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economía

| Domingo 16 De Diciembre De 2012

Estilo de vida

sin Corbata

Carolina del Hoyo

Una Navidad de alta gama

propuesta. El conjunto de árbol navideño, decoración, luces y pesebre puede llegar a costar

$ 50.000; hay pinos de material ignífugo, adornos de diseño exclusivo y lámparas LED Carlos Manzoni LA NACIoN

La magia de la Navidad no tiene precio, pero en algunos casos el lujo y la exclusividad les abren la puerta a costosas excepciones. Sin llegar al extremo de los US$ 2 millones del árbol tallado en 12 kilos de oro macizo que la joyería china Ginza Tanaka expone en su tienda, armar el tradicional pino, con adornos, luces y pesebre, puede llegar a costar $ 50.000. Salvo que se adopte la costumbre estadounidense de talar el propio árbol (con la correspondiente reposición), habrá que empezar por comprar uno de PVC ignífugo certificado por normas IRAM en uno de los tantos locales que los venden en el país. Está la línea empresaria, de cuatro metros de alto y 2200 puntas, y la familiar, cuyo producto más costoso es el de 2,40 metros y 1200 puntas. Horacio Kalinowski, dueño de Exponcongreso, una de las tantas casas que comercializan estos artículos, precisa que el árbol “empresarial” cuesta $ 7000 (en locales de Puerto Madero o Av. Santa Fe pueden costar 30% más) y el familiar, $ 2350. En Alparamis, en tanto, se pueden encontrar diseños exclusivos de árboles, que van desde $ 2500 a $ 4900. “Después, la decoración demanda en promedio lo mismo que costó el árbol”, explica Kalinowski. Algo que está de moda es adornar el pino con figuras de pájaros ($ 25 cada una), mariposas ($ 20) y libélulas ($ 30), junto con los típicos globos ($ 10). Además, se pueden agregar boas ($ 40 las de dos metros) y varas de flores de tela importada ($ 150). A la hora de iluminar, las luces LED son lo último ($ 80 las 100 unidades). Está también la opción de vestir las ramas con piezas más exclusivas. En su propuesta Navidad de cristal, Swa-

rovski cuenta con figuras que fueron talladas en Austria en un cristal especial. “Al reflectar la luz en ellas, se forman efectos luminosos de colores”, cuenta Caroline Von Hartenstein, gerenta de Marketing y Comunicaciones de Swarovski Argentina. Cada una de las piezas de Swarovski ronda los $ 785, por lo que decorar un árbol con 50 de ellas cuesta $ 39.250. La casa austríaca ofrece un plus: una estrella con el brillo del Crystal Golden Shadow, en una cinta de satén marrón claro con una placa de metal color plata. Este artículo vale $ 835, pero para poder comprarlo hay que hacerse socio de Swarovski y pagar una membresía de $ 280 por año. La tienda de decoración Agustina Cerato es otra de las que vende diseños exclusivos, elaborados en telas importadas y tejidos artesanalmente. Estos adornos, con forma de muñeco de nieve, renos, hongos y conos de caramelos, entre otros, van desde los $ 45 hasta los $ 250. También venden árboles, a $ 1700. Alparamis, en tanto, exhibe campanas de cristal ($ 75) y alegorías de los reyes magos ($ 175). Para completar el cuadro con un pesebre, Kalinowski recomienda una cabaña de un metro de alto por uno de ancho, que cuesta $ 600. El nacimiento de Jesús puede recrearse luego con figuras de 50 centímetros de alto, con un valor de $ 350 cada una. “A diferencia de lo que ocurre con los árboles, que empiezan a comercializarse en noviembre, los pesebres se venden a último momento, a partir del 20 de diciembre”, acota el vendedor. No es necesario gastar fortunas para disfrutar del espíritu navideño, pero aquellos que quieran emular a la fastuosa joyería china que talló el árbol de Navidad más caro del mundo e invertir una suma extra tienen a su alcance en el país opciones que pueden costarles tanto como un auto.ß

BranD managEr DE viLLavicEncio

“La montaña es mi lugar preferido” –¿Si pudiera elegir ¿en qué época le hubiera gustado vivir? –En la época de la Revolución de Mayo, porque me apasiona la historia argentina.

