POLITICA

Domingo 14 de febrero de 2010

I

LA SALUD DEL EX PRESIDENTE s INTIMIDADES DE UNA SEMANA COMPLICADA

El paciente Néstor, sin teléfono y con pocas visitas

Promete reaparecer en La Plata

El alivio después de la emergencia

El próximo 24 iría a un acto del peronismo

Pocos lograron verlo en la clínica por pedido de sus médicos Por unas horas, los médicos le cortaron el teléfono y las visitas que no fuesen de su intimidad. El diputado y ex presidente Néstor Kirchner fue un paciente como todos. No fue el líder político hiperactivo que la Casa Rosada y la presidenta Cristina Kirchner intentaron exhibir durante su internación en el Sanatorio de los Arcos tras la operación de la arteria carótida derecha, hace siete días. El domingo, después de la cirugía, no recibió a nadie más que a su esposa Cristina Kirchner, a sus hijos Máximo y Florencia; a su suegra, Ofelia Wilhelm, y a Rudy Ulloa Igor, amigo de la familia. El lunes recibió a Juan Carlos Molina, sacerdote del entorno familiar. Fue quien le reveló que Racing había perdido 4 a 2 con Arsenal, el día anterior, pese a que la Presidenta intentaba ocultarle esa derrota para evitar disgustos. La otra preocupación de Kirchner era el PJ. En su habitación recibió a los gobernadores Daniel Scioli, de Buenos Aires, y Jorge Capitanich, de Chaco. Scioli lo informó de las novedades del PJ, el que dirige en forma interina. Con Capitanich tomó la decisión política más importante de su internación: mantener la reunión del consejo nacional del PJ en Chaco el 10 de marzo, para reasumir la conducción del PJ. Dos actos previstos hasta entonces durante febrero fueron suspendidos por prescripción médica. Aunque con el paso de las horas volvió a poner en marcha uno de ellos (ver aparte). Su primera aparición pública de relevancia será el 1° de marzo, cuando asista a la apertura de las sesiones ordinarias del Congreso que

La semana Domingo 7

La operación Kirchner es operado en la carótida derecha. “La operación fue exitosa”, dicen los médicos. Martes 9

“Hay Kirchner para rato” La Presidenta lleva tranquilidad sobre la salud de Kirchner, mientras él prepara su regreso al PJ. Miércoles 10

El alta médica “Estoy diez puntos”, dice el ex presidente. En Olivos empieza a llamar a ministros. Viernes 12

Intimidades presidenciales La Presidenta cuenta detalles de la internación. Dice: “A Kirchner le mentimos con Racing”. encabezará su esposa, la Presidenta. Todo ello fue conversado allí con los médicos de la clínica y con su cirujano, Víctor Caramutti, el subdirector de la Unidad Médica Presidencial, Marcelo Ballesteros, y con su médico personal, Luis Buonomo. El lunes Kirchner les comentó que quería ir a descansar a El Calafate por unos días, pero los médicos se lo impidieron. Deberá permanecer en Olivos, cerca de la clínica, ante cualquier emergencia o recaída. Todos los ministros que asistieron el domingo a la clínica sólo estuvieron en el bar del piso 11 y no pudieron

ENTREVISTA EN CANAL 7

IMAGEN DE TV

Cristina Kirchner fue entrevistada por Daniel Filmus

“Estuve presa junto a Kirchner en 1976” La Presidenta habló de una detención que no se había registrado; contradicciones con su marido El misterioso pasado de los Kirchner sumó otro capítulo. La Presidenta aseguró que estuvo detenida junto a su marido durante un mes, en enero de 1976, dato que hasta ahora no se conocía y que algunas fuentes desmienten. “Estuve presa un mes durante el gobierno de Isabel Perón, en Río Gallegos, junto a Néstor Kirchner y con otro compañero que había sido el testigo de nuestro casamiento”, confió Cristina Kirchner al senador Daniel Filmus, en el último capítulo del ciclo de entrevistas Presidentes de Latinoamérica, que se emitió el viernes por Canal 7. La detención, según dijo, fue el 6 de enero y se cumplió en una comisaría de la capital de Santa Cruz, donde estuvo retenida por la ley de seguridad nacional número 19.840. La llamativa revelación se contradijo, sin embargo, con declaraciones que su marido, Néstor Kirchner, hizo 12 años atrás, cuando aseguró que había sido detenido junto a Cristina Kirchner en 1975, durante 15 días. “En el 75, cuando se produce el golpe de Capellini, ya estábamos casados con Cristina; fuimos presos los dos”, dijo el ex jefe de Estado en un programa periodístico en 1998. Su conductor, Alfredo Leuco, aseguró en agosto del año pasado que de las cinco detenciones que había mencionado Néstor Kirchner, una investigación posterior sólo demostró que estuvo preso en 1977 en Santa Cruz junto con el ex diputado Rafael Flores. Tampoco dicen nada sobre la detención de la Presidenta los libros El amo del feudo, de Daniel Gatti, ni Justicia era K, de Pablo Abiad y Mariano Thieberger, títulos que han ahondado en la historia biográfica de los Kirchner. “Mentira. Es mentira; ni ella ni

