “Mi editor, mi hijo y el dueño de mi obra”, lo presentó el ganador del Premio Cervantes 2002. Al excusarse de hablar de la realidad política de México, país que adoptó como suyo desde hace más de 40 años, buscó siempre hablar de literatura. Y se solazó con su personaje Maqroll, el Gaviero, a quien trató como a un ser humano real, tangible e impredecible.

El clima era ideal. La formalidad retomada hacía presagiar el fin del acto. Habían pasado casi dos horas; el tiempo había volado. Alvaro Castaño, director de la HJCK, le entregó a Mutis un libro que compila algo de la obra, fotos y la voz del escritor leyendo algunos de sus poemas. Quedaba un detalle: que hablara Mutis. En esa mezcla de ficción y realidad que fue el recorrido por la vida y por la obra del colombiano, su intervención no pudo ser más acorde. Es claro, los personajes no solamente forman parte de la vida de los lectores. Menos mal. “Sólo me queda contarle un día a Maqroll esta tarde maravillosa que pasamos ustedes y yo”, confesó. Si le dijera eso no exageraría ni un poquito.

Más información. Alvaro Mutis y su más célebre personaje. www.adncultura.com.ar

Ayer, en la página 7 (“El CEO de Peugeot, a la embajada en Francia”), se atribuyó a Nicolas Sarkozy un cargo que no tiene. Debió haberse dicho que es presidente de Francia. El miércoles pasado, en “Hallan la gruta legendaria de Rómulo y Remo” (páginas 1 y 13), debió haberse dicho que la cueva donde, según el mito, la loba amamantó a Rómulo y Remo se llamaba Lupercal; el abuelo de los mellizos, Numitor; el pastor que los crió, Fáustulo; el rito que fue prohibido en el siglo V, Lupercales, y el papa que lo prohibió, Gelasio I. También debió haberse dicho que el único fundador mítico de Roma fue Rómulo; que el tío abuelo Amulio tiró o hizo tirar al río a los recién nacidos; que la cueva era lugar de culto mucho antes de Augusto, y que el río Tíber es el tercero, en longitud, de Italia, después del Po y el Adigio. Debe entenderse, además, que el descubrimiento no confirma la verdad del mito (que ya los antiguos entendían que era sólo un mito), sino que la cueva es el lugar donde la tradición situaba el episodio del amamantamiento de los mellizos.

Culto católico Santoral. Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa. Advocación de la Virgen propagada por Santa Catalina Labouré, en 1830. Liturgia. Hoy se leen el libro de Daniel (2, 31-45) y el Evangelio de San Lucas (21-5, 9).