–¿Qué cosas hace para cuidar el medio ambiente? –Compacto las botellas y las llevo a un punto de reciclado, opto por la bicicleta y cuido mucho el agua.

–¿Cuál sería la primera medida que tomaría si fuera presidenta de la Argentina? –Reestructuraría el sistema educativo, en su contenido y sus formas.

–¿Qué huella le gustaría dejar con su vida? –En primer lugar, llegar a ser mi mejor versión y hacer que cada instante que me regala la vida sea significativo para mí y para quienes me rodean.

–¿Qué arregla usted en su casa sin llamar a un especialista? –El jardín. –¿Qué caso de la vida real elegiría para escribir un libro? –La vida de mi madre. – ¿Qué escucha en la mañana, FM o AM? ¿Qué programa? –AM, el programa de Magdalena. – ¿Baila? ¿Qué música prefiere? –Amo bailar. Prefiero música latina para soltarme y dejarme llevar. –En el amor ¿todo es pura química o trabajo de conquista? –Ninguna. Para empezar no concibo el término trabajo cuando se habla de amor. Creo que la química es importante y luego se requiere estar presente en el aquí y ahora tanto con uno como con el otro. –¿Agua con gas o sin gas? –Con gas.

–¿Qué desearía que no se extinguiera nunca en el mundo? –Las mañanas de sol, aire diáfano y fresco. –¿Qué cantidad de agua toma por día? –Dos litros. –¿Playa o montaña? –Montaña. Más que vacaciones para desconectarme, yo las tomo como una oportunidad para “conectarme”. Desde la profundidad de su silencio, la montaña es mi lugar preferido. Ahora estoy saliendo para ascender al Aconcagua. Si todo sale bien, el 25 de diciembre estaré haciendo cumbre.ß

Lea la entrevista completa con Carolina del Hoyo en www. lanacion.com.ar/economia

Fotos: swarovski, alparamis y agustina cerato

EMPrEnDEDorEs

Vida Verde Vertical matías cipoLLino (21)

Productos Plantas de decoración: kokedamas, jardines verticales y macetas invertidas. Año de inicio 2011 Inversión inicial $ 9000 de ahorros Facturación anual $ 250.000 proyección 2013 Canales de venta Tiendas de decoración y viveros de Capital y Gran Buenos Aires, e Internet

Luján scarpinelli

la idea Jardines en espacio reducido

el secreto Tendencia global urbana

Matías Cipollino presentó un trabajo práctico, para una materia de la Licenciatura en Comercialización que cursa en el Instituto Universitario Escuela Argentina de Negocios. Vida Verde Vertical (VVV) fue inspirada en dos aspiraciones: convertirse en dueño de un negocio y poder conectarse con la naturaleza, pese a vivir en un departamento. Mientras otros jóvenes de su edad buscan ser como Mark Zuckerberg y crear la próxima Facebook, Matías basó su emprendimiento en las plantas. Él mismo se encarga de armar las “macetas” de sustratos naturales para las kokedamas que luego distribuye con la ayuda de un vivero online.

La iniciativa de Vida Verde Vertical se inscribe dentro de una tendencia global instalada en las ciudades más importantes del mundo. La conciencia sustentable disparó una expansión de hábitos y ambientes relacionados con la naturaleza. Esa ola expansiva está llegando a Buenos Aires. “Las terrazas verdes y los jardines verticales serán lo próximo, en 2013”, se entusiasma Matías que, consciente de las implicancias del proyecto, ya busca inversores. Cuando los encuentre podrá dedicarse full time a su pequeña empresa. Aunque parezca un negocio atípico, la competencia prolifera. Por eso, VVV intenta diferenciarse con financiación para clientes.

La responsabilidad social empresaria no le da un gran lugar a los chicos

Cuánto invierten las empresas en acciones RSE en la infancia Más de 500.000 2%

estudio. Una encuesta de la que participaron 464 compañías revela

que la mayoría invierte menos de $ 10.000 al año en ese objetivo Luján scarpinelli LA NACIoN