él; nunca estuvieron presos un mes. Es otra de las barbaridades que dice, como cuando Kirchner dijo que estuvo preso cuando la echaron a don Jorge Cepernic”, aseguró ayer a LA NACIÓN el ex vicegobernador Eduardo Arnold, que supo conocer y compartir el gobierno de los Kirchner durante muchos años y hoy se encuentra entre sus más duros críticos. “Kirchner estuvo detenido dos días en Río Gallegos en 1977, pero con Rafael Flores, no ella”, asegura Arnold, que adelantó que se encuentra escribiendo sus memorias, en las que incluye los tiempos que compartió con los Kirchner en el poder y promete que causará revuelo. Según cuenta el libro El último peronista: la cara oculta de Kirchner, del periodista Walter Curia, Néstor Kirchner y Flores estuvieron tres días y dos noches en la Unidad Penal N° 15 de Río Gallegos, lugar al que llegaron en sus propios autos porque fueron citados para ser interrogados y en el que luego debieron quedarse. Fue en marzo de 1977, y estuvieron allí hasta que fueron liberados gracias a la relación existente entre el coronel Alberto Callón, jefe del Regimiento 24 de Infantería de Río Gallegos, y la familia de Flores. Nada dice de la detención de Cristina. El mismo libro señala, además, que, después de casados, Néstor y Cristina Kirchner abandonaron la ciudad de La Plata para llegar a Río Gallegos el 27 de julio de 1976 (es decir, después de la fecha en que la Presidenta dice haber sido detenida). Otro abogado local que conoció y trató a los Kirchner a su regreso a Río Gallegos desde La Plata aseguró ayer a LA NACION que ni Kirchner ni Cristina mencionaron que ella hubiera estado detenida, ni en ese momento ni al regreso de la democracia.

bajar al piso 4. El único que no fue a la clínica por estar de viaje fue Florencio Randazzo, del Interior. El líder piquetero Luis D’Elía ni siquiera pudo ingresar en el piso 11 y permaneció afuera del nosocomio con otros militantes. Al margen de Scioli y de Capitanich, el ex presidente recibió el lunes sólo al jefe del Gabinete, Aníbal Fernández, y al secretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli, según se supo en el Gobierno. La comidilla de los comentarios fue la ministra de la Producción, Débora Giorgi, que viajó varias veces en ascensor sin encontrar el piso donde estaba el paciente. Debió ser auxiliada por Daniel Stefanoni, su secretario privado, y allegado además a Kirchner. Mientras tanto, Miriam Quiroga, directora de Documentación Presidencial, y Marta Torres, secretaria privada de Kirchner en Olivos, tampoco pudieron acceder a su jefe político. Cristina Kirchner fue decisiva para acotar las visitas. Junto a Kirchner, además, estuvieron su secretario privado, Martín Aguirre, y otros colaboradores como David Muchnik y “Pachi” Castro, conocidos en el entorno como los “Rudy Boys”, hombres de Rudy Ulloa Igor. El martes recibió visitas de familiares e hizo algunas llamadas a ministros y a colaboradores. El miércoles fue dado de alta y organizó en Olivos un almuerzo con Aníbal Fernández y el ministro de Economía, Amado Boudou, para hablar de la inflación. Al día siguiente arreciaron las llamadas a Guillermo Moreno, a Hugo Moyano, a Oscar Parrilli y a Gabriel Maritotto. Ya empezaba a ser el de siempre.

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FOTOS DE ARCHIVO

Sonriente. Tres días después de su internación de urgencia, Kirchner salió del Sanatorio de los Arcos con la cicatriz de la operación de carótida a la vista. Se refugió en Olivos, donde retomó su rutina de llamar a ministros y a dirigentes, y supervisar la gestión del Gobierno.

Visita I. Luis D’Elía, antes de pelearse en público con el Gobierno (y luego reconciliarse), intentó ver a Kirchner el mismo domingo. No pudo. Según él, hace un año que no hablan.

Visita II. Daniel Scioli estuvo el lunes en la clínica. Pasó dos horas con Kirchner en la habitación. Hablaron del peronismo y de la gestión. “Lo vi muy reflexivo”, dijo al salir.

El ex presidente y actual diputado nacional, Néstor Kirchner, prometió encabezar el miércoles 24 un acto en La Plata, en conmemoración de los 64 años del primer triunfo peronista. Será el primer evento en el que participará luego de su operación en la arteria carótida derecha. La Corriente Platense para la Victoria aseguró ayer que Kirchner les había confirmado su presencia, pese a que durante la semana se había dicho que sólo retomaría su agenda pública el 1° de marzo, cuando se abran las sesiones ordinarias del Congreso. Ese miércoles, un día antes de su cumpleaños 60, Kirchner llegará al Club Atenas de La Plata con un grupo de incondicionales. Todos ellos duros opositores del intendente local, Pablo Bruera, que ha tomado posiciones críticas sobre el estilo de conducción kirchnerista. Estarán el ex intendente y actual ministro de Justicia, Julio Alak; el piquetero Emilio Pérsico, del Movimiento Evita, y el secretario de Desarrollo Social, Carlos Castagneto, que aspira a conducir el municipio. El acto conmemorará la elección del 24 de febrero de 1946, en la que la fórmula Juan Domingo Perón-Juan Hortensio Quijano se impuso a la de la Unión Democrática, que postuló a José Tamborini y Enrique Mosca. Como parte de su recuperación, Kirchner desistió de viajar este fin de semana a El Calafate junto con su esposa, la presidenta Cristina Kirchner, que encabezará allí un acto mañana. Según fuentes oficiales, los médicos lo dejarán volver al ruedo cuando hayan pasado dos semanas de su operación.