Intervención del Embajador de España D. Julio Herraiz Jefe de la Delegación ante la Conferencia de Desarme
Convención sobre Ciertas Armas Convencionales V Conferencia de Examen Ginebra, 12 de diciembre de 2016
Señora Presidenta, En primer lugar permítame felicitarle y agradecerle todos los esfuerzos que está realizando para el éxito de esta Conferencia de Examen, lo que hago extensivo a los dos Presidentes de los Comités Principales y al Embajador Biontino, de Alemania, por su excelente labor en la cuestión de los Sistemas de Armas Autónomos Letales. Mi delegación, que suscribe íntegramente la declaración de la Unión Europea, quisiera manifestar algunas breves reflexiones a título nacional. En primer lugar deseamos reiterar nuestro compromiso firme con todos los esfuerzos que nos lleven a paliar y eliminar los efectos de las armas que produzcan un daño inhumano o intolerable. Por ello consideramos a esta Convención y todos sus Protocolos como instrumentos fundamentales del Derecho Internacional Humanitario. Con esta convicción, España aprobó el pasado año una nueva legislación que establece la prohibición total de minas antipersonal y de otras armas de efecto similar, extendiendo el ámbito de las prohibiciones a las municiones en racimo y a otras armas incluidas en la Convención de Ciertas Armas Convencionales. Mi país entiende de este modo que debe otorgarse el mismo tratamiento jurídico a todas las armas que causen sufrimientos inaceptables, promoviendo las sinergias entre instrumentos y optimizando los esfuerzos de cooperación y universalización. Nuestras contribuciones financieras se dirigen, sin ningún tipo de discriminación sobre el arma empleada, a iniciativas de limpieza, remoción, destrucción y asistencia a las víctimas, habiendo alcanzado más de siete millones y medio de Euros en los últimos seis años en materia de cooperación y asistencia. Consideramos de enorme importancia que todos los Estados respeten escrupulosamente todas las normas contenidas en nuestra Convención y sus Protocolos, y que al mismo tiempo respondan con regularidad a sus obligaciones en la elaboración de informes anuales, necesarios para establecer una mínima transparencia y confianza en el cumplimiento. También señalamos la urgente necesidad de que todos los Estados contribuyamos con la debida puntualidad a nuestras obligaciones financieras en la Convención para no impedir el buen desarrollo de nuestros futuros trabajos.
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Señora Presidenta, Disponemos en esta Conferencia de Examen de una excelente oportunidad para continuar impulsando los debates que hemos emprendido en relación con los Sistemas de Armas Autónomos Letales. Creemos que la convocatoria el próximo año de un grupo de expertos gubernamentales debería conducirnos a una próxima definición de estos sistemas que facilite el debido respeto del Derecho Internacional Humanitario y del Derecho Internacional de los Derechos Humanos. Con dicho fin, deberemos precisar con carácter técnico los grados de autonomía que resulten inaceptables con la debida objetividad, considerando su letalidad inherente y teniendo en cuenta que abordamos el posible futuro desarrollo de unos sistemas de armas que todavía no existen en el momento presente. Nos complace asimismo reiterar la importancia de los trabajos que estamos llevando a cabo en la lucha contra los Artefactos Explosivos Improvisados, que constituyen una creciente amenaza global que debemos afrontar reforzando el intercambio de información y la cooperación internacional, y contando asimismo con la Resolución sobre esta materia aprobada por primera vez el pasado año en la Asamblea General de Naciones Unidas. Finalmente, Señora Presidenta, me complace señalar que España ha iniciado ya el proceso administrativo que permitirá el próximo establecimiento de un sistema de examen legal de nuevos armamentos para analizar su plena compatibilidad con el Derecho Internacional Humanitario, en cumplimiento del Artículo 36 del Protocolo Adicional I de los Convenios de Ginebra, reforzando de este modo nuestro inequívoco compromiso con los objetivos fundamentales de la Convención sobre Ciertas Armas Convencionales. Muchas gracias.
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