La responsabilidad social empresaria (RSE) avanza en la Argentina, aunque con una pata floja: las acciones relacionadas con los derechos de los niños siguen relegadas en la agenda de las corporaciones. Basta echar un vistazo al estudio realizado por “Empresas por la infancia” (ExI), una iniciativa conjunta de la Fundación Arcor, Unicef y Save the Children, dedicada a la defensa y promoción de los derechos del niño. El cuestionario que respondieron 464 empresas presentes en el país (en su mayoría, de servicios) reveló que la mayoría (41%) destina a acciones de este tipo menos de $ 10.000 al

año, o no alcanzan, siquiera, a precisar su volumen. otro 27% dijo invertir entre $ 10.000 y 50.000 en ese plazo, y sólo unos pocos contestaron haber aportado sumas mayores. Los resultados del estudio desarrollado por el Centro de Investigaciones por Encuesta de la Universidad Tecnológica Nacional, marcaron una diferencia en relación con el precedente, llevado a cabo en 2006. En aquel año, el escaso desarrollo de la RSE se interpuso como limitante en la investigación. Las cosas cambiaron en el presente: gran parte de las compañías cuenta con fundaciones o iniciativas sociales. Pero, según destaca el informe de ExI, las empresas aún muestran “un reducido grado de sensibilización con

respecto a los derechos de la infancia, y escasas políticas, programas o acciones para promoverlos y protegerlos”. En conclusión, define, hay “un bajo interés de las empresas argentinas en la RSE-I (responsabilidad social empresaria orientada a la infancia)”. La afirmación anterior se sostiene en el estudio con diferentes dimensiones y cifras porcentuales. Una de las variables abordadas como condicionante directo de los derechos de los niños es la informalidad laboral que puedan sufrir sus padres en trabajos considerados “precarios”. “La justificación radica en que sólo a través de un empleo formal se garantizan las licencias por maternidad, el horario reducido por lactancia para

Entre 50.000 y 100.000 7%

Entre 100.000 y 500.000 5%

Entre 10.000 y 50.000 19%

Menos de 10.000 41%

No sabe 27%

Fuente: Empresas por la infancia / LA NACION

tres respuestas

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¿Qué tipo de plantas se eligen para armar los productos de interior? – Por ahora, Vida Verde Vertical elige kokedamas y otras variedades de condimentos para la cocina. Jardines y terrazas se armarán conforme los gustos y posibilidades.

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¿Cuánto cuestan los distintos productos? –El rango de precios va de 80 a 200 pesos.

¿Habrá alguna promoción de Navidad? –Sí. Las kokedamas se venderán en paquetes de cuatro y seis, a 35 pesos cada una.ß

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madres hasta el año de nacimiento del hijo, el seguro en caso de accidentes de trabajo, entre otras cuestiones relevantes”, indica el estudio, según el cual el 41,5% de las firmas incluidas en la encuesta poseen recursos humanos no asalariados. Y lo que es curioso, la existencia de un área de RSE en las compañías, un avance destacado, “no parece incidir en los estándares respecto de las relaciones laborales internas”. Muchas de las empresas, por caso, desatienden la extensión legal de las licencias por maternidad de 90 días. Lo mismo ocurre con la lactancia: casi un 50% hace caso omiso de la hora que corresponde otorgar a diario, hasta que el bebé cumpla un año. otro punto importante relacionado con la responsabilidad en las compañías es el trabajo infantil, un amparo de la ley para resguardar a menores de 16 años. Del procesamiento de las respuestas se desprende que “sólo 44,8% de las empresas considera posible respetar la normativa sobre trabajo infantil en su actividad, mientras que el 33% desconoce las normativas vigentes en el país”.

En este mismo apartado, la relación de las empresas con sus proveedores toma de especial relevancia. “Se destaca un elevado desconocimiento sobre lo que sucede en sus organizaciones y su cadena de valor, en cuestiones que afectan directamente el cumplimiento de los derechos del niño, así como sobre la existencia de normativas específicas vinculadas a la infancia”, se escribe en el reporte de Arcor, Unicef y Save the Children. En porcentajes, sólo 40% de las firmas participantes dijeron saber si sus proveedores respetan la legislación sobre trabajo infantil. También existe desconocimiento respecto de las prácticas relacionadas con la preservación del medio ambiente. En ambos casos, la ignorancia de los procedimientos implica “complicidad”, según denuncian los expertos en infancia. Un desdén similar se percibe en la comunicación y marketing de las empresas hacia los niños. La falta de políticas de protección, destaca ExI, revela una irresponsabilidad al poner en riesgo la integridad física y mental de los menores.ß