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espectáculos
| Jueves 3 de octubre de 2013
1938-2013
ciNe
Giuliano Gemma. El carilindo actor del spaghetti western
El encanto de Federico Moura iMágenes paganas (argentina/2013). ★★★★ muy buena. dirección:
Sergio Costantino. guión: Sergio
Costantino. fotografía: Matías Calzolari.
con :
Federico Moura, Marcelo
El romano Giuliano Gemma quedará en la historia como uno de los grandes e inolvidables rostros del spaghetti western. El que levantó la bandera (aún por encima de Franco Nero) de la más genuina estirpe italiana dentro de un movimiento que se propuso reinventar desde Europa el género cinematográfico por excelencia de Estados Unidos. Gemma logró en aquellos años 60 lo que ningún otro: no ocultar su apellido original detrás de algún invento anglosajón. Sólo una vez aceptó llamarse Montgomery Wood, cuando empezó su gran vínculo con el western a la italiana. La película se llamó Una pistola para Ringo (1965), y desde allí Gemma pasó a la historia identificado con ese personaje, uno de los más perdurables del género. Quedó identificado a pleno y de inmediato con esta nueva expresión (ese mismo año hizo otros clásicos como Un dólar marcado y El retorno de Ringo), pero ya entonces era una figura conocida en su país. Había filmado varios péplums (películas mitológicas) y su aparición en El gatopardo fue muy comentada. Pero el spaghetti western lo consagró gracias a su pinta (le decían angel face, “cara de ángel”) y al hecho de que Duccio Tessari, su descubridor, fuera uno de los grandes directores del género. Su fama internacional fue tan perdurable que hasta hoy, en Japón, existen dos modelos de scooter que Suzuki bautizó con su apellido. Con el tiempo, Gemma supo reciclarse e incursionar con éxito en papeles más exigentes, como en El desierto de los tártaros (1976). En 1990 trajo a la Argentina su eterna estampa de galán para rodar junto a Georgina Barbarossa la comedia Ya no hay hombres. Alternó desde allí el cine y la escultura hasta que anteayer murió en un accidente vial. Había llegado a los 75 años con la apostura intacta.ß Marcelo stiletano
Moura, Julio Moura, Velia Moura, Daniel Sbarra. distribuidora: Buen día Films. duración: 82’.calificación: apta para mayores de 13.
“E
spero que hayamos sido encantadores”, dice Federico Moura. Sí, Federico, lo fueron. La banda platense Virus liderada por Federico Moura fue un punto clave de los ochenta, y sigue siendo un hito insoslayable del rock argentino: su sonido new wave, sus arreglos perfectos, su profesionalismo, la cualidad de duende magnético de Federico. Pero esto es una crítica de cine y no una celebración musical. Imágenes paganas es un documental sobre Federico, voz y líder del grupo, que murió a causa del VIH el 21 de diciembre de 1988, la tercera de las grandes muertes del rock argentino de fines de los ochenta (Luca Prodan había muerto en 1987; Miguel Abuelo, a principios de 1988). El director de Imágenes paganas es Sergio Costantino, que codirigió Buen día, día (2010, sobre Miguel Abuelo) junto a Eduardo Pinto. Costantino toma una decisión osada: mezclar pequeños clips ficcionales que buscan la estética de los ochenta y algunos bailes en medio de canciones de Virus. Puede resultar shockeante porque no son fragmentos de especial brillo. Pero enseguida se integran a la película, incluso con cierta sabiduría en su extraña modestia pop: hasta se convierten en encantadores en su inocencia estética, en su falta de sofisticación. No quieren –no pueden– ser mejores que las historias sugeridas por las letras de los clásicos de Virus. La estructura principal de Imágenes paganas –primer acercamiento del cine argentino a este músico fundamental– está dada por entrevistas a la madre de Federico, a los hermanos de Federico (Marcelo y Julio fue-
Walter Cornás (der.), es el protagonista de la ópera prima de De Caro
energía
ciNe
El cantante de Virus primer plano
ron parte de Virus desde el inicio, y Julio lidera la banda hoy en día), a los otros músicos del grupo, a amigos de Federico. La historia familiar (con un hermano desaparecido en la dictadura), la personalidad de Federico, la música de la banda, el éxito aquí y afuera, la enfermedad. La película no esquiva temas, no juega al documental distanciado o de observación quieta, yerma. Se compromete con la figura de Moura, la busca con pasión. Y si pierde en prolijidad o en formas inobjetables gana en emoción, en fascinación ante el encanto del talento, del profesionalismo, del gesto, de la voz, del movimiento de Federico Moura. “Espero que hayamos sido encantadores”, dice Federico Moura al final, se lo escucha un poco bajo, fugazmente, en una frase no destacada al final de Imágenes paganas (canción y película). Una frase esencial de una personalidad apasionada (son varias las referencias al carácter fuerte de Federico) con un constante deseo de cautivar y de seducir mediante el pop perfecto. Una frase que la película deja caer sin enmarcarla, sin profundizarla, sin exprimirla al máximo. Hay tanta riqueza por extraer del Virus de los ochenta que Imágenes paganas se da esos lujos.ß Javier Porta Fouz
Manual de perdedores 20.000 besos (argentina/2013) . ★★★ buena. dirección: Sebastián De Caro. guión: Sebastián Rotstein. fotografía : Mariano Suárez. música: Cosmo. edición: Andrés Tambornino. elenco: Walter Cornás, Gastón Pauls, Carla Quevedo, Alan Sabbagh, Alberto Rojas Apel, Eduardo Blanco, Clemente Cancela, Laura Azcurra y Laura Cymer. distribuidora: Energía. duración: 92 minutos. calificación: apta para mayores de 13 años.
