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eDITORIALeS | CARTAS

| Martes 26 de febrero de 2013

Fundado por Bartolomé Mitre el 4 de enero de 1870 Número 1, Año 1 “la nacion será una tribuna de doctrina” Director: Bartolomé Mitre

Nuevos artilugios para estafar a los jubilados Los desvíos de fondos de la Anses y las manipulaciones para el cálculo del aumento de los haberes jubilatorios perjudican a un sector desprotegido

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os jubilados y pensionados constituyen uno de los sectores que más han sufrido y sufren el saqueo por parte del gobierno nacional. Como si se tratara de un castigo por algún pecado desconocido, ese sector vuelve a ser víctima de las manipulaciones y trampas de una administración que, necesitada de fondos, arrebata los que pertenecen a quienes no pueden defenderse. Estimaciones de diversos especialistas en seguridad social indican que el último aumento otorgado a las jubilaciones y las pensiones en septiembre del año pasado debería haber sido del 14,18%, y no del 11,42%, que fue el que se aplicó. De confirmarse esos cálculos, esos tres puntos de diferencia representan más de 6000 millones de pesos anuales que dejaría de percibir la llamada clase pasiva. Esta sensible diferencia generó un pedido de informes de la ex diputada Fernanda Reyes, de la Coalición Cívica, sobre los datos empleados en la fórmula aplicada. Pero la preocupante e inaceptable respuesta de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses) fue no mostrar todos los números que utiliza para calcular el aumento de las jubilaciones. El organismo que conduce Diego Bossio agregó que la estimación de porcentajes hechos por “actores distintos al Poder Ejecutivo” y su difusión “podrían provocar en la población beneficiaria una expectativa errónea sobre sus ingresos futuros”. Sin ninguna vergüenza, el escrito sostuvo que la autoridad administrativa “goza de determinada discrecionalidad” para responder a quien requiere información. ¿Por qué la Anses recurre al ocultamiento de algo que debería ser público? Muy probablemente porque una vez más, y recurriendo a nuevas modalidades de despojo, ha decidido seguir esquilmando a los jubilados. Como en otros casos en los que el Gobierno niega el acceso a informaciones que deben ser públicas, nos encontramos ante otra intencional falta de transparencia. Como señaló este diario, la ley de movilidad rige desde marzo de 2009, tres años después de que la Corte Suprema de Justicia ordenó la aprobación de un sistema de ajustes automáticos para proteger a los jubilados de la inflación. El porcentaje del incremento que se aplica en el tercer y en el noveno mes de cada año se define mediante una fórmula que combina la evolución de los salarios y de la recaudación por beneficiario de recursos tributarios con los que se financia parte de las prestaciones. Pero la Anses no publica el número de jubilaciones que paga mes a mes. El resultado de esa fórmula se compara con el de

otra que actúa como límite (se tiene en cuenta la que da el resultado más bajo) y que multiplica por 1,03 la evolución interanual de la totalidad de recursos que van al sistema. La ex diputada Reyes, que formó parte de la comisión bicameral de seguimiento de la administración del fondo de reserva del sistema previsional, heredado de las AFJP, consideró que, ante la falta de información oficial, el problema no sólo consiste en la imposibilidad de hacer cálculos a futuro, sino que también se imposibilita así a los ciudadanos y a los poderes Legislativo y Judicial el control de los índices aplicados. A eso debe añadirse la incógnita de lo que puede ocurrir de ahora en más, especialmente ante las cada vez más apremiantes urgencias de caja del Gobierno. Un informe del Instituto para el Desarrollo Social Argentino (Idesa) señala que, como el incremento de los impuestos no alcanzó para financiar el aumento del gasto público, el Gobierno recurrió mediante decretos de necesidad y urgencia a los fondos de la Anses y del Banco Central por un total de 50.000 millones de pesos, de los cuales 22.000 millones fueron aportados por el organismo previsional. Otros estudios indican que, entre 2009 y 2012, el Tesoro nacional se apropió de 80.000 millones de pesos de la Anses. De esta manera continúan consumiéndose los ahorros previsionales que pertenecen a los jubilados, profundizándose así, como sostiene el informe de Idesa, “la insolvencia del sistema jubilatorio, que se evidencia en el sistemático incumplimiento de las sentencias judiciales”. Por el presunto desvío de fondos de la Anses, la Mesa Nacional de Jubilados, Pensionados y Retirados de la República Argentina denunció ante la Justicia a Bossio y al vicepresidente Amado Boudou, en su carácter de ex director ejecutivo de la Anses, por administración fraudulenta y malversación de caudales públicos. El fiscal federal Guillermo Marijuán impulsó la investigación. Es criminal el incumplimiento de lo que la Justicia, en fallos firmes, ordena pagarles a los jubilados que se vieron obligados a pleitear para que les ajusten sus haberes, y en este sentido, pese a que el presupuesto nacional del año pasado autorizó a las Anses pagos por 3541 millones de pesos correspondientes a esas sentencias, el organismo sólo habría cancelado 3250 millones de pesos. Fácil es advertir que el castigo y el constante empobrecimiento del sector pasivo constituye una política oficial siempre presta a innovar en las modalidades del saqueo. Una política tan sólida como cobarde y tan despiadada como ilegal e inmoral.

El aporte de los científicos Resulta satisfactorio el nivel de inserción laboral alcanzado por los ex becarios del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet)

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n relevamiento entre ex becarios del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) arroja positivas conclusiones sobre su nivel de inserción en el mercado de trabajo. El Departamento de Recursos Humanos del Conicet realizó un estudio cuyo objetivo fue analizar la inserción laboral de los ex becarios del organismo, dentro y fuera de la institución. El modo de abordar la cuestión comenzó por establecer una base de datos de los doctorados en el Conicet a partir de 1998; en total se reunió así información de 6080 ex becarios. Se procedió luego a la extracción al azar de una muestra representativa con un total de 934 doctorados en la entidad. En tercer término se reunió información actualizada del trabajo que cumplían los ex becarios hasta agosto de 2012. Los resultados del estudio se subdividieron en cuatro partes. En la primera se observa que el 52% de ese personal altamente calificado cumple tareas como investigador en el Conicet, en tanto que el 37% se encuentra ocupado en el mercado laboral del país. Un 10% ha emigrado y se ha radicado en el exterior. Sólo un 1,5% carece de trabajo, dato de indudable importancia. Según se agrega en la segunda parte del estudio, el 68% de quienes se han incorporado al Conicet lo han hecho en carácter de investigadores, en tanto que el 30% son becarios posdoctorales. El mayor número de quienes se encuentran en el mercado laboral del país –fuera ya del Conicet– ejerce en universidades oficiales y privadas (53% en total) o bien en empresas (18%) y en la gestión pública (12%). De modo autónomo sólo trabaja el 7%. Quienes emigraron ejercen mayoritariamen-

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te en universidades del extranjero; en empresas únicamente se ha insertado el 7%, y muy pocos en tareas autónomas (2%). Por último, se establecen rangos salariales de ex becarios insertos en el mercado laboral argentino. Alrededor de un 50% gana entre 10.000 y 15.000 pesos; el 16% tiene ingresos superiores, en tanto que el resto percibe un estipendio menor. Se puede concluir de esta información que es satisfactorio el nivel ocupacional alcanzado por los ex becarios del Conicet, muy cerca del tope. Ahora bien, el nivel salarial es desigual y sólo para una parte puede resultar satisfactorio luego de años de una formación de excelencia. Es indudable que el problema ocupacional y salarial de los científicos está generalizado y sólo lo superan algunos países de alto desarrollo, en los cuales la industria encara investigaciones de alto riesgo, así como los organismos estatales, según lo puntualiza con acierto el nanotecnólogo Galo Soler Illia. Ese espíritu de búsqueda e innovación de las empresas está todavía en lento desarrollo en el país, si bien progresa. Pero necesita crecer en posibilidades y aspiraciones a fin de incorporar más personal altamente calificado. Asimismo, es necesario que nuestros científicos sepan dar mayores aportes en el campo de la investigación aplicada. Es evidente la significación de los datos comentados. Se está avanzando positivamente en el difícil campo de la formación de los que descubren, inventan o crean. Hay resultados alentadores, vocaciones dispuestas y un mundo abierto al conocimiento innovador. Es menester servirse de la enseñanza de las experiencias cumplidas y promover la investigación tanto estatal como privada.