C
on películas como Días de vinilo o 20.000 besos, el cine argentino comienza a apostar por esas comedias generacionales que tanto abundan en la producción independiente norteamericana y que intentan (mediante una mirada bastante coral) sintonizar con algunos comportamientos, sentimientos, obsesiones y códigos de determinado tiempo y un lugar (en este caso, los porteños de treinta y pico). La nostalgia precoz, las inseguridades afectivas, una adolescencia que se niega a ser abandonada y las lealtades entre amigos son algunos aspectos que el guionista Sebastián Rotstein y el director Sebastián De Caro describen en este film modesto y amable, que por momentos se
queda en la exposición de su propia mitología y del fetichismo por sus personajes favoritos (reverencian a héroes como el Sylvester Stallone de Rocky o Jim Morrison, a los personajes de Star Wars o Volver al futuro, a los clásicos videojuegos arcade y a casi todo ese universo vintage hoy tan de moda en el ideario nerd), pero que aun en su superficialidad y en su buscada liviandad termina siendo irresistible, al menos para quienes puedan identificarse –por gustos o edades– con algunas de esas cuestiones. El antihéroe perfecto de 20.000 besos es Juan (Walter Cornás), un joven que ha terminado una relación de tres años con su novia, para alegría de sus cuatro amigos (Gastón Pauls, Clemente Cancela, Alan
Sabbagh y Alberto Rojas Apel) que de alguna manera sienten que lo “recuperan”. Deprimido, agobiado, viviendo de prestado en el sofá de Goldstein (Pauls), Juan se topa con un encargo de su delirante jefe (Eduardo Blanco), que lo obliga a trabajar con Luciana (Carla Quevedo), una chica de espíritu y gustos opuestos (es risueña, naïf, optimista, lúdica y entusiasta). En esta nueva etapa de su vida se amplifican las dudas, las angustias y las contradicciones del protagonista que la película explora y explota con humor negro y con varias agradables canciones pop de Cosmo de fondo. Comedia testosterónica (las mujeres están omnipresentes en las fantasías/pesadillas masculinas, pero tienen un papel bastante secundario y lateral), 20.000 besos surge –más allá de sus convenciones y hasta de sus limitaciones– como una muy digna y atractiva propuesta sobre jóvenes perdedores, pero a pesar de eso (¿o por eso?) siempre queribles.ß Diego Batlle
nuevo CD
Pérez & Company El saxofonista Daniel Pérez publicó su segunda producción discográfica, Pelo, al frente de su propia banda. Siempre en la senda del funk y el acid jazz, Pérez & Company hará la presentación formal de este material con un concierto en Bar Abierto, Borges 1613. Hoy, a las 21.ß
web
El día de One Direction El 23 de noviembre, One Direction celebrará el 1 D Day. Se trata de una transmisión online de siete horas en vivo, en la que los fans podrán interactuar con los integrantes del grupo. El evento se realizará dos días antes de la salida de su tercer álbum, Midnight Memories.ß
Los agentes Coulson, Ward y Skye, en acción
sony
TelevisióN
Del cómic a la pantalla chica Marvel’s agents of shielD (eeuu/2013).★★★ buena. creada por :
Maurissa Tancharoen, Jed
Whedon, Joss Whedon. elenco: Clark Gregg, Ming-Na Wen, Brett Dalton, Chloe Bennet. emisiones: los miércoles, a las 22, por Sony.
E
sta serie tiene muchas razones de ser. Se trata del desembarco televisivo de Marvel, el gigante de las historietas trasformado en productor de cine; del regreso del director, guionista y productor Josh Whedon a la pantalla chica, y el vehículo necesario para que el agente Coulson sobreviviera o, más precisamente, reviviera después de su enfrentamiento con el “Mussolini de Asgard” en Los vengadores. Cada uno de estos puntos –juntos o por separado– alcanzan para justificar la instantánea popularidad de esta ficción, cuyo primer episodio prometió más de lo que finalmente terminó concretando en pantalla. Por supuesto que, con las enormes expectativas generadas a su alrededor, era difícil conformar a todos. Tal vez los que queden más satisfechos después de ver el primer episodio sean los fanáticos de Marvel, a quienes están destinados los guiños estratégicamente colocados para sacarles una sonrisa. Y los seguidores de la obra de Whedon, uno de los pocos autores televisivos que merece el título de tal gracias
a las notables Buffy, la cazavampiros, Angel, Firefly y Dollhouse, tampoco serán defraudados, aunque para ellos al capítulo inicial le falte algo de la estimulante libertad narrativa de sus otros ciclos. Con los límites del universo Marvel firmemente establecidos, Whedon y sus socios creativos consiguen, de todos modos, imprimir su sello a la historia. De hecho, el personaje rescatado de los films –el mencionado agente Coulson, que interpreta Clark Gregg con la justa medida de humor y sensatez– funciona como la figura paterna del grupo de jóvenes espías, función que cumplía Giles en el caso de los cazavampiros que acompañaban a Buffy. Gracias a un guión repleto de inteligentes y graciosos diálogos –además de un espectacular despliegue de secuencias de acción– Agents of S.H.I.E.L.D. se eleva por sobre el promedio, aunque sus credenciales no siempre impliquen aciertos. Así, en tren de situar al espectador en medio de la “mitología” de los cómics, ciertos pasajes se exceden en explicaciones y detalles y la liviana pluma de Whedon se vuelve algo pesada. Sin embargo, el primer episodio logró alcanzar sus objetivos: insinuar y tentar a los espectadores con los conflictos de sus personajes y demostrar que en la TV hay lugar para una historia bien contada, entretenida y pochoclera.ß Natalia Trzenko