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Sin clases Soy padre de dos alumnos que concurren a la Escuela Nº 3 del Distrito Escolar Nº 7, ubicada en Av. Rivadavia 4817 de CABA. Al concurrir ayer a la escuela para obtener información sobre el comienzo del ciclo lectivo previsto para mañana, me encontré con varios carteles pegados en la puerta en los que Ademys convocaba a un paro docente para ayer y para mañana. Mis hijos esperaban ansiosos el inicio de clases para reencontrarse con sus compañeros y con la oportunidad de aprender nuevas cosas en la escuela. ¿Qué sentido tiene para los alumnos un paro docente el primer día de clases? Se me ocurre una respuesta: “Si los docentes no dan clases, la escuela no debe ser tan importante como dice papá”. Ante este doble discurso el alumno se confunde, y si bien puede entender que sus maestros deben recibir un salario por enseñarles, no comprende por qué él (y los demás alumnos) pagan las consecuencias del descontento de esos maestros. Cuántos más paros se realicen, habrá menos aspirantes a la carrera docente y más niños confundidos en casa, a los que se deberá apuntalar para que no caigan en el desánimo y el desconcierto. Carlos Alberto Castriota DNI 10.627.447

Abucheos Inútil es interpretar lo sucedido durante el acto por el aniversario de la tragedia de Once –los abucheos a la Presidenta– sin pensar que el que abuchea y critica a un funcionario lo hace siempre en pos de una razón política, más aún cuando la razón son 51 muertos producto de una red de corrupción entre el Estado, sindicatos y empresas privadas. El senador Fernández cree que ese derecho que brinda la política de criticar una determinada gestión le fue vedado al resto de los comunes mortales. Se equivoca. Senadores, diputados, legisladores y hasta la mismísima Presidenta deben afrontar con autocrítica cualquier abucheo que en forma democrática se les realice, y sin ánimos de soberbia. José Luis Traverso [email protected]

Trenes sin controles Viajo por el ferrocarril Mitre todos los días desde hace cinco años, desde la estación Dr. Cetrángolo hasta Retiro, ida y vuelta. Es decir, realicé más de dos mil viajes… y me han pedido el boleto solamente tres veces. ¿Por qué? ¿Será que a las empresas que explotan el servicio no les importa porque los subsidios son más que suficientes y más fáciles de obtener? Nunca nadie controla en la estación terminal, y la mayor parte de las veces en Cetrángolo hay un cartelito manuscrito en la boletería que dice: “Sistema SUBE no funciona. Pase”. Eso significa: viaje sin pagar. Si el sistema anda tan mal, ¿por qué no cobran el boleto en efectivo? O, mejor, ¿por qué no lo arreglan? ¿Por qué se usa dinero público de compatriotas que viven en La Quiaca o en Ushuaia para financiar viajes en Belgrano, Olivos, San Isidro o Vicente López? ¿No sería mejor usar los cientos de miles de pesos que se podrían recaudar para arreglar la estación Retiro, un palacio hoy en ruinas? Sr. ministro Randazzo: qué misterio, ¿no? Antonio Guarino [email protected]

Acuerdo con Irán En respuesta a la carta de lectores enviada por el Sr. Enrique Borensztein, en la que se sostiene que voté a favor del memorándum de entendimiento entre la Argentina e Irán, entre otras afirmaciones y juicios de valor, aclaro a la opinión pública que rechacé el referido memorándum. Ciertamente soy de origen judío –como también afirma el mencionado– y parece que no tendré que avergonzarme, según el juicio del Sr. Borensztein. Cabe preguntarse qué lleva a una persona –supongo que con honestidad y creyéndose informada– a cometer estos errores. En primer lugar, denota irresponsabilidad de su parte, pero quizá sea menos grave si se piensa dentro de qué dinámica la mayoría de las personas forjan sus creencias sobre la actualidad política. Falta seriedad en el modo en que la comunicación

Los textos destinados a esta sección no deben exceder las 15 líneas o los 1100 caracteres. Debe constar el nombre del remitente, firma, domicilio, teléfono y número de documento. Por razones de espacio y de estilo, LA NACION podrá seleccionar el material y editarlo. Los mensajes deben enviarse a: [email protected] o a la dirección: Bouchard 557, 5to piso, Capital (C1106ABG).

social induce a falsas creencias y pasiones exacerbadas, aunque, desde luego, esto no exime de las responsabilidades individuales de las que cada quien debe hacerse cargo. Dr. Samuel Cabanchik Senador de la Nación DNI 12.543.429

Adoctrinamiento Estupor y una gran preocupación me produjo la nota publicada el domingo pasado sobre la formación de cuadros juveniles, los cuales serán adoctrinados y jurarán lealtad a la Presidenta. Esto me recordó el proceder fascista. La formación y el adoctrinamiento de la juventud estuvieron entre los principales objetivos que se marcó el Estado. Se trata de un claro ejemplo cómo este gobierno de carácter totalitario intentará llegar a los más recónditos espacios de la vida de los argentinos, incluidos el familiar y el personal. ¿Ésta es la educación que queremos para nuestros hijos? Esto es muy grave. El adoctrinamiento es muy perjudicial para nuestra sociedad y es el fin de la democracia. Prof. Guillermo César Vadillo LE 4.829.954

En la Red Conflicto docente Facebook y Twitter

“Los sueldos bajos y miserables no colaboran a respetar la institución docente. Nadie nos respeta: ni el Gobierno ni los padres... ¡menos los chicos! ” Clara Drocchi

“La educación es fundamental para lograr el cambio social, por eso los políticos la han colonizado. Sin educación o con educación sin exigencias, el pueblo es más fácil de engañar y dominar” Oscar Delgado

“El tema salarial no se arregla con punto más o menos en paritarias. El problema es cómo se distribuyen los recursos provincias-Nación” Flavio Luis Buccino @flaviobuccino

Partido de la Red En un artículo del 23 del actual, referido a la fundación del Partido de la Red, se afirma: “El experimento tiene un antecedente llamativo. Hace seis años, en Alemania, se fundó el Partido de la Red, llamado Partido Pirata.” Parecería que el antecedente del Partido de la Red de Buenos Aires es el Partido Pirata de Alemania, lo que merece algunas aclaraciones. El Partido Pirata tiene sus orígenes en Suecia, y desde ahí se diseminó como una alternativa ante lo que está pasando con Internet en el mundo. Los piratas europeos tuvieron éxito en distintas elecciones, consiguiendo bancas no sólo en el Parlamento Europeo, sino también en diferentes parlamentos regionales, en el senado checo y la alcaldía de una ciudad suiza. En América latina, el Partido Pirata existe en la Argentina desde 2009 y también tiene presencia en Brasil, Chile, Uruguay, etc. Creemos que la llamada “piratería” en Internet, que comienza compartiendo cultura entre pares, es algo que cuestiona el actual modelo económico de las industrias culturales

y que, por extensión, la organización de pares cuestiona los modelos políticos actuales. Nos reivindicamos piratas porque creemos que nuestras prácticas digitales contribuyen a la democratización del conocimiento, y por eso fomentamos una política horizontal y transparente usando las redes y las tecnologías libres para lograr la participación directa. Pero el Partido Pirata no se limita a la Red y a una mayor participación en las políticas de Estado, sino que también propone la protección de los bienes comunes y el libre acceso a la cultura y el conocimiento. Además, cuestionamos la creciente invasión de la vida privada de los ciudadanos: la proliferación acrítica de las cámaras de vigilancia o el registro compulsivo de nuestros datos biométricos por parte del Estado (Sibios). La adopción de las “nuevas tecnologías” debe ser debatida y sus posibles consecuencias analizadas antes de ser implementadas. El Partido Pirata Argentino está en proceso de legalización y planea presentarse para las próximas elecciones en CABA. Nicolás Reynolds [email protected] Firman además Sebastián Cartagénova, Rodrigo de Arzave y Eduardo González

Falta de monedas Ante la falta de monedas en todos lados, intenté conseguir cambio chico en dos bancos privados y en la sucursal central del Banco Nación. Como en ninguno están entregando monedas, decidí ir al Banco Central, donde estaba seguro de que podría conseguirlas. Gran sorpresa la mía cuando me respondieron que para conseguir cambio debía tener cuenta en un banco privado y solicitarlo allí. Considerando que la carta orgánica del BCRA establece que su misión principal es defender el valor de nuestra moneda y que ni siquiera está a la altura de proveer un poco de cambio, me queda muy claro por qué no podemos manejar la inflación. Juan J. Galto [email protected]

Un vuelo en AA Sin dólares, pero bien de espíritu, el 20 de enero abordé el vuelo 1302 de Aerolíneas Argentinas a Miami. Allí comenzó la obra. Primer acto: mi asiento tenía el respaldo reclinable roto, los sistemas de video funcionaban mal, los auriculares que tenían sonido estaban conectados a pantallas oscuras. Segundo acto: ya en vuelo pasa un señor de uniforme (¿capitán?), sonriente, amable, cuaderno en mano anotando los desperfectos. Se escuchan por los parlantes avisos varios sobre el reseteo (infructuoso) del sistema audiovisual. Tercer acto: llega la cena. En la bandeja, dos medias “bochas” de color, sabor y textura dudosos. Probemos. Ummm, ¡mejor dejemos! Cuarto acto: el sistema audiovisual se apaga en todo el avión. Mágicamente, mi pantalla queda encendida como un faro durante el vuelo nocturno. Al llegar pienso en toda la gente que debe haber cobrado para que yo pudiese viajar en la línea de bandera. El 9 de febrero encaro el viaje de vuelta, en otro avión, vuelo 1305. Primer acto: mi asiento tiene el respaldo reclinable roto, al apoyarse se desliza. El asiento de la fila de atrás no se reclina porque está averiado. Los sistemas de video y audio funcionan mal, mi ahijada usa la salida de sonido de mi asiento para su televisor, porque su control no funciona. Segundo acto: pasa un señor de uniforme. Amablemente le refiero el problema por si lo tiene que anotar. Con cara larga y de desprecio responde: “¡Pero yo soy el capitán!”, y sigue de largo sin importarle lo dicho. Pero, eso sí, con la jerarquía que le da ser el capitán. Tercer acto: llega la cena. Esta vez otra comida porque –gracias a Dios– el catering es otro. Pero, como aclaró una auxiliar, se puede elegir entre pollo o pollo. Cuarto acto: el sistema audiovisual se apaga en todo el avión. Por suerte, esta vez el mío no funcionó en todo el viaje. Reflexión final: el montaje de estas obras, que sirven para distraernos, nos cuesta... ¿cuántos millones de pesos por año? María Marta Schang [email protected]

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